Partida Rol por web

Y con lagrimas sinceras en los ojos le digo... -[[Por favor perdoname por lo que voy hacer...]]- y sacando aprovecho de los abrazos, la cercanía y lo vulnerable que está Ilify, lo prenso violentamente por atrás, aplicandole una llave estranguladora... poniendo cada vez más y más presión, con el fin provocar daño, para partir cuello...

Si el ataque entra no lo suelto y sigo, mientras dolorosamente le mascullo con suma melancolia palabras al oído... -[[...amigo... amigo... amigo... yo también tengo sangre de Guerrera Mágica en mis venas... so-solo quería que confiaras en mi, una vez más... ya es tarde... yo ya estoy muerta, soy como un zombie reanimado, no sobrevivi al ataque de Scarlet-Bat........ no lo van a lograr Ilify, la reina no te va a escuchar, tu causa está perdida, no sobrevivirán... prefiero matarte yo, a que lo haga otra titanide o las guerreras caídas, como yo...]]- y mientras aprieto con cada vez mas fuerza y mis lagrimas caen en su cabeza... mis dedos les acarician los cabellos, e incluso le beso la cabeza... -[[Sshhh... Sshhh... Sshhh... pronto acabará... Sshhhhhh...]]- 

Pronto termino quedandome sin emociones ante la influencia de mi calidad de muerta viviente...

Al notar que la titánide intenta sujetarme por el cuello, Sonrió triste, se dio cuenta de que era otro títere, había sucumbido ante scarlet bat decía, y su vida ya no era poseía la calidez de la libertad, el dragón acurrucó sus alas para impedir la sujeción de Aberrant, estaba furioso pero no con ella, si no con la constante cobardía de aquellas oscuras existencias, que buscaban jugar mil y una trampas, y dañar los sentimientos inocentes de la princesa oscura y sus compañeras, con la vida de millones de seres vivos en su mayor momento de debilidad.

Lágrimas de furia por obligarle a luchar, cuando su mayor deseo era buscar un entendimiento. Odiaba haber tenido que decidir empujar a Aberrant, le quería proteger como a todos los que sufrían las humillaciones de las demás titánides.

Mientras su intento por librarse iniciaba habló - te equivocas, sigo creyendo en ti por eso hablaré también en tu nombre, LE OBLIGARÉ A ESCUCHARME.

Su ira desencadenada, era el dolor de su corazón, volvía a sentirse como una bestia de nuevo, sediento de sangre, y aun así quería intentar hablar.

Nereida...

Bajo mi inexpresivo rostro y rígido pose mi corazón dolía por lo que el destino me había deparado. Parecía una ironía de la vida que justamente fuera Nereida quien tuviera que enfrentarse a mi. 

Cerré los ojos un segundo respirando profundamente y, luego, los abrí mirando directamente a la peliazul. Noté como mi cuerpo reaccionaba por sí sola y atacaba a mi compañera.

Mi inexpresivo rostro miraba a Nereida sin apenas pestañear. Con una rígida postur, mantenía mi hoz fuertemente cogido y apoyado contra el suelo. No reaccioné a sus palabras ni moví un músculo, simplemente la observaba. Entonces, cerré lentamente los ojos, como si pensara, para luego abrirlos y fijarlos directamente en la peliazul.

Alcé mi hoz y lo hice girar sobre sí mismo antes de cogerlo con firmeza con las dos manos. Con determinación y sin mediar ninguna palabra, me lancé directamente a atacarla.

El sorpresivo ataque de la muchacha no le dio tiempo de defenderse. Era realmente Lightning? Si era así, se habían vuelto enemigas.

-Que haces? -le dijo mientras intentaba esquivar aquella poderosa arma- No se si eres Lightning o no pero si me atacas, yo... tendré que responder...

La titánide, tras sucumbir a sus órdenes, trató de tomar por el cuello al guerrero dragón, el cual con un movimiento eficaz, logró alejar a Aberrant, tras liberarse de la presa a la cual le había sometido. Un segundo después, el dragón extendió sus alas y las sacudió con toda su fuerza para generar una ola de aire que arrastró a Aberrant y la hizo caer, mas la titánide se recuperó rápidamente y se lanzó a Ilify a estrangularle una vez más, cogiéndolo en un agarrón fuerte que hizo que el vampiro comenzara a sufrir los efectos de la falta de aire.

