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Aguas Nuevas: La Conquista de Maztica

6: Órdenes

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15/03/2011, 23:26
Capitán Ardell

Las palabras de Gargun sentaron a Ardell como una puñalada. Al capitán le rebosaba la hiel de oír al enano alabar constantemente a Karla. Había que reconocer que la muchacha tenía un don para encarar las olas y que la quilla las cortase con eficacia para no perder velocidad. En un rato, la galera se iba haciendo más pequeñita en la distancia, y finalmente, en algún momento de la madrugada debieron de cansarse de perseguirles o perderles de vista en la oscuridad.

En la Revivida reinaba un silencio importante y tenían todas las luces apagadas para que no les localizasen. Dylon, que miraba por el catalejo llevaba horas sin verla.

 Creo que la hemos perdido de vista... Dijo al fin. Aunque solo lo dijo cuando estaba muy seguro de ello. Entre unas cosas y otras habían avanzado a un ritmo vertiginoso y seguramente entrada la mañana estarían de vuelta en las islas, listos para encontrarse con la flota de nuevo. 

Y pasarían lo poquísimo que quedaba de noche reordenando los trastos que la precipitada huida había dejado desparramados por ahí.

Muchos marineros y también soldados se acercaron a Karla, a felicitarla por su trabajo y darle algunas palmaditas en la espalda y una botella de ron a medias que le regaló uno.

A Ardell le seguía rebosando la hiel.

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16/03/2011, 00:07
Karla

Karla se había manejado con pericia al timón, con la facilidad de alguien que ha nacido haciendo aquello y que -dioses mediante-, estaría haciéndolo por el resto de su vida. Pero ella en su interior había sentido algo más. Era difícil de explicar, pero se había sentido como se sentiría un pura sangre cabalgando a galope tendido. La excitación que había sentido nada tenía que ver con el medio de la persecución o el triunfo sobre Ardell. Iba mucho más allá, y Karla empezaba a sospechar que estaba conectada a La Revivida de una manera muy especial. Que el barco sentía, y que había pasado es que había compartido esas emociones.

Aquel subidón de adrenalina le había dejado con el cuerpo roto. Recibió las felicitaciones con una sonrisa cansada y cuando al fin Dylon anunció que habían logrado perder al galeón se dejó caer sobre el timón.

--Gracias --murmuró acariciando a la madera--. No se si me abre vuelto loca y le estaré hablando a un barco pero... si estás ahí... gracias.

Después llamó a Gargun y a Oropher para que se reunieran con Dylon y con ella. Según se acercaban alzó la botella de ron que le habían regalado.

--¿Un brindis? --les ofreció. No quedaba más que media botella, pero alcanzaba para que se tomasen unos tragos juntos. Al fin y al cabo, eran los que primero se habían apresurado a cumplir sus órdenes. Entusiasmo que pronto se contagió a la tripulación. Les debía ese pequeño homenaje.

Además el elfo había comentado que le gustaba beber.

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16/03/2011, 00:51
Oropher

 

 - Eso es algo que no se puede rechazar, estimada Karla.

 Era muy de agradecer un trato más cercano y especial para  el enano y para mi. En mi mirada podrían percatarse de una actitud abierta a la celebración, pero también conocedora de almenos alguno de los motivos. Otros eran evidentes para todos, incluso para Ardell que vería ahora más que nunca a la joven marinera como una amenaza más que directa. Sólo temía por el jovencito que le acompañaba. Aquel niño iba a sufrir daño...sólo esperaba que no fuese directamente por su propia mano.

 Oropher apretó el ceño y amplió la sonrisa mientras se inclinaba sobre la borda siempre mirandolos. Daría el primer trago, si es que se lo permitían, generoso, pero a sabiendas que podía sentarle realmente mal. El sabor era demasiado fuerte para él y no tuvo más remedio que entrecerrar uno de sus ojos para aguantar la reacción que provocaba en su cuerpo, la temperatura estaba en alza y era lo último que necesitaba.

