Partida Rol por web

- Si te encarcelaron fue porque casi incendias el ferry. Si no hubieses ido lanzando conjuros de forma irresponsable y poniendo en peligro a la gente no habría pasado nada de eso. La magia no es un juguete, sino una responsabilidad - explico tras salir del escondite, respondiendo al chico con actitud seria.

· Zephyr: A mí no me mires, chico, yo no tuve nada que ver - comenta la espada - Yo no tengo cara de aguafiestas como mi portador.

- Tú ni siquiera tienes cara ahora mismo - me apresuro a añadir, mirando de soslayo a mi desvergonzada espada parlante.

Jaden realiza la pregunta que me interesa: ¿qué anda buscando?

Finalmente entramos en la iglesia, y la verdad es que si fuera de noche sería un lugar bastante aterrador, con esos pensamientos en mente doy un leve respingo cuando veo algo moverse; aunque no tardo en reconocer al chico del ferry. ¿No estaba con la policía?. De cualquier manera al escuchar sus reproches por haberlo entregado no puedo contenerme. - Y tu eres culpable de haber alborotado un ferry en el que no habrías podido subir si no te hubiéramos ayudado.

Cuando Jaden pregunta al chico que hace ahí recuerdo que andaba buscando un animal, no tenía sentido entonces que estuviera en una iglesia abandonada alejado de la civilización. ¿Podría tener algo que ver con el Gremio oscuro a pesar de ser solo un chiquillo?. Solo queda esperar su contestación

¿Uhh? Ese sombrerito me parecía conocido. ¿El mocoso del Ferry? ¿Qué hacía en un lugar como este? Al verlo salir de las banquetas le divise más fácilmente, sin duda alguna era él. El mocoso era un gran estúpido, ya todos lo habían reprendido de alguna forma, no me quedaba nada que decir. Me crucé de brazos, esperando quizá que respondiese la pregunta de Jaden. ¿Qué demonios se supone que hace aquí?

Enma se pone repelente tras las acusaciones y algo contestón: Si la señora me hubiera comprado las pastas que me prometió, no tendría la culpa. Tampoco me enseñó sus braguitas. Si quereis que os perdone, ayudadme a buscar la gema de mi cetro, es redonda y rojiza. No sé a donde habrá ido a parar. De seguro está aquí dentro.

Se pone a mirar en la otra hilera de los bancos pasando un poco de vosotros sin mucha mas explicación.

-¿Una gema?- pregunto perdiendo el interes. No estabamos aqui para buscar un objeto perdido -¿Y como fue que la terminaste aqui?- hablo dando un mirada superficial alrededor sin mucha intencion de buscar -Nosotros estamos buscando un gremio, dicen que estaba por aqui ¿Sabes algo de eso?- no digo que es un gremio oscuro, tampoco es que esa informacion ayude mucho.

Me siento en uno de los bancos -Oye Zack, avisame cuando encuentres la gema esa- digo mientras me recuesto. Estaba seguro que el heroe de la justicia no se negaria a ayudar al niño. 

- No creo que unas pastas fuesen motivo suficiente como para casi incendiar a una mujer y el ferry entero. Tienes mucha suerte de no haber acabado trasladado a las prisiones del Consejo Mágico - explico, intentando meterle un poco de miedo de paso - Tienes que hacerte responsable de tus propios actos - ¿qué hago intentando educar a un crío? Finalmente suspiro - En fin, voy a ayudarte a buscar esa gema.

Eso digo, pero estoy tan despistado que tropiezo con las piernas de Jaden, quien se estaba recostando en un banco. Caigo de bruces.

- ¡Auch!

· Zephyr: ¡Así me gusta, que pierdas la dignidad ante la más mínima oportunidad! ¡JAJAJAJA! - se ríe mi espada. Le miro intensamente con una expresión asesina mientras me reincorporo.

Vaya niño tan vulgar, lo miré con algo de desdén cuando mencionó "braguitas". Me cruzo de brazos y dejo escapar un largo suspiro. Creo que no tenemos tiempo suficiente para perderlo en una tontería así, ¿me equivoco? Estaba algo fastidiada, al menos hasta que Zack se cayó, ahí dejé escapar una fuerte carcajada.

