Partida Rol por web

La escandalosa alarma nos acompañó durante todo el trayecto hasta el Centro de Seguridad, llegando en un suspiro-¿y ahora que coño pasa?-me pregunté mientras corría como un poseso esquivando a la gente que me iba encontrando por el camino.

-¿Capitán qué mierda está pasando?- pregunté respirando agitado, esperando con ansia la respuesta.

Por la pelotas de San Pedro y la muerte a todos esos putos fariseos.

Piensa mientras va corriendo cargando su rifle de repetición junto a sus otras armas de fuego, cargando en su cuerpo la armadura táctica de combate y haciendo sonar la pesadez de sus pasos hasta llegar al centro de seguridad. Apuntando la mira diagonal treinta centímetros de manera descendente.

La respiración es agitada, es intenso y observa al capitán y a Spartan.

-Capitán...¿que demonios esta pasando?-.

Dice en un tono alarmado y nervioso de manera evidente.

Ni siquiera hemos tenido tiempo de tomar una decisión, o acaso de mantener una conversación que nos permita sentar las bases de lo que vamos a hacer a continuación, cuando una alarma empieza a sonar por todo el complejo colonial. ¿Y ahora qué está pasando? Antes de que pueda reaccionar, mis dos compañeros abandonan mi apartamento a toda velocidad, como si estuvieran acostumbrados a actuar en situaciones de emergencia como aquella. Yo los sigo por inercia.

No tardamos mucho en llegar hasta el lugar del que procede la alarma: el centro de seguridad. Spartan y Banks se dirigen al capitán y le preguntan, con comprensible nerviosismo, qué es lo que está sucediendo. Yo me limito a permanecer un paso detrás de ellos, observándolo todo en silencio, tratando de que no se me escape ningún detalle.

Sabía que algo tenía que acabar pasando…

El capitan estaba preparando un rifle de pulsos.

No lo se la alarma estallo en el laboratorio medico. Coged un arma y seguidme. Ofrecio una Faisal.

Como en mitad de un sueño, y sin acabar de registrar completamente lo que está sucediendo, recojo el arma de las manos del capitán como un autómata. «Joder, ¡si nunca he disparado una! Vale, aquí se aprieta y por ahí sale la bala… Hay que sujetarla bien con las dos manos, porque el retroceso es más fuerte de lo que la mayoría cree…».

Mientras me repito una y otra vez las instrucciones acerca de cómo creo que se usa un arma, sigo al capitán y a los dos marines sin rechistar. Espero estar a salvo a su lado…

La respuesta fué inmediata y automática-Sí señor-dije tajante, cogí el rifle de pulsos, comprobé que estuviese cargado al 100% y seguí a paso ligero al Capitán en dirección a la enfermería, junto con Banks y Faisal-Tened mucho cuidado, no tenemos ni puta idea de lo que vamos a encontrarnos allí-dije mientras corría.

Termina por revisar el cargador y nuevamente todas las municiones guardadas en su compartimiento mientras va escuchando las indicaciones del Capitán. Pensando ya en el peor escenario, gesto que evidencia su nerviosismo al apretar los dientes y acentuar más la mandíbula a causa del estrés.

-Entonces Josué les dijo: No temáis ni os acobardéis. Sed fuertes y valientes, porque así hará el SEÑOR a todos vuestros enemigos con quienes lucháis-.

Dice en un tono de voz marcado al resto de los presentes y mira a Faisal.

-No te preocupes, Dios estará con nosotros en este momento, Faisal-.

Termina por comentar y con arma presta en mano mira al Capitán a la espera  de seguirlo para investigar lo que está ocurriendo.

Una vez entramos, no perdímos un segundo y fuímos hacía la consola que controlaba las cámaras de la Colonia-Bien, veamos-dije mientras buscaba con rapidez entre el listado-Perfecto, aquí están, espero que salga el cabrón que ha iniciado todo esto-comenté mientras le daba al playy empezábamos a revisar la grabación.

Los pasos se hicieron sonar por todo el pasillo, característicos de alguien que posee una gran estatura mientras va cargando su rifle de asalto. Tras llegar a la sala de Control y Seguridad, lo primero que hace es posicionarse en el lado izquierdo del marco de la puerta observando por unos momentos el pasillo en caso de presentarse alguna irregularidad, pareciendo en momentos que su mirada se transforma en equivalente al giro de un camaleón.

-No perdamos tiempo...yo estaré vigilando-.

Dice en un tono alerta mientras va observando los alrededores  sin bajar en momento alguno la guardia para que Faisal o Spartan hagan bien su trabajo.

Irrumpo en el centro de seguridad sin ninguna sutileza y con la pistola firmemente sujeta en mi mano. Durante el tiempo que tardamos en llegar hasta los monitores de seguridad, lo único que puedo pensar es: «Joder, esto es un caos». Vamos de un lado a otro sin conseguir ni una puta respuesta, y literalmente cualquier cosa podría pasar a partir de ahora. Estoy acojonado.

—A ver qué pasa aquí —digo mientras guardo la pistola en la parte de atrás de la cintura del pantalón, como he visto hacer tantas veces en las películas de guerras de bandas. Seguidamente, empiezo a teclear, buscando específicamente la grabación correspondiente al laboratorio médico. Temiéndome lo peor, dejo que esta se reproduzca…

En la grabaccion pudisteis veis como entraba alguien con la cara tapada y un uniforme negro. De constitucion muy delgada.

golpeaba a Salazar con un porra y empezaba a volcar y abrir los especimenes.

-¿Pero qué coño?-pregunté al aire tras ver la figura enmascarada atacando a la doctora y soltando a los bichos.

-¿Qué tienen pensado hacer aquí estos cabrones, infectarnos y luego qué, experimentar con nosotros?-mascullé con ira, al sentirme impotente por la situación y la falta total de información y ayuda, miro a mis compañeros-está claro que poco vamos a sacar de esta grabación, pero Faisal ¿es posible seguir su rastro por otras cámaras del complejo? no se, siguiendo su camino de salida y si no es a esa persona...¿puedes seguir a los putos cangrejos? ahora pueden estar en cualquier parte, incluso pegados ya a la cara de alguien-dejé perder las palabras con enorme preocupación.

-Estamos jodidos-pensé, comenzaba a estar asustado, algo que no sentía desde hacía tiempo y eso no era bueno, nada bueno.