Partida Rol por web

Arranco la manta de la cama y me preparo para apagar a Duncan en cuanto sea necesario, si es que alguien pega fuego a ese limo

-vamos Siriel, dale con la antorcha rápido-

Romualdo se acerca a Duncan para tirar de él en cuanto el moco comenzara a arder.

- Pero que demonios es esta cosa? Raangar no sabes nada de estas cosas?- pregunta inquieto al ver como las pertenencias del ladrón comienzan a deshacerse

Duncan empieza a revolverse intentando quitarse el limo que lo cubre pero parece que esta muy bien pegado aunque la parte alrededor de la lampara que porta el ladron no esta cubierta por el extraño liquido pegajoso verde. Ademas sorprendentemente la ropa que lleva asi como el saco que lleva a la espalda parece que se empiezan a disolver.

Rapidamente y alertado por los gritos de Raangar el intrepido Ataulfo lanza un vial de aceite que cubre por encima del ladrón.

algo has oido acerca de creaciones magicas gelatinosas de diversos tipos y nombres Cubo gelatinoso, pudín negro, gelatina ocre, limo verde, cieno gris....con propiedades extrañas como por ejemplo ser altamente acidos. En principio se supone que se crearon como mecanismos de limpieza en subterraneos de magos locos pero algunos de estos seres lograron escapar y aun más extrañamente fueron capaces de reproducirse. Suelen tener pocas debilidades a algunos les afecta el fuego, a otros el frio y a algunos solo la magia.

En este caso crees que este ser se llama Limo Verde y has leido que lo unico que le afecta es el fuego y el frio aunque no demasiado tampoco.

Hago un esfuerzo para recordar lo poco que he oido sobre esta clase de criaturas

-es un limo verde si no me equivoco, y solo le afecta el calor y el frio, el fuego es la única esperanza de Duncan. rápido-

Sin esperar a que el Halfing actúe, parece demasiado sorprendido, le quito la antorcha de las manos y la arrojo sobre Duncan y el Limo

Ppppepero así lo quemarás.- balbuceó el halfling cuando le quitaron la antorcha.

Siriel se quedó un poco parado, sin saber qué hacer ante aquella extraña criatura

El mago lanza la antorcha con excelente punteria y al impactar contra Duncan el aceite prende y comienza a arder quemando al ser y al ladron por igual aunque sin mucho efecto aparente.

Al verse rodeado de llamas el ladrón se quita la capa y la arroja lejos con la esperanza de quitarse el fuego y al bicho de encima.

Esto parece un baño, debe haber agua por algún lado.- pensó el pequeño

Agua, aquí tiene que haber agua para Duncan.- gritó

Aunque se giró y buscó otro tipo de objetivo, se dirigió a la puerta por donde habían accedido a la habitación y la cerró. A lo mejor había un bicho fuera durmiendo la siesta y el halfling no quería molestarlo con tanto ruido

En cuanto comienzan a arder tanto el ladron como el limo verde, Romualdo trata de agarrar a Duncan y tirar de él a ver si se suelta de esa cosa intentando ademas ahogar el fuego con su propia capa.

- Maldita sea, hay que soltar a Duncan de esa cosa como sea!!-

En cuanto Romualdo intenta soltar a Duncan de ese limo una parte de este se estira hacia él intentando pegarse a su cuerpo.

- Acercad fuego al limo, no vaya a ser que acabemos rostizando a nuestro 'amigo' - dice Ataulfo mientras busca una antorcha o lámpara por la sala.

Ataulfo acerca la antorcha al limo y este al sentir el calor se aleja un poco separandose unos centimetros de Duncan, el cual siente el calor en su piel descubierta.

-Vasily, mas vale que estés preparado para curar a Duncan, y tu aguanta un poco mas, ya casi se desprende-

No estoy seguro de que pueda escucharme ahora mismo, yo me preparo con la manta de la cama para intentar apagar el fuego en cuanto el limo se desprenda

-Ahhhhh¡¡, con un alarido Duncan se tira al suelo comenzando a rodar. Su piel se deshace y se quema incapaz de hacer nada.

A pesar de que el aceite se ha consomido el limo verdoso sigue pegado a la poca ropa que le queda a Duncan y es que el ser no es que la disuelva sino que por lo que parece esta se transforma en limo. Afortunadamente para el ladron el limo al sentor de nuevo el calor de la antorcha de Ataulfo se comienza a disolver con gran rapidez desapreciendo en pocos segundos y quedando asi vuestro compañero libre de ese increible peligro aunque bastante chamuscado.

Una vez liberado del limo, Romualdo hace rodar al ladrón para terminar así de sofocar las llamas e inmediatamente después se aparta para comprobar el estado de Duncan.

- Vasily, creo que deberías de echar un ojo a Duncan, no se si sus quemaduras son graves o no, pero seguro que podréis hacer algo.-Dicho esto, deja paso libre al clerigo se queda revisando la sala por si hubiera alguna que otr sopresa guardada.