Partida Rol por web

Abajo la Basílica

6. Juez y Parte.

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04/04/2011, 09:21
Emmanuel Friedeg

 
Emmanuel prefirió no comentar y hurgar en el tema de lo absurdo de la búsqueda aquella, para hacer algo de honor al cumplido de cortés que acababa de expresar Marat.

Sí, bueno... No creo que haya ningún problema en aclarar algunas cosas antes del juicio. Es el número dos tres seis dos tres.

Notas de juego

De todas formas, a ver cuando se conecte el máster qué dice :P Imagino que sí, pero vaya...

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04/04/2011, 11:37
Director

Tras despedirse cortésmente de monsieur Friedeg, Marat abandonó la Magistratura para dirigirse a La Jaula. Allí, pidió una audiencia con el prisionero 23623. Hasta que no argumentó que se le había asignado el caso como juez de oficio no se le permitió ver al drow. Por lo que le dijeron, estaba considerado como un preso peligroso. Le aconsejaron que extremara las precauciones, pues se trataba de un brujo de maléficos poderes.

Trajeron a Nimruil a la sala de interrogatorios escoltado por dos Hijos de la Luz. La habitación estaba desprovista de todo salvo una recia mesa y un par de sillas. La pareja de guerreros que lo habían escoltado cerraron la puerta tras de si, no sin antes asegurar a Marat que si necesitaba ayuda sólo tenía que pedirla.

Notas de juego

Adelante pues.

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04/04/2011, 11:45
Nimruil

 
Nimruil era un anciano elfo oscuro, bien puede tener los cien años y su actitud cuando entra es sumisa. Sus dedos están rotos e hinchados, morados y tienen pinta de doler muchísimo. Su paso es lento pero trata de seguir el de los guardias que le llevan. No levanta la cabeza, dejando que el cabello, sucio y desmadejado, caiga por donde quiera caer. Sus ropas son humildes y envejecidas, además de mostrar manchas de tierra y algunas salpicaduras de sangre. 

Cuando le sientan, suspira hondo, lentamente, con resignación y levanta la cabeza con expresión tranquila más que angustiada o asustada. Su rostro también evidencia muestras de violencia pero las lleva con dignidad. No llora, no al menos ahora, parece extrañamente traquilo.

Dos tres seis dos tres, para servirle. Se presentó, y formó una delgada sonrisa que marcó más aún sus arrugas de un rostro que enmarcaba dos afables ojos pardos. Le daría la mano Mostró los dedos rotos Pero si es usted tan amable, haga el favor de darse por saludado y ahórreme el dolor.

Bajó la mirada desviándola del caballero, aunque no bajó el rostro, y su semblante se entristeció como si ese fuera todo el humor que le quedara. 

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06/04/2011, 15:14
Jean Paul Marat

Sentado en una de las sillas, observé la entrada del drow y sus tranquilos y resignados movimientos. Su actitud, su apariencia, todo en él contrastaba vivamente con lo que era dado esperar, si se tenía en cuenta los testimonios acerca de él, pero no era la primera vez que me enfrentaba a personas que aparentaban lo que no era. Aún así, algo en él unido a su historia hacía que quisiera conocerle más a fondo. Todo el mundo tiene derecho a defenderse sea drow o no. Pensé y me estremecí ante tal pensamiento pues hasta hace un mes nunca jamás me hubiera si quiera atrevido a dudar de la veracidad de los cargos. Valentine...me abriste los ojos...pero cuán doloroso es darse cuenta de lo equivocado que ha estado uno en algunas cosas...Perdido en mi lamento interior, al principio no escuché las palabras del hombre, pero volví a prestarle atención cuando hizo referencia a sus manos, rotas y medio sangrantes. Observé esos patentes signos de tortura con repulsión. No me gustaba el trabajo de los inquisidores, no había honor en ello. Me aclaré la garganta.

- No se preocupe, señor Nimruil- premeditamente le llamé por su nombre de pila, ignorando su número de referencia- Entiendo los motivos y desde luego, no comparto los procedimientos que han tenido con usted- ¡por Celestar, era un venerable anciano!. Incómodo, mi poblado bigote se agitó. Intentando ordenar mis pensamientos, revisé el guardadocumentos donde había tomado algunas notas del caso. Le miré- Su caso es sin duda de lo más extraño, para lo que suele ser habitual encontrar...- comencé en tono reposado, sin dejar de mirarle- Según está escrito, dice ser un fiel servidor de Celestar, aunque no existen registros de que fuera expulsado de la orden cuando acabó la guerra...por no hablar de que usted mismo se entregó para ocupar el sitio de otro drow que habían confudido con usted...además de los cargos por los cuales se le pretende juzgar...- paseé la mirada por la hoja, más por costumbre que porque necesitase leerlo. Lo tenía gravado a fuego en la mente- Veamos...vayamos por partes...¿puede explicarme cuando y cómo entró al servicio de la Diosa Celestar?

