Partida Rol por web

Sabes algo chico, no necesito un fanboy en mi escuadrón eso lo dejo para otra clase de personas, esto es una guerra y necesitamos soldados, así que más vale que te hagas pronto a esa idea, porque de lo contrario terminarás muerto y peor aún causarás la muerte de alguien.

Comandante escojo al alférez Hazung Alanya, si tienes problemas con Erikson me lo dices y ya veré de enderezarlo con la ayuda de la mayor Volger o el capitán Cifuentes. - digo mientras reparo en la mirada de Elizabeth, lo que hace despertar en mi una serie de sentimientos negativos como pocas veces he sentido.

Baker, si tienes problemas conmigo o Tanaka, te espero en el gimnasio para conversarlo. - añado en tono amenazante.

La verdad es que comprendía perfectamente como se sentía Michael, pero creía que estaba mostrando una actitud bastante intensa, lo que me preocupaba un poco, pues eso significaba que tarde o temprano iba a terminar por explotar y eso no iba a ser bueno para nadie, así que tomo de la mano a Alanya y le susurro algo al oído.

Creo que lo mejor es que salgamos ya de aquí antes de que el nuevo termine de cabrear a Strauss, ya tiene suficiente con la mirada de Baker, el comandante está presente y pese a ello acaba de amenazar a Baker. - susurro con evidente preocupación.

Strauss, se que los ánimos no son los mejores, pero espero un mejor comportamiento de mis líderes de escuadrón, así que o moderas tus reacciones o te aplicaré una medida disciplinaria y será Domovoy quien supervise tu castigo. ¿Estoy claro teniente? - pregunta el comandante recibiendo como única respuesta por parte de Strauss un "Sí señor"

Teniente Hertz, permiso concedido para el uso de la sala de simulación, los demás escuadrones, reúnanse en dónde estimen conveniente para coordinar acciones y horarios de entrenamiento. Rompan filas. - añade el comandante dando por concluida la reunión.

Las presentaciones estaban hechas, Tanya relajó los hombros y la postura al escuchar el "Rompan filas" de Chmielecki.

- Eso ha sido intenso - comentó a Eliza mientras buscaba con la mirada a Hiroko para realizar la reunión.

Se acercó a la teniente al mando de las Valkyrias.

- ¿Comenzamos a entrenar? - dijo - Quiero estar en guardia y en forma para la próxima.

Me mantuve serio y callado, no me sentía muy bien del todo capaz de presentarme como era debido, no por miedo, si no porque habían unas pocas personas que me ponían muy tenso por la clase de actitud que se traían, personas que no era difícil deducir quienes.

Dejé que Alanya hablase y le reverencié de vuelta sin más, ya habría tiempo para hablar después, tal vez. Luego fue Strauss quien me eligió. Por lo que suponía había quedado claro con quién debía ir.

Mientras veía que ya era momento de romper filas, relajé mi postura y me dirigí hacia Alanya quien estaba con un chico.

- Señorita Alanya, es un gusto - Reverencié. - Rovel Hazung, como ya sabrá usted - Después me erguí y dejé de posar mis manos tras mi espalda.

- Parece que tengo que ir con Strauss. No quise decir nada porque aquí los que eligen son ustedes, la admiro mucho y solo déjeme decirle que Robin no es pesado ni nada, solamente es frenético pero es un buen chico, lo sé porque desde que la ONU me reclutó pese a los escasos contactos con SHAD y Robin. Son buena gente, le deseo mucha suerte, si en algún momento se presenta la oportunidad de hablar, cuente conmigo - Dije con calma, mientras miraba alrededor.

- O bueno, a menos que se me sea llamado para ir a algún otro sitio. Ahora podemos presentarnos debidamente si lo desea.

Me acerco a Michael cuando rompemos filas y le pongo suavemente una mano en el pecho. Cálmate, cariño. Sé que te molesta, pero ahora tenemos que trabajar todos juntos para salvar a la humanidad.

Le doy un beso en la mejilla y me dirijo al chico de las orejas de elfo. Así que fue un juego. ¿Y no has pensado, ya que de momento no te vas a operar para quitartelas, recortarlas un poco y darles una forma más "humana" que no haga que llames tanto la tensión? Si quieres yo misma o Alanya, o incluso la doctora seguro que podemos hacer algo con ello.

Observo por el rabillo del ojo como una de mis chicas me está buscando. Luego hablamos, cuando tengamos un momento de descanso.

Me giro y me acerco a Tanya. Ey, ¿me buscabas? Creo que sería bueno digo en alto aprovechando que todos siguen en la sala, escribir en un papel los horarios para el uso de la sala de entrenamiento y así saber cuándo podemos usarla y cuándo estará ocupada. Bajando la vista hacia las chicas comento: mientras tanto igual podrías enseñarme a disparar en el campo de tiro.

Eliza se sentía un poco abrumada, primero sospechas y todas infundadas fueron el origen de la plática de hace rato.

