Partida Rol por web

Al día siguiente...

El sol reluciente hacia brillar el símbolo en la entrada de la academia mientras las nubes se reflejaban en los cristales de la estructura en forma de H. No por ser el segundo día era menos emocionante y asombroso que la primera vez, y es que nunca se sabía lo que podría suceder ese día de clases.

Una vez llegaron y hablaron un poco con sus compañeros en la entrada, se dirigieron directo al aula para no hacer esperar al profesor, quién...

Se le veía de lo más tranquilo acostado bajo la pizarra con un saco para dormir, disfrutando de un jugo mientras les miraba con esos ojos vagos y depresivos.

-Tomen asiento, la clase esta por empezar, y no tenemos tiempo para perder -dijo antes de terminar de exprimir la bolsa para después abrir el saco y salir mientras ustedes iban a sus lugares. -. _{No debe tardar en llegar...} -añadió en voz baja para que nadie le escuchase, pero los más atentos pudieron notar que dijo algo. -. Muy bien: Espero que todos hayan descansado bien, pues hoy...

Pero antes de que el profesor pudiese continuar con la explicación, unos rápidos pasos se oyeron fuera de salón, y entonces aquella persona entro por la puerta con mucha energía y entusiasmo, y esa gran sonrisa en el rostro...

-¡¿Esta aquí la clase 1-A?!

Un hombre con pinta de motorista rebelde les mostró su mejor sonrisa mientra alzaba levemente las cejas. Aquellos que veían al profesor Aizawa en ese momento podían notar en su rostro que no le terminaba de agradar la entrada del sujeto, o el sujeto mismo...

-Se supone que hoy los atendería un héroe profesional muy famoso y que seguro hubieran querido ver, pero se le presentaron unos inconvenientes antes de venir y por lo tanto no pudo asistir a esta clase... -explico Shota antes de presentar al recién llegado. -. Él es un nuevo profesor de U.A., el héroe Black Dragon, y los atenderá el día de hoy...

-¡Es un gusto estar aquí!

A la mañana siguiente, Takeshi apareció como de costumbre en clase, acompañado de su hermana menor y junto a Takumi. El día anterior quedaron para ir juntos a la escuela, así que después de irle a buscar y hablar un poco por el camino, llegaron a clase, donde el profesor estaba literalmente relajándose, pero no sin antes saludar a sus compañeros de clase y charlar de manera muy leve con ellos.

El enorme gigante de acero saludó con un movimiento de cabeza y una leve inclinación de su cuerpo antes de ir a tomar asiento y provocar que la silla y la mesa crujieran levemente.

Parecía que iba a ser un día movidito y más con lo que iba a ocurrir…entró un hombre con pinta de motorista el cual parecía tener mucha energía y entusiasmo, preguntando a gritos si era la clase 1-A, el profesor Aizawa no parecía estar muy contento con la llegada de aquel hombre, ¿sería por celos?, ¿o algo más?

Fuera como fuera, el profesor Aizawa lo presentó, era un profesor de la U.A, Black Dragon. A Takeshi no le sonaba, pero no tardó en repetir el mismo proceso que usó con Aizawa, saludando con un movimiento de cabeza y otra reverencia que hizo crujir aún más su pequeña mesa.

Sora había llegado al salón temprano, y sacó su set fabuloso de utensilios escolares, saludando alegremente a todo el mundo que entraba al salón sin hacer distinciones. Observó con su evidentemente inagotable interés al profesor en su -a todas luces- rutina usual de reservar el gasto de energía al mínimo, y cuando estaba preguntándose qué depararía la clase hoy, un nuevo profesor entró en escena.

-¡¡Hola nuevo profesor!! -Sora levantó la mano diligente y energéticamente sin perder tiempo. Atropello o iniciativa, dependía del oído que escuchase.- ¿Qué vamos a hacer hoy? ¿De qué materia está encargado? ¿¡Vamos a probar nuestros trajes ya!?

La noche anterior fui acompañada un largo tramo del camino cosa que me dejó bastante tranquila, y al despedirme de los que me acompañaron, se lo agradecí más de lo normal antes de correr el resto de camino a solas.

A la mañana siguiente fuí mucho más tranquila a clase pues esta vez iba con tiempo y más calmada al haber conocido a más gente de mi misma clase. Al entrar saludé a todos con una sonrisa y me dirigí a Takumi, Tamaki y Takeshi para hacerles una ligera reverencia - Gracias por acompañarme parte del camino ayer de veras - me volví a repetir, aunque me faltaba Saori a quien también debería de decirselo... Para mi era muy normal, pero igual para ellos no tanto que me sintiera tan agradecida.

