Partida Rol por web

Los pilotos de Sonnenzorn adivinando el final del combate toman la iniciativa ante el ataque Cylon son sufrir bajas, tan solo algunos rasguños e impactos de metralla sin importancia adornan sus vipers.

Los vipers de la Takeshi en cambio pierden en su defensa y con ello la vida de varios pilotos pasan a la eternidad en un combate sin igual donde los pilotos de viper de la Defender Kokuro afortunadamente evaden la muerte segura junto a los Raptors. Segundos después una nueva cortina de fuego de la Takeshi barre con los Raiders que atacaban a sus pilotos lo que genera el momento idóneo para la venganza de los vipers y Raptors del capitán Yamato. Ante la súbita contraofensiva colonial también se suman los vipers de la comandante Taryn que no logran derribar al enemigo pero los hacen retroceder bastante.

Vamos acabar con ellos de una vez!, dice Kaori desde su silla mientras mira por el gran panel como se desarrolla la batalla y ve como a pesar de que parece que esta ganado, siguen cayendo pilotos de las doce colonias. Esto debe acabar, Misaki esta en grave peligro, y una nave como la Hatsu no tiene nada que hacer contra esa monstruosidad.

Las explosiones que se desencadenaron le entusiasmaron como si hubieran sido por sus propios misiles, golpeando al aire con su puño cerrado. ¡Los tenemos! Confirmó cuando la basestar perdía su movilidad, dejando que los raiders realizaran un ataque a la desesperada. Replegad Vipers, que vuelvan al nido. Su mirada se giró al instante entre los oficiales de los diferentes departamentos. Baterías al máximo dando cobertura, no dejemos raiders sueltos. Cruzó el centro de mando con velocidad hasta relajar la tensión de su cuerpo al desplomarse sobre su asiento. Su mano masajeó su cuello cuestionándose si podían dar el siguiente paso o sería demasiado pronto para celebrarlo. 

Las baterías de las cuatro Orion abren fuego sobre los Raiders restantes permitiendo el aterrizaje de sus “aves” sin mayores dificultades. El enemigo disminuye en cantidad e intensidad respecto a sus ataques, a este paso desaparecerán por completo si no desisten pero desisten cualquier idea de retirada.

La completa y total destrucción de la segunda Basestar no arrancó sonrisa alguna en el anciano comandante. No hubo alegría, ni placer, ni gusto. Solo que su deseo de venganza se había visto saciado durante algunos segundos. Quizás un par de minutos. No descansaría hasta exterminar a cuanto Cylon encontrara en su camino. Y no pararía de perseguirlos hasta el final de sus días.

Por suerte, allí parecían estar rodeados de ellos.

- Buen trabajo, Comandante Venator. - Lo felicitó, caminando de vuelta hasta su sillón, y sentandose allí, desde donde podía gobernar su nave y por extensión, la batalla. - A todos los Viper, formación cerrada. Delta Asimetrica. Priorizad las maniobras defensivas mientras conducis al enemigo hasta la posición 23-28-11 donde recibireis cobertura desde la Nazara. - Informó a sus pilotos, para después mirar a control de fuego de la NAzara. - Disparad contra la posición designada en cuanto esten a tiro. No dispareis cerca de nustros pilotos, no quiero fuego amigo. - Les advirtió.

La Nazara se colocó en posición, a la espera de sus pilotos para abrir fuego con todas las baterias contra los raiders, esto no solo los diezmaría, además les obligaría a moverse según los deseos de las fuerzas coloniales para que los Vipers pudieran acabar el trabajo.

- Comandantes, esto no ha terminado. - Hacia clara alusión no a la batalla entre manos, si no a la Warstar del lugar. Warstar que levantaba su interes no solo por lo que era. También por lo que podía contener. - Recuento de daños, bajas, munición. Les paso toda la información que tenemos de la Warstar hasta el momento. - Envié la información que teníamos sobre la Warstar.

