Partida Rol por web

El gimnasio es del mismo tipo que el de todos los institutos, con el suelo de parqué, dos canastas plegables de lado a lado a lo largo y porterías. A lo ancho hay cuatro canastas más, posiblemente para entrenamientos más ligeros.

El lado por el que entras está rodeado de gradas aseguradas y por el techo de cristal se filtra el sol. La pared frente a ti esta llena de espejos que aun no sabes cómo pueden estar completos viendo la panda de animales que por ahí pululan.

Después de aquel musical y de ver la porquería que tenían por comida decidió seguir dando un paseo por el lugar. ¿Cómo puede ser que no sirvan comida decente? ¿Y cómo puede la gente comérselo? Por más que le daba vueltas no lo comprendía, aunque tarde o temprano también acabaría comiendo de aquella potingue como los demás. Sacudió la cabeza negando y resopló levemente. Alzó la vista y vio el gimnasio. No parecía que hubiese nadie dentro, así que aprovechó para entrar. 

Abrió la puerta y la cerró tras acceder al interior. No se podía creer que estuviera tan limpio y cuidado. Quizás fuera porque no lo usaban tanto. 

Comenzó a caminar por toda la pista ojeando los materiales que había por allí. A la vista de que no encontraba un saco de boxeo decidió coger un balón de baloncesto y echar unas canastas. No sin antes quitarse la sudadera, junto con la camiseta, y dejarla en uno de los bancos de las gradas. 

Si era verdad que no solía ir nadie no tenía que preocuparse por sus cicatrices.

Durante un largo rato pudiste disfrutar del gimnasio para ti solo. Echabas canastas, te desahogabas... ¿Qué mejor que algo de deporte para olvidar todo lo que te rodeaba?

Después de un rato de soledad comenzaste a oír unos voces y unos pasos y vislumbraste llegar a unos cuantos chicos que parecían ser deportistas.

Tenías que darte prisa en ponerte la camiseta si no querías que te vieran.

Estaba claro que aquella tranquilidad no iba a durar para siempre. Después de estar largo rato echando canastas y darle vueltas a todo lo que estaba pasando a su alrededor últimamente, unas voces se escuchaban cada vez más cerca.Por unos segundos Logan las ignoró sin acordarse que no tenía la camiseta puesta.No pasaba nada si las demás personas veían sus cicatrices, pero no tenía ganas de contar la misma historia una y otra vez. Historia inventada, claro está.

Dejó el balón votando solo en el suelo y salió casi corriendo a colocarse nuevamente la camiseta. Pensó que le caería una bronca por estar utilizando el gimnasio sin permiso alguno pero quién sabe, éste centro no era como los otros. Así que optó por quedarse echando más canastas hasta que lo echaran de allí.

El grupo de deportistas de BlackRose entra en el gimnasio seguidos de Sammy. Logan la recuerda por ser la chica que hizo un trato con Discord para que a él no le partieran por la mitad.

A simple vista eran chavales normales. Logan no podía saber qué clase de problema podrían tener pero era obvio que no eran del estilo de amigos que frecuentaban a Discord y en eso podía estar tranquilo.

Al ver a Logan, uno de ellos sonríe de lado.

-¡Ey nuevo! ¿Entrenando unas canastas?

Paró la pelota colocándosela bajo el brazo y se giró hacia los chicos que habían entrado. - Así es, aprovechando un poco ahora que estaba vacío. - Afirmó acercándose unos pasos a ellos. - ¿Y vosotros? - Parecían simpáticos y agradables, pero algo no terminaba de convencerles, por lo que no bajó la guardia. Quizás era este sitio, que no sabes qué te puede esperar.

Aquella chica le sonaba pero no terminaba de caer de qué hasta que recordó lo que pasó nada más llegar. Ella era la chica que después de aquella pelea se acercó a hablarle a Discord. Se quedó unos segundos mirándola sin apartar la vista. No sabía si podía confiar en ella. De hecho, ahora menos sabía si esto pudiera ser una encerrona por lo de esta mañana. 

Sammy entro alegremente tras Dylan y tomo asiento en los banquillos dispuesta a ver el partido. Le encataba aquello, era de los pocos "espectaculos" que habia en Blackrose... y bueno, todo ese tio sudoroso y musculado la ponia a 100, pero eso solo era un incentivo.

