Partida Rol por web

EL BLOQUE III

EL BLOQUE.

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29/01/2014, 11:13
Shan Mei
Sólo para el director

Shan Mei no pudo aguantar la risa. Rió de forma sincera, aunque intentando no llamar la atención del resto de gente. Reía sin grandes carcajadas. Reía casi sin abrir la boca, pero con ganas, como intentando dejar atrás las cosas por las que había pasado hacía tan solo unas horas... o eso suponía. El semblante y su animo se oscurecieron un poco mientras recordaba a sus compañeros y por lo que habían pasado, y se puso de nuevo alerta, pues que la atmósfera de aquel lugar no alertara sobre ningún peligro no quería decir que no lo hubiera. Sonrió de nuevo y contestó a los niños:

- Siento decepcionaros pero no vengo de parte de Santa... y tampoco soy una ninja... aunque si que practico un arte marcial y soy bastante buena, eso sí. - ¿Porqué había dicho eso? Tan solo estaba alardeando ante un montón de crios, pero.. curiosamente... se sentía mejor al haberlo dicho. - Si quereis os puedo enseñar algún movimiento, pero solo si os dejan vuestros padres ¿eh?

 

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29/01/2014, 23:21
Director

Los niños aceptan y juran y perjuran que sus padres estará más que encantados que les enseñes a defenderse.
Al momento están formados frente a ti intentando repetir tus gráciles movimientos...con más voluntad que habilidad. Las ansias de aprender de los niños, y su vitalidad, parecen increíbles.
Al momento una quinceañera vestida con chandal y cruces se os acerca. Es hora de cenar, le dice a Loreto, te lanza una mirada evaluativa y te saluda con un leve gesto de cabeza.
Escucháis un trueno que hace temblar los cristales, su sonido es increíblemente oscuro, así como las nubes que lo provocan.
Nos vamos a cenar dice Loreto y los demás le suplican que os quedéis un poco más, la quinceañera les dice algo en español que no entiendes y todos ríen. Cuando Willy le da un beso de despedida en la mejilla a Loreto, ambos se ponen rojos y entiendes que había dicho la chica: Romeo y Julieta.
Otro trueno retumba tras vosotras mientras os dirigis hacia la puerta del ascensor, y al momento escucháis gruesas gotas de lluvia cayendo contra los cristales, y eso que estos se encuentran alejados, igual que las paredes.
Los niños apenas le dedican un gesto a la lluvia mientras siguen jugando entre ellos. La chica, antes de cerrar la puerta comenta, y esto si lo entiendes perfectamente, que extraño, debería ser nieve.

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02/02/2014, 15:07
Shan Mei
Sólo para el director

Mei intentaba que sus gestos, movimientos y posturas fueran los más sencillos de su amplio repertorio. Sorprendentemente, aquellos chicos y chicas la seguían con la mirada sin perder detalle y reproduciendo, a su manera torpe pero muy entusiasta, todo lo que veían. Lejos de sentirse intimidada, o incluso acobardada por su nueva audiencia, a la chica asiática le encantó la sensación. Nunca había vuelto a abrir la escuela de su padre pero, en estos momentos, empezó a replanteárselo.

Justo cuando una decisión nacía en la mente de Shan Mei, una adolescente indicó a los niños y a ella misma que era hora de cenar, así que dejaron la introducción de Shansou, el arte marcial de su familia, y les acompañó, mientras los truenos y la lluvia resonaban tras los cristales y las paredes de aquel lugar.

- Que extraño, debería ser nieve.- Dice Loreto, y Mei no puede contenerse.

- ¿Porqué debería ser nieve Lori, por la época del año?...- Se queda pensativa unos instantes y añade, sin saber muy bien porqué: - Y por cierto ¿puedes decirme la fecha de hoy?

