Partida Rol por web

Una Sombra en los Sueños

Segunda parte: La Isla de Corvinus

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16/09/2014, 21:11
Narrador

¿La muerte es esta oscuridad total que os rodea? ¿Tan triste y solitaria va a ser?

...

...

¿Qué es eso que suena? Unas campanas...

El eco de esas fuertes campanadas parece deciros que la muerte no os ha llegado...

Al menos todavía

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16/09/2014, 21:11
Narrador

Al abrir los ojos, os encontráis en una playa. El cuerpo os duele, estáis empapados, pero no parece que haya nada roto.

Cuando os decidís a levantaros, una nueva ola hace su aparición y os baña de nuevo. Al mirar a vuestro alrededor, veis varios tablones, seguramente pertenecientes al zepelin.

Vuestras pertenencias están dispersas por la playa, al igual que vuestros compañeros.

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16/09/2014, 22:34
Ariadne Briaero

Poniéndose rápidamente en pie, Ariadne empezó a ayudar a levantarse al resto, mientras oteaba la playa y cercanías en busca del origen de esas campanadas y de más supervivientes, con particular preocupación por el extraño que había provocado todo aquello.

- ¿Estáis todos bien? ¿Qué... qué ha pasado? - Tras una breve pausa de meditación, se auto-responde pensando en voz alta su propia teoría - Diría que nos hemos estrellado, pero parece que hemos tenido suerte...

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19/09/2014, 11:10
Cáliban Menrol

Oscuridad.

Oscuridad con destellos blancos.

Oscuridad con destellos blancos y algún sonido.

Un gruñido surgió de Cáliban cuando luchaba por salir de la insconsciencia en la que estaba sumido, pero sobre todo, cuando intentaba moverse ligeramente. Al parpadear, la luz le deslumbra y el agua le empapa de nuevo, pero lo primero que hace es buscar sus gafas. Ante la caída podían estar en cualquier sitio, pero al menos estaban cerca de su hombro, meciéndose un poco por la corriente y quedando paradas con el cuerpo del hombre.

Las cogió e intentó ponerse de pié, con mucho esfuerzo y dolorido, se puso las gafas y se tambaleó un poco- Eso de bien, es relativo -dijo mientras intentaba salir de ese mar y sentarse en la arena- ¿Alguien se acuerda de algo de lo que pasó allí arriba?

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20/09/2014, 12:13
El Gato

Notas de juego

Bueno, como de 5 habéis posteado sólo 2 (¬¬ para los tres que no han posteado) esperaremos unos días.

Por cierto, por si no os habéis dado cuenta, todas vuestras heridas han desaparecido. Empapados y las ropas rasgadas quizá, pero sin heridas de ningún tipo.

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21/09/2014, 10:56
Inari

Inari fue el tercero en ponerse de pie, aunque con dificultades. Estaba mareado, aunque a él ese tipo de cosas no le afectaban demasiado. Mirando a su alrededor, vio el estropicio que había causado el zeppelin en ese lugar. Todo hecho trizas, por el agua flotando estaba la mayor parte de lo que quedaba de la nave. El resto, sobre la arena. Se quitó un alga del pelo de mala gana.

Bueno, al menos estamos vivos, aunque no me consuela para nada.

¿Dónde narices está el tío ese? - dijo mientras intentaba quitarse el exceso de agua de sus ropajes. 

Comenzó a rastrear la zona. Él no podía estarse quieto.

- Tiradas (1)
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22/09/2014, 01:11
Pyros Sedrith

Pyros colocó las manos detrás de sí, para después impulsarse con gran fuerza y soltura y ponerse en pie. Estaba empapado, tenía el pelo pegado a su oronda cara, y sus ropajes pesaban como quinientos kilos más. Pero esas campanas... aquello le dio una mínima esperanza.

No había rastro de nadie, ni tampoco de nada. Si alguien más había sobrevivido a todo aquello, no estaba por allí. Observó primero hacia el mar, por si había alguien a quien poder rescatar. Y de no ser así, señalaría hacia donde se escuchaban las campanas.