De nuevo el profesor estaba igual que ayer en un saco de dormir - ¿Acaso el profesor Aizawa duerme en la escuela? - Me preguntaba a mi misma - Aunque... sería un buen metodo para no llegar tarde. Puede que más que perezoso o dormilon, sea inteligente... - Mi hilo de pensamientos empezó a perderse hasta que el propio profesor dio paso a uno nuevo. - Vaya, a este no le conozco tanto - pensé teniendo en cuenta los profesores del día anterior. Fue entonces cuando Sora empezó su batiburrillo de preguntas y yo sonreí esperando las respuestas del profesor

Se había dormido como gato y se encontró acurrucado sobre una de las camisetas de Aizawa, experto en levantarse de la cama y no despertar a Eru quien solía dormirse sobre una de sus prendas cuando se volvía animal, al parecer le relajaba mucho, igual que el primer día que se conocieron cuando solo se pudo dormir si era entre las vendas que usaba el profesor, justo en las que lo salvó. 
Suspiró ligeramente al volverse humano y empezar a vestirse con el uniforme, se había quedado algo dormido a pesar de que faltaba media hora para llegar bien a las clases pues debía pasar por su casa a hacerle el desayuno y el bento a su madre. Nunca se despertaba tan tarde pero quizá fuera el esfuerzo del día anterior por socializar lo que mentalmente lo había agotado y ese era el resultado. Desayunó una lata de comida para gatos que había en la despensa y cerró con llave la puerta en cuanto salió, yendo directo hacia la casa de su madre quien por desgracia ya estaba levantada y despotricando. No mejoró cuando el chico entró por la puerta, recibiendo varios improperios mientras se dirigía hacia la cocina para hacerle el desayuno a esa mujer que empezaba a arreglarse para ir a trabajar. - Se supone que ya deberías haberme hecho el desayuno, no puedo llegar tarde por tu culpa gato desagradecido. Mientras estaba en la tarea a pesar de que solía ser callado sintió la mano posarse sobre su hombro y un escalofrío recorrió su espalda mientras escuchaba las siguientes palabras. - Eres igual a ese hombre, no solo me quitó la cara de mi amado hijo si no que ahora tú también te vas de mi lado. Mujer desquiciada es lo que era la madre, tarada mental por culpa de un hombre, pagándolo con un hijo que se vio con la mejilla cortada por un cuchillo de sierra que esquivó a tiempo como para que no fuera profundo. Ya no sabía que más hacer, ¿no le bastaba con las visitas cada fin de semana por algún tiempo? Después de tod odiaba verle la cara, ¿Entonces por qué decía eso? ¿se sentiría sola en ese momento? el aceite de la sarten voló hacia los brazos de Eru que hacían de escudo y no le quedó otra que volver a salir corriendo de esa casa, volver a lo que ya consideraba su hogar y meter bajo agua bien fría los brazos a los que con mucha suerte y crema para quemaduras no quedarían marcados. Sacó del armario de Aizawa vendas que el tenía y una bandita para la mejilla para ocultar el corte y las quemaduras que con mimo trató, dándose cuenta de que llegaría algo tarde a la clase pero no demasiado por lo que esperaba poder pedir disculpas por el retraso y que no le echaran del aula como solía pasar en la secundaria. 

Hacía unos pocos minutos que la campana había sonado y no fue si no por segundos que logró entrar sin que le llamaran la atención los guardias de la barrera. Corrió por el recinto hasta encontrar el lugar en el que debía estar, llegaba tarde y desde el otro lado del pasillo podía escuchar perfectamente como en el aula ya había ruido mientras la puerta se cerraba a lo lejos. Cuando este llegó y la abrió recuperando el aliento se encontró con Aizawa de pie frente al atril y a su lado a un hombre bastante seguro de si mismo y con pintas de motorista, ¿Quien sería ese hombre? No parecía que al profesor le agradara demasiado tenerlo allí. 

-Perdón... perdón por el restraso... ah...¿Puedo... puedo sentarme?...

