Partida Rol por web

"Fue hace unos tres años cuando desapareció, salió a encontrarse con amigos y nunca regresó. Sabíamos que algo malo había sucedido cuando mis guardias personales encontraron la mitad de su colgante a juego en un callejón en los barrios marginales de la ciudad. Incluso hasta el día de hoy, mi corazón permanece sin cicatrizar. Si puedes hacer algo, siempre estaré en deuda contigo ".

El Maestro Famagen responde cualquier pregunta que pueda sobre la desaparición de su hija, pero él sabe muy poco y esta cansado y desesperado. Famagen está dispuesto a pagar el regreso de su hija: "1,000 gp para usted si la devuelven con seguridad"

Escuchó atentamente lo que el hombre les contaba, estaba apenado y seguía sufriendo por la muerte de su hija. Kami se había incorporado para poder ayudar, y por ello les pagaban. - Pertenecemos a la guardia, y es nuestras obligación ayudar. No me parece correcto aceptar su dinero - Sabía que lo que acababa de decir no les agradaría a la mayoría de sus compañeros, pero estaba en el deber moral de hacerlo. Si aceptara ayudar solo porque le pagan, no sería tan distinto como los guardias corruptos de otras ciudades, donde solo ayudan a la gente a cambio de que estos les paguen.

- Ha dicho que encontraron la mitad de su colgante en los barrios marginales. Si fuese capaz de ofrecernos un mapa de la ciudad y señalarnos donde, se lo agradeceriamos. - Esperó a que el hombre les buscase un mapa y que les marcase el callejón donde encontraron el medio colgante. - Si dispone de algún retrato de ella nos gustaría verla, para saber a quien estamos buscando. Como bien les ha dicho mi compañero somos recientes en la guardia por lo que al no ser de aquí todavía tenemos dificultades para saber las ubicaciones de los sitios y no conocemos aun a los habitantes de la ciudad. - Kami no quería hacerle saber al hombre que no solo estaban allí por su hija, por lo que intentó buscar la mejor manera para disimular la otra dirección que buscaban. - Al enterarnos de su perdida hemos estado preguntando, y nos han contado que se rumoreaba que la última vez que se le vió fué cerca de un restaurante con un farolillo rojo, pero por desgracia nadie ha sabido decirnos donde se encuentra dicho restaurante. Si usted sabe cual puede ser dicho restaurante también agradeceríamos que nos lo añadiese en el mapa. -

El amigo Kami ha dicho todo lo que tenía que decirse. Al fin y al cabo, un clérigo es un hombre con una gran carisma personal y no es plan de estropearlo todo con su voz de pito.

Así que Al-Harén simplemente está atento a como reaccione al padre, y desde donde está examina la sala con la mirada, en busca de algo que pueda decirle que clase de persona es el padre y que clase de familia es esta.

• Busca si hay símbolos sagrados, o alguna cosa que denote que perteneces a alguna religión
• Echa un vistazo rápido a las estanterías, para ver si hay libros o tratados mágicos.
• Contempla las paredes, por si hay armas que hubiera llevado un guerrero en su juventud
• Presta atención a si hay restos de viajes a tierras exóticas -el padre de un amigo mio era capitan de barco e iba a África: Su casa estaba llena de marfil, de reproducciones de barcos, y de detalles de una cabina de capitán-

Finalmente, Al-Harén le pregunta por dos detalles más

"¿Antes de nada, usted es comerciante, pero ¿Que mercancias suele tratar usted y de donde viaja? ¿Metal, alimentos... o lo que sea? Y lo más importante ¿Sospecha usted de alguien, señor comerciante, aunque no tenga pistas o pruebas?"

Para relajarle, detalla: "Esta parte de la investigación no tiene por que aparecer en nuestros registros. Lo que nos diga ahora puede quedar entre usted y nosotros. Vamos a investigar por ella"

Todos sus compañeros están pendientes del comerciante y no prestan atención al joven, puede que el tenga algo que aportar a todo esto.

- Perdone joven pero tiene usted algo que aportar, algo de lo que su padre no estuviera atento y usted si, cualquier detalle puede ser importante.

Buscad mis buenos nuevos amigos , yo estooy demasiado viejo y demasiado cansado para ello

El grupo se va al callejon conociendo la situacion exacta

Mientras el grupo llegaba al callejón, el mercenario, insatisfecho por la escasa información adquirida por el hombre en tres años, dedujo con facilidad que la muchacha no había desaparecido por temas económicos. Se habían dejado su medallón, posiblemente valioso, en el callejón y nunca se pidió rescate por ella. Era algo más siniestro.

Conforme entraron en la callejuela Ishram echó un vistazo alrededor. Suponía que no encontraría nada ya que en su día los guardias personales del mercader, posiblemente los guardias de la ciudad y abundantes viandantes abrían pasado por allí en tres años, peinando la zona. Y nadie vio nada en todo ese tiempo.

