Partida Rol por web

Una historia fantástica.

Capitulo I: Tambores de guerra.

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10/02/2017, 14:03
Flynd Brightnight

Flynd una vez comenzaron los primeros alaridos de dolor se permitió la libertad de asomar la cabeza al otro lado de la colina para observar lo acaecido. Al parecer las cosas se habían precipitado. Casi tanto como el bueno de Enmell, que lo suyo había sido bastante literal... El tablero de juego se había desplegado de forma muy caótica, con bárbaros en el centro del meollo, las flechas golpeándoles de forma sangrienta y unos rudos y feos orcos avanzando hacia ellos con intenciones aviesas. Aquellos seres tenían armas muy desagradables con efectos todavía más desagradables, como dejaba patente la pérdida de un dedo del heredero de Ingmar. El mago esperaba que la magia curativa de Topanga pudiera arreglar ese desaguisado. En cualquier caso convenía que hubiera un cuerpo vivo al que unir el dedo de marras, había que actuar.

El potente proyectil mágico de Enna abrió los ojos al mago, aquella era la vía para actuar de los lanzadores de conjuros, claro que sí. Dicho y hecho, se alzó ligeramente por encima de la cresta de la colina, lo suficiente para tener ángulo de tiro hacia uno de los arqueros y conjuró con todas sus fuerzas un misil arcano contra él. Y con tanta fuerza lo lanzó que parte de su resistencia se fue con él. El mago sintió cómo la respiración le faltaba mientras volvía a ocultarse tras la colina.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Elijo "Perturba el tejido de la realidad" (-1 a Lanzar un hechizo hasta Preparar hechizos) por haber sacado menos de 10 en la TR.

Por cierto, no me aplico el -1 al lanzamiento de hechizos por el sortilegio de Invisibilidad porque éste ya no está en funcionamiento.

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10/02/2017, 15:47
Enmell Rondak

Con esfuerzo logré trepar a lo alto del pino pero el gruñido rompió mi ya frágil concentración y el arco se cayó antes de que pudiera tensarlo para lanzar mi primera flecha. "Genial, el mejor arquero de la historia." Cuando alzo la vista, varios orcos ya se han percatado de mi posición y tensan sus arcos en mi posición a pesar de tener diez arrobas de músculo, acero y hachas girando a su alrededor.

Traté de colocarme de forma que las finas ramas del árbol me proporcionaran algo de covertura puesto que era prácticamente imposible tratar de esquivar algo ahí subido. Sólo me quedaba una opción. Cogí mi viejo y confiable mandolín para dar apoyo al resto de miembros del equipo. Alcé la vista un segundo.

- Eoron, Señor de los vientos, desvía sus flechas o seré pronto un alfiletero. - supliqué mirando al vacío infinito de la noche.

A continuación, mi mente se aisló un instante y mis ojos se centraron en Filipencio que parece estar herido de gravedad. La sangre chorrea terriblemente y no tardarán en llegarle nuevas heridas. Es incluso posible que mientras entono las primeras notas de mi arte, alguna hoja serrada ya haya caído sobre él. Pero ahora nada de eso está en mi mente, sólo la música. Mis dedos se mueven ágilmente acariciando las cuerdas al tiempo que la música se mezcla con la magia para restañar las heridas del príncipe.

- Tiradas (2)

Notas de juego

He puesto que perdía el arco porque se suponía que quería flechearlos.

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11/02/2017, 17:47
Enna

La situación si bien arriesgada, no había empezado tan mal como esperara en su momento Enna. Pero aún no estaba decidido como terminaría esa, o mejor dicho, como terminaría la propia chica.

Los arqueros la tenían localizada, y si no hacía nada para remediarlo, podría ser su fin, así que se puso manos a la obra.

-YA-Empezó entonando su plegaria- concede a tu humilde discípula una gota de tu oceánico poder, si así la consideras merecedora de ello.

La gracia de Ya recorió el cuerpo de la sacerdotisa, colmándola de gracia divina, que la joven sacerdotisa dio forma de descarga mágica que cruzó el aire nocturno en forma de puntos de luz, sembrando de sombras la pendiente de la colina... hasta que se estrelló contra el orco más cercano, acabando con él, pero dejando a la sacerdotisa agotada por la experiencia divina.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Pierdo el poder usar Proyectil Mágico hasta la próxima comunión.

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12/02/2017, 09:56
Topanga

Parece que mi estratagema ha surtido efecto, si todos los orcos que se disponían a flechear a Filipencio II lo hubiesen hecho quizá ahora no tendríamos guerrero. Pero basta de ocultarse es hora de ayudar a los héroes como uno de ellos, es hora de adentrarse en la oscuridad como cuervo y salir de ella como un animal más fiero y mortífero.

Alzo el vuelo de nuevo adentrándome en la oscuridad de la noche* y sin que me vean los orcos caigo en picado hacia ellos. Cuando estoy a lo suficientes metros como para atacar mi cuerpo empieza a transformarse dejando atras las plumas, los ojos profundos de negrura y el tamaño de un ave carroñera. En cuestión de segundos mi cuerpo coge un tamaño de casi dos metros y más de 100 kilos, las plumas pasan a aser pelo de un color marrón pardo, el pico a un hocico con unos dientes feroces y mis alas y garras pasan a ser 4 zarpas de tamaño considerable. Sin duda alguna un oso grizzly es la mejor de las opciones para embaucarme en una dura batalla.