Creo que allí puede que haya alguien capaz de ayudarnos. Suenan campanas, y eso es que alguien tiene que estar tocándolas. Quizá si alguien ha sobrevivido, está tratando de llamar nuestra atención. Será mejor que todos nos reunamos allí antes de que venga otra ola. Concluyó mientras tomaba las pertenencias que iba encontrando.

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22/09/2014, 04:20
Leon Kriess

Leon se levantó aturdido tras el impacto, tardando algo más en recobrar la consciencia. Al abrir los ojos, necesitó unos momentos durante los que no escucha a sus compañeros para ubicarse y recordar todo lo que había pasado. Al hacerlo, dio un rápido vistazo a su alrededor en busca de supervivientes, pero suspiró al haber encontrado al menos a aquellos que estaban con él cuando todo ocurrió.

Asintiendo a las palabras de Pyros y sin ánimo ni fuerzas de mediar palabra, empezó a encaminarse pesadamente hacia las campanadas, pareciendo abatido ante la situación.

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24/09/2014, 22:14
Narrador

La playa avanza un par de decenas de metros antes de empezar a convertirse en una verde campiña llena de colinas, adornadas por algún que otro árbol de gran tamaño. Lo único que estropea tan precioso paisaje es el hecho de que el cielo está gris y oscuro, como si presagiase una inminente tormenta.

Algo raro os ocurre según camináis. Notáis que vuestro cansancio desaparece, que os sentís con energías renovadas como si de algún modo os hubiesen curado de los combates y de la caída que habíais sufrido.

Tras caminar un buen rato, llegáis a una aldea, desde la que suenan las campanadas. Una entrada abierta con casas a los lados desemboca en lo que parece la plaza del pueblo. Hay una gran cantidad de gente, os atreveríais a decir que está todo el pueblo. Parecen estar preparando algo, pues hay mucho movimiento y muchos gritos.

Pero vuelve a pasar algo. Un niño se gira y os ve. Se queda pálido y corre hacia la profundidad de la multidud. Poco a poco todo el mundo se silencia y se gira para observaros, y su mirada no parece precisamente acogedora, aunque tampoco agresiva. Os empiezan a rodear, dejando cierto margen de distancia, mostrando curiosidad, incertidumbre y algo de preocupación.

Pasados unos segundos, un fornido hombre de mediana edad da unos pasos hacia delante, con expresión escéptica y, carraspeando, os pregunta.

¿Quién sois? ¿Qué hacéis aquí y cómo habéis llegado a nuestra isla?

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25/09/2014, 00:08
Ariadne Briaero

Alzando las manos con las palmas hacia su interlocutor en actitud pacífica, Ariadne respondió. - Somos náufragos, viajábamos a bordo de la Dama, una nave voladora que se ha debido estrellar hace poco. Perdimos el conocimiento con la caída, y lo recobramos en la playa. Hemos venido hasta aquí guiados por las campanadas. - explica la joven con calma, esperando satisfacer a la multitud. Sin embargo, una pregunta se le había formado mientras explicaba su situación. Sin una pizca de malicia, la joven pregunta extrañada - ¿No habéis visto u oído caer a nuestra nave?

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25/09/2014, 19:20
Inari

Mientras caminaban en dirección al sonido de las campanadas, comenzó a sentirse con vitalidad.

Esto no puede ser nada bueno - pensó.

No le gustaba nada que la arena se le metiese entre sus zapatillas, era algo que nunca había llevado bien, a pesar de codearse con la naturaleza continuamente.

Tras un tiempo sin parar llegaron a una zona poblada. Pero el recibimiento, como él esperaba, no fue del todo amable. Cuando aquél grandullón vino hacia nosotros y Ariadne levantó las palmas, el arquero pensó:

Eso en el lugar de donde vengo es una muestra de debilidad. No sé qué pensarán por aquí.

Inari no dijo nada, se quedó quieto como una estaca y observando a la gente de alrededor.

