Partida Rol por web

Kami entró tras sus compañeros, sin ser ni siquiera consciente de ello. Se encontró desubicado, hacia nada estaban planeando una emboscada y de golpe estaban dentro de nuevo. Empezaron las miradas recelosas de los clientes, con dudosa reputación la gran mayoría.

- Supongo que esto es lo común en estos sitios cuando unos pertenecen a la ley y los otros se las saltan. - Mientras revisaba a los clientes de la taberna con la mirada. - Pobres descarriados de la senda de Pelor, espero que algúna vez encuentre lugar en la sociedad - Era un pensamiento que sin querer lo dijo en voz alta. Cuando se dió cuenta se llevó la mano a su maza, no con la intención de desafiarles pero si por precaución a la posible respuestas por su comentario involuntario.

Espero mientras si el tabernero respondía a las preguntas que se le hacían.

No sabes que lo que me alegra oir eso señor gigante, encontraremos un lugar comodo para semejante gran cliente, me hacen un gran favor al no buscar problemas , sino toda mi clientela saldria corriendo de aqui jajaja, a cambio tomen unas cuentas rondas que invita la casa

Respondiendo ahora al caballero de la armadura y la espada : La taberna es un lugar popular para muchas razas diferentes, aquí elfos, enanos, semiorcos, humanos e incluso el ocasional centauro de las llanuras circundantes son bienvenidos, Dice llenandos las copas.

Al-Harén mira de soslayo a Kami. Y luego mira la copa.

Sep. Sospecha que pueda haber algo en la bebida.

Si Ishram había mostrado cierto rostro de amabilidad y educación, este se borró en el acto. Con una mirada dura y un tono menos suave se volvió a dirigir al posadero, apartando la bebida que le ofrecía como si aquel alcohol barato fuera a comprar su amistad y cansado de ese estúpido juego.

- Yo no le he preguntado su tolerancia y amor a las razas de este mundo, señor - dijo voz de pocos amigos y deje de sarcasmo -. Le he preguntado si ha visto o no a gente ocultando sus rostros en capuchas ¿Tan difícil es comprender y responder esa sencilla pregunta? - le interpeló haciéndole ver o que intentaba esquivar la respuesta o le faltaba algún hervor. Cualquiera de los dos supuestos enervaba al mercenario.

Sin soltar la mano de la maza Kami se acerca al posadero con intención de apaciguar el ambiente.

- Vamos a ver amigo, a nosotros no nos interesa que se produzca una pelea en la taberna, ya que luego tendremos que dar explicaciones, sin contar que no me gustan las peleas a no ser que sea preciso, pero a tí tampoco te interesa ya que es muy probable que tu local no acabe en condiciones de abrir de nuevo hasta dentro de unos cuantos meses, sin contar con las pérdidas materiales que afectarán a tu bolsillo. - Reflexiona un momento sobre lo que ha dicho, dandose cuenta que podría sonar como una amenaza. - Disculpeme si ha sonado como una amenaza, tan solo intento evitar que por culpa de no darnos información y mi amigo se altere se produzca una contienda con tus clientes, y creanos que es lo último que queremos. -

Kami esperó que el posadero entrase en razón, ya que sino la cosa podría acabar muy mal.

No es que no quiera responder señor , es que practicamente esta llena la taberna de personas con esa descripcion, si tuvieran que darme una moneda de cobre por cada malhechor que bebe en este tuburio , tendria mas tesoro que el mas grande de los dragones jajaja

Al-Harem suspira.

Va a ser hora de ir reuniendo información... al viejo estilo: Hablando con los parroquianos, socializando, y haciendo que el licor vaya suavizando las gargantas que guardan secretos. Así que le pide al tabernero un cubilete y unos dados, y empieza a jugar con KAMI, mismamente. Sabe que no es un gran diplomático, pero quizá pueda ayudarle en la tarea

Lionel decide mezclarse con la calaña y jugar a las cartas para ver que puede sacar, no importa si tiene que jugar creativamente para ganar, es por un bien mayor.

Ishram se calmó levemente ante la aparente sincera respuesta del tabernero. Aun así su estado de humor no era bueno y no se detuvo a tomar ni brindar nada. Por el contrario caminó por el comedor de la taberna, ojeando a todos los presentes, fijándose en aquellos que, a pesar de estar en sitio recogido y abrigado, insistían en portar capuchones pesados para ocultar sus facciones.