 - No disfruto siendo yo el que echa a perder las celebraciones. - comenzó tratando de ser lo más pragmático y educado posible - pero quizás deberíamos reservar este momento para cuando lleguemos a tierra firme.

 En la intimidad... - musitó sensualmente...sus labios brillaron con la única claridad que el cielo oscurecido podría proporcionar en conjunción con la bebida - puede que a la luz del fuego...

 Lo que se estaba imaginando también podía incluir a un par de personas o más completamente desnudas.

 En realidad Oropher deseaba que Karla no tentase a la suerte. Estaba claro que no tendría ningún problema en enfrentarse cara a cara a su capitán, ya lo había hecho y había que agradecerselo.

 - Gracias por salvarnos de esos piratas, pequeña. - Espetó susurrante.

 Mostrar las cartas, llevar aquella lucha familiar a la vista de todos era lo que más le convenía al capitán actual de la Revivida. De hecho, podía parecer un patán pero conocía como funciona cierta clase de gente. Lamentablemente para él Oropher lo conocía bastante mejor.

 No era el momento de luchar por el liderazgo, era el momento de ganarselo por todas las de la ley. Haciendo proezas dignas de un capitán o incluso de algo más...en eso no podía ayudar a Karla, pero sí, quizás, pudiese contener su espíritu guerrero o ser una voz de consejo suficientemente elocuente como para ser tomada en cuenta.

 Hubo unas palabras más por parte del elfo solar pero su actitud más salvaje y atrayente se dirigió, en esta ocasión, a Gargun:

 - Buen trabajo con esas rodillas. - era dificil saber si bromeaba - Pero trata de no ser tan evidente. Podrías poner en un apuro a alguien, y...no queremos eso, ¿verdad?

 Luego, sin ánimo de esperar una respuesta rápida por parte del enano se giró a Dylon y le guiñó un ojo con una sonrisa pícara.

 - ¿Tiene algún secreto siniestro o es usted perfecto?

 Otro guiño sería para Karla.

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16/03/2011, 05:26
Gargun Dun

"jejeje! lo sabia! lo sabia, jejeje... Karla en LaRevivida y nosotros podemos, se los dije compas mios, yo se lo dije jajaja!"dice con gracia y orgullo con palmeadas ligeras al elfo solar, alguna que otra a algun marinero cercano, alguna otra al malhumorado boquiabierto de Ardell

Agarra con la mejor suavidad posible el vasito para que le sirva algo de ron, se lo toma de una sintiendo ese fuego interno desde su garganta a su panza "aaah! fuerte y potente, como Karla en LaRevivida es el ron, si señor! si señor!"
Al instante mira con anhelo el nocturno paisaje maritimo con sus brazos hacia atras y le habla mas de cerca a Karla "Lo ve, joven Karla? todos apoyamos su buena voluntad, no importa quienes gruñan sin saber, las perlas son perlas y valen lo suyo, Princesa del Mar, jejeje" dice con una mezcla de gracia y sinceridad sentimental, poniendo gestos de tranquilidad haciendo una mirada de costados indirecto hacia Ardell y mas directos hacia Karla.

Tras eso, tambien mira al elfo rubio y le comenta estando cerca "no entiendo las palabras de muchos elfos, pero bien hecho, compañero elfo Oropher... ya es uno mas de LaRevivida, como su primo Sirouten, no es cierto, jejeje!" dice riendose mirando hacia donde estuviera Siroutem. Tambien ve como Oropher parece hacerse el seductor mientras intenta tragar ese trago de ron diciendole con un leve golpecito de entendimiento chistoso "jejeje, su elegancia no soporta bebida fuertes eeeh? jejeje! No importa compañero Oropher! Sea libre de ser y decir lo que quiera... Puede aprender mañas de su primo, el toma y lo hace casi peor que los enanos... Falta que tomara kerosene, jaaajaaajaaa!" dice con chiste y gracia al mas fiel estilo enano convinado con aires de pirata, marinero y todo lo demas

