Partida Rol por web

GELUS VIRICA

[ICEHOTEL] - Pasillos

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12/01/2009, 12:42
[Milo Notara]

La ausencia de asientos provocó que la mayoría cayera sobre la nieve de los helados pasillos. Al menos sólo había sido algo más de una mañana...
Milo había caído con las rodillas flexionadas, y nada más tocar aquella fría superficie, aseguró las piernas y, aún mirando el teléfono, echó a andar en dirección a las habitaciones, buscando algo o a alguien...

- Volveréis a ser los mismos, Lex y Andrea... Dadme un momento.

Notas de juego

Podéis volver a poneros vuestros nombres originales, vuelve a haber libertad total de posteo. Las sorpresas y la experiencia llega con el resto de jugadores ;) Siento mucho ésta misión coñazo :S

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12/01/2009, 15:11
Taylor Hawkins

De nuevo en "casa". Otra vez la sensación repugnante e indescriptible de ser desintegrado allá e integrado aquí. En las novelas de ciencia ficción resultaba hasta romántico..., pero en realidad era nauseabundo -literalmente-.

Taylor, aún de culo en el suelo, reprime una arcada. Milo se había apresurado a sacarlos de allí, pero antes de eso se había quedado agusto: no sólo le culpaba del destino que podría haber sufrido María, sino que también ondeó bien alta la bandera que le identificaba como "hombre bueno", permitiéndose incluso impartir lecciones morales. Él. Precisamente él: cómplice de asesinos caprichosos.

Ahora no es La Rabia. Es ira, sólo eso. Común, humana. Indignación por no haberle dado opción de responder. Cólera de quien no ha tenido derecho a réplica: por eso quizá la irritación es mucho más fuerte que el shock...y Taylor sale detrás de Milo y de su jodido teléfono móvil. Al alcanzarlo, lo agarra del hombro y le dá la vuelta, encarándo así.

- Ésta por Arty...- dice con claridad a pesar de estar con los dientes bien apretados. Los brazos entumecidos no obeceden al cerebro: éste último ordenaba una descarga al 100%, la megahostia cuyo eco rebota en las paredes. Seguramente, desde donde fuese, Art Connor agradecería una muestra de afecto como esa. Un momento para su recuerdo mejor que cualquier ramo de flores o alguna plegaria.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: CaC (Exploding fist!)
Dificultad: 94-
Resultado: 83 (Éxito)

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12/01/2009, 22:08
[Lex Czigany]

Las explicaciones a Milo se suceden, a cada cual más sin sentido, aunque lo peor de todo es que son ciertas, nos han mandado al matadero, id a buscar a no se quien, y de repente un ejército de mutantes nos pisaba los talones, muerte y desesperación, eso es lo único que hemos conseguido de todo este descontrol, eso y un par de tetas, maldito crio de los cojones.

A pesar de la “franqueza” de Taylor no me parece justo culpar al griego de lo ocurrido, y mucho menos meterse con Madison, aunque debo reconocer que…uhm… no puedo creer que mire mi cuerpo de esa manera, me fijo en ella, una chiquilla, aunque, no sé, tal vez no lo sea tanto, no puedo evitar una sonrisa medio derrotada, tendrá que dejar de avergonzarse por todo, creo que no le quedará más remedio, para su desgracia, así resulta bastante encantadora, inocente, sinceramente es una pena que las personas tengan que dejar de serlo, ojalá todos tuviéramos un poquito de Madison.

Y más reproches por parte de Milo, creo que no se da cuenta, de que el batería es el más perdido de todos, que la única forma que tiene de catalizar su frustración es de esa manera, es la forma de evitar que todo se la caiga encima, y de pronto, de pronto otra vez en el jodido hotel, el hogar de la hija de puta más grande que me echado en cara, y mira que he tenido malas experiencias, pero las supera con creces. El golpe lo noto más de lo habitual, echó en falta algo más de consistencia, me siento débil, creo que sería cuestión de acostumbrarme, pero también estos pequeños detalles me hacen un poco más consciente de la situación de Alexandra, joder, deberíamos largarnos todos de este puto lugar.

Liada sin esperar siquiera a que reaccionemos, maldita sea, me levanto con toda la rapidez posible y agarro por la espalda al americano, pero sin mucha fuerza, TAYLOR, PARA gritó con la voz de la húngara, ¡Peleándonos no conseguiremos nada! eran tópicos tan reales como vacíos, ¿pero que otra cosa se podía hacer?, era obvio para todos que estábamos jodidos, pero la culpa no era de Milo, la cosa estaba más arriba, tenía que ver a esa… lo que diablos fuera, pero la sola idea me aterraba.