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26/09/2014, 03:53
Pyros Sedrith

Pyros se acercó a Ariadne y apoyó una mano sobre su hombro. Efectivamente, no comprendemos como podemos estar vivos, pero hemos sobrevivido. Parece que ustedes están celebrando algo, o en fiestas. Necesitamos un lugar donde descansar, un sitio para comer algo y beber. Ustedes pueden seguir disfrutando de lo que estuvierais haciendo. Con que uno nos diga dónde nos encontramos y cómo podemos salir de aquí, será suficiente. No queremos molestarles.

Después miró a su compañera, quería que aquel gesto la hiciese sentir más confiada y segura, y que el resto no les vieran como una amenaza. Al fin y al cabo, está claro que no les esperaban.

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26/09/2014, 19:31
Leon Kriess

El joven pelirrojo aún parecía encontrarse parcialmente en shock. Les seguía con pasos silenciosos allá a donde fueran, y permanecía escondido tras las espaldas de sus compañeros ante la muchedumbre que se acercaba, envolviéndose en su capa con una leve tiritera ante las preguntas del tipo que se adelantó.

Ante las palabras de Ariadne y Pyros, pareció suspirar algo aliviado al comprobar que ellos mantenían la calma. Tal vez todo podría estar bien. Algo más esperanzado, dio un paso adelante para situarse junto a sus compañeros y asentir, corroborando sus palabras.

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29/09/2014, 21:14
Narrador

¿Náufragos? dijo el hombre extrañado. La gente empezó a hablar, pero en un tono distinto, amigable.

¡Ah, son náufragos! se oyó en la multitud.

¡Mamí! ¿Dónde está la nave? ¡Yo no he visto nada!

El hombre se acercó a vosotros y se presentó tendiendo su mano.

Mi nombre es Raymon, soy el alcalde. Estáis en Corvinus, una pequeña isla del mar interior. Contadnos, ¿una aeronave? ¿De qué tipo? Estoy convencido de que a toda la isla le encantará escuchar vuestras aventuras.

Tras estas palabras tan amables, un río de gente os empezó a llevar hacia la plaza. En ella, había una gran mesa con gran cantidad de alimentos.

¡Mamá, puedo sentarme al lado del señor pelirrojo! chilló un niño dando tirones de la manga de Leon.

No, cariño, deje que se siente con la gente importante le acalló su madre llevándoselo.

Os sentaron en la mesa y pusieron ante vuestros ojos una gran cantidad de manjares.

Os acosaron a preguntas sobre vuestra aeronave y vuestro destino.

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30/09/2014, 20:13
Inari

Inari no podía creérselo. ¿No habían visto nada?, ¿no habían oído el estallido?, ¡chorradas!.

Él mismo, a pesar de no ser muy hablador, se dirigió al alcalde:

Resumiendo, fuimos objetos de una captura sin saberlo, quisieron acabar con nosotros al principio (pausa de dos segundos) y al final - dijo señalando con el dedo hacia el lugar donde se estrellaron.

Necesitamos respuestas, no contaros nuestras historias, pero no seré yo quien las haga porque no estoy de humor.

 

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01/10/2014, 03:57
Pyros Sedrith

Pues entonces, cállate la boca y no molestes. Dijo de muy malas formas Pyros al tipo del pie herido. Si eso es todo lo que tienes que decir, déjame a mi que ya me encargaré de contar la historia.

Pyros se sentó cómodamente en el taburete de la mesa y se puso a comer todos los manjares que allí se ofrecían. Estaba emocionado por poder probar bocado, desde que habían partido no había comido nada, y después de hacer tanto ejercicio y de sufrir tanto, se le había terminado por abrir el apetito.

Emocionado, comenzó a contar toda la historia de lo que les había pasado, incluso revelando el ataque de los guardias y el ser misterioso. Quizá esa gente tan entrañable supiera algo de información sobre lo que había pasado.

Por último se percató de que no parecían sorprenderse por ser "naufragos" ¿Acaso ha habido más como nosotros que hayan llegado hasta aquí? De todas maneras, a Pyros había algo que no se le iba de la cabeza, un comentario que aquel sobrenatural desconocido les había dicho: "Ya es tarde. La Puerta de las Tinieblas se ha abierto". Aunque había que reconocer que si así eran las tinieblas, no habría de qué preocuparse.