Mi transformación se lleva a cabo justo a tiempo para caer encima de los orcos pertinentes y empezar a devorarles. Jamás me cayeron bien estos sucios orcos.**

- Tiradas (1)

Notas de juego

*Uso ocultarme en la noche gastando mi segunda permanencia.

**Gasto la permanencia que sea de oso en atacar ferozmente a cuantos pille, en especial los orcos que puedan atacarnos a los que estamos en el fragor de la batalla. De los arqueros ya se encargaran mis compis con sus proyectiles mágicos.

Por cierto, como druida podría pensarse que tengo poderes curativos pero no jejeje

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12/02/2017, 11:30
Seth Soderstrom

Hahahahaha...

Lo estaba disfrutando. Era un hijo de Espita del Fiordo, luchar es lo que hacen para divertirse, y amar es lo que hacen para desahogarse. Y como un skald guerrero, empezó a cantar en mitad del campo de batalla.

Admira esta larga espada,

luce a la luz de la luna,

cabeza de orco cortada...

¡Seth Sotherstroooommm! ¡Seth SO THEIR STROOOOOONG!

Vale que cuando se puso a cantar en las ruinas, matando comadrejas, quedaba ridículo. Pero ahora... en medio de una turba de orcos... mientras agita su espada al aire... sigue quedando ridículo, pero le imprime una dosis de psicosis, y sed de sangre peculiar. ¿Quién si no el propio Seth Soderstrom iba a cantar sus alabanzas? ¿Enmell? Puf... Cuando quieres renombre y que cada mujer al sur y norte de Sierra Argéntea suspire por ti, tienes que hacer las cosas tú mismo.

Estando rodeado de enemigos, y con una altura estándar de orco más o menos homogénea, Seth Soderstrom hizo girar el espadón por encima de su cabeza para tomar impulso, y trazó un movimiento circular para poder decapitar a varios orcos a la vez.

Quedó tan espectacular, que ahora que Filipencio II estaba "incompleto", Seth Soderstrom podría pensarse si reclamaba el trono para sí. El padre de Filipencio seguro que era incapaz de decir que no a los músculos torneados y a los hoyuelos que flanqueaban la sonrisa blanca de Seth Soderstrom.

- Tiradas (2)
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14/02/2017, 11:13
Director

Turno 1.3

Los sonidos del combate, los gritos de los guerreros y los rugidos de los orcos se confundían en aquella pequeña batalla. Filipendio II luchaba contra dos grandes orcos, que junto a otro ser humano hubieran parecido inmensos. Pero el príncipe de Ingmar era al menos tan grande como ellos, y luchaba con una furia salvaje. Mientras recibía profundos cortes de sus sucias espadas aserradas, el guerrero hendió el hombro de uno de los pieles verdes separando su cuerpo en dos, y lanzando los despojos por el aire como una masa sanguinolenta.

Enna permanece quieta sobre la cima de colina, convertida así en un claro blanco para las flechas de los orcos, y deja de estar sola cuando Flynd se coloca a su lado, y gesticula con sus manos creando arcanos símbolos en el aire, sutilmente distintos a los que, a su vez, está invocando la joven sacerdotisa. Cansada por el esfuerzo de tanto conjurar un sudor frío recorre la frente de Enna, mientras el conjuro que estaba lanzando se escapa de su memoria con este lanzamiento. Sin embargo, mago y clériga consiguen crear de la nada dos chisporroteantes masas que surcan el espacio haciendo eses y silbando peligrosamente.

El proyectil de Flynd explota junto al hombro de uno de los arqueros, que se ve obligado a soltar el arco mientras la carne de su rostro se disuelve en una espantosa quemadura. Sus alaridos se confunden con los de su otro compañero arquero, que recibe el proyectil de Enna de frente; el fuego se expande desde el lugar del impacto y convierte al pobre monstruo en una pira, que tras correr un rato se tropieza en el riachuelo y cae inerte.

Los dos arqueros restantes aprietan sus deformes dentaduras y alzan sus flechas, mientras desde la copa del pino Enmel intenta protegerse tras las ramas y usa su instrumento musical para elaborar una canción de curación, fresca y verde como la hierba. Todos escucháis su hermosa oda, pero es Filipendio quien siente renacer su fuerza. Sus heridas se cierran y se cicatrizan, y el espantoso surtidor en el que se había convertido su dedo deja de expulsar sangre.

Uno de los arqueros dispara contra el bardo, pero sus intentos por ocultarse tras las ramas tienen éxito; la flecha golpea varias de ellas, de las más finas, y con un sonoro traqueteo pasa junto a la cabeza de Enmel sin causarle daño alguno. Enna, sin embargo, no tiene tanta suerte: es un blanco excelente. Con un gemido ahogado recibe un doloroso flechazo justo en mitad de su pecho, tan potente que casi la derriba. Sin embargo, tras trastabillar un momento, logra mantenerse en pie con el asta del proyectil saliendo de su cuerpo como una banderilla.