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12/01/2009, 23:19
Andrea Scerri

La violenta respuesta de Ty hacia el simpático griego agudizó los sentidos del maltés y agravó (si aún se podía estar más nervioso) su estado de alerta... Tragó saliva e hizo amago de hablar para serenarlo, pero era irrefutable que el hombre había explotado y no iba a quedarse agusto sin soltar parte (porque seguro que no era el "todo") de lo que llevaba dentro... Después asintió repetidamente a las palabras de Notara, habiendo encontrado cierta verdad tanto en uno como en otro. Aún así la muchacha no veía a Milo como el culpable...

Y como todo regreso al Ice Hotel: Te dan por culo, aunque fuera la propia nieve que alfombraba el suelo quien les recibiera de forma brusca. Scerri aún no se había incorporado cuando Milo se alejaba sin sospechar en ningún momento el acecho de un batería malhumoradísimo...

- Ty... ¡¡¡¡...TY!!!! - exclamó ojiplático al tiempo que se levantaba como un resorte, sin poder creerse la sacudida que acababa de recibir el griego. Abrió la boca, con los ojos muy abiertos y las cejas enarcadas, y acto seguido reaccionó igual que... Ella misma, curiosamente, colocándose entre Hawkins y Notara con los brazos en aspa por si aquello terminaba en una batalla campal - ¡¡Basta!! ¡¡Taylor, tranquilízate, por favor!! - le pidió, amedrentada, desviando la vista hacia atrás para comprobar cómo se encontraba el herido. Dios quisiera que el desahogo de Taylor no le costase caro... - ¿Estás bien...? Lo siento, estamos muy alterados. Por favor ve a hacer lo que tengas que hacer, te esperaremos aquí... - un tono de disculpa y un aire sumamente angustiado... No quería más problemas para ningún compañero más de su grupo. No después de la muerte de Isabella y de la ausencia de John Rewell, por quién temía...

...Y por no hablar del otro grupo.

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13/01/2009, 00:53
[Milo Notara]

Milo sufrió sobre todo la sorpresa del ataque, ya que los músculos del californiano no eran ni de lejos los de Connor o los del propio Notara. El golpe no provocó ni que se tambaleara, pero al ver la reacción de Andrea y Lex, sus ojos salieron de la sorpresa para volver a la melancolía... ¿Tan esperable era una reacción negativa...?
Le habría dicho a Taylor que se tomara algo frío y se acostara, que aquel carácter era producto de la enfermedad, y eso quería creer. Pero no quiso ponerse más aleccionador. Simplemente dijo un:

- Os pondréis bien. Ya lo veréis -y volvió a girarse para ir al altar.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d4
Motivo: Golpe de Taylor (DAÑO)
Resultado: 1

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13/01/2009, 19:59
Taylor Hawkins

Como Travis Bickle, el personaje que interpretaba DeNiro en "Taxi Driver", Taylor había reaccionado ante lo que le asquea buscando un receptáculo para su impotencia...a su medida.

Travis quiso matar al futuro presidente. Taylor desea acabar con Isenhall.
Travis vío que atentar contra el senador era un suicidio. Taylor vé inalcable a la diosa aberrante.
Travis buscó un saco de mierda más pequeñito. Taylor, con Milo, hace lo propio.

Travis se cepilló a unos cuantos chulos de putas. Taylor - y aquí viene lo patético de su situación- sólo es capaz de lanzar un guante que el guaperas casi recoge como una caricia.

Travis & Taylor. T´N´T. Hawkins había explotado.

-¡CABRONES!- el grito sale ahogado, pero apunta alto...porque aunque se dispara en dirección a la espalda de aquel tipo, en realidad no va dirigido -como el puñetazo- a él. Ya casi no forceja. Donaría medio millón de dólares para las reformas del Partenón si Notara le hubiese respondido con una buena hostia. Una pelea. Ni eso. Aquello era aún más frustrante.

-Cabrones...- dice ahora susurrando, con la barbilla haciendo danzar a su labio inferior. Si Lex no andase cerca, lloraría como un chiquillo. Se echa el pelo hacia atrás, enseñando la cara congestionada por el frío -reconfortante- y, sobre todo, por lo esteril de todos y cada uno de sus actos. Respira hondo y suelta vapor de agua a carrillo hinchado. Aún no está, ni de coña, tranquilo...

-Quiero que me digáis algo, chicos...¿Sabéis, por una PUTA CASUALIDAD, quién manda aquí?. ¿Quién nos lleva aquí y allá?. ¿Quién decide donde nos vamos a dejar los cojones?. ¡No me digáis que es Isenhall!. No, yo mismo se lo pregunté: nosotros ponemos el culo, pero ella sólo pone la cama. Sólo la cama...

