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Castillos y Caballeros

Torre del Fénix > Escaleras del Fénix

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24/10/2017, 17:17
(0) Alyra Vaelys

Subiendo las escaleras, tras separarse del noble, se encuentran boca de jarro con Septon y el maestre, Alyra inclina su cabeza aunque sin pasar por alto el gesto de cansancio de su amigo, la chica se preocupó por el anciano septon ya creyendo que estaba exigiéndose demasiado con lo del baile y todo aquello. Tiziano debería estar descansando y que los que desearan hablar con él, fueran en su búsqueda, pero eso no iba a pasar, es más, a veces sólo un puñado de los habitantes de la fortaleza estaban interesados en lo que el hombre pudiera decir, entre ellos, estaba Alyra que deseaba hablar sobre religión y leyes. La chica inclina su cabeza ante los hombres, y mirando al maestre, pues Tiziano le había dicho que le preguntaría sobre alguna pócima para curar los granos de su rostro.

— pues, deseaba llevarla a mi cuarto, deseo cuidar de ella — le explica a su maestro, y apartándose para que Evan y Kyler pasaran cargando a la adolorida Fiona — ah, por cierto maestre Caelus, Ser Alester deseaba enviar una carta a su tío, y creo que la ha dejado en su escritorio, para que le informe si fue enviada, — aun no se convencía del todo de la presencia de un noble en aquella torre, pero el noble no parecía estar mintiendo.

 continuemos, Fiona debe descansar, maestre, ella necesita atención, su pie parece hinchado — le explica a Caelus, aunque de pronto desvió la mirada hacia su maestro, había alguien ahí presente del que habían hablado y a juzgar por aquella mirada triste, era algo que no superaba del todo — si desea acompañarnos, septon Tiziano, puedo pedir que les traigan algo para comer, todo el mundo debe estar vuelto loco y no creo que lamenten mucho la ausencia de ambos, sin embargo yo estoy obligada — se encogió de hombros, no deseaba ir, tener que nuevamente encarar a todos esos nobles con su rostro la llenaba de inseguridad, a pesar de las buenas palabras de todos. 

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25/10/2017, 01:09
(0) Evan Ross

Subir los escalones a la pata coja sería un poco lento y complicado para Fiona. Evan estaba sumergido en sus pensamientos, por eso estuvo a punto de chocarse con el septón y el maestre cuando se encontraron al pie de la escalera. 

Levantó la mirada rápidamente, deteniendo su paso en el último momento, y se encontró con los rostros de ambos acianos. El semblante de Evan era serio y de sorpresa en un primer instante, después pareció relajarse a voluntad. 

-Disculpen - dijo por el encuentro fortuito y repentino -No esperaba unas escaleras tan concurridas- parecía bromear, al menos en parte -Veo que al final nos hemos encontrado mutuamente, maestre Caelus, pues según tengo entendido fueron en su búsqueda a causa del contratiempo sufrido por Fiona. Lady Alyra ha tenido la amabilidad inconmensurable de adoptar la responsabilidad del cuidado de Fiona. Kyle y yo le hemos practicado un primer tratamiento, aplicando frío e inmovilizando la zona - La pierna de Fiona estaba entablillada desde la rodilla hasta el pie para evitar que un movimiento en falso la hiciese empeorar -Todos esperamos que no sea nada grave, aunque dispondrá del tiempo de reposo que sea estimado - Como mayordomo se aseguraría de ello, aunque debería informar a Ginevra.

Miró después al septón, no quiso ofenderse porque fuese al único a quien no saludó ni prestó atención, se hacía cargo de la edad del anciano y de lo susceptible que estaba él mismo ante los acontecimientos que se iban sucediendo en ese día y los que estarían por llegar. 

-Septón Tiziano, si lo desea puede acompañar a Alyra, en cuanto a Fiona estará bien atendida, no la dejaremos sola hasta que regrese Lady Alyra, si a mi señora le parece correcto- Al anciano le costaba caminar, estaba en buena forma para los años que cargaba a sus espaldas, o eso creía Evan, sin embargo ya no era un jovencito y debía cuidarse de los excesos. Además, entre otras razones, consideraba que para Alyra podría ser un alivio contar con su apoyo en la comida. Por su parte no pensaba dejar a la sirvienta a su suerte, velarían por su seguridad. 

Miró finalmente a Caelus, cierta seriedad y preocupación podían verse en su mirada.