Sin piedad ni compasión, Relámpago oscuro se lanza por su presa ni siquiera reaccionando a las palabras de Nereida, ni a su mera presencia. Toma su hoz con decisión y ataca con todo lo que tiene. Nereida aún trataba de no luchar, pero su compañera de armas no le dejó más opción y aunque la vio, la duda no le permitió actuar, haciendo que la guerrera mágica recibiera el ataque de Relámpago oscuro en todo su esplendor. Ella pudo sentir la fuerza del relámpago en ella y ver que su antigua compañera no estaba jugando, iba completamente en serio.

El dragón esperaba que bastaría con soltarse para que Aberrant reaccionara, pero no fue así, la titánide volvió a sujetarse sin demora. Ilify no quería hacerle daño, le desagradaba tener que atacar a un ser que si bien no era completamente inocente, solo actuaba como una marioneta.

- reacciona, ayúdame - se concentró en soltarse y guardar las distancias, si bien tuvo que golpearle una vez, para apartarla no lo quería hacer de nuevo.

En esta ocasión quiso comprobar una habilidad que poseía y que nunca le gustó, pero que en ese momento era tan viable como saber que influencia sería mayor, si la amistad que el dragón le brindaba o el control otorgado por scarlet bat.

Concentró toda su tristeza en el ambiente, lágrimas rebosantes de dolor, y pensamientos de dolor masivos, tampoco era muy difícil dadas las circunstancias, solo esperaba liberar a la titánide de cualquier otro control previo, sin duda manipular a los demás era algo que odiaba, le gustaba ir siempre de frente y sin trucos, pero por una vez, esa horrenda habilidad tal vez le fuera útil para ayudar a alguien.

- ¿prefieres dejar de luchar y dañarme? (Sob) ¿no puedo confiar en ti a pesar de querer seguir creyendo? (Sob) ¿de verdad es más poderosa una magia llena de rencor, que una amistad? (Sob)

- ¡reacciona! (Sob) ¿¡traicionarás mi fe en ti!? (Sob) si no eres la amable Aberrant dispuesta a revelarse contra unos designios injustos (sob) deberé suponer que eres una impostora (sob) una ilusión más (sob) otra trampa cobarde de tu madre y sus ciegas seguidoras...

De repente, una aguda tristeza se apoderó de ti y pudiste sentir el dolor de Ilify. Viste cómo su madre murió frente a sus ojos cuando él era aún pequeño y cómo la distancia de su padre fue forjando la frialdad por la cual se caracterizaba. A pesar de esto, había una parte oculta de sí que aún lloraba a su madre y, con cada día que pasaba, trataba de hacerlo un poco menos sin éxito.

Ese dolor, ese abandonó se relacionó con tu propio dolor, los abusos que Leti sufría y toda la violencia que ella presenció, lo cual la llevó a caer fácilmente en las garras de la oscuridad una vez más. Las lágrimas comenzaron a salir y aunque seguías siendo un zombie, se te dificultaba mantenerte enfocada en el combate porque la tristeza hacía tus pasos más pesados. Sueltas a Ilify porque te faltan fuerza, pero sabías que tenías una misión.

Platinium asiente a la pregunta de Animae y le responde colocandose junto a ella y apoyando su mano en el hombro de la chica que parecia abatida, sus palabras le hacian pensar que habia sido algo como lo que ella habia paado, una especie de prueba, aunque sin duda le habia afecctado bastante, le mira y dice en un tono de voz suave:

No te preocupes, Hikaru lo pasara, es una chica muy fuerte y estoy segura que podra con ello. Creo que lo mejor es esperar un poco mas por ella, para que cuando despierte no se encuentre sola.

Decia mientras observaba de reojo a Hikaru

De repente, y mientras terminaban de hablar, el espejo que mantenía encerrada a Storm Angel comenzó quebrarse. Primero algunas rajaduras, luego unas más profundas, hasta que, al final el libro estalló y cayó hacia los lados. Storm Angel se levantó despacio, aún tratando de caer en cuenta de lo que había sucedido. Se levantó despacio y aunque era ella, parecía que había algo diferente.

Abriste los ojos y te pusiste de pie. Notaste que estabas rodeada de espejos, los cuales estaban sobre el suelo, al igual que tú. Te levantaste y viste pedazos de cristal en el suelo y te percataste que te encontrabas en el marco de un espejo como los demás. No tardaste mucho en darte cuenta que estos espejos tenían el tamaño de una persona. Los guardianes no estaban, lo cual podía indicar que habían sido capturados, pero no podías decir mucho más.