Aparecía con una cura rectangular y ancha en la mejilla así como vendas que sobresalían de debajo de las mangas en ambos brazos, aunque no parecía que para el fuera algo lejos de lo normal pues se sentó como el día anterior en su sitio, callado y saludando con timidez a sus compañeros de al lado antes de mirar hacia los profesores y prestar atención a lo que dijeran mientras colocaba la cartera a un lado de la silla. "Ya le contaré después lo que me ha ocurrido... aunque supongo que se lo espera..." Lo pensaba mientras inconscientemente se lamía la zona interna de la muñeca derecha, la parte que quedaba fuera de la venda que estaba algo enrojecida.

La mañana de Takumi había sido movidita. Se había dormido a las tantas, mirando en internet las discusiones más recientes sobre el próximo lanzamiento de un videojuego al que se moría de ganas de jugar. Parecía que se había filtrado un tráiler incompleto del mismo, y Takumi había estado analizándolo minuciosamente para no perderse ningún detalle.

Si los deberes le gustasen tanto como los videojuegos…

El caso era que durmió de más, incluso con las tres alarmas de su móvil. Tuvo que venir su madre a despertarlo a gritos, tras lo cual se vistió rápidamente y salió de casa corriendo. Mientras revisaba en su teléfono móvil el lugar donde había quedado con Takeshi y Tamaki se dio cuenta de que, ¡ni siquiera había puesto a cargar su teléfono!

- ¡Qué desastre! - se lamentó mientras seguía corriendo por la calle.

Los hermanos lo vieron llegar a lo lejos, tarde. Esperaba que no pensasen que aquello iba a ser una constante. Tras alcanzarlos se disculpó y, al poco de seguir su viaje hacia la escuela, les habló del nuevo videojuego que le había quitado el sueño aquella noche.

Al llegar a la clase, se encontraron al profesor Aizawa tirado en el suelo, en un saco de dormir. A Takumi aquello le extrañaba y fascinaba a partes iguales. Si el profesor lo hacía… ¿significaba que él también podía echar una cabezadita en clase?

Ahogó una risita mientras iba a su sitio y saludaba a sus compañeros. Eby les agradeció que la hubiesen acompañado la tarde anterior, a lo que Takumi respondió con una media sonrisa y el pulgar levantado.

- Somos compañeros, ¡ahora tenemos que trabajar siempre juntos!

Y había conseguido decírselo sin sonrojarse. Ya había comenzado a olvidar el comentario de Sora del día anterior.

Se sentó en su sitio y apoyó el mentón sobre las manos, aún algo soñoliento. Justo bostezó mientras el profesor decía aquello de que esperaba que hubiesen descansado…

¡Y entonces apareció Black Dragon por la puerta!

- ¡QUÉEEE! - gritó Takumi mientras ponía las manos sobre la mesa y se levantaba.

Luego, se sonrojó y volvió a sentarse rápidamente.

Black Dragon era un héroe super guay, molón y con estilo motero. ¡De los rebeldes! Takumi ya se había olvidado de lo primero que había dicho Aizawa sobre otro profesor.

- ¡Eso, eso! - exclamó, sumándose a la voz de Sora -. ¿Qué vamos a hacer? - preguntó, menos avergonzado que momentos antes.

Takumi estaba tan centrado en el nuevo profesor que ni siquiera se dio cuenta de que Eru había llegado tarde.

Me desperté temprano para prepararme un buen desayuno y marchar a clase con tiempo. A diferencia del día anterior hoy marchaba radiante a clase, con muchas ganas de volver a ver a mis nuevos amigos y con intención de aprender cosas nuevas. - Quizás incluso pueda mostrarles mi habilidad. Y también podemos pedir a Tamaki que nos la enseñe, aunque debe dar bastante miedo. -

Con una mentalidad bastante positiva llegué a clase y abrí la puerta con mucho ánimo, para luego sentirme observada por una siniestra mirada... - Bu-buenos días sensei. - Le dije al Aizawa Oruga que estaba allí tirado en el suelo. Su comportamiento era un poco raro, ¿Por qué parecía tan pasota? Y encima ahí tirado en el suelo, prefería no pensar que quería fijarse en cosas que no debía.

Fui a mi sitio saludando tímidamente con la mano a los compañeros con los que estuve la tarde anterior y me senté para esperar el comienzo de la clase y entonces apareció... ¿Black Dragon? A decir verdad no esperaba ningún héroe famoso, era cierto que conocía a casi todos los que había visto el día anterior.

- A diferencia de Takumi... no tengo ni idea de quién es. No me suena de nada. ¿Le habrán reconocido el resto también? - Sentía un poco de vergüenza por no reconocerle y no pude evitar mirar al nuevo profesor con cara de incertidumbre. ¿Quién sería la persona a la que estaba sustituyendo?