Tal vez haga falta mirar con otros ojos, pensó mientras susurró unas palabras arcanas. Sus ojos brillaron momentaneamente y a fata de una gran percepción se dedicó a buscar rastros mágicos.

Al Harén está confuso.

Está tan confuso que se pega un coscorrón a si mismo, pues anda bien despistado y ya no tiene ni idea de que está haciendo el grupo.

"A ver... chicos. Cuando fuimos al farolillo rojo ¿Nadie sabe nada de que?" dice extrañado "¿Nadie sabe nada de las desapariciones? Creia que los pobres e indigentes iban allí, y si alguien echa de menos a un indigente, debe de ser otro indigente"

Eso si, a Al-Harén le gustaría seguir al joven que se daba el piro. Es algo sospechoso.
Pero por supuesto, un hombre de dos metros y medio, que cuando da un paso tiembla el suelo, no es el más sigiloso y discreto para seguir unr rastro

"Pst..." susurra "¿Alguno puede seguir a ese tio, a ver que asuntos se trae?"

Llegamos al punto dado por el comerciante, durante el camino la parada en el farolillo rojo fue poco útil, nadie sabía nada ni interés en saberlo, por lo que llegamos al sitio con pocas referencias.

Evidentemente después de tres años poco se podía encontrar, quizás encuentre a alguien que sepa algo pero no tengo mucha fe en ello, que curioso tener fe, como todo dependa de la intervención divina vamos mal.

-Al-harem los mendigos bastante tienen con lo suyo como para preocuparse por eso, y no hablan con desconocidos.

A Kami le pareció extraña la conversación con el hombre, aun así acabaron llendo al lugar de la desaparición en busca de alguna pista que hubiese podido pasar por alto los que la habían buscado con anterioridad.

- Quizas deberiamos hablar con nuestros superiores y preguntarles si tienen constancia de este suceso. Puede ser que hubiesen recabado algo de información cuando ocurrió la desaparición y nos de alguna dirección por donde poder seguir si aquí no encontramos nada. -

Empezó a observar el callejon en busca de algún signo de forcejeo que hubiese dejado marca durante 3 años, aunque probablemente podrían ser rastros de otras peleas o asaltos.

Obviamente en el callejon nada mas llegar no encontrais nada de interes, pero el barrio destaca por ser un barrio de escoria criminal, y varios bares donde se reunen delincuentes y gente de baja realea, puede que esteis cerca pero es como encontrar una aguja en un pajar , investigais y preguntais en un par de bares pero no obteneis informacion*1

Aproximadamente un día después de que las PJ se encuentran con Farnagen, su hijo (Braf) desaparece. La noticia de la desaparición de Braf se extiende rápidamente después de que un vagabundo encuentra su espada y su capa en un callejón. Braf no era un mendigo y los rumores pronto se convierten en histeria, y no solo entre los pobres. Si heroes hacen otra visita a Farnagen, él les ruega que encuentren a su hijo también, duplicando su oferta. Solo sabe le dijo que buscaria el tambien por esa zona por la que buscais , tal vez hizo demasiadas preguntas yendo solo.

[color=#990066]"Tengo una idea, chicos. Y esta puede ser simple, sencilla y fácil de usar"[/color]

El rostro del semigigante se ha iluminado con una de esas ideas, de las que pueden ahorrar un buen trabajo para el que de hecho no estamos cualificados.

[color=#990066]"Somos la guardia ¿No? Tendremos acceso a algunos de los recursos del Gran Duque -y si no, tenemos algo de dinero nosotros mismos- Así que... ¿Que tal si le pedimos una prenda de ropa de Braf al comerciante Tarfagen, y usamos un sabueso de las perreras de la guardia"[/color]

[color=#990066]"Con eso podríamos seguir los rastros. Incluso si llevan a una tumba"[/color]

La búsqueda es infructuosa cuando llegamos al callejón, después de tanto tiempo era imposible sacar algo en claro, pero después de nuestra visita el hijo del comerciante ha desaparecido, está claro que nos han seguido y que saben a lo que vamos, no me trago eso de que lo secuestrarán sólo por estar por aqui, seguro que ese infeliz ha venido más veces aquí.

- Tu idea es buena Al harem, pero no nos vale si lo han montado en una barca, o lo han llevado en un carro o algo similar, permíteme probar algo primero.

Busco en las esquinas al tipico mendigo que este muy quieto, poco pendiente de pedir limosna y si muy atento a la gente, suelen ser los vigilantes de los matones locales, son los encargados de avisar si llegan autoridades así que tienen que saber la gente que pasa, sobre todo alguien que no pega aqui como nuestro joven. Me acerco a uno mientras hago girar unas monedas entre los dedos.

- Perdone señor, creo que no pierde detalle de todo lo que pasa por aquí, no habrá visto por casualidad a un joven un tanto fuera de lugar...