Te levantaste y notaste que todos estaban rotos, pero no estaban solas, frente a ti se encontraban Commutatus Animae, la guerrera de Andelivian, y Platinium, la dragona de Hardak. Con tu nueva identidad, sabías qué misión te correspondía, y era acabar con ellas. Eran tus enemigas, enemigas que se encontraban demasiado cerca de llegar a la sala del trono con la reina y con Scarlet. Algo impensable.

Las dolorosas lagrimas de sangre brotan a chorros de los ojos del inexpresivo rostro de Aberrant, lo que hace que suelte a Ilify del cuello y luego de unos pasos hacia atrás... se queda inmovil y en silencio por varios segundos, sin hacer sonidos ni gestos, sabes que ella por dentro llora con toda la mayor de las amarguras...

su cuerpo tiembla tenso y pesado... -[[... n-no hay, fe... no hay, Princesa... Aberrant, está muerta... yo, la maté... Aberrant, ama a Mamá... aunque Mamá me odia, por haber nacido... lamento defraudar tu fe, Aberrant, solo sabe defraudar...]]- 

Moviendose con trabajo, levanta su guadaña... -[[Ahora... solo te queda, matarme, o morir, por mi mano...]]- y torpemente ataca...

-hahahahahahaaaa AAAAH HAHAHAHAHA...- me reía con demencia y muy orgullosa de mis actos... me sentía liberada... -Siiii... Al fin me siento libre... libre de expresar mi oido como yo quiera, gracias a la Gran Reina de las Tinieblas, no le fallaré mi señora... Scarlet Bat, amada mía, haré que te sientas orgullosa de mi, ya lo veras...-

MIS TROFEOS

Arjimae (General de las Guerreras Mágicas).

El mejor de mis trofeos, la cabeza del jefe de mis enemigos, estoy orgullosa de éste logro, gracias a la sublime inspiración que me dio la Reina de las Tinieblas en aquel momento.

Scarlet Light (Guerrera Mágica).

Pobre... ella murió como vivió, siendo una joven boba y bocona; perdedora y patética. 

Titiritera (Titanide).

Agh... a ella como la odié... asquerosa como ella sola, le metería su oso por el culo, el número de veces, que yo quiera. 

Madre (Mortal).

Un humano más, un humano menos que se roba mi oxigeno... que le den....

Veo a las dos pendejas tendidas en el piso... -Mis siguientes trofeos...¿A quien mataré primero?... ¿Que importa?...- Aprovecho su turno de inconciencia para yo poder cargar todo mi cuerpo con energía electrica contenida... 

Con una sonrisa miro a Platinum y Animae, con mi cuerpo completamente cargado de Relampagos de Alto Voltaje... -(Bostezo)... ¿Como están? ¿Durmieron bien?... me gustaría mucho que me contaran que soñaron, sería interesantísimo... pero como ven, unos viven, y otros mueren... y hay que finiquitar éste asunto de una vez... así es éste negocio...-

Señalo a Animae con mi dedo indice... -"Trueno Atómico"-

Y sobre Animae descargo toda la energía electrica que traía acumulada...

Animae había asentido a las palabras de Platinium en la propuesta de permanecer ahí cuando no tuvieron que esperar mucho porque Storm había salido de ese espejo. Se incorporó para recibirle, pero su instinto le hizo detenerse a una distancia menor de 3 metros y las palabras y acciones de su compañera le hicieron sobresaltarse y, sin tiempo que perder, invocó una poderosa ráfaga de viento que la rodeó tanto a ella como a la draconiana para protegerse del ataque poderoso que se le venía encima, intentando absorber parte de esa energía para recuperarse.

-¡Storm! ¿Qué estás haciendo? ¿Qué te ocurrió?

Y ante el grito, brisas ligeras pero resistentes y fuertes se dirigieron a Storm para inmovilizarla sin lastimarla con la intención de ganar tiempo o averiguar qué estaba pasando.

Tras el primer ataque me giré para mirarla fríamente. Balanceé la hoz sujetándolo con una mano a un lado de mi cuerpo.

- Mi señora ordena que te destruya, y así será - dije lacónicamente.

Comencé a acercarme de nuevo a ella caminando, apoyando el arma en el suelo para que se escuchara el sonido del arma al rozar la superficie antes de lanzarme de nuevo corriendo a por Nereida.

Maldita sea, Nereida, defiéndete y ataca, no es momento para dudar...

Si la mataba sólo porque no quisiera atacarme sería la peor pesadilla de mi eterna esclavitud. Era mil veces mejor morir a manos de una amiga que matarla por no haber podido impedirlo. La miré a los ojos y la hablé, esperando que entendiera la situación. Después, caminé lentamente para darle tiempo a prepararse antes de lanzarme de nuevo.