En este combate han pasado algunas cosas raras, como el hecho de que un troll que pasaba por allí se dedicara a pegar gritos, o que un bárbaro testosterónico apareciera de la nada, pero lo más extraño de todo sucede en este mismo momento. Nadie percibe la aproximación del Topanga convertida en cuervo, (hay demasiada oscuridad y demasiada agitación), pero cuando su cuerpo emplumado se hincha hasta adoptar la forma de gigantesco oso todo el mundo se percata. La transformación es exitosa, pero el aterrizaje no lo es tanto; el inmenso corpachón cae sobre un orco, con tan mala suerte que al derribarlo su espada aserrada queda perpendicular al suelo, convertida en una auténtica pica que se clava en el cuerpo del oso hasta la empuñadura. La única razón por la que no sale por el otro lado es la corpulencia de la bestia, que queda atenazada por el dolor, (debilitada hasta retirar el arma, -1 a tiradas de Fue). El orco consigue salir indemne de debajo del oso, pero sin espada.

Por último, Seth está totalmente desbocado y comienza a dar vueltas sobre sí mismo cantando alguna extraña canción ritual y blandiendo su espada como un molinillo. Eso descuida su defensa, de forma que no puede evitar recibir el tajo de una de las espadas aserradas de los orcos, pero a cambio alcanza a todos sus enemigos con su ataque, descabezando a dos de ellos, (daños 3 y 3), e hiriendo al último, que mirándolo con ojos asesinos se agacha para recoger el arma de uno de sus compañeros. (Seth sacó un éxito total, pero solicitó alcanzar a más enemigos con su ataque. He repartido el daño causado entre ellos, pero a cambio le han atacado: un beneficio, un coste).

Aunque los orcos están llevando la peor parte son criaturas de la guerra, sedientas de sangre y sin respeto alguno por la vida, ni siquiera por la suya. Así que el combate sigue adelante. ¿Qué hacéis?. ¡Es vuestro turno!.

- Tiradas (8)

Notas de juego

Próximo turno, el viernes día 17 de febrero del año de nuestro señor de 2017.

Combate:

Orcos con arco:

1- Filipencio le ha arrancado parte del cráneo, y está muerto.

2- Enna le ha abierto la caja torácica con un proyectil mágico, y está muerto.

3- Flynd le ha fundido la cabeza y está muerto.

4- Enna lo hizo arder como en San Juan y está muerto.

5- La luz de la luna ilumina a Enna, a Flynd y a Enmel, y pretende asaetarlos.

6- La luz de la luna ilumina a Enna, a Flynd y a Enmel, y pretende asaetarlos.

Orcos sin arco:

7- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

8- Filipencio lo ha cortado por la mitad, y está muerto.

9- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

10- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

11- Seth ha intentado cortarle la cabeza, pero sigue vivo (2 pupas). Ataca a Seth.

12- Pretende convertir a Seth, Topanga y a Fil en carne para hamburguesa.

Cosas importantes.

Filipencio sufre 6 pupas, pero recupera la misma cantidad gracias a Enmel. Ahora Filipencio tiene 2 pupas.

¡A Filipencio le falta el dedo medio de la mano derecha!.

Ahora Filipencio tiene 1 Px.

¡Enmel ha perdido su arco, que se encuentra al pie del árbol!.

¡Enna pierde el uso del conjuro "Proyectil Mágico"!.

¡Enna sufre 8 daños!. Ahora Enna tiene 8 pupas.

¡Enna tiene una flecha clavada en el pecho!. Bastará una acción para retirarla sin pupas adicionales, pero si cae o recibe un golpe en el pecho puede causar daño extra.

¡Topanga sufre 5 pupas, (6-1 por armadura)!. Ahora Topanga tiene 5 pupas.

¡Topanga-Oso tiene una espada aserrada bien metida dentro!. Mientras no la retire de alguna forma, (y no será fácil), está debilitada, (-1 a tiradas de FUE).

¡Topanga gana 1 Px!. Ahora Topanga tiene 1 Px.

¡Seth sufre 6 pupas!. Ahora Seth tiene 6 pupas.

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14/02/2017, 12:36
Enmell Rondak

Al parecer Eoron había escuchado mi súplica o, tal vez, aquel pobre árbol se había apiadado de mí. Sin embargo, las cosas no estaban tan bien para el resto de miembros del equipo. Debía entonar un nuevo canto pero no tenía claro qué hacer. Topanga, mi fiel compañera de armas, tenía una espada serrada orca alojada en su interior y no tenía demasiado aspecto. Mi anterior esfuerzo curativo apenas había podido paliar los ataques que Filipencio recibía. Las heridas de Seth comenzaban a tener mala pinta. Sin embargo, fue la situación de Enna la que llamaba totalmente mi atención.

- ¡Tienes que sacártela! - grito en su dirección mientras me aferro con fuerza a mi instrumento. - Haré lo que pueda por sanarte.