Parecia que el nuevo queria apuntarse. A ver que dotes podia mostrar... nadie como su Dylan, sin duda, pero quizas no era malo.

Cruzó algunas palabras con varios de ellos y aceptó echar un partido. El cuál aguantó entero y no fue del todo mal. Como todo deporte se llevó alguno golpes por parte de los que defendían. Aún así consiguió dar varias asistencias y encanastar otras tantas. Se podría decir que estaba a la altura. 

Terminó el partido y Logan se acercó al banquillo terminando de limpiarse el sudor con la parte de abajo de la camiseta. Dejando asomar por unos segundos lo que parecía ser una cicatriz en su costado. Por suerte se había traído la sudadera y no tendría que salir de la ducha con el pecho descubierto.

Volvió a mirar a la chica, la cual estaba allí, y se sentó para recuperar un poco el aire y atarse bien las zapatillas. 

Sammy bajo de las gradas a animar al equipo. Se la veia bastante animada tras el entrenamiento, charlaba con todos y parecia bastante simpatica.

Se acerco a Dylan y le susurro algo al oido luego se marcho a esperar junto a la puerta del gimnasio.

Un grito se escucha de pronto en el gimnasio y cuando Sammy se quiere dar cuenta Carlos la ha tirado al suelo, abrazándola nervioso; detrás de él aparecen Nephtys y Ray.

-¡Sammy! -Lloriquea el chico de pelo albino asustado, resultando en cierto modo incluso tierno-¡Había un pájaro Sammy!

Sammy vio al chaval como se le tiraba encima, por un momento temio un follon, pero luego al reconocer a Carlos sonrie.

- Tranquilo chaval -dice riendose- que aqui no hay pajaros, mas allas de los cuervos de Discord.

Le contesta a modo de chiste.

Neph siguió a Carlos a paso lento, con los ojos abiertos visiblemente alucinando por el comportamiento del chico. Sabía que había gente que le tenía miedo a las aves, pero nunca había presenciado una reacción como la suya.

-¿Siempre le has tenido miedo a los pájaros? - preguntó con curiosidad, sin darse cuenta hasta demasiado tarde que quizá debería haberse callado la pregunta.

Tras eso fue directa hacia la tal 'Sammy' con una amplia sonrisa.

-¿Qué tal? Yo soy Nephthys, puedes llamarme Neph.

Siguiendo a Carlos hasta el gimnasio se topa con aquella escena tan tierna de él buscando cobijo sobre la rubia. Sonríe, ya que parecía haber un ambiente agradable ahí, alza su mano y la agita levemente -soy Ray.- agrega, más que nada hablando con Logan, por que Sammy ya la conocía.

Mientras iba mirando el edificio y examinando a quienes más estuvieran. -¿y qué iban a hacer? ¿podemos jugar algo?-

Estaba sumergido en sus pensamientos mirando al suelo mientras estaba apoyado en la pared, hasta que ve como dos personas caen al suelo de repente. Alza la cabeza y se da cuenta de que Neph estaba allí junto a otro chico, el cual le sonaba. - Logan, encantado. - Dijo levantándose del banquillo y estirando un poco sus brazos. - Acabamos de terminar un partido de baloncesto, ahora estábamos descansando. - Hizo una pausa terminando de estirarse. - ¿A qué os apetece jugar?

Sammy le revuelve el pelo a Carlos un poco mas cariñosamente y trata de quitarselo de en cima sin mucho resultado, suelta un soplido levantandose el flequillo.

- En fin... yo me marchaba ya realmente chicos... aunque me parece que tengo un pequeño obstaculo para ello. Pero vamos que si el plan es interesante...

Mira de soslayo hacia los vestuarios.

-Pues no tenía nada en mente, solo preguntaba; pero si ya calentaron, seguro que sería algo injusto, no?- sonríe y le tiende la mano a Sammy para que se levante y/o quitarle a Carlos de encima. 

Se gira para mirar a Nephthys -¿qué opinas?- era su idea ir al campo deportivo, quizá ya tenía algo en mente.