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06/04/2011, 16:05
Nimruil

 
Nimruil suspiró, perdiendo la mirada en el frente.

Sí, no lo comparte... todos muy puros, pero al ocaso cuando se quitan los hábitos y se van al Nidal a por cosas mucho menos puras, se olvidan de todo eso...

Sopló, como si le fastidiara hablar.

Estamos en el setecientos treinta y tres. Tengo noventa y siete, entré con dieciocho... Pues en el seiscientos cincuenta y cuatro, a principios de verano. Entré al servicio porque en aquél entonces el clero de la Madre de Todos significaba Justicia, Bondad y Caridad, entre otras muchas cosas loables. Sus sacerdotes habían ayudado a mi familia a integrarse en Port Coeur, pues no teníamos mucho. 

Me ordenó el prelado Freur, Philip creo que era su nombre. Fui expulsado hace treinta y cinco, en... el seiscientos noventa y ocho. De todos los que me conocieron entonces, queda el prelado Clemence Devere, que actualmente está en una celda y ha sido torturado por... diferir de opinión. Por si le quiere preguntar. 

Le miró a los ojos. No me extraña que no hayan registros. Para comenzar, hace ochenta años no estaba todo tan reglado ni las personas tan controladas con documentos y números, además que no me extraña que hubiesen borrado cualquier prueba de que en el clero hubo algo más que humanos. 

Se encogió de hombros No sé como más puedo demostrárselo, Caballero. Conozco todas las oraciones, desde las de boda a las fúnebres, las oraciones antiguas que usted seguramente no conozca, antes de que añadieran a muchas de ellas versos de odio y discriminación, y de paso quitasen algunos de conciliación y sacrificio. Si le sirve, se las recitaré de memoria.

Se lo quedó mirando a los ojos, algo tenso 

A la porra... Estoy harto de esta tontería.

Y aquél fastidio que llevaba guardando salió por fin de sus labios.

Ahora en serio, Caballero. ¿Esto tiene algún objetivo o es tan solo una pantomima? Porque del último 'acusado' de herejía que sobrevivió para contarlo hace veinticinco años, desde entonces, que yo sepa, acusar un drow de herejía es lo mismo que matar un drow. No sea que equivocarse hiera el orgullo de algún Hijo de la Luz, que se sabe que es más valioso que una vida en el Nidal.

Si va a acabar así podemos ahorrarnos unas cuantas blasfemias contra la Equidad y la Justicia y pasar directamente a lo que quiere Aunsel.

Por primera vez se le veía algo de enfado. Pero no un enfado iracundo, si no uno suave y ofendido. Como si tuviera ya aceptado su fin y le molestase que le tomaran el pelo con un chiste de juicio.

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08/04/2011, 08:49
Jean Paul Marat

Con gesto impasible escuché todo el discurso del drow, sin que ni un solo músculo de mi rostro se moviera ante sus declaraciones. Distintos eran mis pensamientos que bullían, entre soliviantados por sus acusaciones, su enojo y la verdad que traslucían. En otro tiempo me habría levantado, iracuando ante la sugerencia de que se hubieran borrado registros, que los códigos se hubieran modificado pero, ahora, hasta yo mismo empezaba a comprender lo mucho que nos habíamos desviado del camino del verdadero creyente de Celestar. Y aquello me entristecía. Sin embargo, le sostuve la mirada y asentí, finalmente, cuando el acusado se cayó.

- Más lejos de mi intención de que esto se convierta en una pantomina...- comencé al fin con voz suave y conciliadora- Entiendo su enojo, y recojo sus acusaciones pues yo mismo soy un fiel servidor de Celestar, cuyos principios, Bondad, Justicia y Caridad han regido mi vida siempre- aunque no siempre los llevases a la práctica bien...- Se me ha designado para ser juez de su caso y no tengo la menor intención de enviar a la hoguera a alguien que no es culpable- aseveré con firmeza. Mis ojos brillaron con decisión- Por eso estoy aqui para averiguar la verdad...y para ver si esa verdad puede demostrarse- le dije inclinándome hacia delante para forzarle a mirarme.- Dígame, ¿por qué decidió curar a ese niño si sabía que ello atraería la atención sobre vos?

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08/04/2011, 09:16
Nimruil

 
Nimruil se irguió un poco, mirando a los ojos al caballero.

Porque ese era el deber de los Celestarum, antiguamente. Cuidar de los demás aún a costa de uno mismo, el Principio del Sacrificio. Dijo llanamente. 

