Partida Rol por web

Expedición al Castillo Ravenloft

Día 4 Lamiéndose las Heridas (y el RESUMEN de todo lo anterior)

Cargando editor
25/11/2018, 19:07
Ashlyn, cazadora de muertos vivientes

Vaya, ya sabia que la espada sería poderosa, pero todo eso que dice... bueno, realmente el coste es alto, pero parece que merece la pena. Ahora el problema es buscar el santuario de la colina, pero si conseguimos la espada solar sería un gran hallazgo.

Bien, hay que buscar ese santuario. ¿Por dónde quereis empezar?

Cargando editor
26/11/2018, 18:38
Don Urik

Don Urik estaba ciertamente algo abatido por todo lo escuchado, y asintió un par de veces, absorto, a los comentarios de sus compañeras. Aquello no sólo iba a resultar caro, era prácticamente imposible que él reuniera ése dinero, no sin ocurrir un milagro. Lo que más le repateaba es que en su mente veía la codicia y avaricia en los rituales, algo de lo que había acusado Babá a los antiguos monjes de la antigua orden, que ni siquiera era la suya.

Se levantó y le hizo una reverencia a la mujer - Gracias de nuevo por vuestros conocimientos. Mejor si partimos cuanto antes. - dijo, sin querer iniciar una discusión sobre el tema del "Verdor". Lo primero era tratar de encontrar a ése espíritu, si sobrevivían y se hacían con el poder del Templo, ya volverían a hablar con ella. A él le daba igual por dónde empezar, pero emplearía sus poderes, por escasos que fueran, en seguir peleando contra el mal y por los ideales que él atesoraba, dijera lo que dijera nadie. - Antes de que se vaya toda la luz, mejor empezar por el bosque más cercano. - respondió a Ashlyn.

- Tiradas (3)

Notas de juego

No sé si es factible, pero usaré "detectar el mal" para intentar ayudar en la búsqueda. La lógica me dice que si el lugar es frecuentado por un ente maligno, queden rastros.

Lanzo tres buscar para ayudar también.

Cargando editor
27/11/2018, 19:38
Reluë Dranohel

Me muestro totalmente de acuerdo con el Caballero del Cuervo en que debemos ir aligerando con nuestra faena antes de que desaparezca el último rastro de luz. Y el bosque más cercano es un buen comienzo para ello.

 -Rezad por nosotros. -le pido a Babá Zelenna al despedirnos de ella y de sus monjitas.- Nos queda una noche muy larga por delante, y no esperamos que la compañía vaya a ser grata; es posible que la Colina se vea más frecuentada que de costumbre esta noche, así que cerrad bien las puertas y ventanas. -pienso en el comité de bienvenida que Strahd nos estará preparando, como si con El que Llama en la Oscuridad no tuviéramos ya más que suficiente.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Si finalmente vamos al bosque, Tiro "Buscar" allí. Si nuestras tiradas de buscar no dan resultado, utilizo el conjuro de Detectar Magia.

Cargando editor
27/11/2018, 20:05
Ashlyn, cazadora de muertos vivientes

Me despido de las monjas con una inclinación de cabeza. Cuidense, y quédense a resguardo esta noche. Volveremos.

Luego, acompaño a mis compañeros. Más que buscar, voy con ellos por si surge algún problema, y en ese sentido llevo la mano sobre mi espada. Al fin y al cabo, no podemos fiarnos que Strahd no vaya a hacer nada. Como si esta maldita tierra no fuese suficiente... en fin.

- Tiradas (1)

Notas de juego

tiro un buscar, por tirar...

Cargando editor
28/11/2018, 10:02
Walterly Wallace

Dejaron el Cascarón de Santa Ecaterina, y exploraron el bosquecillo del noroeste de la Colina de Lysaga. Hicieron dos tandas de búsqueda: la primera buscando a ojo, y tras el fracaso Reluë insistió en hacer una segunda batida con sensores mágicos.