Sonrió al ver estallar finalmente la segunda Basestar, y como el resto de la flota iba dando buena cuenta de los Raiders que quedaban. Observó el Dradis con atención, viendo como los Raiders Cylon mantenían la línea. –Cabrones testarudos...- pensó, mirando su oficial de comunicaciones. –Digale al CAG que el y sus pilotos den caza a los cylons que queden, pero que no se distancien mucho de la Hyperion o el resto de la flota, los que lo necesiten, que vuelvan a los hangares a recargar munición y combustible.- terminó, viendo la imagen del Dradis, sin apartar los ojos de la posición de la Warstar, antes de escuchar la voz de Sonnezorn por los altavoces. Empezaron a recibir la información existente. –Quiero recuento de daños, que los vipers vuelvan en cuanto hayan terminado el trabajo…ya habéis oído, esto no ha terminado, hay que seguir avanzando…- ordenó, viendo como el resto de la flota se enfrentaba a la Warstar. Se mantuvo serio, dejándose embargar por los cánticos que aun perduraban entre su tripulación.

La Cygnus Nazara y la Battlestar Phoenix disparan todo lo que tienen junto a sus pilotos contra las diezmadas hordas de Raiders pero sin lograr mayores bajas que en momentos anteriores.

Súbitamente cuando el enemigo tenía una leve ventaja en su línea de fuego cambia de rumbo hacia el espacio profundo abandonando el campo de batalla. En todos los Canales se escuchan los vítores y celebraciones por la victoria contra un enemigo que hasta ahora parecía imbatible.

En cambio a cuarenta minutos luz de allí la flota de Lovett se enfrenta al leviatán campeón de las maquinas. ¿Podrán elevarse como antiguos héroes del Olimpo o pasaran al recuerdo de sus camaradas? 

Tanto Kaori como Yamato, ordenan a sus Vipers y Raptors que regresen a sus respectivas naves mientras dan la enhorabuena a toda la tripulación por el desempeño acaecido.

Bajo el fuego mortal las tres naves llegan a las coordenadas planeadas y abren sus lanzaderas de misiles nucleares. El enemigo les envuelve y el infierno comienza, los misiles impactan, los cascos ceden y la integridad estructural también,  placas y vigas se derrumban, el humo y las llamas se reproducen. De continuar el daño es irreversible pero los misiles coloniales son disparados en un gran arco como trayectoria hacia la warstar. Raiders, metralla y misiles intentan detener las ojivas nucleares pero nada parece funcionar. El impacto es inminente.

Lo siguiente es la información obtenida por el DRADIS de largo alcance del grupo Sonnenzorn:

Al segundo 0.0.001 del cierre del plan de batalla de la Comodoro Lovett se detecto una singularidad en cadena acompañada por una detonación nuclear que segó los sistemas de largo alcance de todas las naves. Debido a la explosión en el área de la Arvak Asterion un pequeño planetoide cercano fue vaporizado y el DRADIS de largo alcance dañado, se deberá reiniciar y realizar una pequeña reparación en cada una de las naves. No hay señales de las naves implicadas en la contienda en ese sector, ni enemigos ni aliados, tampoco rastros ni escombros de ningún tipo. No se recomienda navegar por la zona de la detonación porque se ha detectado un pequeño pozo gravitacional posiblemente ocasionado por la conjunción de sucesos. Fin del informe.

Todos lo celebraban. Todos sonreían, gritaban, se felicitaban. No así Acturus, que se mantenía de pie, observando las diferentes pantallas de datos, más atento, más consciente de cuanto le rodeaba. No sería él quien celebraría lo sucedido, porque para él la batalla solo había comenzado. Y soldado que se relajaba, era soldado recordado. La tormenta no había acabado.

- Saren. Informe de Situación. - Acturus tomó asiento en su sillón, dejando caer las manos sobre los reposabrazos, descansando los huesos en aquel sillón, durante unos segundos, dándose el descanso que necesitaba. Un breve descanso que terminó cuando Saren abrió la boca, dando el informe solicitado.

