Partida Rol por web

La profesora mira sorprendida a la puerta cómo dos chicos entra y tras un fuerte intento, recuerda sus nombres - Burke-san, Ayase-kun. ¿Cómo están? -.

A su habitación entran Koichi y Edwin, quienes parecían un tanto sorprendidos por algo.

Tras eso, Koichi se acerca a la profesora emocionado y mirándola - ¿Cómo se encuentra, Natsume-sensei? La verdad la he extrañado en el instituto -. 

Con una leve y casi imperceptible sonrisa, dijo - Les agradezco a todos sus palabras y no te preocupes, Tempus-san. No es tu culpa - cuano Naoko intervino, Yuuko estaba a punto de responder pero todo pasó demasiado rápido para ella y al verla marcharse, dijo - Bueno, ¿Entonces quiénes entrarán? - miró a los restantes mientras Naoko se iba hacia el baño y Jaycee iba tras de ella.

Shiro miró a Mamoru y le dijo - Gracias por ser un caballero. ¿Les incomodaría que entráramos primero? - miró a Katherine y a Mamoru, además de Hikaru.

- Podrías quedarte con Tempus-san, Misaki-san - sonrió y esperó la respuesta de Mamoru.

Estabas sola en el baño pero había algo que te hacía sentir incómoda, aunque no sabías muy bien qué era. De repente, en tu cabeza pasaron las imágenes de tu sueño a gran velocidad y parecían hacerse las imágenes más vívidas, mientras el conejo que habías visto en aquella situación, parecía gritarte - ¡Despierta! - al hacerte consciente de tu situación, te encontrabas en el suelo del baño.

Jaycee esperaba por ti afuera.

Te encontrabas esperando a Naoko que saliera del baño, cuando viste a Chidori caminar presurosa y a Reimu detrás de ella. Parecía encontrarse algo triste, aunque no comprendías el porqué.

- Bueno, yo no me opongo - dijo tranquilamente.

Luego, miró a Katherine algo incómoda, parecía que ell sería ahora su niñera más que compañera de clase y eso le incomodaba un poco.

Al salir de la habitación, pudieron ver que Koichi y Edwin iban en camino hacia la habitación. Chidori caminaba a una velocidad moderada y Reimu la seguía. Al hablar y Reimu aceptar la invitación, algo resonó en su cabeza. Una voz atrayente como la de una serpiente pero atemorizante como nunca había escuchado.

- Serás mía dentro de poco - y entonces, un sopor que no pudo controlar se apoderó de ella. Reimu cayó al suelo, siendo los ojos rojos y brillantes de Chidori lo último que vería en ese frío pasillo de hospital.  

Irisu respondió con una amplia sonrisa.

Gracias Murakami Sama.

Dicho eso se dirige al techo del hospital asegurándose de que nadie la siguiera.

Una vez en el techo, atranco la puerta de acceso, necesitaba privacidad, además no estaría al frente de batalla, no todavía.

Ante cualquiera que la viera, Irisu solo estaba parada en la barandilla, contemplando el paisaje, y recitando algo.

Lo que en verdad hacia era convocar a sus sirvientes

Come to me, dark warriors!

Solo invocaría a 3 sirvientes, podía invocar a 6, pero debía guardarse algunas sorpresas. Además estaba recitando órdenes, de los 3 sirvientes, solo uno causaría estragos apoyando a los demás generales, los demás solo serían soportes en caso de que las chicas fuesen demasiado poderosas o intentasen escapar.

Esperar siempre es molesto, y más cuando ves algo que te molesta más que esperar, pero que se le va a hacer, hay que ser "caballeroso" no? Me siento más como un caballo su como un caballero, me pregunto si preocuparme tanto por los demás es obra "mía, suya, nuestra", a veces ni siquiera se quien soy...

El suelo vibraba a tu alrededor tras el retumbar de tus palabras y la lluvia caía aún con más intensidad. Podías sentir el poder del eclipse llenándote de energía mientras tus sirvientes surgían, Aria, Yukiko y Kiriyo. Las tres surgiendo de un pozo en la tierra mientras hacen una genuflexión esperando tus órdenes. Estaban listas para escucharte.

Katherine se había puesto roja por algo, pero se limitó a toser un poco y evadir todas las miradas posibles. No entendió lo que dijeron los demás por estar tratando de relajarse, por lo que sólo comprendió lo dicho por Hikaru. Se quedó callada unos momentos más tratando de discernir que habían dicho, pero sus mejillas perdieron color ante la mirada de su compañera de clases. <<Did I do something wrong?>>.

-Me perdonarán... pero no entendí lo que dijeron.

A la pelinegra le daba mucha pena tener que decir eso, bajó su mirada porque no se atrevía a ver a los demás.

-Su..su..supongo que como Kuroryuu y Mamoru es la dupla completa, pasarán primero... ¿no?

Miró a Hikaru, pero sabiendo cómo ella la observaba desvió su atención a Kenta a través de la ventana. Suspiró y eso le ayudó a relajarse un poco. <<I hope nothing happens today>>.

Shiro miró a Katherine y sonríe.

Luego dijo - De acuerdo, entremos entonces, Tsukaima-san -.

Ante la solicitud de Shiro-san Mamoru se pusó colorado, era lo que queria pero no sabia que ella iba a decir que si, ahora se sentia como el chico mas afortunado del Japon. Intentando parecer mas viril de lo que su enclenque cuerpecito podia dejarle Mamoru se pusó con la espalda recta intentando parecer mas alto, sonrió animado y dijó:

-Claro Kuroryuu-san, vamos.