Taylor, con Milo ya ausente, se dirige a sus compañeros y los mira de cerca, a la cara, pasando uno por uno. Casi Interrogándolos. El intercamibio Lex-Andrea no tiene sentido para él ahora...más cuando el Ice Hotel ya se ha encargado de menguar las apariencias anómalas.

-¿Lior?. ¿Es ella?. No...Es otra más. ¿Quién, joder?. No sé donde está Rew, María...

Estoy hasta los huevos de todo...

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13/01/2009, 21:41
[Madison Greens]

Tras la caída, el único alivio de todo es comprobar, con una mirada rápida, que Andrea ya no es casi irresistible. Ahora es sólo guapo. Me levanto y sacudo la nieve de los pantalones. Sólo ha debido ser un minuto… el justo para que Taylor la líe otra vez.

El huracán Taylor pasa por mi lado, levanto la vista al escucharlo, justo para ver el golpe al pobre Milo. ¿”Arty”? ¿Se refiere a Art, quizás? ¿El que me salvó? ¿Pero que dice? ¡Si Milo ni estaba aquí! Niego con la cabeza, lo que parece estar perdiendo él…

Hogar, dulce hogar. Casi había olvidado la facilidad para que alguien la líe y unos cuantos intenten arreglarlo, mientras a la otra mitad le es indiferente…. Este grupo falta… por ahora.

Enmudezco con su retahíla, siempre acabo pensando que lleva algo de razón, e inconscientemente, intento responder… ¿El Faraón? Más por poner en orden mis pensamientos que por querer dirigirme a él… sí, eso dijo Adrían y que… Ostras, entonces…. Levanto la vista al batería, mirándolo como un niño cuando se siente mal por haber hecho algo malo, puff, está hasta los huevos de todo, puff. Pues se lo tengo que decir... Debería esconderme detrás de alguien… Pero de Andrea no, porque es Lex, y de Lex no, porque es una chica. Mierda.

Madison, es su hija. Carraspeo, retorciendo levemente las manos, bastante segura de que es lo último que quiere escuchar y de que se lo tengo que decir…. Por fin, lo miro y empiezo a hablar. -Taylor… hay algo más…. Todavía te acuestas calentita... Cuando Adrián hablaba por la radio esa… dijeron que el mismísimo Faraón mandaba a por nosotros… debido al senegalés y… las niñas. Muerdo el labio inferior, apenas un segundo. Y Adrián me dijo que se refería a “Alma” y… y a “Polly”. Levanto las manos en son de paz. Hablando rápido, ciertamente asustada No le dije que sé quien era, ni dónde está tu niña… y no te lo dije antes por si nos estaban escuchando y les daba una pista para encontrarla.

Y ahora es cuando puede pasar cualquier cosa…. el poder de la oportunidad no lo tengo, eso seguro.

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13/01/2009, 23:25
Andrea Scerri

Andrea expulsó con cierto alivio todo el aire que sus pulmones habían recolectado en aquel prieto instante, agradecido por el decoro del griego...

Al momento siguiente se volvió hacia Taylor con gesto grave, sujetándole de los hombros cuando éste lanzaba los insultos. Sus siguientes palabras la desolaban aún más de lo que podría estar en ese momento, en un cuerpo que no era el suyo. Todo era diferente. No sólo el tacto, las distancias o el latido del corazón. Invadía una incomodísima sensación de violación de intimidad... Sus gestos y reacciones distaban mucho de las que el mismo maltés solía mostrar, y aún desviaba con creciente preocupación los ojos hacia su cuerpo de mujer. ¿Qué pasaría si no volviera a él? ¿Debería preocuparle? Scerri parecía llevarlo mejor, y eso la agobiaba aún más... La impaciencia de Lex aumentaba conforme más tiempo permanecía en el cuerpo de Andrea e, igualmente, conforme iba siguiendo el hilo de la conversación. Le dolía la cabeza.

- Ty... - tragó saliva. La situación del californiano era muy distinta a la de muchos: Tenía una hija. Pero quizás tenía razón... ¿Quién les mandaba? Czigany, francamente, no se fiaba del todo de las palabras de la diosa por el simple hecho de ser eso mismo: una diosa. No es un ser sensible que se preocupe ni que tenga que dar explicaciones de sus actos a sus pequeños mortales, simplemente se sabe superior al resto y, como si de una jauría de cachorritos tristes se trataran, Isenhall jugaba con ellos... Y no había más remedio, porque ellos necesitaban la cura y ella era el primer eslabón de la cadena alimenticia.

Aún así su gesto se ensombreció... ¿Y si era cierto que había alguien más? ¿Lior? Difícil... Le daba hasta escalofríos recordarla y le hacía volver a reparar en Herkus... Se suponía que eran ella, Victoria y Antti quienes dirigían el cotarro. Y de Antti era imposible que la húngara desconfiara...

