Partida Rol por web

Baldred había cruzado mientras el resto del grupo discutía sobre si dividirse o no. A él, personalmente, no le gustaba la idea. Y si fuera el líder de la expedición, habría dicho que no inmediatamente. Sin embargo, aquella compañía carecía de lider, aunque el más cercano en aquel momento era Allister que la encabezaba. Así que decidió dejarles decidir lo que quisieran. Si tenían que esperar lo haría, pero en aquel lado del río. Nadie podía saber qué pasaría después o si las aguas seguirían mansas. 

Escuchó las indicaciones de Fosco, pero Baldred ya se había adelantado. Tenía la cuerda atada, y si alguien se caía, le lanzaría la cuerda. Atarla al otro lado, facilitaría que alguien cruzara, pero no podría lanzarla si alguien resbalaba a pesar de la ayuda. Prefería confiar en su destreza. 

Viendo que el grupo avanzaba cruzando el rio, entendió cual era la contestación.
Nadie parecía interesado, en investigar.
Ceorl parecia pensar como el, Pero sin subirse a la grupa de su caballo no seria una buena opción.

Rápidamente su curiosidad se desvaneció y en silencio cruza el rio...

Ya en el otro lado, que me costó un mundo llegar allí, me puse rápidamente a hacer una pequeña hoguera para calentarme. Estaba totalmente empapado y hacía frío. Había tragado mucha agua, ya que casi todo el trecho que atravesé era profundo para mi estatura. Los demás eran altos o iban a caballo, pero yo era bajito e iba a pie. Recogí algo de leña seca y empecé con la tarea. Una vez encendida, me puse casi encima para calentarme, no quería resfriarme. Después puse algunos palos por encima y colgué la ropa que llevaba en la mochila y cuando estuviera seca y caliente, me la cambiaría por la que llevaba puesta.

 Busqué agarrarme a la cuerda que me tendían y traté de cruzar con cuidado el río, con intención de seguir nuestro camino a Moria. Mientras andaba en el agua, buscando la mejor forma de cruzar, sin dar un paso en falso.

   RECAPITULEMOS:

  Resultado de la Tabla de Embarque: 12 o más. Un comienzo prometedor. La compañía emprende un camino que probablemente le mostrará maravillas casi olvidadas o la enfrentará a peligros que aterran nada más pensarlos. Pero los auspicios son buenos y, si la compañía es fiel a sí misma consigue prevalecer.

   Como resultado, añade 2 a las tiradas de la tabla de Acontecimientos de viaje. Las tiradas adicionales llevadas a cabo para determinar el resultado inicial de dichos encuentros se hacen con ventaja.

   Tabla de Acontecimientos del Viaje: 12 o más. ¿Muchos encuentros? ¡Corred, insensatos! La compañía ha encontrado a un viajero por el camino, pero es posible que no se trate de quien parece ser. No se trata de un vagabundo ordinario, sino de uno de los grandes y buenos (o corruptos) de la Tierra Media. El viajero puede ser Gandalf, o Radagast, o quizás Saruman. O puede ser uno de los hijos de Elrond, Elladan o Elrohir. Puede ser Beorn o Legolas. Si la tirada de embarque fue un 1, el encuentro es automáticamente un enemigo. Si es un 12, la compañía se ha encontrado uno de los grandes poderes del Bien. (Saruman sigue siendo un Adalid del Bien en el 2945 y su destino no es inamovible a lo que ocurre en los libros)

   El Ojo de Mordor: 1D20+6 contra una dificultad de 9, (con ventaja por la tabla de embarque y no es 2951 aún)

   La Caza= +9 (+2 competencia +1 Bain, +1 Aegon, +1 Allister, +1 Baldred, +1 Caleb, +1 Ceorl, +1 Dastar, +0 Fosco)
   Modificador por competencia: +2. Hay elfos de los bosques +1. Hay enanos +1. Hay otros hombres +1.

   El Velo= +6 (+2 La compañía viaja por tierras libres y fronterizas. +4 Se encuentra con Saruman y su magia les protegerá, lo sepan o no)

   Esta parte del viaje es tranquila, no llaman la atención de nada oscuro o vil.

   El posible encontronazo que debería haberse producido por El Ojo de Mordor (la posibilidad de llamar la atención de las fuerzas oscuras de la región) era si se sacaba menos de 9. Sin el encuentro de Saruman sería 8 y se hubiera producido, con el +4 adicional no llega a producirse, así que pasamos al segundo de los dos encuentros de la tabla de acontecimientos de viaje.