 Tal vez todos fuimos muy estrictos con los nuevos, pero… ni siquiera han pasado 24 horas desde el funeral.

-Mucho gusto –Fue su saludo cuando la presentaron con un pequeño asentimiento de disculpa. Lamento si los ofendí, pero estamos bajo cierta presión.

Luego se giró hacia Tanya y al verla su semblante se compuso, como si un peso se le hubiera sido arrebatado a la pelirroja.

-Bastante intenso, y si, vamos. Yo tampoco quiero quedarme atrás.

Con un suspiro la chica volvió a sonreír y pensar que a pesar de todo seguían aquí y estaban más cerca de un posible final, el cual prometía levemente un tipo de desenlace feliz.

Alanya dedicó una amplia sonrisa a Robin.

- Bienvenido a la escuadra Masamune, es un placer tenerte con nosotros. He visto por tu ficha que eres un buen luchador cuerpo a cuerpo, entrenaremos juntos.

- Necesito una descripción más adecuada de tu mecha y tu posición típica de combate. En cuanto tenga esto prepararemos algunas simulaciones para que te vayas entrenando en el trabajo en equipo con Eliot y conmigo.

Antes de que Strauss se fuera, Alanya le susurró algo al oído.

- Quiero que me mandes un autógrafo dedicado a Robin, no te cuesta nada y quiero tener a mi gente contenta y centrada en la medida de lo posible. Además, me lo debes. - concluyó con una sonrisa.

Al escuchar las palabras de Alanya, me giro y la observo con seriedad.

Yo no soy ninguna celebridad para darle autógrafos a nadie, creo que me conoces lo suficiente como para ello, el día que Robin me derrote en un combate cuerpo a cuerpo me lo pensaré. - respondo bastante molesto.

Alanya era mi amiga, pero difícilmente conseguiría un autógrafo de mi, lo había dejado en claro desde el primer día, yo no estaba aquí para ser popular, sino para defender a la tierra.

Ya tenía mi permiso para ir a la sala de practicas, "Con su permiso, comandante Chmielecki, voy marchar con mi escuadron a la sala de practicas" le digo al comandante antes de dirigirme a SHAD, "Tienes unos minutos para dejar tus cosas en tu habitación, luego tendrás que presentarte en la sala de practicas, cuando terminemos el entrenamiento, tendrás el resto del día libre" le digo a recluta antes de marchar hacía la sala de practicas para ir preparando todo, quería dejar listo para que se grabasen todas los combates para estudiar los errores cometidos para intentar evitarlo cuando llegase una situación de emergencia.

Dado que parece que me he quedado sólo, contemplo la pared y digo unas inmortales palabras:

 Claramente pude relajarme un poco más al ver que el resto realmente no nos odiaba, si no que simplemente habían pasado un mal rato con todo lo sucedido... Aunque todos mis ánimos cayeron un poco por los suelos al escuchar que Michael no me quería en su equipo.

 -Aww... -solté desilusionado, dejando caer los brazos durante unos segundos antes de recomponerme y escuchar al resto. Lejos de lo estricto y duro que era Michael, los demás eran bastante abiertos y seguramente podríamos reforzar esa relación de compañeros más adelante.

 Terminando en el grupo de Alanya, escucharía su presentación y bienvenida antes de usar ambas manos para tomar una de las suyas y agitarla energéticamente, tal como hice con Michael al llegar.

 -¡Mucho gusto! ¡Estaré orgulloso de hacer equipo con ustedes!  -dije bastante animado, siendo que a pesar de que realmente me hubiera gustado trabajar con el león blanco, el equipo de Alanya y Elliot tampoco estaba mal. Seria entonces que vería como la chica iba a decirle algunas cosas a Strauss antes de que partiese, llegando a escuchar vagamente la respuesta del piloto de mechas antes de que finalmente se fuese, siendo que una amplia sonrisa se había dibujado en mi rostro: cualquiera podría asegurar que ya me estaba imaginando un momento oportuno en el cual poder desafiarle...

 Una vez fuese momento de partir, asentiría a Alanya y Elliot.

 -¡A sus ordenes, teniente! -tras lo cual, me giraría para ver a los que aún no se habían ido. -. ¡Hasta luego! -me despediría, dispuesto a seguir entonces a la líder de mi escuadrón a donde viese oportuno charlar con más calma.

- Yo también necesito practicar algo con armas, vamos las tres a afinar nuestra puntería - dijo Tanya al resto del equipo.

Lo cierto es que me siento algo apartado asi que con algo de duda me acerco a Tanua

"¿Os importa que me una a vosotras? Siento que ando oxidado" Y no es mentira en absoluto. En verdad creo que de haber sido mejor soldado de a pie, podría haber hecho algo más durante el asedio anterior. Podría haber

Observo a Kyoga y afirmo. Claro, por qué no. Siendo más seguro que lo pasamos mejor. Vamos.