Partida Rol por web

EL BLOQUE III

TUNEL HACIA EL BLOQUE.

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04/11/2014, 10:17
Paul "White" Dorsey

Apenas si tuvo tiempo de disfrutar de la sonrisa de Isabella, pero no la olvidó, ninguna de las dos, como tampoco sus susurradas palabras. Él también estaba vivo, nunca lo había olvidado, la convivencia con la muerte había sido una constante a lo largo de su vida, por eso tenía ese recordatorio constante. Pero había muchas formas de afrontar la realidad, y ahora él no sabía que camino elegir.

Por eso no supo que decir a aquella mirada.

Sigues aquí...

Había ignorado por completo la pregunta de Lerman sobre la muerte de Liss, a él también le gustaría saber muchas cosas, pero no siempre se obtenían las respuestas adecuadas. Tampoco le importaba en exceso la política interior de los que habían dado la orden de asesinar a su amigo. Si morían todos, no lo iba a lamentar lo más mínimo. Lo único en lo que estuvo de acuerdo era en el asunto de la confianza.

El caos volvió a aparecer, mucho más conocido y común para White que el estado anterior. Saltó del asiento cubriendo de manera instintiva a la chica que tenía sentada a su lado. Deformación profesional, no podía evitarlo, tumbándola en el suelo con el impulso y arrastrándola con él a la cabina. No podía disparar mientras descendían en picado, hubiera sido inútil, así que cuando el avión se estabilizó de nuevo, ocupó un sitio parecido al de Elena, a la que tendió una de las armas que le habían quitado hace unos momentos y sacó la suya.

Agacha la cabeza.

Hizo un gesto a Isabella, él no tenía ni idea de lo que aguantaría el fuselaje del avión, aunque no lo terminaba de ver claro, pero tampoco le apetecía la idea de ser masacrados por una ametralladora.

¿Pasado simplemente cerca no los desestabilizaremos?

La presión del aire podría ser suficiente.

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04/11/2014, 13:21
Isabella Pars

El instante en el que empezaron a estallar las ventanas la pillaron completamente de sorpresa, había perdido su estado de alerta crónico, y eso no debía de ser bueno. Por suerte entre la proteccion de White y sus reflejos se cubrió y tiró al suelo antes de que algo la alcanzase, aunque no tan rápido como cabría esperar, pues no iba de manera independiente, era más bien una marioneta en las manos del hombre, que se manejaba igual de rápido y seguro solo que cargando con ella. Pero antes de comenzar el camino,se aseguró de coger el cacharro con la información de las coordenadas.

Se las dio a Lerman sin levantarse del suelo, ni cruzar palabra. Volviéndo inmediatamente a colocarse con los otros, su acosador particular de los últimos cinco años, cuanto más lejos, mejor, ignorarlo era la mejor manera de no amargarse y funcionar en condiciones. No iba a darle más información de la indispensable, y no tenía ni remotamente otro tema de conversación con él.

Se te va la pinza Mari Paz, -como si una colisión sólo desestabilizara a uno de los que colisionan, eso para empezar -¿no has visto lo raro que es? Seguro que el material con el que está hecho también es de la energía chunga, resistente.

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04/11/2014, 16:06
Samuel Lerman

Lerman escuchó pero no medió palabra. No había tiempo para hablar solo para reaccionar. Había visto aquellos dos helicópteros y no podían ser sino un comité de bienvenida que indicaba que se estaban acercando peligrosamente al punto cero, al lugar donde debían aterrizar y al que otros sin duda ya habían llegado. Otros que ya habían hecho cuanto tenían que hacer para impedir que terceros, que en esta ocasión eran ellos, se sumaran a la fiesta.

Miró al copiloto e hizo un gesto con la cabeza. Entre ambos podrían resolver aquello o cuando menos intentarlo.

-Lo intentaremos -fue la escueta respuesta que finalmente se permitió y que dirigió a White sin apartar la mirada del panorama que se extendía ante él-. Maniobra de aproximación a máxima velocidad.

En la mente de Lerman se dibujaban las diferentes operaciones a llevar a cabo con un objetivo. Generar una fuerte turbulencia en las inmediaciones de los dos mosquitos. Inició un fuerte picado con el objeto de situarse bajo las naves enemigas y en un punto ciego a sus disparos para de inmediato inicar las maniobras oportunas y elevarse rápidamente pasando lo más cerca posible sin impactar.

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04/11/2014, 16:18
Samuel Lerman
Sólo para el director

Notas de juego

Desconozco la maniobrabilidad del aparato, pero lo suyo sería pasar a máxima velocidad y en un movimiento de molinillo, girando sobra su propio eje, generando un máximo de turbulencias.

Invierto un bloque en las maniobras.