"VIVA LA REVIVIDA! VIVA KARLA Y LA HERENCIA DE SU HONORABLE FAMILIA! VIVAN TODAS Y TODOS, UNA Y OTRA VEZ!" dice orgulloso en voz alta Gargun Dun levantando el vasito con unas pizcas de ron, y mirando a todos, en especial a Karla, Dylon y a donde sea

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16/03/2011, 09:33
Capitán Ardell

 
¡¡¡VEEEEEEEEEEEENGA YAAAA!!!! Gritó Ardell a pulmón lleno a Gargun. ¡¡Deja de subirle el ego a esa niñata!! KarlaKarlaKarla! Maldita sea, deja de adularla ya!! Ha tenido una suerte inmensa, eso es todo, empiezo a estar harto de oírte ese peloteo constante, Gargun!!

Resopló fortísimamente. Sabia que no debia haber dicho aquello, pero si no lo decía, reventaba.

 Dylon sonrió ampliamente escuchando el arrebato de Ardell, y respondió a Oropher. Nah... Ninguno... solo paciencia.

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17/03/2011, 09:36
Karla

Karla se masajeó las sienes mientras exhaló un profundo suspiro.

--Ardell, te lo ruego, no grites. Él no forma parte de nuestra tripulación para que le hables en ese tono. Y aunque lo fuera, tampoco es la solución. Papá nunca ha tenido que levantar la voz a nadie --pero la mirada de la mujer se posó entonces en el enano--. Pero yo también te agradecería que midieras tu entusiasmo, Gargun. A veces parece que no te tomas nada en serio.

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19/03/2011, 11:16
Director

Notas de juego

 
¿Chicos? ¿Nada que decir?

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19/03/2011, 14:15
Oropher

Hum...

 Ya había invertido suficientemente esfuerzo en evitar lo que estaba acaeciendo y no pensaba despilfarrar más su tiempo. Quizás fuese la bebida que ya empezaba a trastornar la percepción de su mundo, demasiado fuerte para sus gustos, aunque una miel dulce merecedora de probarse en momentos como aquel. Oh, la miel dulce y tentadora...

 No pudo evitar quedarse unos instantes prendado de aquella imagen, quien sabe si por la aparente formalidad de Dylon, por la fuerza brusca que tenía expresión en Gargun o porque había algo en Karla que le daba un atractivo que las mujeres más accesibles, incluso cuando eran dificil piratas no podían ofrecer.

 ¿Qué ganaban discutiendo?

 Ah...Oropher necesitaría que todos colaborasen para que aquella empresa saliese bien. Y se jugaba algo más que su precioso y esbelto cuello en aquello, mas...no tenía ganas de dar explicaciones de sus motivos. Le dedicó una mirada a la lejanía del mar y a la costa, con cautela pero cierta ensoñación con los párpados a media asta. Después, ofreciendo el perfil, echado hacia atrás y con las piernas cruzadas en una pose sutil les dedicó la última de las miradas.

 Supongo que es lo máximo que podriamos pedirle.

 Pensó y quizás lo hizo en el enano, o en el inepto capitán, o en Karla...sea como fuere, se separó de la borda y caminó hacia la otra punta de la cubierta buscando algo más de intimidad, un lugar donde alzar la vista y contemplar el cielo en el que nadie había reparado hasta ahora.

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21/03/2011, 21:36
Gargun Dun

"Bah, pamplina, joven Karla!
Solo soy un enano que me agrada sentir bien y hacer sentir bien en donde estoy, quizas eso tu padre no te lo dijo. A mi no me importa lo que me diga alguien como Ardell que de verdad desvalora todo esfuerzo, incluso de sus familiares...
Aun asi, acepto su capitania o co-capitania y aun lo respeto por aveces parecer un buen hombre y ademas ser un familir suyo, joven Karla!
No soy de pelearme con nadie, pero ni los capitanes ni los ladrones mas fieros me haran verme humillado, ni a mi ni a mis compañeros en LaRevivida, incluida a usted Karla, heredera de LaRevivida
Es bueno diferenciar las focas de las sirenas, quizas a Ardell no le interese pero a mi si, mientras este en vida"
dice con una sensacion de cordialidad y amabilidad, de momento señalando levemente a Ardell cuando lo nombra o reojos, con otros con expresion semejante al cariño a la joven Karla y haciendo movimientos con los brazos y manos de darle importancia al barco, a donde estan y golpeando levemente su puño en su palma para hacer sentir lo que Gargun Dun dice con conviccion