Aquí no hay ni un mojón de cabra. Y yo soy tepestaní, entiendo de mojones de cabra. Hay un dicho en mi tierra que dice: ara con arado y tendrás buen hado, labra con cabra y serás corneado.

El conjuro de Reluë finalizó después de revisar todo y confirmar que el círculo del santuario no estaba allí. En un último instante, a la vuelta de la inspección, desde los matorrales que lindaban la pradera, Reluë detectó magia a lo lejos. Levantó la vista y vió coronando la colina el Cascarón de Santa Ecaterina, pero no sabía si se debía a que el círculo sagrado estaba allí, o lo que brillaba era la magia de las Servidoras del Señor del Verdor. La detección de magia finalizó sin poder darle más información.

Cargando editor
28/11/2018, 19:31
Reluë Dranohel

- Nada. No se percibe magia en este lugar. -Les informo tras dar unas cuantas vueltas por el bosque sin hallar nigún rastro del antiguo círculo de menhires.- Lo único, si acaso...

Aparto unas ramas que estorban la visión y allí, a lo lejos, contemplamos el viejo torreón derruído del que venimos.

- ... la única magia que noto desde aquí viene del torreón de Babá Zelenna. Quizás sean los trozos de menhir que reutilizaron para su construcción; o quizás sea un halo mágico de las monjitas o de la propia madre superiora. No sé qué decir. -me encojo de hombros.

O quizás sea que el Santuario se encuentra en el propio cascarón, lo cual implicaría que Babá Zelenna nos ha mentido para alejarnos de allí. ¿Qué motivo tendría para eso?

"El enemigo se vuelve amigo y el amigo se vuelve enemigo. Y las mentiras se extienden como un veneno..."

Las palabras de Madame Eva vuelven a sonar en mi cabeza.

Cargando editor
29/11/2018, 00:10
Don Urik

Tras buscar un buen rato, no pudieron encontrar nada, y aquello le resultaba frustrante a Don Urik. Al volver hacia la pradera, Reluë hizo un comentario que el caballero ya no pudo ignorar. - No es posible. Noté en Babá que algo no funcionaba bien. Sus alumnas están limpias de todo mal, no están mancilladas, pero ella, ella brillaba con moderación ante mis ojos. Normalmente doy el beneficio de la duda, pues que brille ante mí no significa de forma necesaria que sea malvada, podría ser simplemente que es contraria a seguir las leyes, un alma libre, como suele decirse, y eso no es malo en sí, al menos no a mis ojos y siempre y cuando respete a los demás. Pero empiezan a haber demasiados indicios. También el nombre de su señor...el señor del verdor, no quería decir nada para no parecer maleducado, grosero o vengativo, pues menuda joya de historia ha contado sobre los míos y se me podía malinterpretar, pero ése es uno de tantos sobrenombres con los que se conoce al Demonio Chernovog, derrotado por Lugdana. - preocupado, ahora sí, por el estado de las jóvenes monjas, se encaminó hacia la loma, directo al Cascarón. - Si nos separamos aún estamos a tiempo de hacerlo ésta noche. Voy allí. - dijo señalando el Cascarón que hacía un par de horas habían abandonado. - Si encontráis algo, gritad. Haremos lo mismo. Que venga alguien conmigo capaz de detectar las auras mágicas, por favor, el resto podéis ir al otro bosque. Yo puedo aguantar hasta que vengáis, si nos atacan. - 

El cuervo apoyado en su hombro, notando el cambio de actitud de Don Urik, abrió las alas y graznó mirando hacia aquel edificio.

Notas de juego

Don Urik desenvainó la espada bastarda y el escudo y se encaminó hacia aquel lugar (en la pradera)

Cargando editor
01/12/2018, 11:32
Elyzabeth Ildemar

-Las ofrendas se queman para ofrecerlas al bondadoso Verdor…Verdad?-Preguntó con voz inocente sin dejar de mirar a los ojos de Babá. Algo en aquella mujer le resultaba sospechoso y quería ver que cara ponía. Ely escuchó la respuesta de la madre superiora y luego, tras golpear las palmas contras las rodillas, se puso en pie, impaciente por comenzar la búsqueda.