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02/02/2014, 20:41
Director

Mientras bajáis por las escaleras circulares la niña te responde: Por el frío de esta zona siempre nieva, alguna vez, como excepción, graniza, pero nunca nieva.
La niña intenta hacer memoria ante le fecha: Nueve de enero del 91. Te dice riendo. La hermana mayor, tras un descender un par de plantas, abre la puerta que da a un pequeño Hall. La puerta del ascensor enfrenta con un pasillo, a los lados hay pequeños trasteros. El pasillo está totalmente graffiteado con ángeles guerreros, a modo de insignia de alguna especie de banda. En los huecos de las pintadas hay postales de méxico, de santos y de la muerte. Os cruzáis con algún hispano hasta entrar en la primera puerta a la izquierda, donde viven ellos.
La mesa está puesta: es una pequeña mesa rectangular. Hay pan, sopa caliente y agua. No es mucho pero los padres están contentos de verte. No pasas por alto las miradas a tu mano izquierda, pero no preguntan por ella.
Os sentáis todos a la mesa, tu al lado de Loreto, enfrente sus padres y a tu izquierda su hermana mayor. A la derecha una anciana. Es esta la que habla, Sean cuales sean tus dioses, ¿querrías bendecir nuestra mesa? Eres nuestra invitada y queremos que te sientas como en casa.

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03/02/2014, 23:08
Shan Mei
Sólo para el director

Aunque de primeras aquella extraña petición dejó parada a Shan Mei, ya que nunca se había considerado creyente y mucho menos practicante, se recompuso rápidamente y pensó un instante en lo que podría decir para contentar a sus anfitriones. La mujer había dicho "Sean cuales sean tus dioses" así que cualquier oración debería servir para aquel propósito. Sin darle más vueltas, empezó a hablar:

- Será un placer. Esta es una oración que se encuentra grabada en uno de los muros de la ermita de Chang, lugar de culto de mi pueblo. Es una metáfora muy antigua, y sus significados y posibles interpretaciones han sido discutidos durante décadas.- Cerró los ojos y comenzó:

Es primavera en las montañas.

Vine sólo en tu busca.

Entre las crestas silenciosas

el eco de las hachas: talan árboles.

Los arroyos helados todavía.

Hay nieve en el sendero.

Bajo un sol indeciso llego a tu choza,

entre dos rocas colgada.

Nada pides, nada esperas.

No ves siquiera el halo que te envuelve,

vaga luz oro y plata. Manso

como los ciervos que has domado.

¡Olvidar el camino de regreso,

ser como tú, flotar,

barca sin remo, a la deriva!

Volvió a abrir los ojos y esperó al veredicto de la anciana. Aunque no se podía considerar una poesía especialmente sacra, para ella siempre había tenido mucho simbolismo religioso, y por esa sencilla razón la había recitado sin vacilar ni dudar ni un instante de que estaba haciendo lo correcto.

Notas de juego

La poesía que recita Mei se llama "Escrito en el muro de la ermita de Chang" y es de Tu Fu

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04/02/2014, 11:11
Director

Todos te observan con atención, sobretodo la anciana, algo brilla en su mirada.
La anciana repite, para sí misma, asintiendo, en voz muy baja Olvidar el camino de regreso,
Luego Loreto se pone a hablar contigo, ríe y bromea sobre si es demasiado joven para casarse con Willy, sus padres le dicen que no hable con la boca abierta. Son una familia pobre pero ves que están unidos y que son más que felices con lo poco que tienen.
Cuando acaba la cena, Loreto, con lágrimas en los ojos mira a su abuela,
¿Ha de irse? Sabes que hablan de ti.
Sí, este no es su sino.
La anciana te observa y te habla despacio: Ese ascensor, cógelo y pulsa cualquier botón.
Los padres y la hermana mayor de Loreto miran extrañados a la hija menor y a la anciana.
Loreto se te abraza muy muy fuerte y te da las gracias. Levanta los ojos, anegados de lágrimas, y te mira ¿Nos encontraras? Te dice.
En ese momento te viene a la cabeza la fecha 9-2-92. Cuando la habías escuchado sabías que era algo pero no podías ubicarlo, es la fecha de una catástrofe en la que murieron ahogadas 212 personas en un edificio aislado de la antigua rusia, fuente de infinidad de leyendas y lugar en el que se realizó el famoso concurso "El bloque". En tu mente te viene a la cabeza la imagen de viejos ataúdes de madera, repletos de cadáveres hinchados, escondidos en algún lugar bajo tierra e inundados por aguas freáticas. No te cuesta para nada asociarlos con esa familia que tienes delante de tí.
Recuerdanos así, le dice la niña, aunque nos veas llenos de rábia y de odio, y allí donde esten nuestros cuerpos, dí unas palabras por nosotros, liberanos.
En ese momento todos se ponen de pié, toda la escena vuelve a ser típicamente familiar, como si lo anterior hubiese sido una ilusión. Es hora de que nos vayamos a descansar, dice la madre a sus hijas, que nos retiremos a dormir.
La anciana se dirige hacia tí, y de que tu vuelvas a tu lugar.