Miró a Al-harén con asombro, y le movió el dedo en señal de que se agachase para decirle algo. Cuando bajó la cabeza se acercó a su oido y empezó a susurrarle. _{- ¿Enserio crees que es hora de ponernos a jugar a los dados como si no hubiese pasado nada?. Todos saben que somos de la guardia, así que no creo que podamos disimular y mezclarnos con la gente como si de clientes normales nos tratasemos, por ese motivo te pido que pienses en alguna manera de buscar información sin destrozar el local. -} Dicho esto le dió dos golpecitos con la mano en su cabeza en señal de animo.

Se giró hacia el tabernero, al parecer no habían realizado la pregunta adecuada. Aunque fué un fallo de ellos por no fijarse bien en la gente de la taberna antes de hacerla.

- No vamos a pagar por la información, pero nos la va a facilitar y colaborar sin ningún tipo de engaño o medias informaciones o será tu ruina, y espero que Pelor tenga piedad contigo, porque sinó yo mismo haré justicia. - Kami empezaba a impacientarse, un enano había salido herido por culpa de unos agresores y el tabernero no parecía poner de su parte - Lo primero que nos vas a decir es quien salió después que el enano dejase TÚ taberna. Y luego nos contaras lo que sabes sobre los secuestros que se llevan produciendo tiempo atras. Ya que todos los malechores como ústed dijo vienen a TÚ taberna. - Recalcó por segunda vez, dandole a entender que todo lo que allí ocurre y se habla él es consciente. - Y como puede saber, la bebida suelta las lenguas de los clientes, los cuales dicen cosas que no deberían decir, así que sin más dilación empiece a escupir todo lo que sabe. Soy todo oidos. -

La taberna es un lugar popular para muchas razas diferentes, aquí elfos, enanos, semiorcos, humanos e incluso ocasionalmente centauros de las llanuras circundantes son bienvenidos. Los servidores son todos elfos, y el edificio no coincide con su presencia habitual. Ishra sinembargo se da cuenta de un detalle despues de que el bartman responda otra vez , diciendo que no sabe nada al clerigo de pelor y volviendo a su trabajo . Ishram notas que uno de los elfos que sirve cerveza tiene un ligero tinte azulado en la piel. 

Por otro lado Lionel y Al haren estan sentados y hablando con los clientes, pero descubren poco, la gente disfruta mejor de la compañía si se las deja solas, y la mayoría de ellas están demasiado borrachas para mantener cualquier tipo de conversación.

Ishram enarcó una ceja de extrañeza al observar el extraño tono azulado de la piel de uno de los elfos camareros. Su sorpresa y sospecha creció tanto en cuanto que observó cómo absolutamente todos los camareros eran elfos. No así el tabernero, desmontando la tesis del negocio familiar.

- Joder, que raro - murmuró entre dientes mientras se acercó al elfo azulado, mirándolo con suspicacia. Se giró y captó la atención de Al, que se levantaba de hablar con unos parroquianos sin obtener nada nuevo. Con una mirada y un leve gesto de barbilla le indicó que se iba a aproximar a un individuo, un elfo camarero, y que estuviera atento.

- Gala-Tin - le saludo en élfico -. Du skel ana win ¿Il mag?* - le preguntó esperando una respuesta o una reacción, ya fuera buena o mala. Si es que el elfo era capaz, realmente, de entender su idioma.

Por su parte, el semigigante no se ve muy capaz ya.

Decide hacer lo más astuto, y eso es dejar que el sabio mercenario continue su interrogatorio, sin presionar más para no estorbarle.
"¿Como podremos salvar las zonas más oscuras de CuatroVientos y a su gente, si la ciudad en si no quiere ser salvada?" piensa el psiónico.

El tabernero no tenía pinta de soltar nada más, pero a Kami no le gustan las peleas sin sentido, tan solo lucha contra el mal y para salvar o ayudar a la gente. Provocar una pelea sería absurdo e inmoral.

Se dá cuenta que Ishram ha visto algo que le ha llamado, y observa que se dirije a un elfo camarero. Entonces se da cuenta del tono azulado al que se ha dirigido su compañero. Por desgracia no entiende el élfico, por lo que si se inicia una conversación en ese idioma no se va a enterar de nada.

Con la mirada busca a Lionel y cuando lo encuentra se dirije junto a él para informale sobre lo que está ocurriendo. - Deberíamos rodear la zona para evitar que nadie pueda salir por alguna puerta trasera. Yo me ocuparé de que Al-harén no se meta en problemas. -

Vuelve de nuevo con su compañero de pocas luces por si tiene que avisarle que entre en acción, o por si lo contrario quiere entrar en acción y debe evitarlo. - Amigo, será mejor que nos coloquemos cerca de la puerta, por si llega el momento de bloquearla y evitar que nadie salga sin nuestro permiso. -

El tabernero y camareros evaden cualquier pregunta que no este relacionada directamente con la comida y bebida , y vuelven rapido a sus quehaceres de su oficio, El aludido responde en elfoy comenta sobre los comentarios sobre su piel, responde osado como para sugerir que , "es la iluminación de aquí, porcierto, ¿quiere otra bebida? la cerveza destilada como si fuera entra zumo, cuando en realidad era mas potente que lo que parecia

Una mejor visual deja ver que hay dos zonas 1. Bar Esta es el área de servicio, normalmente llena de clientes con el fuego encendido. Ahora, después de horas, está vacío, excepto por la mesa y las sillas, y el fuego en el hogar es solo una brasa. 2. Cocina camarero elfo que está limpiando después de horas. Mantiene una escoba cerca de la esquina.