- ... la única magia que noto desde aquí viene del torreón de Babá Zelenna. Quizás sean los trozos de menhir que reutilizaron para su construcción; o quizás sea un halo mágico de las monjitas o de la propia madre superiora.

-Desde que conocimos a nuestra amiga adivina, Barovia se ha convertido en el país de los quizás- Bufó frustrada.

Que venga alguien conmigo capaz de detectar las auras mágicas, por favor

La respuesta de Ely fue tomar el brazo del paladín y seguirlo en silencio. Cuando Urik la miró intrigado por aquel gesto. La joven se limitó a responder. –Tu y yo tenemos mucho de qué hablar- Lanzó una última mirada hacia atrás, y guiñando un ojo al mago, añadió en tono misterioso: -…Los milagros no existen si no hay testigos-

Jack siguió de cerca a la pareja con torpe su cadencia de pasos. Cuando Urik lo miró, aquella alma torturada le devolvió una sonrisa forzada, como si alguien le hubiera obligado a hacelo.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Siento la ausencia entre semana. El trabajo no me da tregua.

Acompaño a Urik y lanzo uno de mis conjuros de Detectar Magia. Si hace falta, lanzo el segundo también.

Cargando editor
01/12/2018, 11:49
Jack

Ueeeegh...-dijo Jack, mientras seguía a su ama.

Cargando editor
01/12/2018, 11:50
Walterly Wallace

Zack-dijo por Jack-tiene razón: el monasterio está a medio camino entre los dos bosques. Podemos avanzar juntos hasta el cascarón, por lo menos.

Los demás siguieron a Jack, que seguía a Urik y a Elyzabeth. A lo lejos vieron a Ina, sobre el tejado, avisando a sus compañeras de que volvían a tener visita. Aquella vez Babá Zelenna no estaba presente, tan solo cuatro novicias de capucha roja que recibían con regocijo el regreso de los chicos guapos. Resonó en la cabeza de Elyzabeth la respuesta que había dado en su momento: "las ofrendas son para el dios al que cada uno rece; si son de metal y no se pueden quemar, los dioses tienen otros medios para reclamarlas".

El sensor mágico de Elyzabeht dió un pitido en el interior de su mente. Había magia. Las cuatro muchachas emitían un aura propia de un lanzador de conjuros de nivel moderado. También percibió magia a su izquierda, en un grupo de cascotes. Los cascotes en sí eran lo suficientemente gruesos como para bloquear el sensor, pero la magia se escapaba entre los resquicios que formaban las rocas, como intentar agarrar el agua con la mano y ver el líquido escurriéndose entre los dedos.

Trabajando entre todos podrían despejar la zona bajo los escombros antes de que cayese la oscuridad, pero Ely no sabía exactamente a qué escuela de magia pertenecía su pequeño hallazgo.

- Tiradas (1)
Cargando editor
02/12/2018, 00:15
Ashlyn, cazadora de muertos vivientes

Sigo al grupo sumida en mis pensamientos. Es duro darse cuenta que, aparte de para buscar muertos vivientes, tus poderes no sirven para una búsqueda del mal si esta es de otra naturaleza, y eso es lo que estoy percibiendo ahora.

Solo el hecho que se detecte magia en la torre me hace animarme un poco. Podría ser que desde un principio tuviera razón, y las monjitas no fueran tan inocentes como quieren hacer creer. O podría ser otra cosa, quién sabe. Pero es una buena pista.

Y, de todos modos, nos pilla de camino para ir al otro bosque, así que matamos dos pájaros de un tiro si vamos con la pareja. Así pues, sigo con el grupo, escalando la colina, mientras las cuatro adolescentes toca.... salen a recibirnos. Uff... me están empezando a fastidiar, con sus tonterías hormonales.