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05/02/2014, 11:50
Shan Mei
Sólo para el director

Shan Mei le devolvió el abrazo a Loreto mientras imágenes de ataudes acudían y fluían a través de su mente sin pausa ni orden alguno. Sus ojos se llenaron de lágrimas y estas recorrían sus mejillas mientras pasaba su mirada por toda la familia, y acababa en aquella niña pequeña que, siendo justos, acababa de conocer. Mei escuchó las palabras de la anciana como en un sueño y sin dudar ni un segundo respondió:

- Jamás os olvidaré... y si está en mi mano, os encontraré... y os liberaré.

Acarició una última vez la mejilla de Loreto mientras miraba sus ojos. Demasiado joven para morir. No estaba preparada... pero al fin y al cabo ¿Alguien lo estaba? ¿Su propia hija? ¿Su marido? ¿Lo estaría ella misma? Ya no importaba. Lo que había vivido en aquel lugar, en la fábrica, en la iglesia, aquí mismo... Ahora solo tenía una idea en mente. Había empezado aquel viaje, aquella aventura, con miedo. Había estado destrozada hacía mucho tiempo, por su familia, por culpa de su familia. No eran culpables de haber muerto, pero ella los había hecho los responsables de su caida. Les había convertido en una extraña razón para mantenerse triste, deprimida y encerrada en si misma, tal vez para siempre. Pero se había liberado. Había encontrado razones para seguir viviendo y luchando. Y esta vez lo haría por ellos... y por las razones correctas. Lucharía por Michael, por Emily, por Loreto, por la gente que murió en el bloque y por la que murió en la fábrica. Lucharía por los vivos, por sus ahora amigos: Alex, Pedro, Ciara... No se iba a rendir ni iba a derrumbarse, sin importar lo que ocurriera, ni si conseguía salir viva o no.

Empezó a alejarse de la familia, sonriendo y llorando al mismo tiempo. No quería apartar la mirada, pero sabía que cuanto más lo alargara más dificil sería separarse de ellos. Llegó hasta el ascensor y pulsó el botón para que se abrieran las puertas. Iba a hacer lo que la anciana le había dicho. Entraría, pulsaría cualquier botón, el primero que viera. Y se dirigiría a cualquier lugar que el destino tuviera preparado para ella.

Cerró los ojos, bajó la cabeza, quedándose muy quieta frente a las puertas del ascensor y recitó en voz baja:

"¿Adónde irás? El mundo me ha engañado:

A mi colina del mediodía me vuelvo."

 

Notas de juego

El extracto del poema es de Wan Wei y se llama, obviamente, "despedida" xD

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06/02/2014, 10:34
Director

Cuando pulsas el botón el ascensor se ilumina mucho, muchísimo, y la temperatura sube hasta que crees convertirte en fuego, un fuego que, curiosamente, no duele.
La luz se apaga de repente y te das cuenta de que no existes, te ahogas en una oscuridad densa como el hierro. Intentas salir desesperadamente, tu mano izquierda se coge a algo firme aunque mojado. Empiezas a hacer fuerza, luego puedes con la segunda mano, empiezas a ver algo al final, te ves a ti misma sacándote del suelo, como si salieras de arenas movedizas. Cuando "emerges" el suelo te das cuenta de que sigues en la iglesia, sobre el charco, entre bancos rotos. No hay nadie, la puerta sobre la cruz está abierta y ves un ascensor, lo reconoces inmediatamente.

Notas de juego

Ah, a Shan Mei le falta la alianza de la mano izquierda, la de casada.

