Partida Rol por web

Lunes, 3 de Septiembre. 

El amanecer trae con él el ajetreo del primer día de clases. En menos de dos horas, comenzará la primera clase del curso. Para muchos es obligatoria, pero para otros es, simplemente, una clase optativa. Pero lo primero que hay en el horario es el desayuno.

Los alumnos más jóvenes ya se han levantando y pululan por las salas comunes para acabar de prepararse e ir directamente al comedor. O, simplemente, esperan a que alumnos más avanzados salgan de la sala común y no perderse entre los pasillos y escaleras que pueblan el castillo de Hogwarts.

También es la hora del correo para aquellos que esperen misivas o la edición matinal de El Profeta u otras revistas.

Bajo con mi uniforme impoluto, varios caramelos de broma en mis bolsillos, mi maleta con mis textos, ya leídos de cabo a rabo unas cinco veces y mi sonrisa bien puesta.

De inmediato busco a Karavy algo que ribar de la mesa de los leones, ante las protestas de algunos chicos de quinto y sexto año que en añguna que otra ocasión habían sido víctimas de mis bromas.

Al ver a Kara no pierdo el tiempo y me acerco con mi botín en la mano.

¿Cómo ha amanecido la reina del Serengueti el día de hoy? ¿Todo listo para un gran inicio de clases? - pregunto mientras me siento al lado de Kara.

Si algo se puede agradecer es que la sala común de Hufflepuff es la mas cómoda de todas, y la cercanía a las cocinas nos garantiza un buen refrigerio y un bocadillo especial, algo que debo agradecerle a Helga Hufflepuff, bien el dia comenzó con tranquilidad, mi uniforme si no impoluto estaba lo mas presentable posible, con gracia zorruna en un momento estaba ya en pie, claro después de guardar la cámara esperaba un buen día de fotografías.

Preparé los libros, los pergaminos y la tinta y me dirigí a saquear la primer copia del profeta o de las revistas de aquellos descuidados, después de todo no es culpa mía si lo han dejado sin protección, al igual que algunos dulces y pastelillos.

-Buenos días dormilona- salude a Krystall mientras salía del dormitorio de las chicas - ¿tuviste una buena noche, ya se te paso el enojo?- la cuestioné.

Al aparecer James también lo salude, después de todo era cortesía.

-Hey buenos días pequeño Dingo, ¿has dormido bien?- dije con sonrisa zorruna.

Ha tenido una noche decente de sueño. Quizá está más nervioso de lo que quiere aparentar, pero es un nuevo día e intentará dar lo mejor de sí mismo para dejar a su escuela en una buena posición. Aunque los lunes no son siempre buenos y parece que tienen Historia nada más despertarse. Está mirando el horario cuando Matthew le saluda.

-Buenos días. He dormido bastante bien, sí.

Hay algo en esa sonrisa que le inquieta.

-Bueno... yo me voy al comedor, que tengo clase en la primera hora y tengo que coger energías. Nos vemos.

Sale de la Sala Común.

Euphemia nunca sabe como va a despertar. No sabe si podrá moverse o si tendrá que quedarse en la cama durante más tiempo. Parece que hoy se despierta con un buen día. Se siente un poco cansa, pero parece que su cuerpo va a resistir bastante. Al menos de momento.

Se ha despertado llena de energía. Es más, le ha dado tiempo a ponerse su maquillaje, a arreglarse el pelo y a decidir que complementos van bien con el uniforme. Se ha hecho una coleta lateral, dejando que su cabello caiga por encima de su hombro de forma natural. El coletero es bastante llamativo y lleva muchos adornos colgados de él: estrellitas, lunas, soles... ¡Un montón de cosas!

Es lo bueno de Hogwarts: no parecen darle tanta importancia a los complementos como en las escuelas e institutos japoneses. Mientras lleves el uniforme limpio y arreglado, da igual que te maquilles o que lleves complementos llamativos. Al fin y al cabo, el mundo mágico está lleno de gente excéntrica.