Empiezo a estar agobiado. El combate no es mi hábitat natural y la cosa está demasiado fea para mi gusto. Podemos ganar la batalla pero temo que el precio sea demasiado alto. Trato de apartar esos pensamientos de mi mente y rasgueo las cuerdas en un sencillo acorde para iniciar la melodía. "Todos necesitan mi ayuda." Los oscuros pensamientos inindan mi mente. Las escenas de vísceras de orco y los charcos de sangre se repiten en mi cabeza, en ocasiones con mis amigos como víctimas. La poca concentración que me quedaba ya no existe. Un acorde estridente abandona mi mandolina.

Ahogo un grito de frustración. La ira se une con el escaso valor que me caracteriza, chirrio los diente y frunzo el ceño. La vida de Enna pendía de un hilo. Un solo golpe podría acabar con ella.

¡Aquí, caralechuga! ¡Panda de tuercebotas!  - grito tratando de atraer la atención de los arqueros para evitar que vuelvan a atacar a los dos arcanistas.

- Tiradas (1)
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14/02/2017, 13:52
Flynd Brightnight

La batalla ya estaba cerca del final, si es que sus compañeros conseguían aguantar el tipo, claro. Tanto Seth como Filipendio estaban arrancando cabezas y desmenuzando orcos, mientras Enna y Flynd iban abatiendo desde la distancia. El bardo canturreaba y, contra todo pronóstico, conseguía infundir renovadas energías en Fil. Y Topanga, bueno, aplastaba a un orco a la vez que intentaba suicidarse. Cada uno hacía lo que podía.

Había que continuar, así que el mago del grupo trató de invocar un nuevo proyectil arcano para abatir otro arquero, pero esta vez... esta vez algo no fue bien. El cansancio acumulado por la invocación de tantos hechizos en tan poco tiempo se estaba cobrando su precio.

- Tiradas (1)
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14/02/2017, 15:31
Enna

El impacto fue brutal.

La muchacha, poco acostumbrada a estos lides, ni a la puntería de los arqueros orcos, se encogió por el impacto que sacudió todo su cuerpecillo. Instintivamente se agachó y buscó parapetarse tras Flynn, a unos pies de distancia hacia atrás. Entre la cacofonía de la batalla, le pareció escuchar a Enmell, pero solo estaba ella y aquel dolor.

Agachada para apartarse de la vista de los orcos, Enna tragó fuerte, viendo desencajada como el astil de la flecha salía de su cuerpo, que se movía con el subir y bajar de su respiración acelerada. No podía pensar en quitarse eso, no con sus manos, poco acotumbrados a esfuerzos. Tomando aire suplicó de nuevo a YA, rezando para que la ayudara a expulsar de su cuerpo aquella flecha, de dentro a fuera, a la par que le reparaba el daño causado...

- Tiradas (1)
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15/02/2017, 02:57
Filipencio II

-Grr... -El hacha queda incrustada en el cuerpo del orco, cuando la levanto o la sacudo el cuerpo permanece ahí inerte y con las extremidades balanceándose con los movimientos del hacha, así que la golpeo fuertemente en el suelo para quitarlo de ahí, pero como todavía no se desprende decido extraer el cuerpo con la mano libre y arrojarlo lejos.

Me giro y veo a uno de los orcos saliendo desde debajo del oso volador y me acerco a él. -Tú qué ibas a hacer..? -Le hablo gruñendo y lo agarro del cuello para levantarlo del suelo y acto seguido darle un cabezazo, soltarlo hacia arriba y darle de volea con el hacha. -Otro menos.- Miro fijamente a los arqueros, que como nadie se encargue de ellos pronto tendremos problemas serios.

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15/02/2017, 07:11
Topanga

Suelto un alarido de dolor cuando siento la espada incrustándose en mi lomo, si hubiese tenido otra forma quizá no lo hubiese contado pero al ser un oso me veo capaz de seguir combatiendo, ahora más ferozmente. Aunque soy un oso mi espíritu mediano hace que no sea la más fuerte de las guerreras, quizá me hubiera tenido que quedar en la retaguardia y ayudar de otra manera.

Parece que solo nos quedan dos orcos cuerpo a cuerpo y Filipencio y Seth son grandes guerreros por lo que podrán con ellos perfectamente. Así que sin mediar palabra me dirijo arrollándo a todos los orcos que puedo por mi camino hacia los orcos que disparan a los magos.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No sé si antes gasté algún punto de permanencia o qué movimientos tengo.
 

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15/02/2017, 20:03
Seth Soderstrom

¡Aaaagh!

Seth Soderstrom es un amante, no un luchador. Las únicas heridas que está acostumbrado a sufrir son las de las uñas de una mujer en la espalda. Tambaleante, da unos pasos atrás en la nieve, y cae sobre una de sus rodillas, clavando la espada en la nieve.

Espera... Seth Soderstrom y tú estáis igual de heridos. No tiene porqué morir nadie. Podéis hablar de esto como seres civilizados salvadores de princesas que... ¡Ajá!