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06/02/2014, 22:21
Director

Notas de juego

Ah! tienes tus dos manos bien! y el mono intacto (mojado y sucio, pero no cortado por ninguna de las mangas)

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06/02/2014, 23:12
Shan Mei
Sólo para el director

Shan Mei miró a su alrededor. Aquella maldita iglesia panza arriba de nuevo. No había ni rastro de sus compañeros, así que había esperanzas de que siguieran vivos. Sin embargo... ¿Creerían su disparatada historia si llegaba a encontrarlos? Casi seguro que no, pero no podía quedarse allí plantada. Examinó todo lo que tenía a su alrededor por si había algo que pudiera usar o recoger, además de intentar descubrir por donde se habían ido el resto... Aunque no le costó imaginar hacia donde podrían ir, sobretodo porque sobre la cruz estaba abierta una puerta, y en su interior había un ascensor que ya había visto antes...

Notas de juego

Vale, pues Mei hace lo que he narrado un poco por encima. Mirará bien los alrededores por si a sus compañeros se les hubiera caido algo y para buscar posibles pistas de lo que ha pasado ahí (aunque prácticamente ya lo sabe). Después, como imagino que el único camino que podrá seguir es el ascensor (que supongo que está en el "techo" de la iglesia), buscará una manera de escalar hacia él. Sería genial que el resto le hubieran dejado algo como una cuerda o algo así para poder subir, pero como no tendrá tanta suerte, probará a subir por la cruz si no le queda más remedio. No narro nada más porque tampoco se con que opciones cuenta.

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07/02/2014, 10:14
Director

Te pones a buscar por el suelo de la iglesia, apartando bancos de madera, en mejor o peor estado, rotos por la caída producida por la inversión. No encuentras nada. Cuando te fijas en la cruz, ves que debajo de esta la pared está humedecida y hay huellas de rodillazos y codos, está claro que han subido por ahí.
Luego puedes entreveer el interior del hall, dirías que se ve, al lado de la puerta abierta, asomar la silueta de una de las mochilas que llevaba alguno del grupo.

Notas de juego

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09/02/2014, 13:10
Shan Mei
Sólo para el director

Tras la inspección de la sala en la que se encontraba, que fué bastante inuti, Shan Mei se quedó mirando la puerta que se encontraba encima de la cruz. Estaba claro que tendría que seguir su camino por ahí arriba, así que no se lo pensó más. Se dirigió hacia aquella pared y comenzó a trepar, con dificultad por supuesto, por aquel símbolo religioso invertido. La subida no fué demasiado elegante. Resbaló muchas veces, se golpeó contra la madera, se clavó algunas astillas... Pero pese a todas las dificultades, no se rindió.

Por fin llegó arriba y miró a su alrededor. No podía ver a nadie, pero quizá hubieran pasado por allí no hacía mucho tiempo. Se puso a gritar con fuerza algunos de sus nombres:

- ALEX.... CIARA... PEDRO... - Exclamó, aunque convencida de que no podrían oirla. 

Nadie respondió a su llamada, así que bajó la cabeza y se fijó en la mochila que se debían haber dejado sus compañeros. Sin perder un minuto, se agachó para poder buscar en su interior, por si había algo que pudiera utilizar.

Notas de juego

Me he inventado varias cosas, así que si algo de lo que ha hecho Mei no lo puede hacer, dímelo y se cambia en un momento.

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10/02/2014, 10:22
Director

La mochila presenta un color grisáceo-negruzco y se deshace como ceniza en tos manos, haciéndote toser. Bajo a tos pies, te das cuenta de que hay mucha más ceniza alrededor tuyo, con tanto polvo no te habías dado cuenta. Cenizas, algún trozo de tejido azulado y entre un pequeño montón de cenizas unas lentillas perfectamente conservadas de color marrón. Sigues inspeccionando y entras al ascensor, todo es extraño y confuso al estar invertido, ves claramente que todos los botones salvo dos están llenos de polvo, alguien ha pulsado recientemente esos dos botones. Uno pone P-7 (en la que te encuentras) y el otro P1. Aunque esté escrito del revés no te cuesta leerlo.
Empiezas a escuchar sonidos de pies o cosas arrastrándose aunque no ves nada... y empiezas a sentirte mal, un frío horrible te atenaza por fuera, al nivel de piel, al mismo tiempo que, por dentro, sientes que tu cuerpo empieza a aumentar de temperatura como si te estuviesen inyectando fuego.