Justo después apareció Eru, que hoy llegaba algo tarde y con algunas magulladuras. - ¿Qué le habrá pasado? No parece ser el tipo de chicos que se meten en peleas. - 

El día anterior había sido bastante movidito para todos en general pero no había estado nada mal. Tamaki se alegraba mucho de que Takeshi estuviera haciendo amigos y más de que Takumi quisiera ir con él a la escuela. La pequeña de los Kawakami siempre había estado pendiente del bienestar de su hermano, apoyándole y animándole y ahora que le veía más feliz que nunca... No sabía cómo sentirse... ¡Pero optó por sentirse tranquila!

Al día siguiente la peliblanca no se subió a la espalda de su hermano como solía hacer sino que prefirió ir andando y dejarle su espacio mientras iban al lugar donde se encontrarían con Takumi al cual saludó con una sonrisa para luego ponerse en marcha hacia la escuela.

Una vez allí a Tamaki le sorprendió ver a Aizawa en el suelo, tan pancho, tomando zumo... ¡Que envidia le tenía!

-Buenos días, profesor. ¿No es hora ya de levantarse? -Comentó animadamente cuando de pronto apareció otro hombre preguntando por la clase y cuando la chica miró al supuesto nuevo profesor no dudó en ir a su sitio. Tamaki no estaba tan puesta en héroes como su hermano así que se acercó a susurrarle- ¿Tú sabes quién es?

Ante su entrada, muchos mostraron reacciones distintas por la aparición de un héroe que algunos seguramente conocían más que otros. Al llegar tarde, ambos profesores observaron el estado en el que se presentaba Eru, pero al ver que no parecía serle molesto no hicieron comentario al respecto.

-¡Me gusta vuestro entusiasmo! -además de Takumi y Sora, otros de la clase también se mostraron emocionados cuando el nuevo profesor llego. -. Pues si: Hoy sus trajes ya están listos, y los podrán usar durante la prueba que llevaremos a cabo hoy.

-Dejaré a Black Dragon a cargo de ustedes hoy, así que sera quién se encargue de la prueba y de supervisarlos... -explico por última vez Aizawa antes caminar hasta la puerta. -. No causes problemas... -y tras comentar eso, aunque no sabían exactamente a quién se dirigía, se retiró del salón...

-Ya se encariñara con ustedes el profesor Aizawa... Bueno, en realidad no -bromeo Black Dragon antes de sacar de uno de sus bolsillos un control. -. En fin: Estoy seguro de que están ansiosos por empezar, y realmente yo también lo estoy -dijo antes de presionar uno de los botones del control. Entonces, la pared contraría a la puerta hizo un ruido antes de abrirse para dejar salir varias estanterías con maletines, los cuales tenían números para identificarse aparte del nombre de a quién pertenecían. -. Vayan a los vestidores y ponganse sus trajes de héroes. Los esperaré en la entrada del Escenario Beta para hacer la prueba.

Sin más que decir, el profesor se retiro del aula para dejarles tomar sus maletines e ir a cambiarse. Los trajes eran tan maravillosos y geniales como imaginaban, por no decir más.

Al final, todos se reunieron ya utilizando sus trajes de héroes en el escenario Beta. Algunos eran llamativos, otros más centrados en cumplir eficientemente, pero todos eran especiales a su manera. Delante de todos se encontraba el profesor Black Dragon, mostrando una amplia sonrisa.

-¡Se ven excelentes! Durante su aprendizaje en U.A. podrán ir haciendo modificaciones para mejorar el traje, pero de momento ya están a un paso más de cumplir sus sueños. -comentó antes de tomar del suelo una caja de cartón con un agujero arriba. -. Muy bien... Empecemos.

El Escenario Beta fue uno donde se hicieron las pruebas de admisión de la U.A. para aquellos que no fueron recomendados. La idea era imitar un ambiente urbano formado por edificios, casas, algún parque, y unos muros que delimitaban el área.