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05/11/2014, 22:00
Director

Lerman maniobra el aparato bajo la supervisión del copiloto que parecía mucho más experimentado en ese aparato y sabía mejor como gestionar las velocidades de aquel avión. Así que cuando Lerman maniobra de nuevo hacia arriba, es el copiloto quien acelera con su mando. La aceleración es tan rápida que al momento os sentís como pins de metal atraidos, súbita y violentamente, contra un enorme imán.
Con el techo tapando la visión de los pilotos, todo funciona por cálculos e intuiciones y el copiloto es quién finaliza la acción empezada por Lerman. Todo sucede tan rápido como un disparo:
El avión sube paralelamente, como un harrier, hacia el techo, pero a una velocidad pasmosa, y no se detiene a la altura sinó a apenas un par de metros del techo en que se había convertido la tierra. No hay frenada, ni deceleración, el avión se detiene tan de golpe que una fuerza invisible parece ahora tirar de vosotros hacia el techo.
El viento generado por el propio avión o los reflejos de los pilotos de los helicopteros les habían hecho esquivar, en el último momento, al avión. Solo que con resultados dispares, uno de ellos se había desorientado en su huida -cosa bastante comprensible- y se había estrellado contra la tierra, estallando a unos once metros a vuestra izquierda. El otro helicóptero había esquivado y, para no chocar contra el ala del avión se había detenido, justo con la ametralladora mirando hacia vosotros, tan cerca que casi podríais cogerla. Solo que no hay ningún soldado empuñándola, quién sabe que habrá sido de él. De los otros tres soldados que veis allá dentro, a través de la puerta lateral abierta, hay uno arrodillado con arcadas, intentando sacarse las armas. Los otros dos están mareados por las maniobras evasivas, pero se acaban de dar cuenta de que su compañero de la ametralladora ha desaparecido.

Notas de juego

Los soldados que veis son tal como los de las fotos, la ametralladora estará a un par de metros, el helicoptero a tres y los soldados a unos cuatro metros.
Estais mareados, tenedlo en cuenta en vuestro cómputo a la hora de intentar realizar algún tipo de acción.

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05/11/2014, 22:21
Director

Tienes la coordenada específica de una entrada cercana al bloque y, tampoco demasiado lejana a vuestra posición. Calculas que a media hora, de hecho si no hubierais estado tan cerca no hubieras podido contactar con el infiltrado de Liss en el grupo de Jhonson.

Notas de juego

Solo para tí.

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07/11/2014, 18:15
Samuel Lerman

-¡DISPARAD! -fue el grito que se oyó de boca de Lerman cuando el avión se detuvo ante el helicóptero enemigo, mostrando su interior sin artillero y al resto de la tripulación enemiga bajo los efectos de las maniobras llevadas a cabo. Él mismo podía sentir su estómago peleando contra el deseo de vaciar su magro contenido. Apretó los dientes y tragó la saliva que se acumulaba en su boca-. Mantenga esto estable y salga disparado si nos atacan -fue el comentario siseado furiosamente al copiloto, cuya labor impecable había permitido que se deshicieran de la mitad de las fuerzas del enemigo. En su mano lucía ya una pistola que empezó a vomitar plomo contra los tres soldados.

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07/11/2014, 18:22
Samuel Lerman
Sólo para el director

Notas de juego

Gasto un bloque en el ataque con arma de fuego.

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07/11/2014, 21:46
Elena

No hay suficiente espacio para que disparemos los tres, solo os molestaré chicos. Tengo una idea Dice Elena abriendo la puerta mientras sale arrastrándose. Agachada desde allí y con la puerta casi cerrada, llama a Isabella casi susurrando Creo que necesitaré tu ayuda Parecía la versión bélica de "acompáñame al water", algo que solo podía surgir de alguien como Elena.

Notas de juego

Semiactualización un poco a la espera de los demás n_n

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10/11/2014, 10:25
Paul "White" Dorsey

Un latigazo de dolor recorrió el brazo con el que se aferraba a uno de los laterales de la cabina cuando el avión perdió se descontroló momentáneamente, pero se mantuvo firme. Echó un vistazo a Isabella, pero no pudo averiguar como le había ido. La cabeza le daba vueltas y las nauseas lo sacudían mientras intentaba recuperar la compostura.

Hablar era una pérdida de tiempo, en estos casos lo mejor era dejarse llevar por el instinto y los años de entrenamiento y experiencia.

Se levantó sin prisa, hacerlo de otra manera hubiera supuesto una nueva caída debido al mareo, agarrado con su mano izquierda a la pared lateral y con la derecha sostuvo el arma. Se tomó su tiempo en apuntar, era mejor que disparar a lo loco en estas circunstancias, buscando un buen ángulo de tiro contra el piloto, aunque si no lo había, dispararía contra el soldado más próximo a la ametralladora, con mucho la amenaza más peligrosa del enemigo en estas circunstancias.