Traicioneramente, Seth Soderstrom lanza a su oponente un puñado de nieve a los ojos, se pone en pie y retira a su espada de su retiro. Lo más probable es que el orco solo supiese orquil, y que la cháchara del bárbaro no le hubiese engañado en ningún momento, pero Seth Soderstrom es como las vacas: a veces les gusta sentirse más inteligente que los demás.

Seth Soderstrom engañó al engendro,

echándole nieve nubló sus ojos feos,

y lo empaló detrás del almendro...

¿Almendro?-dijo mirando a su alrededor en busca de alguno.

No había un almendro. Daba igual. Seth Soderstrom nunca dejaría que la realidad le fastidiase una buena rima. Cuando rememore esta historia habrá matado al doble de orcos, y habrá un maldito almendro en mitad del arroyo. Porque eso... eso, es lo que hacen los héroes: ayudar a la naturaleza repoblando los bosques con árboles imaginarios.

¡Seth Soderstroooom! ¡Seth SO THEIR STRONG!

Lanzó un tajo increiblemente preciso y notablemente poco potente, sin empalar ni nada, pero que podría ser suficiente para darle la victoria.

¡VICTORIAAAA!-gritó, recordando el nombre de un antiguo ligue.

- Tiradas (2)
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17/02/2017, 10:52
Director

Turno 1.4

Tras el terrible flechazo a Enna, los dos arqueros enemigos se envalentonan. Gruñendo graves en su incomprensible y grosero idioma, colocan con rapidez sus flechas en los arcos y disparan con una potencia impresionante contra el bardo, que está provocándoles para atraer el fuego sobre sí mismo.

Tras insultarles Enmel coge con fuerza la mandolina de su maestro y se concentra para lanzar su magia. Rasga las cuerdas del instrumento, y su voz comienza a sonar sobre los ruidosos golpes y gritos del combate, adquiriendo una resonancia mística y que se acerca poco a poco hacia el lanzamiento de un potente conjuro para sanar a la joven Enna. El bardo, de hecho, está tan concentrado que ni siquiera intenta esquivar los dos proyectiles que se abalanzan contra él.

Uno de ellos le alcanza en el hombro, lo desequilibra sobre el árbol, y sale limpiamente por el otro lado junto a un chorro de sangre roja que cae lentamente sobre el suelo tapizado de hierba. Aturdido por el dolor su conjuro se pierde, pero consigue agarrarse a una rama del árbol antes de caer, mientras su mandolina se balancea en la otra mano y recibe el poderoso impacto de la segunda flecha en su mástil. En esta ocasión el proyectil se queda clavado, vibrando, en el instrumento. Cuando el bardo consigue estabilizarse de nuevo, se da cuenta de que la mitad de su cordaje ha sido segado, y la mandolina ha quedado inútil hasta que pueda arreglarse. (Etiqueta del ataque: Escabroso).

Abajo, Flynd y Enna se encuentran sobre la cima, conjurando e invocando peligrosas magias. Afortunadamente los disparos de los orcos se han centrado en su compañero, así que están más o menos libres para poder actuar. Sin embargo, la pobre Enna ha recibido una terrible herida, y se encuentra mareada y asustada. Incapaz de arrancarse la flecha, con sus manos temblorosas alrededor del asta, llama a la voluntad de su diosa con un estado mental agitado y poco apropiado, y canaliza la energía divina de forma muy torpe, agotando el uso de su conjuro de "Curar" y causando un efecto indeseado: en lugar de reparar su carne y su hueso, el conjuro retira la flecha que tiene clavada en el pecho de forma violenta, causándole todavía más daño, y la sacerdotisa lanza un gemido ahogado y no puede evitar caer con una rodilla en el suelo.

A su lado, Flynd estaba intentando conjurar al padre de todos los proyectiles mágicos. Tras gesticular y trazar líneas sobrenaturales en el aire, una chisporroteante masa de colores ultravioletas se forma entre la palma de sus manos. Sin embargo, cuando ve a sus compañeros abatidos, (a Enmel asaetado, a Enna dolorida tras el milagro mal canalizado), pierde a su vez la concentración. Quizás se deba al nerviosismo del combate, o quizás la formulación del hechizo fue demasiado rápida. Sea por la razón que sea, el proyectil sale de su control, y vuela errático sobre los combatientes que luchan por sus vidas junto al arroyo. Mientras, el conjuro de "Proyectil Mágico" se borra de su memoria.

Bajo la descontrolada bola de luz, Filipencio arranca su arma del cuerpo del último orco destrozado y se dirige hacia el que se está enfrentando a él, acercándose lo suficiente como para levantarlo por el cuello con su gran manaza. El orco, por su parte, levanta la espada aserrada y la descarga sobre el hombro del príncipe, causándole una profunda herida que, en vez de hacer que lo suelte, sólo sirve para enfurecerlo. El gigantón le lanza un cabezazo al orco que aplasta completamente su cabeza, y mientras el festival de dientes todavía vuelan por el aire lanza a su maltrecho enemigo contra su hacha, empalándolo sin piedad. En ese momento el proyectil mágico se lanza girando fuera de control contra la espalda del guerrero, y explota mágicamente reventando algunas de las escamas de su armadura y dejando un feo manchón negro y humeante a la altura del omóplato, (sólo perjuicio estético, el daño no tiene etiqueta escabroso ni contundente).