-Se llevarán a cabo cuatro pruebas simultaneas en las que evaluare como les va en acción. Para eso, se formarán dos grupos: Los héroes y los Villanos. Se emparejarán con aquel al que le toque la misma letra. -entonces, fue pasando uno por uno para que todos tomasen una de las pelotas que había dentro de la caja, en las cuales había una letra de la A a la H para terminar formando ocho parejas en total. -. Bien, los grupos quedan tal que así:

-La prueba constará de misiones en los edificios del escenario. Cada par de héroes y villanos tiene un edificio para llevar a cabo la practica. En la entrada, los villanos encontrarán un arma de tamaño realista que deberán llevar a alguna parte del edificio para custodiarla; mientras tanto, los héroes deben planear su estrategia para llegar hasta ella y desactivarla. El objetivo de los villanos es inmovilizar a los héroes o resistir el tiempo suficiente para que el arma "explote"; los héroes simplemente deben llegar hasta la bomba y tocarla, considerando así que la desactivaron. Que sepan que ha pesar de que nuestra medica podrá sanarlos luego de la prueba, no permitiré que se sobrepasen con los ataques; en cuyo caso, les daré una alerta antes de tener que interferir yo mismo. ¿Entendido? ¡Vamos entonces!

Tras haberles explicado como serian las pruebas, el profesor les indico cuales serian los edificios respectivos para cada grupo antes de marcharse para observar todo desde otra sala. Los villanos tomaron sus armas y entraron a sus respectivos edificios, mientras los héroes a los que se enfrentarían esperaban en la entrada a la señal del profesor...

Al parecer Black Dragon era el profesor de hoy, con quien ibamos a usar los trajes y además ibamos a hacer una prueba de la que yo no tenía ni idea. - Espero que no sea nada dificil... y que no tenga que usar mi poder... - Pensaba para mi mientras me levantaba igual que el resto para coger el maletin donde tendría mi "traje" - ...Después del comentario de Sora de ayer... ¿Qué pensaran de este traje? A fin de cuentas... - Mi hilo de pensamientos empezó a viajar según iba a los vestidores con las chicas. En ese momento vi a Saori y me acerqué a ella - Muchas gracias por acompañarme ayer también Shikare-san. Hoy estoy un tanto nerviosa... Me da vergüenza usar el... traje. - Tardé en decir la palabra traje - Pero espero que la prueba no sea muy dificil - Seguí hablando con Shikare mientras avanzabamos.

Una vez en los vestidores no me adentré mucho. Simplemente me puse lo que pedí en los formularios e hice un pase desde mis pies hasta mi cuello, cambiando toda la ropa que llevaba puesta por un jumpsuit rosa y blanco. Obviamente usaba mi propio cuerpo para simularlo, pero al estar tan pegado practicamente parecía una segunda piel. Mi pelo estaba suelto por el momento y entonces me agaché para abrir el maletin y ponerme lo que había en su interior - ¿Realmente funcionarán? - pensaba mientras entonces salía hacia afuera.

Imaginaba que sería de las primeras y ahora "vestida como estaba y con unas pulseras pegadas a mis muñecas pasé las manos por mi pelo haciendo que se autorecogieran en unas coletas dobles hacia atrás que hacía que el pelo no estorbase. - Solo falta un pase... pero esperaré a la prueba.

Una vez allí, el profesor nos explicó todo en lo que consistía la prueba - Guau, parece que va a estar chula esta prueba, ojalá me toque del bando de los buenos - Pero para mi decepción caí en el de los villanos y además con el chico gatuno, Koizuma-san  - Joooooo... ¿Villanos? Yo quería ser heroina... Supongo que no pasará nada, tendremos que darlo todo - Y entonces llegó la advertencia que me empezó a hacer temblar. No se podría hacer ningún gran daño - ¿Qué? Realmente vamos a hacernos daño?... Espero que no se pasen ninguno... Sora seguro que no.

Me acerqué a nuestros rivales para darles la mano - Buena suerte Himeko-san, Hashirama-san. Que gane el mejor... pero tratemos de no salir muy heridos ¿vale? - Una vez respondieran entraría con Koizuma-san preguntandole mientras entrabamos - ¿Que piensas que podamos hacer Koizuma-san?

-¡Yay! ¡Les veo ahora! -Sora salió literalmente corriendo de la impaciencia apenas se les dio permiso de ir por los trajes. A diferencia de la mayoría, preguntò antes si "la otra parte de su traje estaba en el vestidor", y tras confirmar salió en su alegre carrera...a pesar de que su maletín parecía ser algo más voluminoso que el estándar.

