El grupo se levantó temprano en la mañana. Habían descansado medianamente bien, pese al susto que más de uno se había llevado la noche anterior. Kendra os recibió en el comedor como acostumbraba, con un rico olor y una deliciosa comida en la mesa.
No iba a ser menos ahora que erais los nuevos "Heroes de Ravengro". Os lo habiais ganado a pulso, y Kendra estaba muy contenta de que hubierais desviado la atención del pueblo con su padre y de que ahora tuvierais su confianza.
No perdisteis mucho tiempo, os despedisteis de Kendra asegurándole que le iriais informando periódicamente de como iba la incursión. Si no os dijo un centener de veces que fuerais cautelosos y que volvierais a salvo, no os lo dijo ninguna. Estaba preocupada por vosotros y asi os lo hizo saber hasta que la perdisteis de vista, aun agitando su mano en señal de despedida.
La prisión de Harrowstone se encontraba sobre una colina al sur de la ciudad de Ravengro. Al acercaros a la cima, pudisteis ver como el inhóspito y encorvado techo del edificio central surgía visible por encima del enorme desfiladero que rodeaba la cercha exterior. Un camino descuidado, parcialmente cubierto por las plantas, subía desde la salida de Ravengro, serpenteando alrededor de la base de la colina y después subiendo por su ladera sur hasta la misma puerta de la valla.
Os encontrasteis frente a una antiquisima verja de madera y de metal, cuya puerta estaba casi caida en medio de dos grandes torres de piedra que una vez guardaron la entrada a la prisión. La puerta cuelga despreocupadamente abierta, chirriando suavemente a medida que el viento tocaba sus barrotes destrozados y la mecía en sus bornes oxidados.
Johansson contuvo un pequeño escalofrío que comenzaba a formarse en la base de su espalda.
Entendía que los aldeanos, menos versados que él en los misterios divinos de la muerte, vieran con tanta superstición a las ruinas que se encontraban frente a ellos.
Debemos avanzar con precaución. - dijo a sus compañeros. - No podemos olvidar que aquí falleció el Profesor y podemos esperar cualquier sorpresa...
Aconsejaría avanzar con Detect magics a mansalva ;D
Aquel lugar no le gustaba a la bárbara lo más mínimo, pero no por supersticiones o por otros cuentos de ese tipo, sino porque intuía el mal en él, allí había fallecido su querido profesor, no era un buen lugar para tener cerca. Sintió ganas de echarlo a bajo a golpes.
Apretó la empuñadura de su arma y quedó alerta: ¡Bueno, vamos o qué? exclamó nerviosa.
El sitio realmente impresionaba. Seguramente cuando estaba habitado tendría un aspecto menos terrorífico. Pero ahora, entre el abandono y lo que se imaginaban que podría haber dentro, era para pensarselo dos veces.
Brrr. Que escalofrio me ha dado.
En fin, aquí fuera no podemos hacer mucho. Tenemos que entrar. Si hay que hacer un orden de marcha diría que Gríam y Johansson fueran delante, Silas y yo en medio, y Dathran cerrando la comitiva.
Una vez dentro usaré mis conjuros de luz. Y tendré activado un detectar magia por si acaso.
Dicho esto el mago lanzó el conjuro menor que le permitía ident¡ficar si algo emanaba magia o no.
- ¡Genial! Me gusta ir la última comentó la semielfa para poder veros bien... En fin... seguro que por ir la última me llevo todas las collejas, pero ¿qué le vamos a hacer?
Miró la puerta de un lado a otro y dijo casi sin pensar: ¿no deberíamos mirar si hay alguna trampa en ella?
Una vez llegados ante el destartalado edificio no puedo evitar el comentario.
- Bonito, muy bonito. Esto debería salir en las guías de viajes....seguro que se llena de visitantes. Sonrío con cierta ironía.
Me remango antes de ponerme delante junto al paladín. - Como dice la señorita voy a dar un vistazo a la puerta y al suelo...no valla a ser que tengamos el primer susto del día. Miro en el suelo si hay algún tipo de marcas delatoras y luego paso a buscar en la puerta.
Tirada oculta
Motivo: Buscar trampas
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+7)=18
Griam buscó minucioso en los alrededores de la entrada. No encontró nada. ¿Qué sentido tenía poner una trampa en la entrada a una prisión que hace mucho tiempo que fue abandonada?