Ese niño era inocente de su linaje y del lugar donde ha nacido, y de las leyes que pesan sobre los drow y los que nacimos elfos. No tenía culpa ninguna como para que le dejara a su suerte. Sonrió un poco Eso sí hubiera sido un crimen de herejía, dejar morir una vida que nace a cambio de una que de todas formas en breve tocaría a su fin, con o sin ayuda del Inquisidor.

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08/04/2011, 09:47
Jean Paul Marat

Observé con anteción al drow y asentí para mi ante sus palabras, convencido de que decía la verdad. He aqui un fiel creyente que sigue sus creencias hasta la muerte...hecho del que pocos se podían jactar hoy en día. Fruncí el ceño, aunque el hombre dijera la verdad, el intentar que le exculpasen era como mover una montaña con el hombro...era oponerse a todo lo que se había hecho hasta ahora, a decenas de años de creencias y malos convencimientos. Además de que, con Aunsel, presidiendo el juicio era prácticamente imposible. Me sentí subitamente frustrado.

- ¿Sabéis del nombre de algún Celestarum actual que puede confirmar vuestras aseveraciones sobre ritos, oraciones y prácticas de culto?- pregunté tras un largo rato sopesando las opciones que tenía- ¿que pueda corrobar al fin y al cabo que vuestra acción no fue más que un acto de caridad debida a vuestra fe en Celestar?

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08/04/2011, 10:04
Nimruil

 
Nimruil pareció interesado, intentando juzgar al hermético Caballero. De algún modo le daba la sensación que realmente quería ser justo, pero no tenía demasiada esperanza. Eran demasiados años de decepción.

Será que me hago viejo... o que estoy en la lista de espera de la Parca, y ya me imagino hasta esperanzas.

¿A dónde ha llegado Rhevraine, no...? Qué triste que sea un delito adorar a la Madre de Todos, y que un acto de caridad necesite justificación...

Se tomó algún tiempo para pensarlo.

En fin... que yo sepa vive Clemence Devere, estaba en mi misma celda. Al menos vivía la última vez que lo vi. Era un niño cuando empezó la guerra, y entró como Celestarum cuando aún la guerra estaba en ciernes, creo. Éramos buenos amigos. Seguramente otros ancianos podrían reconocer las oraciones, y si no... Suspiró. 

Bueno, qué rayos, ya no me viene de ahí. Tengo mis libros de oraciones y ritos en casa, debajo del altar. Con suerte puede quedar alguien que conserve otro ejemplar en alguna parte antes de que se les hicieran los cambios.

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09/04/2011, 09:03
Jean Paul Marat

Asentí, tomando nota mental de sus indicaciones. Sí...quizás si encuentro a alguien fiable en la fe, con una reputación intachable que asevere que lo que dice es cierto, consigamos algo...aunque yo mismo reconocía que era bastante difícil.

- Bien...veré lo que puedo hacer...maese Nimruil- deliberadamente le traté por su nombre, saltándome todo el protocolo respecto a los números. Un pequeño cambio, pero un gran gesto en sí mismo, al menos para mí- Supongo que se dará cuenta de que aún así, demostrar esto va a ser difícil...pero le doy mi palabra de que trataré de que se le haga un juicio justo- aseguré con rostro firme como una roca. Tenía mucho en qué pensar pero aún así, vacilé unos segundos sobre si preguntar o no. Pero finalmente renuncié a resistirme. Era en mí más imperiosa la necesidad de saber. Inclinándome hacia adelante susurré en un tono de voz que sólo el pudiera captar, mirándole a la cara- ¿No conoceríais por casualidad a una joven llamada Valentine verdad?

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09/04/2011, 09:41
Nimruil

 
Nimruil levantó las cejas cuando le llamó "Maese", y así se quedó el resto de la charla. ¿Éste de verdad está intentando salvarme...? Sacudió la cabeza, y ya que esperaba una respuesta, aprovechó para sumirse un momento en sus pensamientos. Lo más probable es que sea alguna artimaña... ahora ya he confesado herejía y listo.... N-No... no lo parece. ¿Qué clase de pregunta es esa? 

Miró a Marat a los ojos ¿De qué podría yo conocer a alguien que se codee con caballeretes de brillante armadura? Aquí hay algo que se me escapa... o Clemence tuviera razón... y los hay que empiezan a desmarcarse, como él mismo...

Nimruil tomó aire y cerró los ojos. Cuando los abrió, negó.

No, ninguna que encaje con lo de "joven", Caballero. Lo siento. 