Cargando editor
02/12/2018, 18:39
Don Urik

Ante el apretón de brazo y la repentina necesidad de acercamiento de la muchacha - juraría que está rozando su cuerpo contra el mío para ponerme nervioso... - Don Urik no pudo sino seguir adelante, pese a notar las voluptuosidades de Elyzabeth rozar arriba y abajo en su brazo, al ritmo de los pasos. - ¿A qué te refieres, Ely? - le preguntó a la muchacha. - De todas formas, igual no es el momento, concentrémonos en lo que estamos haciendo, ¿te parece bien? - le dijo, al llegar a los escombros. 

La mirada y gesto de Jack no pasaron desapercibidos para Don Urik, pero decidió ignorarlo. Si aquel zombi sentía algo por Elyzabeth, no debería ponerse celoso con él. 

Ely les indicó por dónde salía magia como si de un río taponado con rocas se tratara, y Don Urik se puso inmediatamente a ayudar a retirar los escombros para encontrar un paso o lo que fuera que había allí debajo. - Démonos prisa o todo ésto no servirá de nada. - dijo el paladín, dando ejemplo y arrimando el hombro con decisión.

Cargando editor
02/12/2018, 21:55
Reluë Dranohel

Si siembras un ideal, en la tierra del quizás... No puedo evitar que las palabras de Ely me traigan estas otras a mi cabeza, que alguna vez habré escuchado cantar de boca de algún bardo.

Distracciones aparte, sigo a mis compañeros de vuelta hacia el cascarón de donde -quizás- marchamos de forma demasiado precipitada. Nada más llegar, la clérigo detecta un torrente de magia mitigado por la presencia de un montón de cascotes que, por casualidad o mala intención, se han ido a colocar precisamente allí.

- Qué extraño que, estando a tan pocos pasos del Torreón, Babá Zelenna no nos haya dicho nada de esto. -dejo caer mientras me arremango y hago un poco el lento antes de ayudar a Don Urik a retirar las piedras, esperando a que los forzudos del grupo se me adelanten.- ¿Será que ni ella ni sus monjitas tendrán el don de percibirlo? -pregunto, ingenuamente.

Cargando editor
06/12/2018, 13:41
Elyzabeth Ildemar

- ¿A qué te refieres, Ely?

La clérigo no perdió la oportunidad de arrastrar al paladín a su lado, tanto en lo físico como en lo espiritual. -Me refiero a que quizás estés malgastando tu fé en…¡Por las calzas de Boccob!- Se soltó de pronto al ver semejante aura salir de entre los escombros. Elyzabeth explicó en voz baja lo que había percibido con su magia y caminó junto a Urik.

- De todas formas, igual no es el momento, concentrémonos en lo que estamos haciendo, ¿te parece bien?-

La joven aceptó la tregua con una sonrisa siniestra y se unió a sus compañeros a retirar pedruscos. Al ver a las monjitas tan cerca, sus sospechas aumentaron aún más.

- Qué extraño que, estando a tan pocos pasos del Torreón, Babá Zelenna no nos haya dicho nada de esto.

La joven dio la espalda a las monjitas y acalló los comentarios del mago con una discreta mueca de estar de acuerdo.

Ely estiró la espalda y mirando al cascarón semiderruido explicó en voz alta: -Es una pena que el templo esté así. En agradecimiento a vuestra ayuda y sobre todo, esa tarta de manzana, permitirnos ayudar a reconstruir empleando estas piedras-

La clérigo lanzó una mirada severa a Jack, que de inmediato se unió al trasiego de cascotes.

-Quiero un recuento de cada piedra- Exigió sin contemplaciones para disimular.

El alma en pena sostuvo una de las grandes piedras con una sola mano y se miró la otra, estirando uno de sus agarrotados dedos. Se quedó así un buen rato hasta que la joven bufó algo a su lado azuzándolo para volver al trabajo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Jack y Ely ayudan a ratirar cascotes. Ely disimula de vez en cuando anotando cosas en sus pergaminos.

Cargando editor
06/12/2018, 19:54
Ada

La proposición de Elyzabeth distrajo a las muchachas de la presencia de tanto varón.