- No hay bajas entre nuestros pilotos. Dos Viper necesitarán reparaciones menores. Ningún Raptor dañado. Daños menores en la parte lateral de babor del casco a causa de la explosión nuclear de la Widowmaker en la atmosfera de Hydra E. Utilizadas tres cabezas nucleares, almacenaje de misiles al 97%. Almacenaje de proyectiles Flak 98%. Almacenaje de proyectiles antinave 98%. Sin heridos. - Según iba hablando, la información iba saliendo en la pantalla personal de Sonnenzorn, quien los iba evaluando en meticuloso silencio. Sus dedos se movieron del reposabrazos hasta su barbilla, evaluando la información en silencio.

- Quiero el informe de situación de todas las naves de la flota. - Acabó por decir, mirando a Saren. - Oficial de Telecomunicaciones Dala. Quiero trasmitir a toda la flota. - Miró ahora al técnico del DRADIS. - Oficial, barrido de profundidad. Quiero saber que está pasando con el grupo Mintaka y la situación a tiempo real de las Estrellas de combate Andrómeda y Kelvin, además de la Defender Hatsu. -

En la pantalla principal apareció la información del DRADIS sobre el combate que estaba fraguándose lejos de allí. Pudo diferenciar claramente la Warstar y las naves coloniales. De forma instintiva, apretó sus dedos sobre el reposabrazos, clavando aquellos dedos enfundados en guantes en el cuero de los reposabrazos.

- ¿Comandante? Canal Abierto. - Informó la oficial de Telecomunicaciones. Acturus guardó silencio durante unos segundos. Tomando aire con aquella templanza y tranquilidad que le caracterizaba.

- Comandantes. Al habla Sonnenzorn. Esta ha sido solo una pequeña victoria de una creciente escalada de violencia que no tardará en llegar. No hay tiempo para la celebración, ni para el regocijo, ni para la sensación de triunfo. El grupo Mintaka está en rumbo hacia nuestra posición siendo perseguidos por escuadrones de raiders enemigos. Debemos interceptarlos. Retiren sus viper y Raptor, tienen 20 minutos para rotar sus pilotos y preparar sus escuadrones. - Hizo una pausa, tecleando algo con la mano libre. En las pantallas privadas de los comandantes apareció la lista de las naves coloniales que componían el grupo Mintaka, así como su estado teórico. Además, de un plano relativo en el espacio sobre su situación, la situación del grupo Mintaka y la situación de la Warstar.

- Rumbo 16-3-87. - Indicó a su timonel, así como al resto de naves del grupo Palladium. - Grupo Palladium. Formará bajó el Grupo E, manteniéndose en la retaguardia como apoyo hasta nuevo aviso. - En ese momento, una cuenta atrás que había en el CIC de la Nazara marcó algo tan inevitable como poco deseado.

- Señor, ha llegado la hora A. - Informó Saren a Acturus, quien a pesar de estar el micro abierto y el video también, cortó su discurso para desviar la atención a aquel marcador. - Pásalo a la pantalla principal. - Pidió a su primer oficial. No tardó tiempo en hacer lo ordenado, y en la pantalla principal apareció la situación de la Andrómeda, Kelvin y Hatsu junto la Warstar. Guardó silencio, inclinándose hacia adelante, entrecerrando los ojos.

Estaba tenso. Se le notaba nervioso, era claramente visible por la pantalla de video. Él, Acturus, alguien que jamás se mostraba nervioso o que perdía la paciencia o la compostura sucediera lo que sucediera, se mostraba impaciente e inquieto. Recuerde, Lovett. La diferencia entre los Mártires y los Héroes. Pensó, cortando la respiración.