En los vestuarios inicialmente se colocó prendas negras y violetas, que se componían en medias largas y guantes hasta poco antes del hombro, además de algo muy similar a una malla de baño del mismo tono. Luego comenzó a extraer piezas rígidas y a colocarlas sobre estas, pacientemente, pieza por pieza...y al final se dirigió nuevamente al encuentro de sus compañeros en el exterior. Su traje reflejaba un poco el sol, haciéndole parecer casi centelleante, como si la luz reflejara el orgullo que tenía de portar su equipo de héroe. Se veía...como una suerte de caballero, o al menos ese era el aire que tenía a simple vista. Vestía varias piezas de armadura metálica, y portaba en una mano un aparentemente muy pesado escudo de metal negro, esmeradamente hecho y con algunos grabados en algún idioma que ya estaba en desuso hoy en día. En general estaba cubierta decentemente aunque una de las aberturas de las placas de metal inferiores revelaba un poco de lo que, sin saber que era una malla, parecía ropa interior a juego. Aunque no parecía que este detalle le avergonzara siquiera un poco a juzgar por su pose confiada y expresión contenta. Otro detalle a notar es que no estaba usando sus usuales lentes en esta ocasión, una decisión acertada cuando va a haber mucha agitación física. En general no parecían ser vitales para ella aparentemente.

-¡Es algo más pesado de lo que aparenta...jaja! -dijo mientras probaba mover con aparente facilidad el escudo y sus piernas, envueltas en grebas metálicas- ¡Me encanta!

Estrechó la mano enguantada con energía cuando Eby se la ofreció.

-¡Si, si, primero peleamos y después comemos! Así que esperemos que nadie se lastime demasiado.

Agitó una mano en el aire, mirando entre sus compañeros.

-Uhh, ¿Ryûsei-kun? ¡Dame una señal de vida! ¡Trabajemos juntos!

Cuando su hermana le preguntó si sabía quién era, Takeshi negó levemente con la cabeza, era algo vergonzoso…¿Cómo no podía saber sobre ese héroe?...bueno, no importaba, terminaría enterándose de alguna manera u otra.

Fuera como fuera, aquello empezaba a ponerse en marcha, hoy harían pruebas, como de costumbre se imaginaba que efectivamente, le habían preparado un traje, ¿pero ya estaría preparado para “usarlo”?...no estaba del todo seguro, pero tendría que intentarlo tarde o temprano.

El profesor les ordenó que se pusieran los trajes y se marchó sin decir nada. Como era de esperar, Takeshi abrió su taquilla y vio aquel traje…no, definitivamente no podía usarlo, es más, cerró la taquilla posiblemente con un poco de fuerza, provocando que se hundiera la puerta…y aquello hizo que su armadura empezara a temblar levemente a la vez que se escuchaba un sonido metálico, no era nada bueno…

 Al final terminaron en el escenario beta, donde todos sus compañeros llevaban trajes de lo más sorprendentes e imaginativos, le hacía sentir algo de envidia, pero…prefería ir con la armadura y no usar “aquello”.

El y su hermana harían de villanos en una de esas “pruebas”, en las que tendrían que custodiar un arma y evitar que los héroes lleguen a ella y la desactiven, parecía ser algo complicado…teniendo en cuenta toda la cantidad de jóvenes promesas que habían en la escuela, pero en cierto modo estaba seguro de que con su hermana podría hacer algo útil o al menos resistir el tiempo suficiente.

-P...podemos conseguirlo Tamaki...confía en tu hermano mayor.-La animó...aunque no parecía estar muy convencido.

Los ojos de Eru se iluminaron, por fin dejaría de quedar desnudo tras transformarse... ¡Los trajes estaban listos! Eso le hizo sonreír con ligereza antes de despedir con un ligero movimiento de la mano a Aizawa quien salía del aula. El comentario que el nuevo profesor soltó sin más le hizo ensombrecer un poco su mirada, suspirando pues en parte tenía razón... ¿Quizá?. Se afirmó bien una de las vendas del brazo derecho y miró como se abrían los compartimentos, esperando paciente a que todos se movieran para ir a por sus cosas pues no tenía prisa ninguna, iban a ir al mismo sitio todos no había motivo por el que correr. 

En cuanto la marabunta se fue esparciendo tomó su maletín y marchó a los vestuarios donde profirió una maldición algo alta cuando descubrió su conjunto. " Mierda, se equivocaron mirando mi dibujo... ya sé que no tengo arte pero de una cosa a otra...." Suspiró empezando a vestirse, bastante sonrojado cuando tuvo que ponerse las medias de rejilla y encima unos pantaloncitos cortoz que dejaban ver nada y todo al igual que la parte superior que a saber quien decidiría que fuera de cuero en lugar de tela normal. Tomó aire y de pronto una nube de vapor lo rodeó, haciéndolo desaparecer junto a la ropa para que en el suelo apareciera un gatito que aparentaba tener apenas medio año de vida. "Al menos funciona el collar que les pedí" Se lamió un poco las patas antes de salir al exterior y mostrarse ante los demás en esa forma.