-Entonces, ¿subimos?. Cuando usted quiera, maestre.-

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25/10/2017, 02:54
- Muerta (accidente ) - Fiona Ironsmith

Pensó que ningún impedimento más se interpondría entre ellas para llegar a la habitación de Alyra y descansar junto a su señora, pero estaba equivocada.

Justo al subir por las escaleras con la ayuda de Evan y Kyle, que casi parecía que llevaban a la criada al vuelo flotando como una pluma, se encontraron de frente con el septón y el maestre.

Tiziano le preguntó como se había hecho la herida. El hombre tenía un trato cordial con ella, a pesar de no profesar la fé de los siete. - Me temo que... - dijo titubeando un poco avergonzada. - Ha sido un accidente septón, me resbalé en el recibidor, y que yo sepa no había ningún obstáculo en el suelo. Simplemente fuí torpe. - se explicó no sin sentir como el rubor atacaba sus mejillas.

Fiona bajó la mirada de inmediato, rehusando mirar directamente a Caelus. Estaba nerviosa, la idea de que manipulase su pie a su antojo le causaba temor, por el daño que pudiese hacerle. Además no tenía mucha confianza con el maestre y no quería quedarse sola con el anciano mientras le hiciese el reconocimiento médico.

Por suerte Evan aportó una buena solución para todos, se quedarían con la criada mientras su señora bajaba al comedor con el septón para comer y atender a sus invitados, y regresaba más tarde para estar con ella. Fiona asintió a su propuesta con energía.

- Si, mi señora, yo no tengo mucha hambre, el disgusto y el dolor me impide comer, en vuestra habitación siempre hay algo de fruta, así que si necesito algo pediré que me lo acerquen con vuestro permiso.

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25/10/2017, 13:51
(2) Alester Marbrand

Alester volvió a agachar la cabeza ante Alyra-. También yo me alegro de haber venido. Mi tío hizo bien en aconsejármelo, pues aunque no tenga el resultado que espera, sé que al menos la estancia será agradable. Y las personas a las que he conocido hasta ahora han merecido la pena, sin duda.

El noble era consciente de la prisa que tenían todos, lógicamente, pues Fiona seguía esperando para entrar en la habitación. Tras un educado gesto con la cabeza, se despidió de Evan y Kyle. Él también se disponía a seguir con su camino hacia el jardín, cuando Alyra le avisó de que el almuerzo ya estaba preparado:- Gracias por la información, mi señora. La verdad es que puede ser una buena idea, no he comido nada en horas. Espero que tengáis buen día… -pero no pudo terminar de despedirse, pues justo en ese momento llegaron Caelus y otro anciano al que Alester no conocía pero cuyos ropajes le hicieron pensar que se trataba del Septón.

No podía decirse que Alester fuera el más beato de los Reinos, pero su presencia nunca faltaba en las ceremonias del Septo de Marcaceniza y cada día rezaba, pidiéndoles algo a cada uno de los rostros de la fe. Por eso, el caballero se inclinó en una suave reverencia cuando supo de quién se trataba.

Cuando Caelus se acercó más, iba a dirigirse a él, pero Alyra se le adelantó. Sonrió, pues en parte le divertía la actitud de la joven, que no parecía fiarse de él completamente-. Efectivamente, maestre, como dice Lady Alyra, os he dejado la carta para mi tío sobre vuestro escritorio. Iba a esperaros en vuestro cuarto, como me dijisteis, pero al ver que no llegabais decidí dejaros la misiva y una nota para vos explicándoos por qué me había marchado.

Como al maestre aún le quedaba un tiempo, pues aún tenía que tratar a Fiona, decidió no entretenerlo más. Por las conversaciones que escuchaba, era posible que alguna persona más se dirigiera también al comedor, pero como aún no estaba seguro de si finalmente iban a ir, se puso en marcha solo-. Con el permiso de todos, me retiro a almorzar. Ya somos bastantes en las escaleras y la muchacha necesita cura y mucho reposo cuanto antes.

Notas de juego

Tiziano, sí, aún estaba por aquí.

Marcho al comedor.

