Impresionante la visión de los ocho épicos animales. Regios, majestuosos y poderosos, los cuatro que despliegan sus alas y abandonan la Fortaleza lanzan destellos de luz al recortarse en el cielo de la mañana.
Me saca de mi admiración la voz recia de quien debe mostrarme la Senda siempre tortuosa del aprendizaje de la Sabiduría. Me giro y contemplo al Caballero, su armadura gris plata contrasta con la mía, aunque ni una ni otra tienen rival.
-Partamos, Sir Lak.
Me acerco a él, y a los cuatro grifos restantes. Imagino que dos serán nuestra montura. Pero, ¿Y los otros dos...?
-Creí que esperábamos a alguien...
No, no esperamos a nadie. Esos son para otros que deben de cumplir una mision tan importante como la nuestra, buscar monturas para nuestros jinetes...
PARTAMOS!
Espoleando el grifo este desplego sus imensas alas y alzo el vuelo con las primeras luces de la mañana. Sin mirar atras empezaron a coger altura hasta que casi no se distingia el suelo...
Durante varias horas duro el vuelo hasta que llegando a unos picos empezais a descender.
Pasais ahora a otra escena pero no la tengo preparada en cuanto este te aviso.
Ok, a la espera quedo.
:-)
Al alba la mayoria de la gente de la fortaleza ya estaba levantada, el ajetreo en el patio era evidente. El ir y venir era constante... varios sirvientes preparaban alforjas y sillas de un tamaño demasiado grande para un caballo...
Cuando los primeros rayos de sol impactaron sobre el patio las puertas de las cuadras se abrieron y llevados por sirvientes ocho impresionares animales, mitad águilas mitad leones salieron al patio… de pelaje blanco inmaculado y alas cremosas esperaron pacientes a que las ensillaran y atasen las alforjas…
La figura vestida con una armadura oscura con reflejos de plata entro en el patio, detrás de cuatro caballeros vestidos con una armadura casi idéntica…
En diez dias teneis que estar aquí, ¡PARTIR!
A la orden los cuatro caballeros montaron y como uno solo los grifos empezaron a batir las alas y correr hasta la entrada hasta que se elevaron varios metros y sobrevolaron la fortaleza cogiendo direcciones diferentes se perdieron en segundos en la distancia.
Al poco salio un caballero de inmaculada armadura y tomando sus monturas partieron, el clerigo junto al caballero perdiendose en segundos en el horizonte de la mañana.
Desde las sombras de los arcos salio la conocida figura del jardin que te habai arrastrado hasta alli a poco metros de ti, pasando a tu lado te coloco el petate bien amarrado...
Estamos listos, agarrate volaremos rapido... muy rapido...
Y sin mas palabras salto encima de uno de los grifos que estab alli y espoleandolo con fuerza se elevo en el aire...
Corre batidor, esto te va a hacer sentirte mas vivo que nunca en tu vida.
Soy Zak
-Encantado Rak..
Dijo seguro de si mismo, aunque era imposible no ocultar su nerviosismo. Jamás había montado en un bicho de estos. Tomo las riendas y con un grito de adranalina apuntó hacia un un punto perdido con el dedo índice.
-¡WOOOOOOW! ¡En marcha!...
Fue increíble la sensación de estar volando. Era un sueño que tenías de niño, y no hace mas que 2 años, Sebastian, era un niño como cualquier otro. Pero el era diferente al resto, jamás se rendiría ante nada.
Cogido bien fuerte espero a que el extraño hombre tomara la iniciativa para seguir sus pasos..
El viento silvaba en tus oidos con fuerza y las maos estaban entumecidas por el viento cortante. Poniendose a tu altura, te señala unos picos en el horizonte...
En las faldas de esas montañas hay una entrada a una gruta imensa iremos volando, por lo que lleva cuidado, esa gruta da salida al valle verde... alli viven las especies mas grandes que se han visto nunca...
Al lelgar alli ves como Rak hace un picado y entra por una gran grite en la roca...
Montar dif 15 para entras haciendo un picado y no perder velocidad.
Le soprende la facilidad que tiene Rak a riendas de esos bichos. El habla, y el joven Batidor se dedica a escuchar, pues ya tiene bastante con estar ahí arriba a lomos de un Grifo.
El viento agita su melena fuertemente e intenta imitar la acción en picado por parte del extraño ser de ropajes de cuero. Frunce sus rostro y con seguridad tira de las riendas para inclinar al Grifo sin embargo la experiencia es un grado que el joven Sebastian no posee con estas criaturas. Así que al ver el peligro que conlleva decide no arriesgarse y prefiere colarse por esa grieta a paso frenado y seguro.. Su rostro posee el mismo sentimiento emocional aunque no pueda hacer dicha acrobacia... siempre seguro.
Tirada: 1d20(+5)
Motivo: Montar
Dificultad: 15+
Resultado: 7(+5)=12 (Fracaso)