Aquel lugar le parecía increíble, se posicionó cerca de sus compañeros y de nuevo lo rodeó una nube espesa de neblina antes de mostrarse de nuevo como humano, con las ropas y las vendas en los brazos además de la bandita de la mejilla aunque las vendas se encontraban tapadas bajo los guantes de cuero. El sistema del collar parecía funcionar a la perfección y eso lo aliviaba mucho mientras comprobaba que todo estuviera en su lugar correctamente. 

Se sentía algo cohibido por como le habían hecho el traje, pero lo cierto es que era cómodo y muy fácil de llevar así que no le dio más vueltas mientras escuchaba en silencio las indicaciones del nuevo profesor. Buscó con la vista a Eby y marchó a su lado sujetando la cadena que unía una muñeca con el collar de su cuello entre ambas manos, algo cohibido y con las orejitas agachadas. - Espe.. espero... no ser una molestia...  Se acercó a sus " rivales" junto a su compañera aunque el solo acertó a asentir con ligereza antes de marchar con ella hacia el interior del edificio que les tocaba, como villanos. 
 

¿Que piensas que podamos hacer Koizuma-san?
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Esa fue la pregunta de su compañera mientras ingresaban en el edificio y revisaba la planta baja.
-Pues... No sé que poder tiene Hashirama-san, pero Himeko-san lleva una armadura que parece pesada así que... lo más inteligente sería ir a la azotea y ponernos allí... para cansarlos algo antes del combate. Esperaba que la azotea fuera como una cualquiera porque de ser así tendrían las de ganar. -También... Podemos ponernos en el tejado alto de la azotea, eso... eso nos dará la ventaja de sorprenderlos en cuanto pasen por la puerta. Empezó a mirar todo lo que había en el edificio mientras subían con el arma en las manos, se notaba que era atretzo por lo que no pesaba y eso era una buena ventaja en ese momento para moverse bien. -Tú... tu cuerpo puede servir de barrera... la idea es que no toquen el arma... ¿Puedes meterla dentro de tu cuerpo? Si no es ah... molesto... 

-Bueno... parece una buena idea la localización de la bomba... incluso usarme como barrera de la misma - dije apoyando su idea, pero mi tono de voz parecía desilusionado en cuanto a la misma. Pegué un pequeño suspiro y entonces agité mi cabeza - Pero me gustaría hacer más. Además, te veo y... Estas herido. No sé lo que te ha pasado y... y no tienes que contarmelo sino quieres, pero... igual supone una debilidad que ellos pueden aprovechar. Se que no sabemos el poder Hashirama-san pero... Se que voy a tener que utilizarlo algún día y debería de ir empezando ya... Solo te pido que, por favor no me juzgues.

Me apareté unos metros de Eru en el piso que nos encontrabamos según le decía eso y le detuve. Respiré profundamente y cerré los ojos poniendo mi mano derecha sobre el centro de mi pecho. Poco a poco mi cuerpo empezó a vibrar y generar ondas como si se metieran para dentro de mi propio cuerpo hasta que al final...

Mi cuerpo se cambió por completo al de Ryûsei tal y como estaba antes de entrar al edificio salvo por las pulseras que componían mi traje - P-puedo... metamorfosearme en la gente q-que veo y... t-toco... y copiar sus poderes... y... p-personalidad - dije muy timida y nerviosamente. - P-pero queda poco tiempo y... solo es una fracción de sus poderes reales... y-yo... ¿Puede servir esto de ayuda? - dije con los ojos cerrados y con miedo de que Koizuma dijera que sería inutil.

Cuando Black Dragon dijo que era el momento de ponerse los trajes de héroe Takumi volvió a levantarse de un salto, emocionado.

- ¡Sí, sensei! - exclamó mientras corría a por su maletín.

Se moría de ganas de verlo, por lo que no pudo evitar abrirlo antes de ir a los vestidores.

- ¡Ah, qué bien! - dijo sí mismo mientras lo cerraba de nuevo e iba dando saltitos junto a sus compañeros.

En el vestidor, Takumi se desnudó y se puso su traje. Consistía básicamente en una malla bastante ajustada de una tonalidad oscura. Parecía una segunda piel. Takumi comenzó a hacer estiramientos, comprobando la elasticidad de la malla.