Tras lo dicho se va de manera ligera y silencioso, sintiendose levemente ofendido mirando hacia un lado opuesto a Karla y Ardell, haciendo un bufido y aclaracion de garganta mirando de reojo, como un gesto de dijo lo que tuvo que decir y asi sera. Sin importarle mucho si eso le llego a todos, algunos o a nadie

- Tiradas (1)
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22/03/2011, 23:11
Capitán Ardell

 
Ardell se acercó a Gargun a mascullarle algunas palabras a la cara.

Escúchame bien, enano... aquí no hay ningún co-capitán... estoy yo, y luego Dylon de primer oficial... y que tú fueras amigo del anterior capitán no significa nada para el nuevo, está claro? No vuelvas a "equivocarte", Gargun.

Se levantó conteniendo aire entre los dientes y se marchó a grandes zancadas a su camarote.

La noche parecía avanzar sin más problemas, incluso parte de la tripulación se puso a dormir tan tranquilamente.

Al menos, claro, hasta que Winthen, el hijo de Ardell, soltó un alarido de terror que debió desgarrar el silencio a kilómetros en la quietud del mar. El chico debía haberse dejado la garganta en ese grito. No era un simple susto, ni un sobresalto o un mal sueño, algo había pasado.

Notas de juego

 
Winthen duerme en una hamaca en uno de los compartimentos de carga que ahora están semivacíos, que es lo más parecido a tener un camarote propio. Vosotros diréis si pilla a vuestro Pj dormido o despierto, y qué hace ;)

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22/03/2011, 23:35
Karla

Karla se había retirado poco después a su camarote, agotada por las excitaciones del día. No había podido pegar ojo aún. No paraba de darle vueltas a los extraños acontecimientos que había vivido y a esa creciente sensación de que el barco estaba vivo. ¿Tendría alguna relación con el nombre que le habían puesto?

Cuando se cansó de dar vueltas en la cama se levantó y se puso a revisar las cartas de navegación. Eran bastante malas, y por lo que habían visto tenían errores importantes. Karla estaba haciendo sus anotaciones y correcciones sobre la ruta cuando escuchó el alarido de su sobrino.

Lanzó un chillido y por el sobresalto estuvo apunto de volcar el bote de tinta sobre el trabajo que había estado haciendo. Tiró de mala manera el papel de secar sobre la hoja y salió disparada. Aunque a veces no podía dejar en Winthen como en el hijo de Ardell, lo quería con locura. Si esto era cosa de su padre...

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23/03/2011, 00:28
Gargun Dun

Gargun Dun estuvo dormutando en la parte delantera del navio, luego de haber estado mirando hacia el otro lado contrario de donde estarian Karla. Tras el tranquilo sacudir de la noche en los mares escucho al parecer un grito del niño Winthen a lo cual comenta "eeeh! que? que paso?" abriendo los ojos y parandose mientras se balancea algo desconcertado caminando hacia los camarotes

a lo cual cuando entra busca donde esta y va preguntando a su mejor voluntad "hola? que pasa niño? algun problema eh?"

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23/03/2011, 00:27
Oropher
Sólo para el director

  La piedra gemía con cierto placer al encontrarse con la hoja del arma. Las manos de Oropher servían para mucho más que el placer de hombres y mujeres, sabían exactamente como tratar aquellos filos y era dificil entender cual de los dos encontraba más placer en aquella empresa. La concentración del elfo estaba enfocada en encontrar el mejor de los resultados.