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25/10/2017, 18:03
(1) Septón Tiziano

El Septón negó enérgicamente con su cabeza, un gesto exagerado probablemente fruto del cansancio y de la cantidad de gente que le hablaba en simultáneo. - Alyra, si puedes hacerme llegar la comida estaré agradecido. Prefiero ver como evoluciona Fiona y luego tengo que terminar de conversar con Caelus, así que no me moveré de aquí. Gracias por ser tan gentil con este anciano - dijo entre sonrisas, luego miró al mayordomo - No Evan, prefiero acompañarte a ti y a Kyle mientras el Maestre atiende las heridas de esta dama. La oración y la buena compañía harán sin duda que mejore aún mas rápido- le dedicó una sonrisa tierna a Fiona, era sabida la devoción con la que esa chica atendía a la familia, la Madre habitaba en ella aunque no lo supiera y él había decidido acompañarla.

Luego observó al noble que lo había saludado con una sutil reverencia - El Desconocido se manifiesta de modos que no comprendemos - dijo en voz alta, y su mirada pasó del caballero a Ayla de inmediato, y tras un segundo de silencio continuó - Casualmente la torre de los cuervos queda sobre la Capilla, en breve debo ver al Maestre en su laboratorio y luego iré para allí, así que yo me encargaré que esa carta llegue al tío de... Ser Marbrand, no es así?- su mirada se clavó en el hombre que se alejaba como escudriñando el interior de una caja cerrada - Ayla, porque no aprovechas para ir acompañada por el caballero al comedor? Los Siete nos bendicen en los pequeños detalles, incluso el Desconocido nos ayuda sin que nos demos cuenta, y está en cada uno aceptar su generosidad. - dijo con el semblante mas relajado, las hijas de Lord Rhys producían ese efecto en él -Nosotros podemos continuar atendiendo a Fiona, creo que entre tantos nos la arreglaremos- Sin esperar respuesta se volteó y comenzó a subir las escaleras.

Notas de juego

Pongo en copia a Allester, que se está alejando, y luego el Septón comenzará a subir las escaleras hacia el cuarto de Alyra, junto a Fiona y los demás.

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25/10/2017, 19:03
(0) Alyra Vaelys

Mientras todos decidían a donde mandaban a la joven, Alyra solo los observaba, era obvio que al final haría su voluntad, como siempre, era muy difícil hacerla cambiar de opinión a la cuarta hija de Lord Vaelys, sin embargo cuando Tiziano menciona al desconocido, el rostro de Alyra, que se había mantenido calmo, se transforma en una expresión de sorpresa y que se tornó oscura y apesadumbrada. Por unos segundos miró a Evan, sólo unos segundos pero una intensa mirada que guardaba todo lo que debía decirle. 

 — lleven pronto a Fiona a mi cuarto, debe estar cansada de ser llevada de un lugar para otro  — determina para poder zanjar el asunto de una vez por todas, entre tantas palabras, Fiona seguía sin poder descansar. Ella, apretaba los pliegues de su ropa, hasta soltarlos y colocar sus manos delante de ellas, entrelazadas, el desconocido y las palabras del septon había causado una fuerte impresión en Alyra, lo que había modificado pronto sus pensamientos, si hasta su mirada se había tornado más distante.

 — Fiona, apenas termine el almuerzo iré al cuarto, por favor, no dudes en pedirme lo que necesites  — le sonríe a su amiga con un poco más de ternura que pronto desaparece  — cuiden de ella, por favor  — no quería ir al comedor, no quería que la vieran así, pero como siempre, anteponía su deber a sus deseos y bajó los pocos peldaños que había alcanzado a subir para seguir a Alester al comedor, apurando el paso para poder seguir al noble. 

Notas de juego

salgo.

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25/10/2017, 22:32
(0) Evan Ross

Suspiró levemente.

-Todo irá bien-  susurró a Fiona antes de emprender el ascenso por las escaleras.

Al final serían un montón de gente en la habitación. No sabía si eso sería mejor o peor para la sirvienta. No comprendía muy bien qué esperaba hacer allí el septón, supuso que se debía a su naturaleza santa y que, por alguna razón, se preocupaba especialmente por Fiona. De todos modos no dejarían a Fiona hasta que el maestre hubiese terminado de examinarle y le hubiese aplicado las curas pertinentes. Esperaba que no fuese tan grave, aunque era difícil que con solo unas horas se solucionasen. 

En cuanto ella y Kyle estuviesen listos empezarían a  subir hacia la habitación de Alyra.