Espera encontrar a Kara para ir juntas al comedor y también tiene que darle un regalo que no pudo ayer.

Robert se levanta de la cama con muy buen humor en ese primer día de curso en Hogwarts. La verdad es que ha encontrado difícil dejar de sonreír desde que bajó del tren el día anterior, y al bajar las escaleras de piedra del dormitorio incluso silba un par de estrofas mientras el aire de la mañana se cuela por las ventanas y le revuelve el pelo.

Al entrar en la Sala Común, descubre que el bullicio de los primeros días de curso ya se ha apoderado del lugar. Sobre todo son los alumnos más jóvenes los que están ansiosos por encontrar sus aulas y empezar las clases. Para los mayores, aquello ya es una rutina. Se coloca bien la corbata con rayas de color azul y bronce, y echa un vistazo para ver quién está listo ya para desayunar.

-Señor Gurney, veo que está usted muy relajado y feliz - dice una voz desde atrás.

No es otra que la joven pelirroja con la que compartió una parte interesante del viaje, aunque no muy larga. Dominique lleva el cabello trenzado en una trenza descuidada, pero con toda la intención de que sea así. El uniforme está impoluto y queda perfecto en ella.

-¿Has dormido bien?

Seguido de un grupo de novatos llego al Comedor, andaban medio perdidos aún por lo que me encargue de guiarlos hasta aquí, aún no había mucha gente, el grupo que venía conmigo rápidamente tomo asiento en nuestra mesa y empezó a comer yo por mi parte no llegue ni a sentarme, cogí un sandwich y me lo comí rápidamente, lo mismo hice con un vaso de agua, recogí también el periódico y tras dar otro vistazo por el lugar empiezo a andar.

Con el periódico doy un toque a Artemis por el costado mientras parece buscar a alguien.

- Hola Flamel ¿que tal las vacaciones? -Artemis, lo normal sería que nos odiáramos mutuamente pero en mi caso lo veía como un rival ya que nuestras metas coincidían y era quien me lo había hecho pasar en mas de una ocasión- ¿A quien buscas? Te puedo echar una mano, al fin y al cabo soy un buscador ¿eh? -bromeé pasando mi brazo por su hombro

Hola Cross, busco a Kara quería quedar con ella para la tarde, pues quiero organizar nuestras sesiones de estudio para este mes. 

¿La has visto por curiosidad? - pregunto de forma amable mientras me aparto un  poco de la mesa de los leones antes de que alguno de los chicos proteste aún más por mi presencia alli.

Después de sus labores de prefecta el día anterior, Kara había caído rendida en su cama. Y, sin embargo, no había logrando dormir más de tres horas antes de levantarse e ir al baño presa de las arcadas debido a los nervios de empezar el año de los EXTASIS. ¿Cómo iba a poder con aquello?

Así que cuando por fin había logrado calmar su estómago se había dedicado a leer de un modo febril el libro de Historia de la Magia, tratando de hallar consuelo en algo que su buena memoria podía salvar. Cuando había visto que sus compañeras de habitación empezaban a despertar había decidido que era el momento de escabullirse al baño antes de que alguna notara que sus uñas habían pasado a mejor vida.

No fue hasta que no salió de la ducha que no se encontró con Yukino con pinta de haber pasado una noche de sueño de lo más reparador y haberse despertado con ganas de comerse el mundo y no amedrentada por el mismo como en su caso.

- Buenos días, Yuki - se las apañó para esbozar una sonrisa -. Iba a desayunar, ¿te apetece venir?

Sonríe ampliamente cuando Kara hace acto de presencia.

-¡Kara! Tengo algo para ti. Se me olvidó dártelo ayer por la noche.

Busca en su mochila y saca una bolsita con un lazo. La boslita es de tela y es muy bonita. Dentro hay una pequeña pulsera con algunos adornos en forma de sakura.

-Espero que te gusté.