Podría... No!! Solo falta que piense que le estoy diciendo cómo hacer su trabajo... Si ni siquiera me ha dicho su nombre, y lleva todo el rato con esa cara de llevar una piedra en el zapato... ¿Cómo narices le digo...? A lo mejor es de esos que quieren hacer las cosas por sí mismos... Pero es que sin ayuda aunque quiera tampoco creo que pueda y si le intento ayudar cómo va a tomárselo...? Ya he pinchado bastante cuando pensaba que venía a reírse Tras una breve pausa, siguió. 

S-si me permite un par de s-sugerencias... P-podría cambiarme de celda. Si estoy con Devere dirán que ap-prendí de ahí las oraciones. También puede decir no sé... que ese libro no lo cogió de mi casa si no que era de alguien o... podría decirle un montón de nombres a lo largo de toda mi carrera, si eran humanos seguirán en los registros... c-cómo podría un hereje saber eso? Me sé hechizos, r-ritos... Tragó saliva. Con un estudio exhaustivo tendría que verse que se han modificado los registros... Hasta la Basílica! P-puedo decir dónde estaban algunas salas antes de que las cambiaran... Y las estatuas cuando ninguna tenía armas antes de esa... ese cambio por lo de "Doncella Guerrera" ¡S-soldados! Soldados que lucharon en la Guerra, también recuerdo nombres de capitanes y sargentos, de eventos y cosas así, aunque las fechas exactas ya es más difícil...

Por primera vez en toda la entrevista, el anciano parecía nervioso. No era si no incertidumbre, pues antes de hablar con el Caballero tenía la certeza de que su destino era la muerte, tal aliñada vez con una temporada de tortura como castigo antes. Ahora dudaba.
Tal vez Celestar no había abandonado del todo Rhevraine a su suerte, tal vez... las ocho décadas de dedicación se premiaban con un rayo de esperanza en los momentos de oscurísimo porvenir como ése.

Si era así... y no podía ser de otro modo, no podía hacer más que dar gracias a la Madre hasta que se le secara la boca.

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10/04/2011, 20:57
Jean Paul Marat

Por primera vez el clérigo pareció reaccionar y mostrar algo de intención por cooperar, aparte de las respuestas escuetas que había recibido hasta entonces. Recostándome otra vez en la silla no mostré ningún cambio de expresión a pesar de que, momentáneamente sentí cierta decepción porque no conociese a Valentine. Quizás me podría haber ayudado a comprender...Sin embargo, otros asuntos me habían traído hasta allí, así que decidí centrarme en ellos.

- Cualquier cosa que me cuente puede ser sin ninguna duda útil...cómo esos nombres de otros celestarum que le puedan conocer o esos ritos que solo uno perteneciente a vuestra orden conoce...intentaré cotejarlos por su puesto- comente animándome yo también. Desplegando los utensilios de escritura que había traído conmigo abrí un pequeño libro encuadernado en cuero, por la marca de la cinta. Tras mi reunión con el magistrado había apuntado ahí mis impresiones y ahora alcé la mirada, la pluma presta para tomar notas- Adelante...no tenemos mucho tiempo.

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10/04/2011, 23:30
Nimruil

 
Nimruil asintió y mencionó un buen montón de nombres y los rangos con los que los había conocido, así como si habían muerto o no en la guerra, si es que lo sabía.
En cuanto a los ritos, los explicó con pelos y señales, Marat podría haber reproducido casi íntegramente un libro de los rituales más comunes en su versión original, que sonaban en muchos casos más amables, conciliadores e idílicos que los actuales, y en ninguno de ellos se menciona a Celestar como la Doncella Guerrera.

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12/04/2011, 09:57
Jean Paul Marat

Con pulcritud fui tomando nota de lo que me iba diciendo el drow, asegurándome de aclarar aquellos puntos sobre los que tenía alguna duda. Finalmente, éste se calló y yo cerré el libro de notas, deslizando de manera inconsciente los dedos sobre el gravado de la guarda. Mis ojos se encontraron con los suyos. Algo acababa de pasar y aunque ninguno de los dos lo manifestásemos en voz alta, lo reconocíamos por su importancia. Acabo de cruzar la línea...que Celestar me perdone mis pecados y osadía. Sin embargo, desde que había muerto Valentine no me había sentido tan tranquilo y en paz. Era lo que había que hacerse y esa certeza daba seguridad a mis actos y pensamientos.

Tras guardar los utensilios de escritura suspiré.

- Bien...vendré antes del juicio si me surje alguna otra duda...mientras si se acuerda de algo más, no dude en preguntar por mi a...a los hombres que le custodian- hice una mueca, evitando decir la palabra carcelero. Entonces, caí en la cuenta- Disculpe mis malos modales, maese Nimruil...mi nombre es Marat, Jean Paul Marat, Capitán de los Hijos de la Luz- incliné la cabeza cortésmente.- Dígales que quiere vere y ellos me harán llegar el mensaje. Les daré instrucciones al respecto.