...Pero en mitad de sus controversias la bomba de Madison cae con un silbido espectral, y Lex vuelve de nuevo su atención al padre de una de las criaturas.

- No vamos a dejar que le ocurra nada malo a tu hija, Taylor... - Posó una mano en su hombro con suavidad, dándole su apoyo y un momento para asimilarlo... - ¿...Quién demonios es ese Faraón? Lo habéis mencionado varias veces, pero no sé quién es con certeza ni se qué tiene que ver con tu hija... Ni con esa otra niña,"Alma" - una parada dramática. Preguntas en general - ¿Y quién es "Alma"? ¿Y qué tiene que ver... "Adrián" con todo esto? ¿No se suponía que era de los "malos"? ¿¿Cómo es que sabemos su maldito nombre?? ...Joooder - negó impaciente, apretando los dientes, y de pronto se estampó una mano en la cara, apoyando la espalda con desgana en la pared... Esperando una aclaración mientras se masajeaba el entrecejo.

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14/01/2009, 13:51
Taylor Hawkins

Taylor niega con la cabeza y suspira ante las noticias frescas que trae Madison. Más tranquilo, agacha la cabeza y se masajea los nudillos: hacía siglos que no lanzaba un puñetazo, y siente la mano dolorida.

Alma...

-No sé...- se encoge de hombros. Una vez expulsada la bilis, nota los músculos entumecidos y el ánimo sedado. Sin fuerzas para el melodrama. Ni ganas.- Os agradezco vuestra preocupación por Victoria, pero...joder...Es que no tengo ni idea qué tecla pulsar, ¿me entendéis?. Quiero decir...mi hija está amenazada de muerte si su padre no vuelve con caramelos a este hotel de mierda. En realidad,...no sé donde estaría más segura...

En este punto, las opciones que maneja se van por el sumidero: las precogniciones no hacían más que añadir piezas al puzzle, convirtiéndolo en un engrudo de información inconexa. ¿Y si todo esto que se había montado alrededor del Ice Hotel no era si no lo que verdaderamente parecía: un experimento?. ¿Y si ahí fuera había gente dispuesta a "liberarlos"?.

- No puedo más con esto. Necesito saber qué se espera de nosotros. Qué tenemos que hacer para merecer la cura. Arty murió sin saberlo. Alice, Marcos, la rubia...todos muertos como los putos Lemmings. Cada vez estoy más convencido de que todo lo que se ha montado aquí es un filtro, un...proceso de selección: por eso nos lo ponen imposible. El que sobrevive y se muestra dócil, pasa la criba.

El resto, a la puta fosa.

Taylor apura el tiempo intentando retrasar el momento de ir en busca de su hija. Le da auténtico pavor. Sólo espera que Victoria sea lo suficientemente valiosa para que ELLOS decidan mantenerla con vida.
Mira a sus compañeros, sonrisa triste.

- La imaginación vuela, ¿sabéis?. Y de un tiempo a esta parte vengo pensado que entre nosotros hay...una especie de topo. Os propongo algo: reunámonos, pongamos encima de la mesa lo que tengamos y tratemos de encontrarle a esto algún sentido.

¿Cambiar de bando?. Probar fortuna con lo desconocido no es mala opción cuando sólo se conoce el infierno. Un infierno helado.

-Yo ya estoy dispuesto a lo que sea...

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17/01/2009, 22:23
[Lex Czigany]

Escucho en silencio a Taylor, reflexionando sobre lo que dice, las nuevas de Madison no ayudan, aunque no tengo muy claro quienes son exactamente las personas que nombran, la teoría de la conspiración empieza a gustarme, puede que este tipo tenga algo de cordura detrás de ese aspecto de haberse escapado de un jodido manicomio.

De acuerdo Taylor, dije con aquella voz que me resultaba incómodamente sensual, lo de la reunión es una buena idea, pero dudo mucho que le encontremos ningún sentido a esto, busqué con la mirada a Alexandra, a mis ojos, si recupero mi cuerpo tengo muy claro lo que voy a hacer, pero mientras, no puedo arriesgarme a dañarla, encima eso, lo que me faltaba, jodida morena, ¿me ayudaste o me condenaste al infierno?, confiar en una mujer siempre me ha ido mal, debí saberlo desde el principio.