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11/02/2014, 09:55
Director

Durante un instante la anterior sensación de frío exterior y elevación interior de temperatura se desvanece y el ascensor se llena de una sutil olor, que te recuerda a la del pelo de Loreto. Mientras dura ese extraño efecto el botón del ascensor, que asimilas que lo debería haber llamado el compañero convertido en ceniza, se pulsa solo, por lo que empiezas a descender.

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11/02/2014, 11:30
Shan Mei
Sólo para el director

El ascensor comenzó a descender cuando aquella fuerza misteriosa pulsó el botón. Mei no sabía que había pasado allí, pero fuera quien fuera el dueño de aquella mochila... No podía evitar pensar, aunque se odiaba por ello, que esperaba que no fueran Alex, Pedro o Ciara. No es que no le importaran el resto, pero había forjado un vínculo especial con ellos en particular, y lo cierto es que tenía ganas de volver a verlos y saber si estaban bien. Mientras descendía hacia lo desconocido cerró los ojos y, mientras sonreía, dijo:

-"Filo de luz: el alba. Leve viento: zarpamos. Silenciosas caían las hojas de los arces."

Aunque el botón se había pulsado solo, lo cierto es que no sentía miedo. Puede que tras todo lo vivido allí abajo hubiera cambiado también en ese aspecto, y aceptara mucho más las cosas "sobrenaturales" que, sin duda, ocurrían en la fábrica. No había mucho más que hacer, así que, sencillamente, esperó a llegar a su destino.

Notas de juego

 

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12/02/2014, 11:11
Director

El ascensor se desplazaba en silencio y si de algo estabas segura era de que no estabas sola. Al igual que notabas un frío atroz y la sensación de que alguien te rozaba el pelo o el mono azul, como si de electricidad estática se tratase, también sentías aquel leve olor a champu barato de niña que, en esos momentos, te parecía el mejor de los olores. De alguna forma creías, sabías, que lo que produjese aquel olor alejaba de tí el mal frío que te acompañaba en aquel descenso.
Al final el ascensor se detuvo y con un ding empezó a abrise la puerta.

Notas de juego

¿que habrá, que habrá? xd

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13/02/2014, 00:59
Shan Mei
Sólo para el director

Mei se concentró en el olor que notaba a su alrededor. No entendía como podía ser, pero se sentía arropada, protegida por aquello que la rodeaba y que expelía aquel curioso perfume. Recordó a aquellos que había perdido, y sonrió cuando imaginó sus caras, con unas sonrisas iguales o incluso mayores que la suya. No se preguntó que habría tras la puerta que se debía abrir en unos instantes, no tenía sentido darle vueltas a algo así en un lugar como el que se encontraba. Tan solo podía esperar... así que, esperó.

Al final el ascensor se detuvo y con un ding empezó a abrise la puerta.

Notas de juego

Como te gusta el suspense puñetero! xD

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20/02/2014, 09:54
Director

Ambas buscáis por la enorme sala de duchas, en uno de los rincones más alejados de la puerta hay unas mantas que parecen ocultar algo. Las quitáis y veis debajo muchos bidones de agua. El viejo (sentado en la zona del grupo eletrógeno, visible de donde estais, que solo repite una y otra vez Liss,lo rompimos...rompimos el mundo) no es tonto, seguramente cuando empezó a ver que se perdía el agua intentó recuperar la máxima posible.
Hay bidones de sobra para que bebáis durante un año (un año que no tenéis) y incluso aún os sobraría alguno más para, con prudencia, ir duchándoos. Hay tuberías en dos de las paredes, la que enfrenta a la puerta del pasillo y la que enfrenta a la habitación donde está el viejo. Así anudando un extremo de la manta a una tubería de una pared y el otro a la tubería contigua de la otra pared, queda un triántulo alejado de miradas indiscretas.

Notas de juego

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22/02/2014, 00:00
Alex

Miró a Shan Mei, que como ella iba cargada con un par de toallas con el logotipo de L-Bloque y un mono limpio y a estrenar, y atravesó la manta que hacía de mampara de la ducha. Y por fin...el chorro de agua caliente cayó sobre Alex. Nunca se había parado a pensar cuanto podría echar de menos una simple ducha. Habían pasado mucho ahí dentro, habían perdido a muchos ahí dentro...lo que parecía una oferta de trabajo genial y maravillosa, había acabado por convertirse en la Matanza de Texas. Una sonrisa afloró en sus labios al pensar en ello mientras apoyaba las manos en la pared con la cabeza cabizbaja, y dejaba que el agua recorriera su espalda hacia abajo, como si pudiera arrastrar todo lo que habían vivido desde que entraron y borrarlo de su mente. Pero no iba a ser tan fácil. 