   Tabla de Acontecimientos del Viaje: 3. Un obstáculo. Árboles caídos, un río de rápido caudal, una avalancha o un puente caído son ejemplos de lo que bloquea el camino. Es parecido a cuando cruzaron el río, pero esta vez los fallos tienen consecuencias. La CD es 14 (12 + el índice de peligro del viaje que es 2) El guía debe de hacer una tirada de supervivencia y cada uno de los miembros de la expedición una tirada que normalmente será de atletismo o supervivencia (incluido el guía) Si hay animales uno de ellos debe de hacer una tirada de trato con animales. Si todas las tiradas se pasan la compañía está satisfecha del trabajo en equipo y hay un +1 a la tirada de llegada (final del viaje), si al menos la mitad de las tiradas se hacen con éxito el obstáculo se consigue superar sin problemas, si son menos de la mitad las tiradas con éxito el obstáculo se supera, pero quedan agotados. Se anotan un nivel de cansancio. Si todas las tiradas fallan, quedan agotados física y mentalmente al pasar el obstáculo, un nivel de fatiga y un -1 a la tirada de llegada al final del viaje.

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   Pese a las reticencias de Caleb, el resto decide no investigar a aquellas aves que vuelan alto sobre algún punto de interés. Por lo tanto Caleb simplemente hace una breve exploración del río en la dirección de los pájaros y no investiga la zona. No se aleja mucho. En poca más de media hora ha vuelto y cruza el río con vosotros.

   Montáis el campamento al otro lado de la corriente del Celebrant y su afluente, el río Nimrodel, también llamado el río de la Cascada de Plata. Un río de aguas tormentosas y oscuras que recibe su nombre de una doncella elfa llamada Nimrodel que vivía cerca del entonces arroyo, y que protagonizó una historia de amor con Amroth. Este río desemboca en el río Celebrant en un pequeño torbellino de aguas rápidas y cascadas entre las raíces de los árboles que suelen provocar un arco iris cuando el sol se las ilumina. No habéis cruzado por este punto, si no aguas arriba por una zona más tranquila del Nimrodel que encontró Allister. Además, el sol ya empezaba a ocultarse.

   Entre todos montáis el campamento y hacéis las guardias que os indican Baldred y Caleb. Pero nada turba vuestro descanso, ni siquiera el ocasional aullido de algún lobo lejano. Esta parte del mundo respira paz y tranquilidad, aunque sabéis que es una paz engañosa, pues en ocasiones partidas de orcos pasan por el camino del enano, como así se conoce a la calzada que unía Moria con el Reino Élfico. Este camino está interrumpido y destrozado a partes, pero otras partes se conservan en perfecto estado.

   Al amanecer hay que tomar una decisión. En un primer vistazo, podéis seguir tres caminos.

   Primero, seguir por los restos del camino del enano a la orilla del Celebrant hacia Moria.

  Segundo, dirigiros siguiendo el curso del Nimrodel en dirección a las Montañas Nubladas y girar al norte hacia Moria antes de que empiece el terreno a ser demasiado Escabroso. No hay camino, pero la orilla del río hará más llevadero el viaje.

   Tercero, ir campo a través, entre el Celebrant (al norte) y el Nimrodel (al sur) en dirección más o menos recta a Moria.

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   Te alejas apenas media milla, lo justo para echar un vistazo rápido en los alrededores de las orillas del río y volver. Algunos grupos de esos pájaros están más cerca y puedes ver alguno solitario en las cercanías. Aún hay luz y logras identificar a uno de ellos. No estás seguro, pero si casi convencido que los que están en la lejanía son la misma especie de aves.

   Se les conoce como halcones sombríos, pueden llegar a medir casi 8 pies (2,4 metros) de altura sobre sus delgadas patas. Tienen el plumaje de color pardo y gris  y casi siempre sufren de sarna y otras enfermedades. No pueden volar grandes distancias, sino que acechan en las orillas del Gran Río (el Anduin) como si fueran cigüeñas monstruosas. Los reconoces pues aunque no habitan en el interior del Bosque Negro, si habitan en las Tierras Ásperas al oeste de tu pueblo. Normalmente se alimentan de pequeñas aves, gusanos, insectos, pescado y no hacen ascos a la carroña. Rara vez atacan a algo del tamaño de un hombre salvo que estén hambrientos o sean muy numerosos.

   Examináis las rutas disponibles y tras llegar a una elección emprendéis el camino. Debéis decidir por qué ruta seguir. Aunque fresco por el ambiente otoñal, un cálido sol dorado se eleva en el cielo, pero pronto ya no tendrá la fuerza para caldearos. En pocas horas los árboles se harán más dispersos y avanzaréis por llanuras escabrosas que van ascendiendo y volviéndose más abruptas a medidas que avanzáis hacia las montañas Nubladas, la Región que se conoce como Valle del Arroyo Sombrío.

Baldred cabalgaba ahora en silencio. Allister era un gran guía y se movían a toda velocidad. A su lado, el mediano iba contándole historias de la comarca: una tierra que sonaba idílica. Sin preocupaciones, lejos de los conflictos. El soldado pensó en la importancia de su labor. Era grato saber que su lucha en una parte del mundo, propiciaba paz en otras. 