A Krystal le costó bastante quedarse dormida, el enfado que tenia era bastante grande y se llevo media noche dando vueltas por la habitación y por la cama, lo que había hecho que durmiese no muy bien y se levantara con ojeras y el pelo revuelto. Por lo que vio en su calendario tenia la mañana bastante tranquila. Aun despeinada aparece por la puerta de la sala común en donde estaba Mathew y alcanza a ver como el nuevo se marcha, con un gran bostezo asiente con la cabeza a su amigo y dice:

Si… porque he tomado la decisión de formar un club… como no han dicho nada de los club y si no puede ser oficial será extra oficial… va a ser el club de Quidich y si, vamos a jugar… menudo desperdicio el estadio ahí sin usarse…

Se deja caer sobre su amigo mientras bosteza de nuevo para decir mientras se rasca la barriga:

Bueno, tengo un poco de hambre… ¿tienes clases por la mañana? Yo la tengo bastante libre, he pasado de coger las clases más rollo, uff que petardos poner historia y pociones el lunes a primera hora… que buenos fines de semana más largos me voy a pegar jeje... por cierto ¿algo interesante en el Profeta?

Entra en el Gran Comedor sin libros ya que no tiene clase a primera hora. Con el cabello aun un poco alborotado se sienta en la mesa de su casa y comienza a desayunar. Se plantea que hacer en la siguiente hora ya que está libre. Quizá pasear por los terrenos o algo así. Bueno, ya lo vera.

Se sirve un bol con cereales, hasta arriba, y le pone leche. Comienza a comer.

Medito un momento aunque en realidad sabía perfectamente que no, la sala común de Griffyndor quedaba muy lejos de la mía y el único trayecto que había hecho hoy era venir hasta aquí directamente.

- No, he estado haciendo de guía a unos chavales de primero hasta aquí. Le he cogido el gusto a ser guía turístico desde el año pasado con los de intercambio... -entonces me fijo que llega Ailyn también, no era muy difícil darse cuenta ya que estábamos al lado de la mesa de los Raven- ...hablando de gente de intercambio. Bueno, Artemis si veo a Kara te aviso yo me voy a seguir saludando a todo el mundo no quiero que nadie se olvide del bueno de Nathan.

Y me despedí con una palmada en el hombro antes de dirigirme junto a Kara sorprendiéndola al poner mis manos sobre sus hombros.

- Hola guapa, ¿que tal tu primer día en Hogwarts o debería decir segundo?

Gracias Nathan, pero por favor no olvides cobrarles la tarifa estanadar 2 Knuts por viaje, el privilegio de nuestra compañía tiene su precio. - digo a modo de broma mientras me dirijo hacia la puerta del comedor, pues ya había robado de la mesa de Gryffindor suficiente comida como para hacer frente a toda la mañana.

Afortunadamente yo no era de comer mucho, con algo de suerte quizás lograría toparme con Jake o Kara en los pasillos camino a clase.

Por un momento consideré saludar a Ailyn, pero como Nathan ya la había abordado, preferí dejarlos conversar en paz, ya luego conversaría con ella con más calma.

-Historia de la magia, paso de ella, tome suficientes clases el año pasado como para librarme de esa asignatura, así que tengo esta primer hora libre, al menos hasta DCAO o Pociones no estoy tan seguro, aun puedo revisar el horario, en cuanto al club a quienes tienes pensado invitar, Quizás me apunte al menos solo para verificar un poco - la sonrisa traviesa no se me borró del rostro.

-En cuanto el profeta nada relevante, salvo una que otra venta en el Callejón Diagón al parecer 50% de descuentos en calderos esta semana, y alguien busca a un exterminador se dice que un Chupacabras americano que arribo ilegalmente, básicamente lo normal, a encontraron un nido de capas rojas cerca de Irlanda eso da miedo-  sonreí mientras le entregaba el periódico a Krystal.

-¿Te apetece desayunar? o prefieres saquear la cocina- dije mientras me ponía de pie y me preparaba a salir.