Isenhall es una asesina igual que el loco de las cuchillas, simplemente cambian las formas, incluso diría que peor, por lo menos esos sabemos a lo que vienen, a matar a todo lo que se pone por delante, se me escuchaba mejor, porque no dudaba en decírselo a la cara, no me tragaba el cuento de selección natural, ¿para qué?, ¿para formar su propio ejercito de mutantes y enfrentarlos en batallitas en Dios sabe que enrevesado juego? Yo digo que nos larguemos, que intentemos buscar una maldita cura para este virus por otro lado, ¿quién nos asegura que no lo ha creado ella?, yo, miro a Taylor, como tu, ya no me fio de nadie, desvío la mirada ahora a Madison, incapaz de comprender que esperan de gente como ella, y temiéndolo al mismo tiempo, creo que lo último que debemos hacer es asustarnos, pues cuando perdemos el control…

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18/01/2009, 13:56
[Madison Greens]

Asiento a Lex, claro que no dejaremos que le hagan nada a su niña, ni a Amber… y me giro a Taylor, escuchándolo atentamente, parece haber recuperado el control, que no la tranquilidad. Con más verdad en sus palabras de la que quiero admitir. Recuerdo bien la cara de incredulidad de Adrián al comprobar que yo no sabía absolutamente nada de lo que me decía, que los nombres de los peces gordos no tenían ningún sentido para mí.

¿En qué planeta vivís los Gelus de Isenhall...?

Me encojo de hombros. Bajando la cabeza cuando nombra a Alice, a mi Alice. Se ha olvidado de Jake, ese niño si que no tenía idea de nada, y mucho menos culpa. Suspiro impotente, con un poco de rabia, ¿ha servido de algo lo de hoy para vengarlos? ¿O para mejorar nada? Ahora hay que sumar a Isabella, que ni siquiera sabía porqué estaba allí con nosotros. Meto las manos en sendos bolsillos traseros del vaquero y doy unos golpes con la punta de una de las zapatillas al suelo. Mirada taciturna, al mismo.

Suspiro. Quizás debí hacerle caso a Adrián, irme con él sin mirar atrás. Pero ahí no quería abandonar a mis compañeros en la misión… ahora sería distinto… Sí, pero mucho peor, ahora estamos en su fortaleza, en su cárcel de hielo. Es demasiado pronto para decidir nada, todavía estamos nerviosos por Isabella y por el que falta.

Pero no dejaré escapar este posible barco. No soy tan tonta. No es precisamente prometedora la vida que me espera aquí.

Levanto la mirada Yo… iré a esa reunión, os diré todo lo que me dijo él, que es lo único que sé... ¿Y si lo buscásemos? iba a “Barcelona” y parecía que sus jefes se preocupaban de él, de su seguridad. Que confuso es todo…. Que ganas de llorar… pero eso no servirá de nada, ya lo he comprobado, con creces. Sacar un poquito más de valor, más que nada porque me va la vida Pero… ella no nos va a dejar. Trago saliva, recuerdo perfectamente sus amenazas y el miedo que dá. ¿Cómo vamos a salir? No tenemos nuestros malditos poderes…. Sólo el asesino ese, Sayune… que está de su lado. Muerdo el labio inferior. No estoy segura de tener a nadie en quién confiar para algo así y arriesgarme…

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19/01/2009, 16:36
Antti Koivusaari

En mitad de la conversación, un grupo compuesto por A.J. Hayes, Antti Koivusaari, Arthur Dryden, Emma Kastehelmi, Renka Isawa y Sven Lockhart llegaban del lado contrario del pasillo por el que Milo se hubo marchado. Parecían alicaídos, salvo el imperturbable Sven, que más que nada tenía cara de cansancio, y un Arthur Hayes al que aquel asunto no le iba ni venía demasiado, pero se comportaba con la debida cortesía. En cambio al gigante Koivusaari lo llevaban de ambos brazos, por un lado Emma Kastehelmi y por el otro Hayes. Parecía como si el guitarrista hubiese estado un mes sin dormir como es debido, además de ir despeinado y con la ropa perdida de nieve. Se quedó mirando a Alexandra sin saber que aquellos ojos ya no le pertenecían a ella, y se agitó un poco entre los dos que se aseguraban de que se mantuviera en pié. Adelantó un par de pasos ignorando al resto de los ahí presentes y le cogió una mano a la que debería ser Lex. Andrea, desde aquella posición, pudo ver que Koivusaari se estaba aguantando las lágrimas, pero sobre todo parecía preocupado al ver que iba salpicada de sangre...

- Morena... ¿Estás bien...?

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19/01/2009, 18:57
[Milo Notara]

En ese instante, frente a la puerta (por fin abierta, tras la llegada de los abatidos A.J. Hayes, Antti Koivusaari, Arthur Dryden, Emma Kastehelmi, Renka Isawa y Sven Lockhart, los compañeros de misión de Rewell podían ver junto con los demás cómo aparecía Milo, llevado con el brazo por encima del hombro de Rewell, por él mismo y por una hermosa mujer de raza negra, que sujetaba la mano del ya conocido Roan-Kale.