*vaya, Gríam.
Ya es por no revisar el texto después de escrito.
Me incorporo después de la búsqueda y visto que no hay ninguna trampa, me inclino como los pajes de los nobles y señalando muy serio hacia las puertas pronuncio.
- Parece que no han dejado nada. Señorita, señores....Bienvenidos a Harrowstone.
Más peligro tendremos en el interior si el Camino Susurrante - el tono de Johansson se vuelve amargo al pronunciar el nombre - ha morado en estas ruinas durante algún tiempo.
Esperó a que los arcanistas, Silas y Thanos, indicaran que no había magia para avanzar hacia las puertas principales.
Al ver que el picaro confirmaba que no había nada peligroso en la puerta, Thanos se acercó.
Puede que no haya nada aquí, pero eso no quiere decir que dentro no lo haya.
Yo siempre prefiero prevenir que curar. Es más práctico.
Pues nada. Entremos.
- Me doy con un canto en los dientes si han morado pero ya no lo hacen. No me apetece encontrarme con esos degenerados.
Embrazo el escudo y llevo la mano derecha hasta la reconfortante presencia de la maza que cuelga al costado.
La joven bárbara apretó la empuñadura de su arma y se ajustó el escudo, preparada para lo que venga, vamos, no esperéis a que sea la dama quien os enseñe.
Dando amplias zancadas, se adentró en aquel horrible lugar.
Dathran fue la primera en entrar. Avanzó unos pasos, y de pronto todo se le echó encima. Tenía una sensación claustrofóbica, esa sensación de escalofrío había conseguido convertirse en una opresión total. Sentía, al mismo tiempo, que la piel le ardía, como si se estuviera quemando. Claramente eran efectos relacionados con el miedo. No obstante, la mujer demostró su valentía y se sobrepuso sin problemas tras unos segundos. Miró hacia el resto, hacia atrás, con cierta cara de preocupación al principio, pero después sonreía de nuevo como hacía siempre.
Motivo: Voluntad
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 16(+1)=17 (Exito)
No es una trampa ni nada eh. La tirada era buena, tampoco se podia ver con un detectar magia porque no estaba activado hasta entonces.
Ustedes me dirán a donde van exactamente.
Dathran no amilanó y cruzó la puerta. Entonces una sensación horrible la envolvió unos segundos, haciendo que su corazón se encogiese y su respiración se volviese difícil de llevar a cabo.
Necesitó concentrarse un momento para pasar ese pánico sin sentido que se le había metido en el cuerpo. Después se volvió a ellos y les hizo una sonrisa pícara, ¡Damas... su turno!
¬¬
No es una trampa... no es una trampa... ñañañañaññaa
Al final es una chica la que os tiene que enseñar... Cobardicas :PPPPPPPPPPPPPP
Se me fue la olla, no llevo escudo :P Solo la espada a dos manos ;)
Vayamos en orden. - dijo Johansson señalando el pequeño edificio* que quedaba a la izquierda del camino que llevaba a la entrada principal.
*parece ¿un cobertizo?
Saco el estoque y colocándome junto a Johansson avanzamos hacia el pequeño edificio.
- Esto cada vez es mas divertido.
Con cuidado, el mago entró detrás de sus compañeros dirección a lo que parecia un cobertizo. La expresión de Dathran al traspasar la puerta le preocupó. Aunque la mujer enseguida se sobrepuso y actuó como si no hubiera pasado nada.
Hemos de extremar las precauciones. Parece que por aquí hay más de lo que se ve a simple vista.
Ya me movi en el mapa.
Entro a la par que Thanos, tal y como habíamos designado posiciones. Al pasar junto a la semielfa no puedo evitar preocuparme.
- Dathran, ¿te encuentras bien? Hace un instante parecía que se te fuera a salir el corazón por la boca. Es posible que hayas activado algo latente en el umbral.
Me pongo a la par de Thanos.
Se acercaron a la caseta. Era una pequeña casa señorial de ladrillo, con aspecto descuidado y cubierta por una abundante masa de hiedra de un color verde grisáceo. El techo de la misma se comba amenazadoramente y la puerta de entrada colgaba torcida de los bornes, de un modo similar a la puerta de la verja.
Thanos, puedes tirar un ingeniería CD 15