 

 

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25/10/2017, 23:31
(2) Maestre Caelus

Caelus salía a toda prisa de su laboratorio cuando se encontró con Fiona, la criada, y su abultada comitiva personal en las escaleras.-Caramba! No había visto nunca tal preocupación por el tobillo torcido de una criada.-Piensa el anciano maestre, haciendo equilibrios para que no se le caigan las pomadas y ungüentos que había cogido para curar a la sirvienta.

-De acuerdo, llevadla a mis aposentos, allí tendremos sitio para todos...-Al parecer el maestre tendría público esa mañana. Al menos se había ahorrado la caminata de ida y vuelta hasta allí.

A Caelus no le pasó por alto que Fiona evitaba mirarlo directamente. No era la primera persona que se sentía abrumada por su presencia, aunque se intuía una expresión de desconfianza en su rostro.-Pues no vas a tener más remedio que dejar que te cure yo, jovencita, a menos que prefieras que lo haga el Septón con sus oraciones.-Piensa Caelus, imaginándose a Tiziano tratando de curarla mediante plegarias a los Siete.-No temas, acabaremos enseguida.-Dice tratando de tranquilizarla el maestre.

 

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27/10/2017, 13:29
(0) Kyle Ironsmith

Kyle se estaba empezando a agobiar al estar con tanta gente en un espacio tan reducido. Quería salir de allí, llegar a la habitación de Alyra de una vez para que su hermana pudiera descansar bien y el poder relajarse.

Aunque agradecía las buenas palabras de Tiziano y sabía que sus intenciones eran buenas, Kyle no pudo evitar que se le escapara una pequeña sonrisa de incredulidad Más nos valdría descansar debajo de un Arciano que orar a los siete. Respetaba las preferencias religiosas de los demas, pero tanto él cómo su hermana profesaban la Fe de los Antiguos Dioses.

Cuando Caelus propuso llevar a Fiona a sus aposentos, Kyle pensó que se había equivocado ya que Alyra había ofrecido su habitación y lo dijo bien claro. Para evitar más confusiones, habló de forma clara y concisa - Venga Evan, subamos a Fiona a los aposentos de Alyra de una vez. Y sin esperar respuesta de nadie, comenzó a subir junto con Evan y Fiona

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28/10/2017, 22:43
(0) Evan Ross

Evan reinició la marcha acompañando a Fiona y Kyle. Empezaron a subir las escaleras lentamente, pues Fiona iba a la pata coja, aunque ayudada por ambos, y por delante tenían cuatro plantas por superar, no era deseable que apoyar el pié por accidente o un mal gesto pudiesen empeorar el tobillo maltrecho de la sirvienta. 

Confiaba que tras ellos irían ambos ancianos, el maestre iba cargado con lo que creía que podía necesitar para examinar y tratar a la muchacha. De todos modos, si viese que precisaba de algo más, podrían ir a buscarlo rápidamente, pues las estancias del maestre estaban una planta por encima de las de Alyra.

Notas de juego

Evan se dirige al dormitorio de Alyra Vaelys

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30/10/2017, 14:39
(1) Septón Tiziano

Notas de juego

[Septón Tiziano] se mueve de [Torre del Fenix: Escaleras planta baja ] a  [Torre del Fenix: Habitación de Alyra]

Somos varios que nos movemos alli, acompañando a Fiona

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14/12/2017, 11:36
- Nueva Ubicación -

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14/12/2017, 17:22
(2) Sloth ,"El Jorobado de Vaelys"

Sloth no se sentía demasiado bien consigo mismo. ¿Había encontrado a Ginevra? Sí. ¿Había conseguido información de ella? No. ¿Había conseguido que fuera a los jardines a hacer su trabajo, donde Lady Vaelys la esperaba? No. Era el criado que más tiempo llevaba en la Fortaleza, pero aún no conseguía que las órdenes de su familia se vieran cumplidas. ¡Y es que casi nadie hacía caso a Sloth! Solo esperaba que su señora no le echara la culpa a él. Sabía que las dulces niñas no lo harían, ellas le tenían mucho cariño. Pero Lady Myriah parecía muy nerviosa hoy. No quería que lo pagara con Sloth, que lo castigara con algo peor que ir vestido de bufón a la fiesta de esa noche.

La fiesta… ¡Terrible destino le aguardaba a Sloth si las palabras de Fiona eran ciertas! ¿Cómo evitarlo? ¿Cómo averiguar algo más? Siempre podía fingir que estaba enfermo y quedarse en su celda, pero ¿no era eso demasiado cobarde? Además, si no acudía a la fiesta, Sloth no podía proteger a sus pequeñas doncellas ni ayudarlas a conseguir un buen casamiento.