¿Tú qué dices, Ida? ¿Les ayudamos con esas pesadas rocas? Tal vez deberíamos preguntarle a Babá Zelenna.

Cargando editor
06/12/2018, 20:00
Ida

¡Soy la mayor! Puedo tomar esta decisión yo sola, no hace falta preguntarle a Babá Zelenna.

Ida se mordió el labio. Tenía órdenes de vigilar, pero también la animaba la idea de reconstruir el viejo cascarón para recibir las alabanzas de su maestra.

Nos turnaremos-dijo a sus compañeras-. Dos vigilan y dos ayudan a los viajeros. En media hora, cambiamos entre nosotras para que las cuatro trabajemos lo mismo.

Entre todos desescombraron esa zona. Pasando la mano por el llano comprobaron las protuberancias del terreno que indicaban la ubicación de los antiguos menhires. Mientras, Elyzabeth entretenía a las novicias haciéndolas clasificar y contar los distintos cascotes por tamaño y forma de la manera más subjetiva y lenta posible, cambiando de opinión cada dos por tres. Cuando los últimos rayos se escondieron tras las Montañas Balinoks, un viento frío se levantó en el cascarón.

¡El Que Llama a la Oscuridad ya viene! ¡Entrad en casa, chicas! Y vosotros... Bajad rápido la colina, él ya viene.

Ida, Ada y las otras dos monjitas se encerraron en uno de los dos edificios del convento que había resistido el paso del tiempo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Podéis marcharos, y volver mañana con una lista de conjuros más pensada para las características que Babá Zelenna os contó del Que Llama a la Oscuridad.

Si os quedáis, elegid quién reza en el interior del círculo. Dentro del círculo caben hasta 4 personas.

Cargando editor
07/12/2018, 16:35
Don Urik

Las monjitas tomaron la decisión de ayudarles y poco a poco consiguieron despejar un área circular que, comprobaron, era la situación original de los menhires. Don Urik puso cara de disgusto, pues aquel lugar estaba dentro del la torre que Baba dirigía.

- Sólo hay dos opciones, o que ésa mujer tan instruida, dentro de su sapiencia y su tan cacareada recopilación de la verdad sobre la historia esté en perfecto y total desconocimiento de la ubicación de éste círculo en su propia casa, o que nos haya ocultado la información por alguna razón oculta. - pensó, dejando ir algo del resquemor que sentía por dentro. Se reprendió mentalmente por pensar así, por ser tan cínico y por no admitir en voz alta que era probable que se hubiera equivocado al darle el beneficio de la duda. Se prometió a sí mismo no ser tan cínico y ser menos orgulloso, mientras la luz del día terminaba de irse.

En una cosa aquella mujer tenía razón, el orgullo, la avaricia, el cinismo y la vanidad era lo que llevaba a la gente a la senda del mal, de la tiranía y del despotismo.

Estaba sudado y sentía el viento frío que penetraba por debajo de su armadura, mordiendo su piel y arrebatándole el calor corporal. ¿O era la influencia maligna del ente llamado "El que llama a la Oscuridad"?

Vio el miedo reflejado en la cara de aquellas chiquillas, y miró a sus compañeros uno a uno. - No sé si estamos del todo preparados para enfrentarnos a ésta criatura. Yo puedo rezar, ya que nos han advertido que nuestras espadas no le podrán causar efecto, porque no bajará a nivel del suelo para que podamos golpearle, y tengo bastante aguante para permanecer despierto rezando, inclusive si nos ataca con su magia....pero...¿podréis contenerle o hacerle daño a distancia? ¿Tenéis los conjuros necesarios? Si no es así, y queréis iros, podemos pedir asilo dentro del Templo, seguro que Babá y sus monjitas nos recibirán encantadas. -

Él apenas podía invocar una protección personal que duraría unos minutos, demasiados escasos como para ser efectivos durante toda una noche. La guardaría por si se presentaba algún esbirro de Stradh.