 Cerca de aquellas selvas y a la tenue luz de las velas trataba de reencontrarse con el sueño. No hacia mucho que había pegado una cabezada, quizás mordido por aquel lobo siniestro que lo perseguía en sus pesadillas no podía concebir mucho más el sueño preocupado por su "misión" especial en aquella expedición. Poco importaba ya las cuestiones a las que pudiese verse sometida su moralidad.

 Las espadas eran mucho más fáciles. También las dagas. Un herrero podría volver a forjarlas, la piedra afila y mantiene sin óxido la hoja, la sangre alimenta su espíritu...y la mano que la empuña le da decisión y vigor a su existencia, le da el ímpetu que necesita para existir y ejercer su cometido. Un arma existe para ser utilizada....

  Entonces...yo estoy aquí para eso...para que mi existencia cobre sentido...Yo, sólo soy un pieza en el tablero. El asesino. El traidor que cambiará el curso de la historia.

 no podía verse sino como alguien importante aunque su papel pudiese pasar desapercivido. Los parpados permanecen ligeramente cerrados, aún está despertando. Los alza para ver mejor el filo, lo recorre sinuosamente con la mirada.

 Pero tu no has elegido estar aquí...no en las condiciones en las que estás.

 se dijo, comprensivo tratando de despertar y avivar la llama de una tristeza ya olvidada.

 Negó.

 En realidad...deberías estar muerto, asique no está tan mal después de todo. Es un reto. Podrás hacerlo sin mancharte demasiado las manos.

 Es tu trabajo al fin y al cabo, siempre has sido el mejor en tu campo, y con el mínimo de bajas. Puede que sea necesario que algunos mueran, pero bien vale una vida sin más intromisiones...

 Sin embargo Oropher no era sincero consigo mismo, él sabía...que si terminaba aquel trabajo nada sería igual. Nadie se conformaba con un solo revolcón...siempre querían más cuando se trataba de él. Frunció el ceño y torció los labios desalentado...Tsk....

 Entonces oyó el alboroto, despertó de golpe y la silla chocó contra el suelo dejando su cuerpo de mecerse sobre ella. Sus botas golpearon la madera al unísono y ambas dagas reposaron en su cintó, dejó las espadas un solo instante y se colocó el peto de mithril y los guantes. Era rápido, había salido de burdeles tras vestirse en segundos muchas más veces de las que le gustaría recordar, y no sólo de sitios en los que no pagar es un problema. Como aquella vez en la mansión de aquel noble que...

 dejando de divagar colocó las espadas a su espalda y dio un soplo a la vela para quedarse en silencio.

 Quería escuchar los pasos de la tripulación, orientarse y saber hacia donde se dirigían...esperaría unos segundos. Siempre le había gustado la soledad por eso. Le bastaba un rincón con una silla en ninguna parte, donde pudiese meditar sin interferencia, y lo más importante...donde pudiese mantener una posición estrategica.

 Su plan era claro, el mismo que le llevó ante karla en las puertas de su camarote...necesitaba entrar allí para conseguir las cartas de navegación o cualquier otra evidencia útil.

 Era crítico conseguir aquella información y enviarla cuanto antes. Aunque aquello arruinase los sueños de aquella gente con la que había compartido tan largos ratos.

 No...lo siento.

 Se dijo, justificandose.

 Saldría a escondidas, quizás con las prisas y la tripulación centrada en asuntos que se sospechaban inquietantes Karla se hubiese dejado la puerta abierta, o el propio Ardell...Tenía que tener mucho cuidado. Se jugaba la vida.

 Pensó en el grito mientras actuaba, también en las posibilidades. Si el muchacho hubiese caído por la borda saltar y rescatarlo sería la moneda de cambio perfecta para canjearla por una buena  reputación tanto con la potencial capitana como para el actual...pero eso pondría demasiadas miradas sobre él.

 Se encogió de hombros. Esperemos que no le pase nada.

 Por lo menos él...no le haría ningún daño a sabiendas.

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23/03/2011, 20:46
Director

 
Indudablemente escogiste el momento oportuno. La mayoría corrió hacia abajo a ver qué le habia pasado al niño, y por supuesto el padre también.