- Se siente raro - comentó a sus compañeros en el vestidor -. Es como si no llevara nada… - confesó mientras se ruborizaba

Takumi se apresuró a ponerse los accesorios que le quedaban. Un par de guantes reforzados y una pequeña coraza pectoral.

Mientras iba con los demás al lugar donde tendría lugar la clase, se preguntó por qué Takeshi no llevaba ningún traje. Oh, quizá no lo necesitaba. Su armadura era su traje, ¿no?

Cuando llegó al Escenario Beta se cruzó de brazos y esperó la explicación de Black Dragon con expectación.

- Así que un ejercicio con… ¡combate!

Aquello le gustaba, pero también le daba algo de impresión. Seguro que había gente en la clase mucho más hábil que él. Aunque tenía curiosidad por ver con quién le tocaría.

Al ver los emparejamientos finales no quedó decepcionado. Al final parecía que podría enfrentarse de forma amistosa con los demás.

- ¡Buena suerte! - deseó de forma sincera a sus rivales, Takeshi y Tamaki, antes de retirarse con Saori a discutir su estrategia.

Takumi se veía extremadamente cómodo en su traje. Era bastante ajustado, pero parecía que era así por necesidades de su singularidad.

- Así puedo usar mi kosei en todo mi cuerpo - confirmó a su compañera tras apartarse de los demás -. ¿Qué te parece? - preguntó con una sonrisa.

> ¡Por cierto! Tenemos que pensar en una estrategia. Seguramente Tamaki será un problema muy grande si nos atrapa con su kosei. Y Takeshi es grande y fuerte, pero seguramente no muy rápido…

Takumi se cruzó de brazos y se llevó una mano a la barbilla, pensativo.

- ¿Hasta dónde llega tu Congelación, Shikare-san? ¿Podrías congelar el suelo para hacer que se resbalen? Yo seguramente puedo andar sobre el hielo sin problemas - propuso mientras cambiaba de posición, poniendo los brazos en jarras y andando en círculos.

Un combate directo… ¡Sería guay! Pero también muy arriesgado.

- Al final nuestro objetivo es sólo tocar el arma. Yo soy muy rápido, creo que podría hacerlo si los atrapamos con tu hielo - concluyó finalmente -. ¿O tienes alguna otra idea?

Ryusei había llegado al escenario utilizando su traje de héroe al igual que el resto. El suyo estaba formado por una chaqueta anaranjada con capucha bajo la cual llevaba una camisa blanca manga larga y corbata azul oscuro. También llevaba un pantalón marrón con un cinturón negro y un par de tenis deportivos anaranjados. Se podía decir que su vestimenta era la menos fantástica de grupo, puesto que todo se podía conseguir en alguna tienda de ropa, a excepción de los audifonos individuales y los guantes metálicos que llevaba puestos.

Había intentando pasar desapercibido durante el discurso del profesor, cosa que hizo bien puesto que no abrió la boca en ningún momento y se mantuvo medio escondido detrás de quién pudo, pero se sobresalto levemente cuando Sora le llamo de manera tan activa.

-¡S-Si! -asintió antes de ir hasta ella y luego ir ambos hacia el edificio donde se llevaría a cabo su prueba.

Una vez frente el edificio, el chico apoyo la espalda en una de las paredes de la entrada mientras miraba a los lados con algo de nerviosismo.

-¿Q-Qué crees que estén planeando los villanos? -comentó antes de mirarte. -. ¿De verdad puedes... andar con ese escudo?

Se le notaba bastante pequeño en cuanto a confianza, y seguramente también en autoestima. Pero de pronto, Ryusei se ruborizo levemente antes de negar varias.

-¡N-No digas eso! -te dijo... ¿a ti? No parecía estar dirigido a ti, pero no había nadie más con quién poder hablar... Tras haber alzado la voz, Ryusei se ruborizo más y realizo varias reverencias ante ti a forma de disculpa. -. ¡P-Perdón! No era para ti... -luego de reincorporarse, se giro hacia un lado para que no le vieses directamente el rostro, aunque él si te veía de reojo con verguenza. -. Mi Kosei... Es difícil de explicar, pero... Puedo fortalecerme con la luz solar, aunque no la necesito para cambiar... -de nuevo, no sabías exactamente a que se refería... -. ¿Tu.... Tienes el poder del profesor Cementoss?