Partida Rol por web

La rubia va primera de todo, no deja de sonreir en ningún momento... y responde a las posibles pregunta que le hará alguno de los chicos, vais caminando durante unos cinco minutos, tranquilamente... cada vez la nieve es más virgen y os cubre más. Ella os mira disculpándose.

No tardaremos en llegar.

Kenya camina cada vez con el ceño más fruncido. Sí, había venido a pasarlo bien, no a congelarse de frío. Se frota los brazos por encima de su anorak mientras no abre la boca para decir nada... sabe que podría no soltar nada bueno en esos momentos. ¿De verdad que esa chica no tenía frío?

Evita mirar a Dany mientras camina, pues sabe que si lo ve tan emocionado como supone que está, se le pasará cualquier rastro de mal humor... y quería estar enfadada. Al menos así se olvidaba un poco del frío.

Eric sigue a la chica, el primero de la fila, sin hacer ni caso a Lynds. Cuando ella se disculpa él solo puede decir:

-No pasa nada mujer, tampoco hace tanto frío.

Linds frunce el ceño... y suelta finalmente a Eric, cruzándose de brazos, mientras su pelo suelta leves chispitas de color rojo. Mira a otra dirección... cabreándose.

Lara caminaba entrecerrando los ojos, y abrazada al brazo de Mike. Observa con preocupación la nieve virgen.

Esto no me gusta... Cada vez había mas nieve virgen. ¿Cuántas personas habían pasado por allí antes?

Tu tranquila. ¿Cuanto tardariamos en salir de aqui 5 segundos?.Responde frotando el brazo de la chica para tranquilizarla.

Tras esto dirige su mirada hacia Linds.Me preocupa mas Eric,esta muy...raro.

Llegáis a un claro, la chica se gira y os sonríe...

- Yo ya he terminado... quedaos aquí - os sonríe amable y se aleja internándose en el bosque, parece que sepa a donde va.

De detrás un árbol aparece otro hombre...

El hombre que aparece es de aspecto descuidado, lleva un abrigo bastante viejo y una bufanda con agujeros, además de los guantes que les falta las puntas de los dedos de mínimo dos en cada mano. Os mira con algo de miedo, aunque intenta sonreir levemente... quizás no sonríe del todo por el frío, o por el mismo miedo...

- P-Perdonar que os hayamos hecho v-venir hasta aquí... y d-de esta manera, pensamos que no c-confiaríais c-con no-nosotros... - traga saliva y deja unos segundos de silencio, mirándoos - N-no sois todos... ¿v-verdad...? C-conté c-con e-ello. M-mi nombre es A-Adrien Wallace y s-soy c-científico... mi hija s-se ha i-ido p-porque no queremos que estéis i-influenciados p-por s-su b-belleza...

Parece que es algo tartamudo, pero al igual que su sonrisa, quizás es por el miedo... o el hecho de estar enfrente de vosotros.

Ya fuera del 'influjo' de la chica, con un humor que no es apacible (el lugar y clima hace que sea desconfiado en extremo) y un tono de voz sereno pero algo 'siniestro'

Decid 'Adrien', si ese es vuestro nombre... ¿por que nos habéis hecho venir a este lugar tan apartado?

Los brazos, cuyas manos están dentro de los bolsillos del abrigo, se tensan imperceptiblemente.

Kenya enarca una ceja, visiblemente molesta. La morena no era de confiar en nadie... y menos si ese alguien usaba artimañas o mentiras para atraer a otras personas.

Se cruza de brazos, molesta y mirando con el ceño fruncido a ese tal Adrien. Aunque no tarda en intentar contactar con los árboles de alrededor, cerrando los ojos, para ver si hay alguien más cerca. Debería haberlo hecho antes. Se había dejado engañar y había sido confiada. ¿Qué le estaba pasando?

Los árboles están tranquilos... sin embargo puedes sentir una leve presencia a varios metros de allí, parece que hay una barrera... ¿mágica? No puede cruzar nadie ni nada...

Pero pronto uno de los árboles, que parece tener muchísimos años parece querer ponerse en contacto contigo.

- Él puede ayudarte...

Normalmente hablabas con plantas o flores, el hecho que ahora te hable un árbol viejo... que llevará varios años viviendo en aquel bosque... es algo que puede que te sorprenda y... emocione, en cierta medida...

Kenya se relaja... sus hombros vuelven a una posición normal y su ceño desaparece.

Lo siguiente que hace es extremadamente raro en ella. Sonríe con dulzura y busca la mirada de Linds y la de Dany, cogiendo de la mano a éste último y descruzándose de brazos. Parece emocionada por algo... y extrañamente tranquila.

Gracias... confiaré en él. Es lo único que se ve capaz de decirle a alguien tan importante como aquel árbol.

¿Más científicos? ¡¿Incluso aquí?! Pensó Mark alarmado, mirando al rededor en busca de "alguien más" y tratando de averiguar las intenciones de aquel tío.

¿De qué va todo esto? Se limitó a preguntar con cierto tono de amenaza.

-Pero...- Eric intenta hablar con Maithe, que desaparece entre la nieve antes de que el chico pueda decir nada. Cabizbajo vuelve junto a sus amigos... notándose algo extraño.- ¿Que ha querido decir con influenciados por su belleza?- pregunta.

Linds arquea una ceja al ver a Eric actuar de aquella manera otra vez, se cruza de brazos y mira al hombre que dice ser "científico" con enfado y cabreo. Si él conocía a la "putón verbenero" entonces, toda la culpa es suya, además parece que sabe lo de sus poderes.

Su cabellos se mueven aun más por sí solos, y sus ojos también están rojos... mientras que la nieve de su alrededor empieza a fundirse.

Sin embargo, no hace ningun otro movimiento que morderse el labio por la parte inferior de la boca, esperando que responda a sus compañeros... luego, puede que actúe.

Kenya mira de reojo a Linds y hace ademán de poner una mano en su hombro... aunque refrena su impulso justo a tiempo.

Linds... cálmate. No es culpa suya... y creo que... Mira a Erik de reojo. Diría que tampoco lo es de Erik.

Lo sabía... Piensa con rabia Lara.

¿Qué quiere de nosotros? Le pregunta desafiante. En realidad aún no sabía si debían confiar en él, lo único que sabía es que todavía no habían hecho nada que supusiera un peligro para ellos. Pero mejor seguir alerta, por si acaso...

Sin haber articulado palabra hasta ahora , prosegui al grupo , fijandome en los encantos de la bella Maithe. Tras despertar de su "embrujo" me encuentro en mitad del bosque con algunos de la residencia , escuchando a un autollamado profesor con tardamudeos varios. Segun reacciono a los acontecimientos determino que debo prepararme para escapar por si acaso...