Antes de irse y seguir a la hermosa chica peliblanca Mamoru volteó hacia Katherine y le dijó:

-Volvemos en un momento, no te preocupes.

Y asi ambos pasaron a ver al presidente. Mientras pasaban por el umbral Mamoru sintió un nudo en la boca del estomago, odiaba los hospitales, pero por ayudar a Irisu-san lo tomaria con calma.

Yo habia ido al baño y ahí me dio vertigo y me desmayé un rato... XDD luego volvi a tener los sueños de la Gran Guerra... y me desperté, sobre el piso del baño... :P -Ese sueño de nuevo. Creo que ya me volvi loca ahora si...- 

Salgo algo desorientada, y veo a a Jaycee y me pongo a reir nerviosa, -¡AAh ja ja ja Jay-San!... ja ja ja. ¿Que-que haces aquí? Pensé que estarías con Kathy-Chan... es que lo que yo quería era que tu te quedarás con Kathy, porque creo que tu le gustas a ella... ¿Eso lo dije o lo pensé?...- lo que planeaba me salió alrebes... soy un desastre XD... bueno ya, lo caido, caido XDD -¿Co-como estas? Ji ji ji ji...- Digo... y luego mascullo - aaayyh, soy una estupida...-

Katherine miraba cómo los chicos entraban a la habitación donde se resguardaba Kenta y suspiró un poco. No le molestaba entrar después y confiaba en que ellos no lo exaltarían, sino todo lo que sucedía a consecuencia de lo ocurrido en el museo. Sentía un poco de culpa por no haber hecho nada y aunque era consciente que el universo no giraba a su alrededor, pensaba que tal vez podría haber marcado la diferencia.

-Yuuko... ¿qué dicen los médicos? Sabemos que sigue delicado, pero hay alguna otra noticia... ¿Cómo estás tú? ¿Quieres que vaya por una bebida para ti?

Su preocupación por la pelirroja era verdadera. Simpatizaba con ella y si podía hacer algo lo haría sin dudar. También miró a Hikaru sonriéndole con cordialidad.

-¿Igual estás bien? Aunque Naoko y Jaycee hayan ido por bocadillos, puedo ir por más si gustan.

Jaycee escuchando todo pensamiento de aquella chica,... se sonrojó ligeramente.

- No te preocupes, el día tiene muchas horas - pensó de nuevo lo que naoko le dijo y su respuesta y no pudo evitar que el enrojecimiento aumentara, pero debía disimular y ser un tipo duro,... con suerte su "dejadez" le ayudaría un poco - en todo caso, o lo has dicho todo en voz alta, o yo me he vuelto médium - sonrió con su leve y simple comentario.

Todavía cruzado de brazos y apoyado en la pared, Jaycee la ve algo "ida", no es la persona más afín del mundo, pero no solo las palabras de la chica dicen de más, su cara es un poema - no creo que nos hechen de menos si tardamos un poco, ¿prefieres que vayamos un rato a la cafetería? Será más seguro que desayunes tranquila, no querría tener que visitar a tres personas,... - guiñándole el ojo se inclina levemente hacia ella ofreciendo su mano - señorita,...

Quizás el olor del hospital también le molesta a él, no le desagradaría en absoluto, estar unos metros más alejado de ese vírico olor...

Tentáculos negros... aquello me recordaba lo que había pasado en el gimnasio tiempo atrás. Quien sabría lo que les habían hecho en aquella prisión. Me pregunté si no recordarlo sería parte del shock ante todo lo que había pasado o si les habrían borrado la memoria, o tal vez algo diferente que les hubieran hecho. De cualquier modo, tendríamos que tener paciencia, y esperanza de que pudiera recordarlo.

- No se preocupe, Sensei, si no puede recordar nada más, ya vendrán los recuerdos cuando sea - la tranquilicé con una sonrisa.

Las noticias sobre Kenta eran peores y no supe qué responder. Lo poco que sabía, no estaba muy segura de querer decirlo.

- Me temo que nada que no sepan los demás, sensei - intenté evitar la pregunta - pero si puedo hacer algo por él, lo haré sin dudarlo.

Nuestra conversación se vio interrumpida por los dos chicos que entraban. Me callé para mirar atrás y los saludé con una sonrisa.

- Hola, chicos, ¿también de visita? - pregunté tontamente, evidentemente estaban de visita. Me aparté un poco para que ellos también pudieran hablar con la profesora.

Irisu ve satisfecha a sus sirvientes satisfecha. Para los demás solo sería ella junto a tres chicas desconocidas, incluso si sospecharan que ellas eran malas, no había motivos que pusieran en tela de juicio su integridad mortal.

Aria, Yukiko,  Kiriyo, Tienen que buscar a Yami y apoyarlo en lo que diga.

 Aria, solo tú apoyaras directamente, usa tu disfraz, causa estragos, no temas mostrarte en público.

Yukiko, tu deber será servir de apoyo a Aria, procura mostrarte lo menos posible. Defiende a Aria.

Y Kiriyo, serás su respaldo, que las chicas mágicas no te vean, si están en problemas huyan, si están en ventaja no las dejes escapar.

Vallan y regresen con vida.

Les tenía aprecio, pero debían cumplir con su deber. Así que las despidió, simplemente sabía que ellas eran desechables, aunque algo dentro de ella podía sentir tristeza al pensar en perderlas.