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10/11/2014, 10:25
Paul "White" Dorsey
Sólo para el director

Notas de juego

Gasto 4 bloques.

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10/11/2014, 19:04
Director

Lerman empieza a disparar desde su posición a aquellos soldados, dos de sus balas golpean en el costado del soldado que estava vomitando dentro de su propia máscara, las balas no penetran su chaleco pero la fuerza de los disparos lo hace caer de lado...al vacío. Sus otros dos disparos alcanzan la pierna de uno de los soldados que permanecía de pié. Sendos chorros de sangre procedente de alguna artéria preceden su caída.
El otro soldado coge la ametralladora y apunta hacia la cabina. La ventanilla desde la que dispara Paul, por cercana que esté a la de Lerman, le da una perspectiva diferente: cuando cae el soldado con los disparos en la rodilla ve una rendija abierta: la puerta de la cabina del helicoptero. Tres disparos limpios cruzan aquella puerta abierta y rebotan en el interior de aquel reducido espacio destrozando los aparatos y consolas de pilotaje. En el mismo momento que la ametralladora empieza a disparar el helicóptero sale despedido como una pelota de rugby acabada de chutar y acaba estrellándose contra el techo, bien lejos del avión.
Los disparos de la ametralladora solo habían adornado un poco más el techo de la cabina y abierto unas cuantos agujeros más que siseaban inofensivamente. Nada de daños materiales ni personales.
Elena asoma la cabecita por la puerta que no había llegado a abandonar y silva.
Tenemos aqui a Cleant Eastwood y Lee Van Clef... me alegro de no haber tenido que saltar al helicóptero en marcha!! dice riendo natural y ufana por resvelar su gran plan.

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12/11/2014, 22:17
Samuel Lerman

Afortunadamente, todo había acabado. De momento. Dudaba que no fueran a producirse nuevos encuentros, especialmente conforme se acercaran a las nuevas coordenadas que Lerman introdujo en la consola del avión.

-Destino, el infierno -señaló antes de añadir escuetamente-. Buen trabajo, mercenario.

Tomó los mandos y el avión reinició su camino hacia el único lugar desde el que podrían dar esperanza a todos y cada uno de los integrantes de aquel pasaje, incluido él mismo.

-Media hora. Más o menos -afirmó con contundencia-. No creo que sea buena idea llegar con el avión hasta la entrada de allí donde vamos, pero tampoo hay opciones. O mejor dicho, tiempo.

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12/11/2014, 22:43
Director

El copiloto observando la situación intenta ayudar en lo posible y llama a una de sus azafatas por megafonía, esta le deja claro que por suerte no ha muerto ningún civil. Por una vez la suerte parece sonreirles:
-Si me dejáis los mandos puedo convertir esa media hora en unos diez minutos, y nisiquiera pondré este trasto a la mitad de su potencia.
La azafata y el copiloto esperan alguna respuesta de los allí presentes; una para dar la orden a los pasajeros de abrocharse el cinturón y el otro para llevarles al infierno con más presteza aún.
En ese momento Elena se queda mirando a Isabella, extrañada...luego se abalanza sobre ella.
-Isabella!! Isabella!!- le grita zarandeandola: esta tiene la mirada perdida y la boca medio abierta, como si fuera a decir algo. Cuando Elena la abraza, con ese conocimiento de la condición femenina que solo surje entre las mujeres, Isabella no responde, ni se altera, ni parpadea... Solo le cae de las manos un móvil con la pantalla iluminada por un mensaje entrante.

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14/11/2014, 01:25
Samuel Lerman

-En ese caso, que sean cinco minutos y aumente la potencia de este trasto. Y capitán, ha hecho un gran trabajo, Sin usted, estaríamos posiblemente acabados.

En aquel momento, los gritos de Elena distrajeron su atención. Se volvió raudo, la pistola en la mano, antes de ver la expresión vacía de Isabella, cuyo nombre se repetía en ecos. Bajó la pistola, pero no se acercó permaneciendo en su puesto. El mercenario estaba más cerca y sin duda, la atendería.

-No se distraiga -señaló al copiloto-. Haga lo que mejor sabe hacer. White, Elena, ese móvil. Está iluminado. ¿Qué dice? Y aunque no le vean sentido, ¿de qué modelo es el aparato?