Notas de juego

Por mí me quedo, y si hace falta, rezo, que para estar de estatua inútil...si el bicho no va a bajar a nivel suelo, yo no podré atacarle. Si queréis iros, voto por pedir asilo en el templo antes de irnos, así de paso a ver si averiguamos algún oscuro secreto de la señorita Baba.**

** Y no, no tiene absolutamente nada que ver que cuatro jamonas estén en celo....de verdad. XDDDD
 

Cargando editor
08/12/2018, 01:13
Ashlyn, cazadora de muertos vivientes

Saco mi ballesta y la cargo con un virote de llama alquímica. Yo creo que puedo hacerle daño especialmente si es un muerto viviente, pienso.

Me sitúo justo frente a donde está Urik, con la ballesta en la mano. Cierro un momento los ojos y concentro mi energía, buscando a mi objetivo, intentando localizarle. Espero a ver que harán el resto, pero yo estoy dispuesta a pelear y no perder más tiempo.

Notas de juego

Saco la ballesta y la preparo y luego uso el poder de "detectar muerto viviente", aunque solo sea para saber si realmente es un muerto viviente u otra cosa.

Cargando editor
08/12/2018, 11:52
Elyzabeth Ildemar

-No sé si estamos del todo preparados para enfrentarnos a ésta criatura. Yo puedo rezar, ya que nos han advertido que nuestras espadas no le podrán causar efecto-

Ely miró los últimos rayos de sol reflejados en las nubes del horizonte y sacudió la cabeza.

-A penas tengo un par de conjuros que pudieran servir- Respondió con voz apagada.

Iba a proponer que fuera Walt el que rezara en esta ocasión, pero el paladín se había ganado su confianza y secundó su plan de nuevo. A continuación miró al tepestaní con su sonrisa cínica y añadió en tono maternal: -Vamos a ser prudentes y hacer caso a Don Urik- Después miró a Jack y le pastoreó hacia el edificio en ruinas: -Vamos querido. Se te va a quedar el sudor frío. Y Nada de ligoteos con esas- Susurró desconfiando de las monjitas. –Si ves cualquier movimiento mientras dormimos, despiértame- Ordenó bajando aún más la voz.

La clériga se propuso escudriñar cada gesto de Babá y cada detalle de su templo para desenmascararla e invocó los poderes de sus dioses entonando una melodía siniestra.

Con los ojos clavados en el horizonte caminó hasta el templo sin decir nada más.

Notas de juego

Lanzo Averiguar intenciones +4 usando manejar habilidad (MdF 114) ⁺10 Hab. y Orientación divina para ganar otro ⁺1. (Total +15)

También Lanzo mi segundo Detectar magia según volvemos al templo y sobre Babá (a la que dedico un buen rato)

Por último, antes de rezar para el día siguiente, lanzaría Identificar sobre una de las 3 pociones de Danovich si el master me permite descontarme las 100 Po directamente de mi oro.

Voy elaborando la lista de conjuros para el día siguiente y la posteo donde me diga el master.

Cargando editor
09/12/2018, 20:26
Reluë Dranohel

La verdad es que, al menos por mi parte, de nada va a servir que demoremos una noche más lo que parece inevitable, y así se los hago saber.

- No creo que tenga en mi repertorio de conjuros nada especial contra eso que llama a la Oscuridad que no hayais visto hasta ahora.- me refiero, naturalmente, a mis hechizos de fuego y a mi capacidad de traer a este plano a ciertos bichitos que ayuden en la pelea, aparte de algún truquito más sin mucha importancia.- Así que por mí lo liquidamos esta noche.

Es entonces cuando Ely manifiesta que ella sí que podría preparar mejor el suyo, así que no hay nada más que hablar: a descansar se ha dicho.

Espero a ver si Babá tiene a bien darnos refugio, o si tenemos que huir a toda prisa hacia la aldea, en dirección contraria a la de donde proviene este viento repentino que me ha puesto la carte de gallina, congelándome a partes iguales los huesos y el estado de ánimo.