Partida Rol por web

El despacho de la directora es una estancia ovalada llena de estanterías con libros. No hay ningún espejo y las ventanas están en lo alto por lo que nada se refleja. La elegante mujer se encuentra sentada tras su escritorio, con su siempre querida máscara puesta. 

Cuando entráis por la puerta, la directora os mira a través de la cara de cerámica inexpresiva.

-¿Sí, Abraham?

Abe metió a los chavales dentro del despacho y miró a la directora.-Estos delincuentes, me han tirado el cubo de fregar al suelo, me han empujado…y para colmo se han burlado mientras empezaban a…a practicar actos anti natura, Diprieto le estaba lamiendo el ano a Maximilian…en el pasillo de la escuela mientras me miraban y me retaban.-Parecía realmente enfadado.

Disculpenos, directora Mistery, lo del cubo no lo hicimos adrede desde luego, salimos del comedor y nos tropezamos con Abe, y lo del sexo con Más fue justo por eso que salimos del comedor, estábamos en plena fogosidad, e íbamos a mi habitación, pero en el pasillo solo jugamos un poco, siempre sin intención de burlarnos de nuestro conserge.

Stefano se escudo de la mejor de las maneras, sin alzar la voz y siempre guardando el mayor respeto posible, sentado en una de las sillas del despacho

La directora los miró a ambos y deliberó. Obviamente Abe no iba a mentirla pero podía haber sido muy exagerado y lo mismo pasaba con Stefano y Max que estaba acojonado literalmente.

La directora se puso de pie y caminó a miraros.

-Bien... Creo que por exhibición debeis ser castigados. Os dejo al cargo de la decisión de Abe. Limpiareis la zona que él os diga. ¿De acuerdo?

Abe miró con una sonrisa a ambos alumnos.-Justicia…-Susurró mientras soltaba una risita insonora. Lentamente se acercó a Stefano.-Vas a ir a limpiar el baño de la planta baja…el de los críos, quiero ver esos retretes desatascados, los meados limpiados y las cagadas desaparecidas, ¿queda entendido DiPrieto?.-Comentó con una sonrisa de oreja a oreja. Sabía que limpiar eso era lo más asqueroso que había…prácticamente porque los niños eran unos cerdos y solían dejarlo todo echo un asco.

-Y tu…Maximilian, vas a acompañarme a la caseta, necesito lejía, guantes y…en general más productos de limpieza…los que me habéis tirado por el suelo, así que andando. -Declaró con un gruñido mientras se ponía de pie y se acercaba a la puerta.

-Oh, cierto…- Abe se giró un momento hacía la directora.-Estáis hermosa como de costumbre Lady Mistery…únicamente me rio por fuera, mi sonrisa queda a flor de piel, si pudieras verme por dentro…estoy llorando, ¿podrías llorar conmigo?.-Comentó antes de soltar una risita e irse tirando de Max por los pasillos.

No me resulta justo,  que a Max se le imponga un castigo menor,  pero como la directora mande

Stefano se levantl de la silla y cuando escucho al consege piropear a la directora rio por lo bajo,  susurrandole al pasar

Contigo no lloraria ni por pena. 

Dijo saliendo al pasillo no sin antes despedirse de la directora. 

-Por lo que tengo entendido por ambas versiones, tú empezaste la faena, Stefano -Contestó la directora antes de que salierais

Cuando Abe le dedicó el poema ella sonrió suavemente.

-Siempre tan galán...