- Detonación múltiple. - Informó el técnico de DRADIS. - Se ha detectado una singularidad en cadena previa detonación. - Sonnenzorn guardó silencio. Mucho más de lo que habría sido normal en un hombre de su capacidad y rango. Posiblemente, estaba calculando todas las posibilidades, todas las variables. - Señor, el DRADIS de profundidad ha sido dañado por la radiación. El último informe no mostraba naves enemigas o aliadas, así como un pozo gravitacional entorno a la posición designada como Punto A. - Pero Acturus siguió sin hablar. Su ceño se frunció, y agarró aquel teléfono llevándoselo al oído.

- Comandante Lovett. Aquí Sonnenzorn. Responda. - Guardó silencio, agarrando con fuerza aquel teléfono. Tanto, que parecía temblarle el pulso. - Comandante Lovett. Responda. - No hubo respuesta. - Lovett. Soy Acturus. Si recibe esta trasmisión, responda inmediatamente. - Pero no escuchó nada más que la estática. El anciano golpeó con el puño de la mano que no sujetaba el teléfono el antebrazo de su sillón. - ¡NELLIE CONTESTAME! - Se hizo el silencio en el CIC de la Nazara, guardando silencio, mirando a Acturus.

Aun pasaron varios segundos, hasta que el anciano comprendió que no recibiría respuesta. No ahora. Y colgó el teléfono, volviendo a mirar el mapa táctico en rotundo silencio, sabiendo que los demás comandantes esperaban ordenes. Esperaban escucharlo.

- Esta era una de las posibilidades. - Informó a los demás comandantes. - Vivimos y morimos por nuestros iguales. Vivimos y morimos por defenderlos, por protegerlos, por cuidarlos. Por preservarlos. No podemos desfallecer, ni rendirnos. Tampoco llorar a nuestros caídos como se merecen. No hasta que podamos descansar, junto nuestras familias, nuestros amigos. O en una fría tumba de metal en el espacio. - Tecleó algo en su panel personal. Algo largo, que por las repeticiones, debían ser códigos de autorización.

- Están recibiendo el informe de situación. Esta información es única y exclusiva para militares con el rango de comandante o superior. Confió en su discreción y buen hacer. - En las pantallas de los comandantes apareció el siguiente mensaje.

Efectivamente, la transmisión tiene los códigos de autentificación de la Andrómeda y esta, en concreto, de la Almirante Lovett. Además, con el informe está incluida la posición de la flota de Cahne en el campo de asteroides. Acturus guardó silencio durante unos segundos, dejando que los comandantes leyeran.

- Así que estas son nuestras ordenes. Recuperaremos al grupo Mintaka, formaremos y marcharemos a velocidad de crucero hacia el campo de asteroides. La posición exacta que tomará la flota será discutida tras reunirnos con el grupo Mintaka. A partir de ese momento, el grupo de combate pasará a llamarse "Grupo Andrómeda" y yo, el Comandante Sonnenzorn tomará el rango de Comodoro del mismo hasta que muera o sea revocado por un oficial de rango superior. De darse el primer caso, el Comandante Raynor ocupará el rango de Comodoro. - Después de todo, era el comandante de la estrella de combate.

- Heinosuke, estará a cargo del grupo Defender hasta que se confirme la situación de la Comandante Nakagawa o sea informado de lo contrario. - Le informó, añadiendo los nuevos datos de navegación al resto de la flota. - Nuestra prioridad actual será recuperar al grupo Mintaka. Buena suerte, Comandantes. Eso decimos todos. -

Habla Stranges desde la Orion Mintaka. ¡Larga vida a nuestros héroes! Que los señores de kobol los reciban como valientes que son. La tripulación lamenta la pérdida y en conmemoración de ello lanzaremos al espacio ofrendas para el barquero, para que lleve a los héroes a salvo al otro lado. La ceremonia comenzara una hora luego del arribo. Por cierto el CAG Aeon Plascrete hizo un buen trabajo con sus pilotos en la protección del grupo, lo recomiendo para una distinción. ¡Así decimos todos! Stranges fuera.