Mientras, a su lado, Topanga convertida en oso se tambalea con la hoja aserrada de uno de los orcos atravesándola como una aceituna en un martini. A pesar del dolor, la druída alza su imponente y poderosa forma sobre dos patas, y se lanza contra el orco que la empaló, (el número 11). Desgraciadamente Seth también está combatiendo con él, y tras conseguir engañar a su adversario fingiendo una falsa debilidad el bárbaro se lanza de nuevo, cantando y creando almendros imaginarios junto al arroyo, y barriendo el cuerpo del orco de un espadazo poco potente pero bien colocado, que raja el cuello del monstruo y lo hace caer sobre una roca. 

Tras ello es Topanga quien se lanza contra la roca, aplastando el cadáver del orco y descargando todo su peso sobre la empuñadura de la espada que tiene metida dentro. El arma todavía se interna más en su cuerpo, atravesando músculo y hueso y asomando, por fin, por la espalda de la bestia. Los oídos del animal pitan, sus ojos se nublan, y Topanga se encuentra realmente mal. Ahora, además de estar debilitada, está confundida, (-1 a SAB).

Los dos orcos restantes se deshacen de sus arcos, y sacan espadas aserradas como las de sus compañeros. Ellos están bien, y los héroes están heridos. Quizás su furia orca consiga darle la vuelta a la batalla. ¿Qué haréis ahora?.

- Tiradas (8)

Notas de juego

Próximo turno, el martes día 20 de febrero del año de nuestro señor de 2017.

Combate:

Orcos con arco:

1- Filipencio le ha arrancado parte del cráneo, y está muerto.

2- Enna le ha abierto la caja torácica con un proyectil mágico, y está muerto.

3- Flynd le ha fundido la cabeza y está muerto.

4- Enna lo hizo arder como en San Juan y está muerto.

5- Se dispone a luchar cuerpo a cuerpo contra Fil, Seth y la malherida Topanga.

6- Se dispone a luchar cuerpo a cuerpo contra Fil, Seth y la malherida Topanga.

Orcos sin arco:

7- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

8- Filipencio lo ha cortado por la mitad, y está muerto.

9- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

10- Seth le ha cortado la cabeza, y está muerto.

11- Seth casi le corta la cabeza, pero al final sólo le cortó el cuello, y está muerto.

12- Filipencio le ha saltado los dientes y lo ha empalado, y está muerto.

Cosas importantes.

¡Filipencio sufre 6 (8-2) pupas!. ¡Filipencio sufre 5 (7-2) pupas!. Ahora Filipencio tiene 13 pupas.

¡A Filipencio le falta el dedo medio de la mano derecha!.

¡La armadura de escamas de Filipencio tiene un manchón negro en su espalda!.

Ahora Filipencio tiene 1 Px.

¡Enmel ha perdido su arco, que se encuentra al pie del árbol!.

¡Enmel ha sufrido 7 pupas!. Ahora Enmel tiene 7 pupas.

¡Enmel tiene una mandolina rota e inútil, con la mitad de sus cuerdas segadas y una flecha clavada en el mástil!.

¡Enmel gana 1 Px!. Ahora Enmel tiene 1 Px.

¡Enna pierde el uso del conjuro "Proyectil Mágico"!.

¡Enna pierde el uso del conjuro "Curar"!

¡Enna sufre 1 pupa!. Ahora Enna tiene 9 pupas.

¡Enna gana 1 px!. Ahora Enna tiene 1 Px.

¡Topanga sufre 4 pupas, (5-1 por armadura)!. Ahora Topanga tiene 9 pupas.

¡Topanga-Oso tiene una espada aserrada bien metida dentro!. Mientras no la retire de alguna forma, (y no será fácil), está debilitada y confundida, (-1 a tiradas de FUE y de SAB).

¡Topanga gana 1 Px!. Ahora Topanga tiene 2 Px.

Ahora Seth tiene 6 pupas.

¡Flynd pierde el uso del conjuro "Proyectil Mágico"!.

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17/02/2017, 12:32
Enmell Rondak

Sorprendentemente, la flecha que atravesó mi cuerpo no fue tan dolorosa como la que rompió el mástil de mi vieja mandolina. Durante la batalla me había sentido asustado, confundido y frustrado. Por primera vez me encontraba realmente furioso.

Al menos conseguí atraer la atención de los arqueros - dije pricipalmente para mí mismo. - Ahora les toca pagar a ellos.

Bajé como pude del pino, con cuidado de no romper aún más el instrumento y no pisar el arco. Una vez en el suelo desenvainé la espada corta y me lancé contra ellos con un grito desgarrador aún en mi garganta mientras mi sangre teñía mi hombro.

Notas de juego

No creo que llegue a tiempo para la pelea antes de que los que ya están cuerpo a cuerpo acaben con los orcos restantes y por eso no tiro por el saja-raja.

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17/02/2017, 14:32
Flynd Brightnight

Las flechas habían volado por doquier y, gracias a los dioses, a Flynd no le había tocado recibir ninguna todavía. Lo que era más: los arqueros dejaban ahora sus armas a distancia, empuñando armas a cuerpo a cuerpo, lo que le convertía en menos blanco que nunca.