Podía oir a Shan Mei a su lado, era bueno tenerla de nuevo con ellos, ella y Duarte eran las únicas personas en las que confiaba. Quizás Steven también, pero Ciara...ella era otra cosa. Sabía algo que no quería contar y quizá fuera la clave de todo, y nunca sabía (y quizá no lo averiguaría en la vida) lo que pensaba ni como iba a reaccionar. Aún así eran un grupo, los pocos que habían quedado de todos, y debían comenzar a confiar los unos en los otros...Ahora envidiaba a ese McGyver que fue enviado de vuelta por incumplir las normas antes de entrar.

- Shan Mei - gritó para hacerse oír - Ahora sería un buen momento para ponernos al día, me gustaría saber que te pasó. Te creía muerta...todos te creíamos muerta. Aunque me alegro mucho de que hayas vuelto, de verdad, fue muy duro, incluso para Steven - hizo una pausa - Bueno, si quieres te puedo ir contando todo lo que ese viejo demente nos ha contado..o al menos, todo lo que he entendido...No me fio de él, en absoluto, y cuando te lo cuente entenderás porqué.-  y así Alex le contó todo lo que habían vivido desde la desaparición de la chica asiática.

 

Notas de juego

Bueno, he supuesto que encontramos algunas toallas por ahí, por donde el viejo, y algunos monos limpios. Si no, corrígeme master.

Y ale, deduzco que Shan Mei leerá lo que el viejo les ha contado, si no, pues lo cuento yo en el siguiente post y au.

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23/02/2014, 23:10
Shan Mei

Shan Mei escuchaba estupefacta mientras Alex iba contando la extraña conversación que habían mantenido con aquel viejo misterioso. El agua le iba cayendo al mismo tiempo, y le ofrecía un parco consuelo ante las cosas de las que hablaba la chica. Experimentos, sacrificios, asesinatos... ese hombre era responsable de tantas cosas... Mucho de todo aquello lo habría aceptado ya, pero otras muchas cosas... pesarían sobre su alma para siempre. En realidad no le importaba. Aunque le escandalizaba lo que se podía llegar a hacer en nombre de la ciencia y la experimentación (y también para enriquecerse), ahora buscar venganza o matar a un ser vivo por sus actos pasados no tenía sentido. Aunque el viejo se merecía todo el odio del mundo, sería más útil si lo mantenían con vida y aprovechaban sus conocimientos. Mei se sorprendió por pensar de manera tan fría, pero al cabo no le dió más vueltas, porque tras lo que había vivido allí abajo no volvería a ser la misma chica asustada que una vez había sido.

Las chicas siguieron conversando y duchándose, hablando del viejo, de su llegada allí y de la tétrica historia que les había contado. Cuando Alex acabó de contar todo lo que recordaba, Mei se quedó unos momentos pensativa, asimilando todo aquello que había escuchado.

- Increible.- Dijo al fin. - ¿Como pueden llegar a pasar algo así solo por que unos pocos quieran enriquecerse?.-

Una vez terminada la ducha las chicas empezaron a secarse y arreglarse lo mejor que pudieron. Se pusieron los monos nuevos, que en esos momentos parecían de pura seda. La ducha les había sentado maravillosamente, y Shan Mei sonreía como una tonta, estirando todos los músculos que podía y relajándose, para olvidar la tensión acumlada.

- Tengo que contaros lo que me ocurrió mientras estuve "ahí abajo", pero si no te importa os lo contaré mientras comemos algo todos juntos, así no cuento la misma historia varias veces.- Dijo Mei sonriendo.- De todas formas.- Continuó.- Te puedo decir que me encontré con un grupo muy grande de personas, que luego descubrí, o creí descubrir que formaron parte de todos aquellos que murieron hace años en "el bloque". Justo antes de coger el ascensor y salir de allí, me pidieron que, si encontraba sus cuerpos los liberara. No se bien a que se referían, pero espero poder cumplir la promesa que les hice antes de salir de allí.