Ambos africanos pudieron así contemplar la grandeza de aquel palacio de hielo, y Nadra, a pesar de su poder gracias al cual nunca había sentido los rigores de las altas temperaturas, se vio atenazada por un frío terrible, amén del mareo y los nervios que el teletransporte de Milo le habían causado. Roan en cambio no parecía tener frío, pero si que vomitó inmediatamente al tocar la nieve del suelo, la experiencia no le había sido grata.

Notara tenía el muslo ensangrentado, al parecer había recibido un balazo que Sven observó con ojo experto, movilizándose inmediatamente hacia la enfermería para prepararlo todo, pero Milo tenía otros planes.

- Por favor, Madison... Quédate con Nadra y Roan... Explícales... -la pérdida de sangre empezaba a marearle- Rew, acompáñame fuera, haz el favor... Quiero irme a casa y quitarme ésto...

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19/01/2009, 19:05
Roan-Kale Oluwatobi

Al ver a Taylor, Andrea y Lex, Roan se incorporó a toda prisa, ocultándose tras las largas piernas de su madre y abrazándose a su cintura.

- [FR]¡Ese me dijo "carroña negra" mamá! -dijo señalando a Taylor, para luego apuntar a Andrea y Lex. Los tres llevaban la ropa salpicada de sangre- ¡Y ellos dos me amenazaron y me hicieron daño![/FR]

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19/01/2009, 19:52
Nadra Oluwatobi

Nadra se sintió helada de pronto, cómo si aquella realidad fuera más bien una pesadilla, estuvo a punto de soltar la mano de Roan pero no pudo porque entonces él, efusivamente en su idioma, señaló a los que lo habían maltratado. Enseguida miró a la joven que Milo parecía haber llamado Madison y le hizo un gesto amable o al menos ella creyó quelo hacía para luego volver la vista contra el hombre que Roan decía era Taylor. Le lanzó una mirada furiosa, llena de odio y cuando estaba a punto de la recriminación, recordó las palabras de Rewell y no es que le hiciera mucha gracia contener lo que estaba sintiendo pero creí que le debía al menos eso al hombre blanco, pues fuera como fuera, aún continuaban a salvo.

Luego miró a los otros dos y respiró profundo, no quería hacer una tontería sin pensar, así que se puso en cuclilla frente a su hijo, le acarició el rostro y le sonrió como hacía horas no lo hacía, quizás mucho más tiempo que eso. Buscó dentro de sí las palabras correctas, era su hijo, la entendería; se tenían el uno al otro y en ese momento, incluso ante aquellos, estaban solos. Lo besó dulcemente en los labios, quizás la mente infantil no alcanzaba a entender a su madre pero pronto lo haría.

-[FR]Confía en mamá, ninguno de estos va a volver a maltratarte o a llamarte carroña negra pero vamos a esperar, Rewell no es un malnacido, tú mismo confías en él y él me ha pedido algo en especial, por eso no le rompo la cara en cientos de pedazos a este... Hombre.[/FR]-Nadra sonrió y asintió, sabía que Roan esperaría con calma.

Se levantó lentamente poniéndose de espaldas a Roan y luego caminó muy lentamente hasta donde estaba Taylor, se le acercó al oído y en voz muy baja, audible apenas para él, le dijo:

-La próxima vez que te metas con mi hijo, voy a arrancarte los huevos y haré que te los comas bañados en salsa... Dale las gracias a Rewell que no lo hago ahora, así que seamos amigos entretanto.

Nadra sonrió como si lo dicho hubiera sido algo muy amable.

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19/01/2009, 21:09
Andrea Scerri

Andrea se había mantenido pensativo con la espalda apoyada en la pared, asintiendo a la idea de una reunión, pero dedicándose a meditar las cosas antes de decir nada... Los problemas debían de ir por orden. Y sólo la llegada del primer grupo logró reventar la burbuja, más aún al contemplar el estado de Antti.

- ¡¡Esa!! - saltó de súbito el maltés, con la expresión más sobresaltada de lo que quizás le correspondía en cuanto a Koivusaari, adelantando sus pasos hacia éste. Inconscientemente, lo sujetó por el costado para evitar que se desmoronara mientras dulcificaba su gesto. Su acento seguía sin pertenecerle... - ¿¿Estas herido?? ¿¿Qué te ha pasado...??

Y ahora, la aparición fugaz del resto de su equipo aún la pillaba con las pulsaciones a tope. Primeramente desvió los ojos hacia la herida de Notara con evidente preocupación. Preocupante, pero Sven ya se ponía en marcha... - Rew... - Suspiró, habían llegado todos a salvo, al parecer justo a tiempo, y casi esbozó una sonrisa al ver a Rewell con vida, igual que la familia Oluwatobi.
Pero apenas les prestó más atención, pues al momento volvió a centrarse en su amigo (que presentaba un aspecto deplorable), recorriendo su cuerpo con los ojos en busca de alguna herida...