Ishram asintió, como dando por buena su respuesta. Se despidió con un cabeceo de cabeza y volvió con sus compañeros.

- Esperemos a que la gente se vaya marchando. Aquí va a haber jaleo - susurró a los suyos mientras se acercó a la barra, pidió una consumición al posadero e hizo como si la bebiese, haciendo tiempo -. Ese elfo de ahí oculta algo - dijo refiriéndose al camarero con el que había hablado, pero sin mirarle -. Si es que es un elfo. La primera vez que veo uno azul - admitió -. Y si ese es así, me imagino que el resto también pueden serlo. Y respecto al posadero... quien sabe - terminó de indicar.

Poco a poco los parroquianos se fueron marchando, quedando solo el personal de la taberna.

- Creo que es el momento de echar un vistazo a la cocina. Y ojo: consideremos a todos los elfos como potenciales enemigos - dijo el mercenario dejando su bebida intacta sobre la barra y dirigiéndose a la cocina.

Al-Harén asiente ante la sugerencia de Ishram.

"Razón  no te falta. Parece que hay un momento para ser educados, y uno para ser pragmáticos. Y este es uno de los segundos" No le gusta tener que guiarse por razas, al fin y al cabo han habido muchos héroes semiorcos, y una legión de clones del elfo oscuro Drizzt intentando ser bondadosos.

Pero cuando algo es blanco, y viene en botella...

- Creo que es el momento de echar un vistazo a la cocina. Y ojo: consideremos a todos los elfos como potenciales enemigos - dijo el mercenario dejando su bebida intacta sobre la barra y dirigiéndose a la cocina.

- Gracias por la parte que me toca, no creo que esta sea un tema racial, pero estaré atento por si empieza una fiesta de improviso.

Sin más Lionel busca un lugar poco iluminado y lateral para estar bien posicionado.

Mientras bebía una copa antes de incorporarme al servicio activo, vi como unos jóvenes reclutas intentaban convencer al tabernero de que compartiera información con ellos sin éxito, así que opté por intervenir.

Lentamente me puse de pie y tomé asiento en la barra, justo al lado del tabernero.

¿En serio amigo mío? De verdad que eres un idiota, acabas de admitir que tu taberna es un refugio de malhechores y criminales, eso les da a estos buenos señores el derecho de ponerte un hermoso par de brazaletes con una cadena a juego. - comento con total naturalidad, mientras observo mi copa. La cadencia de mi voz no denota rabia o emoción alguna, sólo la pasividad de quien lee un libro en voz alta.

Una vez te hayan colocado la nueva joyería, estos intrépidos soldados te llevaran a una cómoda celda en una humeda mazmorra lejos de la vista de todos los dioses.

Cuando llegues allí, entonces serás todo mío y antes de que haya transcurrido un día, desearás estar muerto, me lo suplicarás, pero ese sólo será el inicio, sacaré cada pequeño secreto de esa cabeza tuya hasta dejarla vacía.

Así que dime, prefieres responder las preguntas aquí, en público, dónde, técnicamente no puedo darte mi tratamiento especial o prefieres hacerlo en privado. Tu decides. - digo dejando mi trago sobre la barra.

Los jóvenes soldados no quieren saber nada sobre los viajeros y tunantes transitorios que pasan por aquí, ellos quieren hablar sobre tus clientes habituales o quizá los más recientes.

Me entiendes ahora, hay gente afuera molesta por lo que ha sucedido en la ciudad, gente que paga el salario de bastardos como yo para hacer el trabajo que nadie más quiere hacer, bastardos sádicos y duchos en el uso del acero y la magia, así que.... - doy otro sorbo a mi bebida.

... tienes hasta que termine mi trago para dar una respuesta convincente. 

Por cierto, soy Valinor Silar, nuevo miembro de la guardia, recién transferido a esta ciudad por un incidente con un dragón y un barco hundido.  - sentencio con una sonrisa malintencionada hacia el tabernero mientras me llevo el vaso a los labios.