Por cierto el CAG Aeon Plascrete hizo un buen trabajo con sus pilotos en la protección del grupo, lo recomiendo para una distinción.

 Scrubber y sus  39 pilotos no dicen nada. Nadie sabe que decir. La Andromeda, junto a sus compañeros y amigos ha sido destruida. Su nave. Su hogar. Scrubber ni siquiera tiene animo de abrirse otro donut. O de luchar contra el establishment

Mi hija... - piensa en bucle con la mirada perdida mientras escolta al grupo mintaka

- Preparen el hangar. Informen al CAG de la Andromeda que tiene permiso para atracar en la Nazara. -

Mientras el resto del escuadron se dirige hacia la Palladium (*) que sera su casa hasta nueva orden, Scrubber gira su nave hacia la Nazara, para presentarse ante el nuevo comodoro de la flota. Aterriza en la Cygnus y sale pesadamente de su viper, dejando la pista de aterrizaje llena de migas y azucar glasé.

Puedo yo zolo, lechez - dice cuando intentan ayudarle - Eztoy gordo pero no zoy un vegetal.

Se dirige al CIC de la Nazara escoltado por dos marines, mientras juega con su destornillador

Malditoz comandantez y demaz pezez gordoz. Por zu culpa Nellie ha muerto. - dice luchando contra las lagrimas - Quien noz mandaba luchar contra laz maquinaz? Zon nueztraz amigaz. Simplemente hay que entenderlaz. 

Los soldados se quedan en la puerta del CIC y Scrobber entra solo, mirando a su alrededor. Nadie parece percatarse de su presencia y todo el mundo parece muy ocupado haciendo lo que sea que hace la gente en el centro de mando. Scrubber nunca lo ha entendido muy bien

Quien lechez zera el idiota del comandante (**)? - se pregunta mirando alrededor. Ve a un señor mayor apoyado en un baston que seguramente sea el bedel o algo asi. Los bedeles siempre son los mas mayores y los que se las saben todas

Perdona camarada - le dice a Acturus sin saber que es el - No zabraz donde ze puede conzeguir algo para llevar al buche? Ah, y dime quien es el idiota eze de Zonnez... Nozzerno... - menea la cabeza - El Comodoro Zozo-zorn eze que zeguro ze cree zuper importante .

-Que vuelvan todos los vipers, Horner.- ordenó, satisfecho Raynor. –justa venganza…- pensó, mientras sonreía, mirando el Dradis, observando la posición donde se encontraba la Andrómeda, combatiendo a la Warstar junto a su grupo…hasta que desapareció.

-Señor, se ha detectado una singularidad en cadena…y una explosión nuclear en el grupo Arvak, estamos ciegos, señor. – empezó a decir Ravenor, el oficial táctico. –el grupo Arvak ha…desaparecido.- ante esta mención, Raynor guardó silencio, impactado por la noticia, sin apartar la mirada del Dradis, con los puños cerrados. Aun podía sentir los cánticos de sus hombres, pero ahora también podía sentir la propia angustia de la Hyperion, al percatarse de que sus hermanas habían caído.

La voz de Sonnenzorn, hablando de nuevo, y enviándoles aquella nota, consiguió sacarlo de su estupor, las ordenes estaban claras, Sonnenzorn estaba al mando, y debían reunirse con el grupo Mintaka, y si al viejo le pasaba algo, el estaría al mando. –activa la comunicación, Annie, para todo el grupo.- ordenó a su oficial de comunicaciones, antes de hablar, cuando esta le dio el visto bueno. –A las ordenes, Comodoro Sonnenzorn, Por el grupo Arvak…y la Andrómeda. Así decimos todos. Raynor fuera.- dijo, con los puños cerrados sobre la mesa táctica. –Horner, pongamos rumbo hacia el grupo Mintaka.- Ordenó, mirando un instante a su segundo, antes de coger el transmisor y acercárselo a los labios.