Por desgracia la balanza no estaba enteramente de su lado. Por parte de la compañía de bienhechores asalta-ruinas, había numerosas heridas y casi sorprendía que todos siguieran en pie. Un oso suicida, una sacerdotisa atrae-flechas, un príncipe de nueve dedos enloquecido en la furia de la batalla y, recientemente, impactado por un indebido hechizo...

Pero Flynd, a pesar de haber perdido la capacidad de lanzar proyectiles mágicas por el momento, no tiraba la toalla. Cada gesto era importante, así que decidió volver a utilizar el hechizo de invisibilidad. Esta vez el objetivo sería él mismo. Conjuró el hechizo y, acto seguido, salió a toda velocidad hacia el campo de batalla. Todavía quedaban algunos orcos en pie y, con la ventaja de la invisibilidad bien podría acabar con uno de ellos, ¿no?

- Tiradas (1)
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18/02/2017, 04:05
Filipencio II

-Nngh...!- El proyectil casi me tira hacia adelante, luego de esto le diré al hombre mágico que tenga más cuidado, o tendré que enseñarle a no atacar a sus propios compañeros de la manera en que lo hacemos en Ingmar.

En eso veo que los arqueros preparan sus armas de filo. -Cobardes. Recién ahora deciden usar armas de verdad. -Y hablando de armas de verdad, miro mi hombro derecho y veo que todavía llevo allí incrustada la espada serrada del orco al que le di el cabezazo. -Grr..- La quito de ahí con mi mano izquierda y se la arrojo con violencia a uno de los dos que van quedando, para luego correr hacia el otro profiriendo un grito desenfrenado y sacudiendo mi hacha en todas las direcciones posibles.

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18/02/2017, 12:48
Seth Soderstrom

Un rápido vistazo a su alrededor basta para que Seth Soderstrom se ubique en el campo de batalla. Flynd ha huído, o por lo menos no se le ve por ninguna parte, y la bruja mediana que se transformó en cuervo sigue sin unírseles al combate.

Aaaagh, maldito Flynd, comadreja traidora. Ataca a Filipencio II a traición con su magia, y luego huye para esconderse en la madriguera de la que salió. ¡Seth Soderstrom ya sabía que Flynd no era de fiar! El mago era demasiado rarito...

Por suerte, el oso espontáneo, que apareció cuando Seth Soderstrom no miraba, estaba en las últimas, desorientado y con la espada sierra en su cuerpo. Así, Seth Soderstrom no tendría que matar al úrsido en este instante. Lo dejaría para el final, y así podría volcarse en eliminar a los orcos, que suponían un peligro más inminente.

Porque eso... eso hacen los héroes: tomar decisiones en mitad del caos, identificar las amenazas, clasificarlas por orden de prioridad y, en última instancia, neutralizarlas. Porque si no las neutralizase, no sería un héroe, solo sería un archivista de biblioteca. Y Seth Soderstrom nunca pisa una biblioteca salvo que sea para inmovilizarla antes de cortarle el cuello con su espada. Las bibliotecas son las bestias más peligrosas que existen en la naturaleza. Si alguna vez te sale una al paso en un bosque oscuro, mantenla a raya con fuego. ¡Sus libros son vulnerables al fuego! ¡Recuérdalo!

Seth Soderstrom mantuvo la espada mirando al frente para preparar el golpe final. Corrió sobre la nieve, sobre el cadáver de un orco arquero, de nuevo sobre la nieve, saltó el arroyo, volvió a saltar el arroyo porque estaba en la orilla correcta desde el principio, y, por último, atacó a uno de los orcos. Durante toda esa breve serie de movimientos, cantaba la siguiente canción...

¿Quién corre y quién se corre?

¿Quién es mensajero de la Muerte?

¿Quién a sus compañeros socorre?

¿Quién entre todos es el más fuerte?

¡Seth Soderstrom! ¡Seth SO THEIR STROOOONG!

Tras embestir como un unicornio, aunque no hay suficiente documentación para asegurar que los huidizos unicornios existen o que usan su cuerno mágico para embestir, la espada de Seth Soderstrom perforó el pecho del orco, y la punta de su filo asomó por la espalda.

- Tiradas (2)
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18/02/2017, 19:33
Enna

La muchacha estaba en el suelo, el dolor de la flecha al ser extraída había dejado a la sacerdotisa aturdida en el suelo. Sentía el pecho húmedo de la sangre, mientras iba manchando la túnica de color gris ceniza ribeteada de azul.

Medio mareada contempló el devenir de la escena, tan caotica y llena de brutalidad y muerte. Intentó sin éxito incorporarse para sumarse al resto, tal vez para ayudar, tal vez por miedo de quedarse sola.

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21/02/2017, 07:38
Topanga

Cada vez que ataco la espada profundiza más y más en mí, ahora ya no solo me siento malherida sino confusa, como si me faltasen ganas de seguir combatiendo. Entre tanto ajetreo vislumbro como mis compañeros poco a poco se están haciendo cargo de los pocos orcos que faltaban y me tranquilizo.

