Partida Rol por web

¿Y todo esto? ¿Ya esta? ¿No hay nada util?

Me paré a pensar un momento. Lo que había dentro de las bolsas simplemente me desconcertó y ya esta. No se me ocurría mucho mas que buscar en otra de las habitaciones.

Bueno, tenemos otras tres habitaciones en las que buscar. ¿Vamos?

Mientras William salía de aquella habitación tropezó con algo.

Se trataba de Monique, que estaba tirada en el suelo, inconsciente.

Por favor... Deja de ingnorarme - Te dijo mientras veia como intentabas sin éxito comunicarte con tus compañeros y consolar a Steve.

No tengo demasiado tiempo, así que te aconsejaría que lo aprovecharas.

Iré al grano. No les importas a tus compañeros. En cuanto sientan el verdadero terror, huirán y sólo se preocuparán por ellos mismos.

Serás un lastre para ellos.

¿Acaso crees que antepondrían tu vida a las suyas propias? No seas ingenua...

Aquellas palabras afiladas como cuchillos penetraron en tu interior y sufrías por ello.

Pero yo vengo en nombre de mi superior para ofrecerte a tí, y solo a tí, una gran oportunidad.

Me giré hacia aquel extraño hombre que me hablaba al ver que nadie me oía. -¿Hablar? ¿De mi? mi vida no es interesante...¿Qué quieres?- dije mirándole con algo de desconfianza. mientras observaba la extraña reacción de Steve al abrir la bolsa <No llego a ver que ha pasado...>pensé mientras miraba de manera intercalada a Steve y a las bolsas.

Entonces me dijo aquellas palabras que hicieron mella en mi corazón <en el fondo lo sabía...>pensé amargamente mientras miraba a aquel ser. -¿Una gran oportunidad? De que se trata- dije aún sin confiar.

Ala!!

Por muy poco no pisé a Monique que ahora se encontrába en el suelo. Rápidamente me agaché para socorrerla con pequeños empujoncítos leves en los hombros y llamándola por su nombre.

Monique, Monique!

No sabía como pudo ocurrir, hasta hace un momento no habíamos entrado en la habitación y ella estaba bien.

Eh, tios. Venid, rápido.

Te propongo un trato... Si te mantienes viva el tiempo suficiente, cuando vuelva a verte, te diré algo que tendrás que hacer por mí.

Tu me ayudas, y yo te aseguro que saldrás de este pueblo.

Se acercó mientras conversaba contigo y se remangó uno de sus brazos dejando ver una mano famélica y huesuda.

Te hizo un gesto para darte a entender que le estrecharas la mano si estabas de acuerdo con su proposición.

¿Qué me dices, te interesa?

Como muestra de gratitud, te invito a que me realices una pregunta. Yo te prometo que te contaré todo lo que sepa sobre aquello que me preguntes.

Al ver que el ser me daba su mano para que estrechara la mano en señal de aprobación dudé un poco <¿Mantenerme viva?... eso puede ser difícil... pero es lo que más quiero... vivir...> -Solo quiero saber cómo salir de este entorno extraño en el que nos encontramos...y si los espejos tienen algo que ver...una vez me contestes aceptaré el trato- dije antes de acercarme para oír bien lo que me iba a decir.

Este lugar no es otro que vuestra visión personal del infierno.

El pueblo está maldito. Así que el hilo que separa tu mundo con esta realidad aquí es muy frágil.

La única posibilidad de escapar de aquí es a través de los espejos.

Yo me daría prisa, ya que al "carcelero de esta prisión" no le hace gracia que haya presos que quieran fugarse.

<Entonces es verdad que debemos buscar espejos... y rápido> La idea de un carcelero del infierno furioso no me hacía gracia así que acepté el trato porque me convenció su respuesta, estreché su mano -Muchas gracias... nos volveremos a ver...o eso espero...- dije pensando en que si no le volvía a ver sería porque habría muerto.

Steve dirigió su mirada al reclamo de William, y para su sorpresa vio a Monique tendida en el suelo. Se acercó con prisa y se arrodilló junto a William. ¿Que ha pasado, William? Le preguntó, ya que él era el único que había visto a Monique tirada en el suelo, el único y el primero.

No tengo ni idea, tio. Te aseguro que estaba saliendo de la habitación y casi la piso. Ya estaba en el suelo cuando me he ido a dar cuenta.

Contesté a Steve con algo de nerviosismo, ya que casi me sentía culpable por a ver sido yo el que encabezara la entrada a la habitación y haberla dejado sola fuera. Aunque esa no fuese mi intención. 

-Pobre mujer, rápido mirar a ver si se ha hecho algo en la cabeza.

El patinador miraba a su alrededor buscando algún tipo de amenaza que hubiera provocado ese desmayo. Estaba claro que no podían distraerse más.

Steve asintió a la petición de MJ. Giró su cabeza de un lado a otro con extrema suavidad mientras miraba si había heridas. ¿Ves algo William?

Ten cuidado MJ, no te alejes demasiado procuró decir al muchacho ya que éste quería ver los alrededores buscando algo que pudiera causar la inconsciencia de Monique.

Con cuidado cogí la cabeza de la chica para moverla a la izquierda y a la derecha en busca de alguna herida.

Mmmm...a ver...

No habia ningún tipo de lesión en su cabeza o en su cuerpo (al menos visible).

Parecia estar en perfecto estado, pero inconsciente.

Alrededor todo estaba en calma y en silencio, excepto por el ya conocido goteo de algo que provenía de un lugar próximo.

Tras responder a tu pregunta, aceptaste el trato que te ofreció aquel ser y se esfumó en cuestión de segundos, tal y como había aparecido previamente.

Acto seguido abriste tus ojos y te sobresaltaste tras despertar de aquel extraño sueño que habias tenido.

El sudor recorria tu frente y te encontrabas bastante nerviosa por las palabras de aquel individuo.

De pronto, Monique abrió los ojos y se incorporó sobresaltada.

Estaba bastante alterada, como si hubiera sufrido una pesadilla. El sudor frio le recorria su frente y os miraba a todos con cierto tono de asombro en su rostro.

Desperté de golpe elevando el pecho hacia arriba y quedé sentada. Mi respiración era acelerada y por un momento no sabía donde me encontraba. Miré a mi alrededor desorientada balbuceando cosas sin sentido. Respiré profundamente y solo llegué a decir -Espejos....rápido...carcelero...- me apoyé sobre mis rodillas y mis manos y me intenté levantar.

Al fin, Monique había despertado. Pude entender que dijo unas palabras algo nerviosa, algo sobre unos espejos y un carcelero. Nada tenía sentido, al menos así, de repente.

Monique, ¿Estas bien? ¿Que te ha pasado?  

Me dirigí a ella mientras me mesaba la barba.

Me incorporé con dificultad <¿Cuanto tiempo he estado inconsciente?>pensé mientras miraba a mi alrededor nerviosa y descubrí que apenas había entrado a la habitación. <¿Es un sueño? no... esto es real...> Miré hacia mis compañeros y hablé alterada -¿que ha pasado, que había en las bolsas?... tenemos que salir de aquí rápido... busquemos un espejo cuanto antes...saldremos de aquí...- me puse a dar vueltas mirando a todas partes y entré rápido en la habitación y con cuidado me acerqué para ver el contenido de las bolsas.