-Zack, entiendo el que estés nervioso por estar cerca de Regina, pero contrólate.

Me moví mientras me limpiaba las lágrimas y me senté a un lado de Jaden-. Eso mismo que dice Jaden, si nos dices tal vez pueda darte pastas -me crucé de piernas y ahogué una pequeña risita traviesa.

No puedo más que suspirar ante las palabras del pequeño mago, desde luego no se puede razonar con él, pero me uno a mis compañeros en la búsqueda de la gema, desde luego si la encuentro no pienso devolvérsela para que siga haciendo de las suyas, a ver si así escarmienta.

Resignada por no encontrar nada parecido a una gema me siento en un banco en el momento justo para ver a Zack tropezarse de forma ridícula con las piernas de Jaden y caer al suelo. No puedo evitar soltar una leve risa que intento disimular tapándome la boca con la mano.

En cualquier caso no parece que ninguno de nosotros haya encontrado nada y aún tenemos una misión que cumplir. - ¿Estás seguro de que esa gema está por aquí?. No tenemos mucho tiempo que perder ¿Por qué no vuelves a la ciudad?

Ninguno logra encontrar la gema dichosa, ni siquiera Enma, que no sabe donde la perdio. Irritado por no encontrarla, se echa las manos a la cabeza maldiciendose: Ahhh, seguramente se la llevó ese cuervo!! Ya no podré encontrar a Yuki!!

Mira fijamente hacia Reginna y se dirige hacia ella: Tu quieres que me vuelvan a arrestar verdad? Esa gema es la que me permite usar magia. Es muy valiosa. Y no me iré sin encontrarla. Le señala hacia la cara desde una posicion mas baja. Luego se gira y mira hacia el techo, mas bien un ventanal con una vidriera que estaba rota.

-Hey principe cuidado por donde andas- digo mientras muevo mis piernas luego de que Zack se tropieze. Pasa un largo rato y ademas de la estrepitosa caida de Zack no ocurre nada, no parece que la gema se encuentre por aqui

-¿Llamas a tu gema Yuki?- pregunto extrañado al escuchar al chico -¿De que clase de cuervo hablas? Si es uno culaquiera, sera mejor que te consigas otra gema ¿quien sabe cuantos cuervos hay por aca?- digo mientras cruzo los brazos detras de mi cabeza como almohada

Mi gema no tiene nombre. Yuki es una amiga mía, es la princesa de hielo. Sé que está en esta isla, pero la deben haber raptado. El rastro me llevó hasta aquí pero ese maldito cuervo!! No un cuervno normal, sino un mago que manejaba cuervos... seguramente me robo mi gema!!

Rechista al comentario de Jaden subiendose encima de un banco.

- Vaya, al parecer un cuervo se me ha adelantado.- Es lo que pienso en un principio satisfecha de que el pequeño mago no pueda seguir haciendo de las suyas, pero en cuanto responde a las palabras de Jaden todo cambia, al decir que una amiga suya puede estar en peligro miro a los demás, una mirada que Zack ya conoce y por la que sabe que ya he decidido ayudar.

- Tranquilo, te ayudaré.- No puedo hablar por los demás pero espero que piensen lo mismo. - Deberías habernos dicho antes que había alguien en peligro.- Además, es posible que ese mago de cuervos esté relacionado con el gremio oscuro. - ¿No tienes ninguna idea de donde puede estar?

Enma al escuchar las palabras de Reginna, se calma un tanto. Da un salto y baja al suelo. Se mueve minuciosamente hasta una de las columnas y señala una piedra. Allí se puede ver que una parte está congelada. Tiene una fina capa de hielo.

Ves... esto es hielo. Sé que es de ella por la forma que tiene y el dibujo. Un curioso dibujo estaba impregnado en la piedra entre el hielo. Era la forma de un sombre de mago con ojos.