- Estoy... - tragó saliva - ...Estamos bien. La sangre no es nuestra. No te preocupes... - Bajó la vista, amargada... Casi se le había escapado el detalle del intercambio, y cuando iba a retirarle el rubísimo cabello de la cara, se detuvo por temor a incomodarlo, y simplemente le apartó con cuidado la nieve del pelo con una mano. Mientras tanto miró al grupo en general, comprobando que excepto el accidente de Notara, todos parecían estar bien, sólo agotados. Entonces se aclaró la garganta para proceder a la explicación con mejor ánimo del que sentía, al mismo tiempo que la madre del pequeño parecía decirle algo al californiano... - Nos han... intercambiado las mentes a Andrea y a mí. Osea, a Lex y a mí... Un chanchullo muy raro, pero relájate, ¿vale? Ahora lo solucionamos... Tienes que echarte a descansar, estas muy pálido...

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19/01/2009, 20:43
Taylor Hawkins

Y ahí estaba la cúpula dirigente, casi al completo. También parecen haber tenido un día duro: poco para lo que merecen.

Taylor arruga el entrecejo al verlos y dá un paso atrás, porque, aunque ninguno tiene pinta de querer sacar el hacha de guerra, el curriculum de aquellos individuos invitaba al achante. Los huevos, guardaditos. Para mejor ocasión,...que sin duda habría y no a mucho tardar.

Mira al suelo, incómodo, tenso como un alumno al que su profesor sorprende saltándose las clases. Ni siquiera la presencia de Emma le arranca un saludo. Los ojos se posan en Madison y otra vez en el suelo: Hawkins tenía respuestas para ella, pero la entrada de aquellos tipos hacen que trague las palabras.
Es la presencia de Rewell lo que le hace levantar la cabeza. El paso atrás se convierte en uno adelante, y el gesto serio en una media sonrisa de alivio.

¡Qué cojones!. ¡Qué cojones, Rew! . Ahí estás, como el puto John Rambo. La cabeza sobre los hombros y los huevos en su sitio. De una pieza. Misión cumplida.

A punto está de ir a su encuentro, pero algo lo detiene: para empezar, la presencia de Milo apoyado en su hombro. Y para terminar, la voz chirriante de -otra vez- aquel renacuajo: Taylor lo observa como si fuese un plato de cocina precolombina...hasta que ella surge desde sólo Dios sabe donde.

Al acercarse, Taylor ya no tiene ojos para nadie más. Es lo que tienen las tías buenas: ¿qué tiene de malo un poco de pigmentación oscura cuando hay un buen par de tetas?...
Era de esa clase de mujer por la que Ty se comería con gusto un par de años en el talego. El tipo de hembra capaz de hacer que un tipo con capirote blanco y túnica a juego rompiese el carnet de socio.
El contoneo de caderas lo confunde. La proximidad de aquel monumento esculpido en ébano hace que el pequeño y helado Tytie despierte de su letargo.

Cita:

La próxima vez que te metas con mi hijo, voy a arrancarte los huevos y haré que te los comas bañados en salsa... Dale las gracias a Rewell que no lo hago ahora, así que seamos amigos entretanto.

Tytie ya no es pequeño ni helado..., y puede que esa sonrisa sea falsa, pero cualquiera lo diría. Además, el mismo Taylor hubiese hecho lo mismo de haber estado en su caso. Traga saliva, culpable: si alguien llamase "carroña no-muerta" a su hija, habría hostias después de las bravuconadas.

-Como quieras...y...- "lo siento", iba a decir. Sin embargo hay algo en su jodida naturaleza que le prohíbe parecer un buen tipo.-...te advierto que no estoy para hostias. No sabes la de veces que me han cortado ya los huevos..¡y aquí siguen!. Intactos. Y rellenos de salsa.

Con la misma sonrisa hipócrita, Taylor se agarra un buen puñado en la entrepierna.

-¿Gustas?.

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19/01/2009, 22:36
[Lex Czigany]

Bueno, ya están todos aquí, cuando parecía que por fin comenzábamos a entendernos, incluso Madison parecía algo diferente, mucho más dispuesta a rebelarse contra el orden establecido, ni siquiera me molesto en saludar, prometí que lo intentaría, joder, pero es que hacen todo lo posible por que tengamos ganas de arrancarle la cabeza de cuajo.