La noticia de la desaparición de su hijo le sorprendió, pero afianzó la idea de que la desaparición de la hija no había sido motivo del azar.
- Quizás deberíamos preguntar a cualquier mendigo sobre los principales criminales de la zona capaces de llevar a cabo secuestros, aunque esa información no nos saldrá gratis - entonces Lionel se dirigió a uno de ellos para empezar el interrogatorio.

Al tratarse de peinar las calles o patrullar varios barrios marginales, la actividad delictiva los encuentra con la suficiente rapidez. En la mitad de la noche, no lejos de la taberna Green Stag, escuchan un grito seguido de los familiares sonidos del combate. Al llegar a la escena, ven a un enano luchando contra tres atacantes humanoides. Los atacantes huyen a la primera vista de los PJ, desapareciendo en un callejón o en las sombras. El enano está intoxicado, casi inconsciente. Con bastante emborachamiento y con alguna ayuda, relata la siguiente historia.

Me esta yendo del Ciervo Verde. Había bebido mucho ... pensé que era mejor volver a casa. No había llegado muy lejos ... mucho antes de esas bestias [¡una larga pausa! ¡Me enfrente! Corté una de ellas ... con mi daga ... Tenían escamas ... y garras. Seguían diciendo, diciendo ... que era mi momento ".

Patear los barrio marginales con su miserias no es la actividad que me gusta hacer la verdad, que exista la miseria no implica que tenga que andar rodeado de ella. Sacar algo en claro de estás gentes es como hablar con las paredes, acaso no encontraremos al joven? El caso es reciente alguien tiene que saber algo.

Ya casi estábamos por cambiar de zona cuando vimos una reyerta, o casi ya que tres contra uno no es algo que se pueda considerar muy deportivo, seguramente un robo o similar.

Nuestra presencia basto para ahuyentar a los matones y rescatar al enano borracho, si este enano esta en ese estado es que debe de haber bebido el equivalente a un lago de cerveza, sus desvarios son algo incongruentes pero la parte de las escamas es interesantes.

- Escamas? Acaso hombres lagarto? Dragones? Aclarenoslo maese enano..

Ishram pensó sobre lo extraño de la desaparición del segundo hijo del comerciante. Demasiada coincidencia. Aun así, no teniendo nada con lo que especular y careciendo de dote de gentes, dejó que otros más carismáticos llevaran el peso de la investigación con respecto a los interrogatorios.

Sus pesquisas no llegaron a nada. Nadie sabía nada, nadie había visto nada. Cuando ya creía que se iban a estancar en un bucle de "nadismo", una noche oyeron una trifulca. Ante su llegada un enano borracho y herido contó que había sido atacado por personas... escamosas y con garras.

El mercenario miró al suelo y buscó la daga del enano, examinándola si de verdad había pinchado algo y de qué color se teñía la hoja, aparte de poder haber sajado algo más.

- Escamosas y con garras, ¿Qué tipo de criaturas podrían ser? - se preguntó mientras miraba a sus compañeros -. Me sé de unas cuantas que se ajustan a esa descripción y, aunque no todas, la mayoría tienen una cosa en común: la humedad - indicó mientras hacía memoria de lugares con agua cercanos a ese lugar, como canales y alcantarillas.

"No te preocupes, amigo mio. Estás en buenas manos" dice el semiginante "No es tu hora, y tampoco dejaremos que esos seres te hagan daño"

Kami inspecciona al enano en busca de posibles heridas o roturas de huesos pero sin poder hacer nada con la borrachera. No dispone de ninguna poción para rebajar el grado de embriaguez, ya que quizas podría contar mejor lo ocurrido.

- Lo siento, no estoy familiarizado con el rastreo pero si es cierto que el enano ha herido a uno de ellos lo mejor sería buscar el rastro de sangre y seguirlos por donde hayan huido. Quizas sean los mismos que han raptado al joven, lo que significaría que aún podemos ayudarlo. -

Siguió con su chequeo y haciendo todo lo posible que estaba en sus manos, incluso buscando si lo habían envenenado, como y con qué. Lo cacheó en busca de alguna pista o algún objeto fuera de lo normal que no No era un hombre que le gustase el liderazgo por poder, pero tenían que intentar perseguir a los atacantes como fuese antes que se pudiese perder el rastro.

- Al-harén, coje al enano y llevémoslo de vuelta al Ciervo Verde, seguro que tienen una cama donde lo podamos dejar reposando. Les diremos que envien a alguien a buscar otros guardias para que lo recojan y lo puedan tratar. - Al-harén era el más adecuado para esa faena, para él no le costaría en absoluto cargar con el enano. - Ishram - Dijo mirandole - Dado que eres bastante directo deberas hablar con el tabernero, dile que se le compensará pero dejale claro que no se exceda con el precio. Después empezaremos a buscar el rastro -