Iban tranquilos, pero algo molestaba a Baldred. Notó que los caballos estaban raros. Con un salto se bajó del suyo y se le acercó, mirándole a los ojos. Mientras le palpaba el hocico le preguntó muy bajito. ¿Qué te pasa?

Amaneció tras un descanso reparador. El campamento que se hizo y la tranquilidad del lugar ayudaron a pernoctar con cierta tranquilidad. Las guardias fueron calmadas y al final el alba rompió con los primeros rayos de un sol de un tono precioso, dorado, pero de menor capacidad calorífica. Las estribaciones cercanas de las Montañas Nubladas, los Rios y su humedad, transmitían un frescor que hacía menos agradable la temperatura de lo que aparentemente debería de ser...

Allister estudió las posibilidades, y valoró las distintas opciones teniendo en cuenta el aporte que garantizaban los caballos del grupo y el entorno...

En su interior algo le decía que aun no siendo lo más rápido, el camino del Enano, sería el que les permitiría aligerar más, aunque quizás eso podría llevarles a un encuentro con alguna patrulla de orcos de las montañas... No obstante, el camino posiblemente más rápido, siguiendo una línea recta entre los dos ríos, enfilando de cara la dirección de Moria, podría acabar siendo una encerrona si los acorralaban entre las aguas rápidas de los dos arroyos.... 

La opción de seguir el curso del Nimrodel y doblar hacia Moria justo antes de que las colinas empezaran a ser mucho más abruptas, les protegería un poco, pero el trozo final, dejaría a los caballos en clara desventaja, pues la zona más llana era la propia orilla del arroyo, pero en el momento de abandonarla, el paso descendería en intensidad...

Esta zona ya no le era conocida, y solo podía usar su orientación natural y los conocimientos aprendidos en los Pasos de las Montañas Grises, por su similitud...

Consultó un par de detalles con el Enano que les conducía, con respecto al estado de la calzada y si conocía algún recoveco donde pudieran ser interceptados por esa ruta...

—Acordemos entonces qué ruta seguir —dice Dastar luego de la acampada, habían logrado adelantar bastante sin ningún tipo de contratiempo significativo—. Por mi parte me parece seguir el camino que nos permita aprovechar a los caballos al máximo, y ya cuando no sea posible otra alternativa tomar las rutas más escarpadas.

Había dormido como un lirón, a pierna suelta. Estando rodeado de grandes guerreros, aún estando en un sitio agreste, no sentía miedo. Me desperté con mucha hambre, por lo que mientras los demás decidían qué camino tomar, yo me haría unos cuantos desayunos para quitarme la gusa. A la vez que se iba calentado el beicon y las salchichas, empecé a empacar mis cosas, por si salíamos de inmediato.

-"A mi el camino del enano es el que más me atrae. Estará deteriorado en muchos puntos, sí, pero es una calzada a fin de cuentas. No es ir campo a través, por lo que iríamos más rápido... o eso creo." Dije despreocupadamente.

 Tras ojear las diferentes rutas del mapa, di mi opinión al respecto a mis compañeros:

 - Creo que la ruta más rápida y fácil, tanto para los caballos como para nosotros es ir por la ruta del Valle Sombrío. El camino es más transitable y llegaremos a nuestro destino en mucho menos tiempo.

Opino como Aegon- responde el guerrero- ese es el camino más rápido y los caballos irán más comodos por alli. 

Aunque no todos vamos a caballo, y puede que seamos un blanco mas fácil.
Un terreno llano nos asegura cubrir mas territorio en menos tiempo.

   Tras decidir la zona que esperáis más fácil, os ponéis en marcha. Los dos siguientes días (el cuarto y el quinto del viaje) transcurren con normalidad, pero al atardecer del quinto día os encontráis con un obstáculo en el camino.

   La calzada en ocasiones desaparece, en un tramo cubierto de arbustos bajos que se extiende a lo largo de la orilla del río durante bastante distancia, encontráis que el puente que en ese momento cruza un profundo valle cubierto de ortigas y maleza espinosa se ha derrumbado. Debéis bajar y limpiar un camino donde llevar a los animales (y a vosotros mismos) hasta superar este obstáculo.

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   Allister observa la zona circundante en busca de otro paso, pero no encuentra ninguno, así que os disponéis a descender ya que no podéis volar por encima del puente roto. Baldred va guiando a los caballos y procura que no se pongan nerviosos.

   Entre todo os ponéis a la pesada tarea de limpiar de espinas y ortigas y abrir un camino para que pasen los animales y vosotros mismos. Es un trabajo agotador, pero con paciencia y tesón lo superáis y ascendéis abandonando el valle y reencontrando más adelante la calzada rota. Pero, ¿cómo de agotadora ha sido esta prueba?

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