Aparto la mano cuando Antti la toma, más que nada por puro acto reflejo, no porque tenga nada en contra del ángel guardián de Alexandra, el mismo que permite que arriesgue su vida al antojo de una autoproclamada diosa sin interponerse, que no venga ahora con gesto triste y afectado. Milo, Rewell, el jodido crío y la que posiblemente sea su madre, más gente, más carne de cañón, hay que ir reemplazando a los que ya no están, por lo que parece, y el griego tiene pinta de que como no haga algo, se unirá al club. ¡Quería ayudar Milo!, pero debiste contarnos algo más, avisarnos de que iba toda la mierda esta, ponte bien que te pueda echar la puta bronca. Rewell, el maldito Rewell, al que le gusta hacerse el héroe, pegar voces, y recriminar cosas a sus “compañeros”, no le negaré su valentía, pero creo que los tiros no van por ese lado para seguir con vida.

Si, el niño nos ha cambiando el cuerpo, asiento al finlandés y me alejo de él, en dirección al pequeñajo, mirando con gesto cansado al cantante, que ya está armando follón de nuevo, bueno, nada que sorprenda, y eso que apenas si lo conozco.

Déjalo Taylor, de nuevo aquella voz femenina, iba a terminar por cogerle manía, No le hagas caso, dirigiéndome a la nueva inquilina del lugar, recogimos al niño porque pensamos que estaba en peligro, y creo que gracias a eso se salvó, porque venían a por él, a por ti, a por nosotros, muevo el brazo abarcando a todos los presentes, puede que aquí tampoco estemos seguros, pero es lo que ha sucedido, siento que el crío se haya asustado suspiro mirándolo, espero que ahora por fin se calme, porque como empiece con la misma actitud que el coche, juro que le obligaré a devolverme el cuerpo de una manera nada agradable, pero ahora que supongo que entre Milo y Rewell han aclarado un poco las cosas, haz el favor de decirle que nos devuelva a nuestros cuerpos, aparto el pelo que cae sobre mi rostro, contrariado, esperando que la actitud sea por una vez positiva.

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19/01/2009, 22:38
John R. Dryden

Comenzaba a acostumbrarme, por suerte, a los teleportes, y el hecho de tener una buena fortaleza física me hace un poco más invulnerable a los efectos secundarios del mismo... Aunque seguía sin resultar algo agradable. De cualquier manera, por muy desagradable que pudiera ser, aquella sensación se veía eclipsada por la tranquilidad de haber regresado al hotel. La misión estaba cumplida y, aunque quedaban cosas por aclarar e informes que dar, todo había salido medianamente bien. No solté a Milo, pues la herida de su pierna podía ser grave y él mismo podía no ser suficiente para soportar su propio peso. Saludé a mis compañeros de equipo y al resto de la gente con una inclinación de cabeza, salvo a mi padre, a quien miré más fijamente y, al pasar junto a él, susurré:
-Hablaremos luego, padre... Voy a llevar a Milo a algún sitio donde pueda curarse.

Seguidamente, al saber que iba a ser Madison la encargada de informar de todo a Roan-Kale y a Nadra, me dirigí a estos últimos:
-Os dejo en buenas manos. Espero no tardar demasiado, de cualquier manera... Roan-Kale, si pudieras hacerme el favor de devolver a Lex y a Andrea a sus cuerpos, te lo agradecería mucho, colega... Ah, y Nadra... Gracias -dije, con sincero agradecimiento en la mirada, aunque la actitud de Taylor, desde luego, no jugaba en absoluto a mi favor.
Pero antes de salir había otra cosa que aclarar. Y era con la gente de mi equipo.
-Y, por cierto... Andrea, Lex, Madison y Taylor... Me gustaría hablar con vosotros después. De uno en uno. Y después si queréis nos reuniremos todos juntos y escucharé con tranquilidad todo lo que tengáis que decirme.

Aclarado todo ello, me dispuse a llevar fuera a Milo, donde quiera que quisiera ir. Más valdría llegar pronto a algún lugar donde pudiera tumbarse y descansar...

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20/01/2009, 15:16
[A.J. Hayes]

- ¡Serás cerdo...! -Renka se envalentonó en cuanto vio que Taylor se ponía grosero con Nadra, y como si acabase de materializarse bajo su manga, bajo su mano apareció un shuriken- ¡Racista irrespetuoso de mierda! ¿¡Qué cojones te crees que haces delante de su hijo!? ¿¡Qué quieres!? ¿¡Que te los corten de verdad!? ¡Yo encantada! -dio un paso adelante, pero como siempre, fue Hayes el que la retuvo cogiéndola de las muñecas, probablemente el único que, dentro del hotel, podía con la japonesa (sin contar a Sanuye).

- No te metas, Renka, déjalo -el propio A.J. le echó a Taylor una mirada que indicaba que no era el único que "no estaba para hostias". Con las mismas giró a la nipona cogiéndola de los hombros y la empujó hacia las habitaciones, donde también fue Arthur Hayes tras asentir a su hijo mayor.