 

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14/11/2014, 09:25
Paul "White" Dorsey

Era lo que mejor se le daba, y a pesar de que había acertado de pleno, siguió manteniendo las misma tranquilidad de siempre, limitándose a asentir con la cabeza a los elogios de Elena y Lerman. Había tenido suerte de que la cabina estuviera a tiro, ahorrando muchos problemas. Las prisas por parte del copiloto le parecieron adecuadas a las nuevas circunstancias, y es que verse bajo una lluvia de balas motivaba a cualquiera.

El primer pensamiento cuando oyó los gritos de Elena fue que a Isabella la habían alcanzado con una bala. Se movió hacia ella con agilidad a pesar de que el espacio no era el más ancho y su corpachón enorme. Prácticamente arrancó a la chica de los brazos de la soldado, y la examinó rápidamente en busca de algún tipo de herida. Pero había visto muchos heridos, y ella no parecía estarlo.

Isabella...

Estaba viva, pero no reaccionaba, joder, había cumplido, estaba haciéndolo lo mejor que sabía, y sin embargo algo que no podía controlar la había dejado así, ida.

Intercambió una mirada con Elena, tenían el móvil a su alcance, pero dejó que fuera ella quien lo viera, él tenía los brazos ocupados sosteniendo a la mujer morena, que no reaccionaba a las caricias que el mercenario le hacía en el rostro.

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14/11/2014, 23:18
Elena

La azafata con un silencio lleno de respeto sale de la cabina y escucháis como empieza a indicar a los pasajeros que se pongan los cinturones porque van a acelerar el avión. El piloto tras lanzar una breve mirada de preocupación por la chica se centra en los aparatos y en el mundo que tiene delante, al fín y al cabo maneja un avión con muchísimas vidas y que se merecen toda su concentración.
Elena recoge el móvil del suelo y lo lee para sí con gesto grave, apenas le cuesta unos segundos, luego lo lee en voz baja pero audible para aquellos que estuiesen en la cabina:
Nos hemos quedado sin aire hermanita. No me busques, vive tú al menos allí donde estes. Te quiero.
Luego Elena se queda en silencio y muestra el móvil a Lerman: es un "viejo" Samsung, nada que ver con la teconología de L-Block.

Notas de juego

La llegada al pozo es inminente.

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17/11/2014, 09:59
Paul "White" Dorsey

Supo que no iba a recuperarla, seguía viva, si, pero sólo porque su cuerpo así se lo ordenaba. La levantó con cuidado, ayudándola, sin obtener respuesta por su parte. Su familia era lo único que le importaba, al perderla, perdía las ganas que tenía de vivir.

Ven

Le dijo a Elena mientras sacaba a Isabella de la cabina y la sentaba en el asiento más cercano a la misma.

Cuida de ella, no dejes que le pase nada, acabaremos con toda esta mierda y luego ya veremos, pero necesito que la cuides.

White no deseaba ninguna discusión, su tono era suave pero tremendamente firme. No era justo, pero eso no era nada nuevo para él, nada era nunca justo. Regresó de nuevo a la cabina mientras comprobaba sus armas. Seguía aparentemente tranquilo, se acopló lo mejor que pudo para adaptarse a la nueva velocidad del avión y no salir despedido hacia ningún lado.

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17/11/2014, 18:12
Samuel Lerman

Al parecer todo se reducía a un estado de catalepsia fruto de una fuerte impresión. Frunció levemente el ceño ante los movimientos y palabras de White que parecía dispuesto a no intentar reanimarla e hipotecar la compañía de la soldado convirtiéndola en enfermera.

Se dispuso a operar junto al copiloto para llevar el avión a destino.

-En el botiquín posiblemente haya una cápsula de amoníaco -señaló en voz alta-. Quizá sirva para que recupere la conciencia. Una de las azafatas podría ayudar en ese sentido.

Dicho aquello, maniobró hacia las coordenadas prefijadas.

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17/11/2014, 23:13
Director

Elena acompañó al mercenario y se sentó junto al asiento en que deposito a la chica. Asintió a las palabras que le dijo y le respondió:
Sí, porque somos amigos ¿verdad?
El tono de la pregunta era infantil, como aquel de las conversaciones que habían tenido en el tunel de tren. Con el estado mental de la chica era saber si lo decía de verdad o era solo una imitación punzante. Al fín y al cabo ella, ex-soldado del bloque, había cumplido siempre su palabra y su pago había sido ser atada como un perro a la misma butaca en que ahora se sentaba por voluntad propia.

Las palabras de Lerman suenan desde la cabina al tiempo que la velocidad del avión empieza a acelerar de manera gradualmente exponencial al mismo tiempo que desciende separándose de tierra.

En unos minutos llegaremos, dice el piloto, ¿han pensado que harán con los civiles cuando lleguen al lugar? Incluso si llegamos sin problemas podrían aparecer más helicopteros como los que nos atacaron...
Está claro que es hora de pensar en un plan de acción.