Pienso la forma de sacarme la espada de mi cuerpo pero con esta forma no seré capaz, pienso las distintas formas que puede adoptar gracias a haber vivido en Nowa pero no se me ocurre ninguna y mi cuerpo no sé si soportará el nivel de profundidad de la espada.

Solo me queda una solución. Esperar a que me saquen la espada con sumo cuidado.

Me retiro a un lado de la batalla como puedo a esperar, me flaquean un poco las patas pero me mantengo en pie, debo resistir.

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21/02/2017, 11:33
Director

Turno 1.5

La druida convertida en oso se retira del combate escupiendo sangre, con la terrible espada dolorosamente inserta en su interior. Mientras, en la cima de la colina, Enna no puede mantenerse en pie y cae sobre su rodilla, asustada y herida. A su lado, Flynd exclama una fórmula mágica y su imagen riela, tiembla y se transparenta. Cuando Enmel baja del árbol, (con cuidado para no caer), y echa a correr hacia el campo de batalla, el mago ya ha desaparecido completamente.

Abajo, el arroyo se tiñe de rojo y de verde. Rodeados de cadáveres y cubiertos de sangre, Fil y Seth hacen frente a los dos últimos salvajes que cargan contra ellos. El Príncipe de Ingmar se arranca la espada aserrada de su enemigo del hombro, y la proyecta contra su adversario con tanta fuerza que se lleva una cuarta parte de su cabeza. El monstruo ya está muerto, pero en un estertor salvaje de pollo sin cabeza lanza varios tajos antes de caer al suelo, hiriendo en el pecho al poderoso guerrero.

Seth, por su parte, consigue confundir al orco con una incomprensible maniobra, saltando de un lado a otro del arroyo y cantando una valiente canción de batalla, (valiente para su pueblo, terrorífica para el orco y cómica para todos los demás). Su enemigo titubea sólo un momento, pero eso es lo único que Seth necesita para ensartarlo con potencia y acabar con él. Su cuerpo cae al suelo estrepitosamente, junto al que estaba luchando con Fil.

El duro combate ha terminado, y ahora sólo se escucha el correr del arroyo, el resollar de vuestras respiraciones y los gemidos de los heridos. (Y quizás alguna absurda canción de victoria de Espita del Fiordo). La druida-oso se encuentra malherida, y necesita que alguien desafíe al peligro (Destreza) para retirar la espada aserrada que tiene dentro sin causarle daño. En el área hay doce cadáveres orcos, seis cadáveres de centinelas humanos, y ahora os dais cuenta, el cadáver de un bárbaro de rasgos similares a los de Filipencio, con un hacha entre sus brazos muertos. Ése era el cadáver que portaban los orcos envuelto en una amplia piel de lobo.

Un vistazo a fondo a los cuerpos encontrará los siguientes objetos;

- Una amplia y maloliente piel de lobo mal curtida.

- Doce espadas aserradas toscas, pesadas y sucias de factura orca.

- Seis arcos toscos, pesados y sucios de aspecto tribal, quemados con motivos violentos.

- Una mano humana momificada, con una cuerda para usarla como colgante.

- Un hacha de batalla Ingmariana.

- Seis lanzas con el escudo de Caredon en sus filos, (una torre rodeada de casas).

- Seis cotas de mallas un poco golpeadas, con el símbolo de Caredon.

- Seis uniformes de la guardia de Caredon.

- 38 monedas en total.

- 19 cadáveres en total.

El combate ha terminado, y la noche ha caído cubriéndolo todo con la luz de la luna llena. ¿Qué haréis ahora?. Es vuestro turno, y vuestra decisión.

- Tiradas (3)

Notas de juego

Próximo turno, el viernes día 24 de febrero del año de nuestro señor de 2017.

Cosas importantes.

¡Filipencio sufre 1 (3-2) pupa. Ahora Filipencio tiene 14 pupas.

¡A Filipencio le falta el dedo medio de la mano derecha!.

¡La armadura de escamas de Filipencio tiene un manchón negro en su espalda!.

Ahora Filipencio tiene 1 Px.

¡El arco de Enmel se encuentra al pie del árbol!.

Ahora Enmel tiene 7 pupas.

¡Enmel tiene una mandolina rota e inútil, con la mitad de sus cuerdas segadas y una flecha clavada en el mástil!.

Ahora Enmel tiene 1 Px.

¡Enna ha perdido el uso del conjuro "Proyectil Mágico"!.

¡Enna ha perdido el uso del conjuro "Curar"!

Ahora Enna tiene 9 pupas.

Ahora Enna tiene 1 Px.

Ahora Topanga tiene 9 pupas.

¡Topanga-Oso tiene una espada aserrada bien metida dentro!. Mientras no la retire de alguna forma, (y no será fácil), está debilitada y confundida, (-1 a tiradas de FUE y de SAB).

Ahora Topanga tiene 2 Px.

Ahora Seth tiene 6 pupas.

¡Flynd ha perdido el uso del conjuro "Proyectil Mágico"!.

¡Flynd es invisible!.