Tan aprisa salió que no le dio tiempo a pensar en cerrar la puerta de su camarote. Como quitarle un caramelo a un kobolt. Entraste al camarote del capitán sin levantar sospechas entre los dos únicos que te vieron.

Rebuscaste entre los papeles que tenía más a mano, que por supuesto se trataba de los mapas del Nuevo Mundo, además de las herramientas para dibujar en ellos. Estaban a la mano, más fácil imposible, incluso el diario de a bordo y el manifiesto de carga los encontraste fácilmente.

La única pega era... que el mapa estaba sobre la mesa. Estaba trabajando en él cuando salió corriendo. Quitárselo ahora iba a ser INCREÍBLEMENTE cantón, pero tal vez no tuvieras una oportunidad mejor nunca.

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23/03/2011, 20:53
Grumete Winthen

 
Cuando Gargun y Karla llegaron, el grumete estaba arrinconado en una esquina de la bodega, con la entrepierna húmeda y el rostro lleno de chorreones de lágrimas, jadeando de terror prácticamente incapaz de respirar, temblando visiblemente pero por lo demás incapaz de moverse. Al ver llegar a los dos, tan solo se apretó más en sí mismo, incapaz de responder.

En la habitación no habia nada extraño, y Ardell solo tardaría un par de segundos más en llegar, ya que él dormía una planta más arriba, en cubierta.

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23/03/2011, 21:00
Director

 
Puedes oír en la vibración del aire, de la madera, casi como si la sintieras más que oírla, una carcajada sádica y cruel de una voz rasposa y cascada.

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23/03/2011, 21:08
Karla

La joven dirigió una mirada asesina al techo, como si él tuviera la culpa, pero se abstuvo de decir nada. Cruzó a grandes zancadas la bodega y se arrodilló junto a su sobrino, rodeándole con sus brazos.

--Ssh, ssh... --lo arrulló--, ya pasó, cariño. ¿Qué te ha pasado?

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24/03/2011, 02:19
Gargun Dun

"jejeje, niño Winthen, que pasa? a quien vistes o que vistes? no te pasara nada malo mientras Karla y sus marineros estemos en este barco... jejeje! Cuando seas grande, seras como nosotros! no temas a nada" dice Gargun hablando amablemente y haciendo gestos de reojos simpaticos, poniendo las manos y brazos de ser un forzudo, para demostrarle valentia y proteccion. Con risas algo en voz baja y con actitud de solo hacer sentir bien pero siendo bastante sincero apesar de las bromas.

- Tiradas (1)
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24/03/2011, 09:38
Grumete Winthen

 
Winthen temblequeaba aterrorizado, incapaz de articular palabra. Aunque Gargun le caía bien y era un tipo gracioso, estaba demasiado asustado para responderle. Agarró con fuerza a Karla ya que le abrazaba, y apretaba los dientes hasta rechinarlos.

Llegaron algunos curiosos más, pero el que más corría fue Ardell, que pasó abriéndose paso a empujones si hacía falta. Al llegar no se metió con Karla, estaba demasiado centrado en el chico, al que abrazó, aunque el chico sí dejó a Karla para abrazarse a su padre.

 Hijo... hijo estás bien? ¿Qué ha pasado...? Winthen no contestaba Responde hijo... ¿Qué pasa...?

 Un fan.... p-papa era un fan...tasma...

Se hizo un silencio sepulcral. Entre marineros, esas cosas daban mucho, pero que mucho respeto

 Vale... tranquilízate... vale? Miró a Karla Llama al clérigo a ver si puede encontrar y echar a esa cosa Ardell no dudaba que era cierto. Eso había sonado a mucho más que una pesadilla Gargun échame a los curiosos, esto no es un circo.

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24/03/2011, 10:12
La Revivida

 
Cuando Karla abrazó al chico, la reacción de la voz fue un grito de frustración y enfado. 

Al llegar Ardell, gruñó amenazante, y cuando pidió por un clérigo, volvió a reír, esta vez con desprecio. La misma voz cascada y cruel.