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01/10/2014, 14:41
Cáliban Menrol

Cáliban se mantuvo en silencio y callado cuando apareció esa gente exigiendo saber quienes eran y de donde venían, pero por suerte sus compañeros eran más sociables que él, por lo que se dedicó a quitarse la arena que podía de la ropa, que al estar mojada era una misión casi imposible.

Cuando el chico gordo hizo la pregunta tras darle un ligero rapapolvo al arquero, Cáliban se quedó pendiente de la respuesta, pues la pregunta era más que acertada.

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02/10/2014, 09:23
Ariadne Briaero

Ariadne se dejó llevar por la gente y aceptó de buen grado su hospitalidad.

Oyendo las desavenencias, a Ariadne se le erizó el cabello e intentó suavizar la situación. - Vamos, vamos, la gente se pone de malas cuando intentan matarla... no ganamos nada molestando a quien no lo ha hecho... ¿verdad?

La mesa estaba repleta de manjares de los que Ariadne fue dando buena cuenta sin olvidar agradecer cuando le ofrecían algo o de congratular a los cocineros responsables. - ¡Esto está buenísimo! - se le oía decir a menudo - ¡Muchas gracias, sois todos muy amables! - otras veces.

Cuando la explicación llegó a su final y Pyros hizo su pregunta también captó su atención, pero por una razón diferente. ¿Y el resto de pasaje de la Dama? Desde la playa no habían visto a nadie... - Las corrientes de esta isla... en caso de naufragio, a dónde llevan los restos? A algún otro lugar que no sea la playa que hay en esa dirección? - dijo señalando la playa de la que venían. Si había otros supervivientes tendrían que ayudarles... a no ser que fuera aquel personaje desconocido, claro.

Notas de juego

¿Quien es Aenar?

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03/10/2014, 13:58
Leon Kriess

Leon sonrió amablemente al chico que quería sentarse a su lado, pero decidió no contrariar a su madre cuando se lo llevó a rastras. Tomó el asiento que le habían asignado, y empezó a comer y beber tímidamente mientras Pyros intercambiaba palabras con los lugareños. Poco a poco, la timidez se fue esfumando, y empezó a engullir de forma algo menos decorosa, sucumbiendo al hambre.

Callado y sin querer entrometerse en la conversación, seguía la misma con la mirada, observando a quien hablaba con unos ojos bien abiertos y curiosos. Estuvo a punto de intervenir ante la brusquedad del arquero, pero consideró suficientemente adecuado el comentario de Ariadne.

Entre agradecimientos por todo el banquete, y aún asintiendo a las preguntas que hacían sus amigos, él añadió otra.

-Y, bueno... También me gustaría saber si este pueblo es completamente independiente, o tiene tratos con el continente. No nos vendría nada mal saber de algún barco que pudiese ayudarnos a cruzar el Mar Interior...

Acompañando sus palabras con una jovial y amable sonrisa, esperó respuesta entre bocados de un muslo de pollo que se había agenciado.

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03/10/2014, 22:13
Narrador

El interés de la gente por los náufragos hizo que les colmasen de atenciones. Bueno, a todos menos a Inari, al que apartaron educadamente y dieron de comer menos que a los demás. Pero aún así, no podía quejarse de las atenciones, aunque frías, eran atentas.

Como ya os he dicho, estáis en la Isla de Corvinus. Es una pequeña isla del mar interior, nos dedicamos a la agricultura y a la ganadería para mantenernos. No tenemos contacto con los alrededores, pocas barcas son las que se acercan a estos islotes, porque las bravías aguas de la zona son muy peligrosas. No estamos acostumbrados a ver náufragos, pero si llega alguno, le atendemos bien.

Hay algún que otro islote alrededor, pero no hemos visto a nada ni a nadie salvo a vosotros.

Ante la mención de Leon sobre un barco, el alcalde asintió con energía.

¡Tenéis suerte!  En un par de semanas esperamos una fragata comercial que os podrá acercar a la costa.