-¿Hielo?- enarco una ceja -¿No sera la chica que Zack "intento" salvar?- hablo haciendo enfasis en cierta palabra. Me incorporo en el banco sentandome verticalmente con los pies en el asiento -Bueno entonces ¿no lo tenemos facil? podemos seguir las partes congeladas y de seguro nos llevara hacia tu amiga y si ese mago cuervo esta cerca mejor- digo alegremente

Me paro estirandome un poco -Hmm... parece que ya no podemos hacer nada por aqui ¿Por que no seguimos el camino de migajas congeladas?- sonrio

Escucho atentamente la conversación, y mi interés aumenta cuando Enma habla sobre Yuki. Observo a mis compañeros, quienes parecen haber llegado a la misma conclusión que yo. Asiento con la cabeza ante las palabras de Reina*.

- Por supuesto, ayudaremos a tu amiga - digo convencido. No habrá persona en apuros que no reciba mi ayuda, y menos si se trata de una chiquilla indefensa. Miro de soslayo a Jaden - Eso pienso también, Jaden. Estoy seguro de que se trata de la misma chica.

Observo con atención el rastro de hielo en la piedra, cuya forma es de lo más curiosa. Se me ocurren un par de bromas para Lenn, pero no es el momento.

- ¿Entonces a qué estamos esperando?

· Zephyr: A que te pusieras en plan zoquete justiciero. Tranquilo Enma, si tu amiga está en peligro mi portador se ocupará de recibir las palizas mientras los demás la ponen a salvo.

- Oye, Zephyr... - me giro hacia Enma - Ahora que lo pienso, creo que no llegué a presentarme. Soy Zack Stormblade, mago espadachín.

Chica de hielo... chica de hielo... ¡Oh! Es aquella chiquilla que estaba siguiendo. Asiento con la cabeza aún sentada en el banco de madera. Si bien no era nuestra prioridad, no podríamos dejar de ayudarla. 

-Pues deberíamos ponernos en marcha, ¿no? De lo contrario me volveré a dormir. Por cierto, mi nombre es Leen -dije antes de levantar el pulgar hacia el niño.

Se empieza a escuchar el graznido de muchos cuervos, cerca de 30. Una bandada rompe los cristales de los mosaicos del techo y entran en la iglesia. Os empiezan a revolotear alrededor pasandoos a la altura de la cabeza hasta que se van fusionando formando a un chico encima del altar principal. Es un chico de pelo plateado, piel palida, y ojos ensangrentados. Viste una tunica con capucha negra por encima de un traje chaqueta de color blanco. Se presenta con una risa algo macabra y de la mano enseña una gema de color negruzco.

Vaya, vaya pequeñín. Aun sigues buscando esto? Se la muestra en alto.

Enma se gira enfurecido y exclama: Ehh, tú. Así que los cuervos eras tú. Devuelveme mi gema!!

Así que la chica que busca el pequeño mago es la misma que encontramos al llegar a la isla, no debería ser muy difícil de encontrar entonces teniendo en cuenta que Lenn la había estado siguiendo. - ¿Donde viste por última vez a la niña? ¿Y tienes idea de donde podría deirigirse? - Pregunto a mi compañera peliazul. Pero antes de que tuviera tiempo a contestarme la iglesia se llena de cuervos y terminan formando una figura humana ante nosotros.

- ¿Quien eres tú? - instintivamente mi mano se mueve buscando mi vara, desde luego no parece alguien amigable. 

La capilla se llena de cuervos, los cuales se reúnen y se funden para mostrar a otra persona, quien tiene la gema que buscaba Enma. Ese tío me da mala espina.

Iba a intervenir para pedir que le devolviera la gema al chico, pero Reina reaccionó antes. Guardo silencio y observo con atención su respuesta, pero con la mano cerca de la empuñadura por si las moscas.

Estoy a punto de ponerme en marcha para seguir los objetos congelados cuando, de repente, una bandada de cuervos entra en la iglesia. Rompen las ventanas y empiezan a volar hasta fusionarse en un solo espacio dando forma a un chico de pelo blanco. Levanto las cejas algo sorprendido, -Rara magia- me meto las manos en los bolsillos del pantalon mientras retrocedo hasta estar al frente de una de las bancas.

-Pasemos de las preguntas, este tio se ve mal de cualquier manera que lo veas- sonrio ferozmente. Rapidamente salto para atras e impulsandome sobre la banca que tenia detras salgo disparado hacia el tipo de los cuervos -Ya le preguntaremos luego de que este en el piso-  digo lanzandole un golpe con mis manos en llamas