-Mis bastardos…esto no ha terminado.- empezó a decir, retumbando su voz por toda la megafonía de la Hyperion. –El grupo Arvak, nuestros hermanos…ha caído.- siguió hablando, sintiendo como los cánticos iban cesando. –Se que si prestáis atención, vosotros también sentiréis la pena de la Hyperion por la muerte de sus hermanas, pero también sentiréis el ansia de venganza de nuestra nave…¡No la defraudéis!- terminó, dejando el transmisor en su sitio, sintiendo el ominoso silencio que se hizo en toda la nave, mientras esta iba tomando el nuevo rumbo, pero que poco a poco fue siendo suplantado por algo que parecía ser un latido. Los miembros de la Hyperion, como uno solo, habían abandonado los cánticos de victoria, por un simple réquiem, en honor de sus hermanos caídos en el Arvak, y golpeaban el suelo con fuerza, como si marcaran el paso, en un retumbar acompasado, que fue cobrando fuerza a cada instante. El corazón de la Hyperion, su tripulación, se unía a la mismísima nave, para hacer frente a lo que se les venia encima.

-Todos somos uno…- murmuró Raynor, dejándose llevar por aquel sonido, por aquel rítmico martilleo.

las frases saltaban de la boca de todos los puestos del CIC, "Estamos ciegos!", " Han desaparecido!", "yo tenia amigos en la Hatsu", "Mi mujer iba en la Hatsu"...
Todas esas frases iban y venían al rededor de Kaori, que era intima amiga de Misaki, se habían graduado juntas y siempre Misaki la ganaba en todas las simulaciones, pero a ella la daba igual, no era competitiva, ella era coperativa y siempre desde pequeñas habían estado juntas. Y no se lo podía creer, no podía... mejor dicho no quería creérselo, Misaki, su amiga del alma había desaparecido junto a 380 hombres y mujeres de las doce colonias en la Hatsu. Una nave que había pasado de todo, como la Kokuro y la Takeshi, viejas, pero fiables.
agacho la cabeza y una lagrima empezó a caer por su mejilla derecha, se tapo la cara y sollozo por un momento.
De repente la comunicación de Sonnenzorn le hizo limpiarse las lagrimas y poner semblante serio. Al escuchar los nuevos rangos, dijo a comunicaciones:- Abra canal con la flota.
- Comodoro Sonnenzorn, EL Xo Heinosuke iba en la Hatsu, Señor, por lo que solo quedamos Yamato y yo para comandar la Kokuro y la Takeshi.
Luego sin mas indico al navegante:- Siga las indicaciones del comodoro.

La sensación en la Takeshi es de pesadumbre como en la Kokuro y los mensajes parecidos, Yamato se acerca al cristal del CIC mirando el infinito intentando ver aparecer la Hatsu y a Heinosuke, su amigo de promoción, siempre habían festejado todo juntos, los ascensos de cada uno y sobre todo que les destinaran al mismo grupo de combate. Pero todo eso había acabado, Heinosuke, la Hatsu y toda la tripulación habían desaparecidos. Recivio las ordenes como todos y escucho a su compañera Kaori, por lo que no tuvo otro remedio que ratificar sus palabras diciendo:- Comodoro Sonnenzorn, la Comandante Kaori tiene razón.

Podemos poner un listado de todas las naves que tenemos? Que el grupo Mintaka es .

 El grupo Mintaka esta en la ficha INFO para su fácil acceso.

y aparte de ustedes el grupo Palladium es:

BS Palladium

Crucero pesado clase Berzerk

Dos destructores clase Tiger

Un Crucero de escolta clase Aegis,

Por el lado de ustedes el grupo se compone de:

BS Phoenix - Raynor

Cygnus Nazara - Sonnenzorn

Defender Takeshi - Yamato

Defender Kokuro - Kaori

Orion (Betelgeuse,Mintaka, Bellatrix y Alnilam) - Venator

Tiger Pillar of autuum y Marathon - Keyes

Nabucodonosor - Taryn