Pero lo primero era lo primero. Sloth tenía que encontrar a Lord Rhys y solo se le ocurría que pudiera estar en sus aposentos. Tan viejo era Sloth y tan deforme, que corría a duras penas por los pasillos, solo gracias los túneles secretos pudo llegar pronto. Por supuesto, como le había ocurrido el día anterior, no podía entrar a la Torre tan fácilmente. Tenía que pasar por los soldados y sus perros. ¡Deberían usar a uno de esos perros para probar si el vino tenía veneno en lugar de al fiel Sloth!

- Disculpadme, soldado –le dijo a uno de ellos-. Sloth tiene una tarea importante. Sloth quiere saber si Lord Rhys está en su cuarto. Lady Myriah lo busca, lo necesita en el almuerzo. No lo ha visto desde esta mañana y la señora se preocupa, claro que se preocupa- El jorobado agachaba la cabeza, con los ojos medio cerrados y la mano en el pecho, lo cual le daba una expresión general de tristeza que esperaba que calara en los fríos soldados-. Si está ahí, ¿creéis que puedo subir a hablar con él o, si yo no puedo, al menos podéis subir vos para transmitirle el mensaje de su esposa? Es una orden de ella, se lo ha dicho a Sloth. Una orden urgente e importante, sí.

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14/12/2017, 18:07
Soldado (PNJ)

Lord Rhys no se halla en sus aposentos, ni tampoco en la Torre del Fénix. Desde esta mañana nosotros tampoco le hemos visto, por lo que no sabemos dónde se encuentra. Dijo uno de los soldados sin dejarle pasar.

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14/12/2017, 21:45
(2) Sloth ,"El Jorobado de Vaelys"

Sloth desconfiaba de esos soldados, no le gustaban en absoluto. Odiaba que no le dejaran pasar a los aposentos de sus señores y que estuvieran ahí amenazantes, con sus perros enormes y sus armas. ¿Le decían la verdad sobre que Lord Rhys no estaba en sus aposentos? Nadie lo había visto, no podía estar en un lugar público.

Pero no podía hacer nada. El bueno de Sloth no podía enfrentarse a esos enormes guardas. Si le decían que Lord Rhys no estaba en su cuarto, tenía que creérselo. Negó con la cabeza, desesperado por no haber tenido éxito en nada desde que se había levantado. ¡Qué bien representada estaba su vida en ese día de fracasos!

Se fue alejando poco a poco de los soldados, sin decirles nada más. Tenía que darle las malas noticias a su señora. Esperaba que al menos los criados de la cocina hubieran preparado todo ya en los jardines y, así, la encontraría algo más contenta.

Notas de juego

A los jardines.

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18/01/2018, 12:54
- Nueva Ubicación -

La imagen que la pequeña Mira vio al bajar las escaleras fue aterradora. Fiona Ironsmith una de las mejores criadas de toda la Casa Vaelys yacía en las escaleras tirada. Algo le había sucedido, pues parecía haber caído por ellas. Tenía la cabeza abierta y en el suelo había un líquido blanquecino mezclado con la sangre que brotaba de su cabeza.

Era horrible, una imagen dantesca para la pequeña Mira, pero ella era consciente de lo que había sucedido. Fiona Ironsmith había muerto.

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18/01/2018, 13:03
- Nueva Ubicación -

Notas de juego

Marcaos solo para vosotros dos.

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18/01/2018, 13:07
Soldado (PNJ)

Buenas tardes, lady Tabitha. Dijo el soldado dejando pasar a la joven Vaelys. Luego hicieron un gesto para prohibir el acceso a Sebastián. Sabe que los criados masculinos no tienen permiso a estas horas. ¿Dónde va? Le dijeron al joven criado.

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18/01/2018, 13:08
- Narrador -

Notas de juego

El olor a cuadra es evitente al estar junto a Tabitha, esa peste procede de ella claramente.

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18/01/2018, 13:11
- Abandonó el castillo - Sebastian Ríos

Disculpa, tengo un mensaje para Fiona. Me han dicho que se había dirigido a esta torre. ¿Puedo subir para pasar el mensaje? Sebastián le contestó al guardia preocupado. Él quería que esto pasara desapercibido y ya lo había encontrado una de las señoras y el guardia le pedía explicaciones. Ya había pensado que esto podia pasar al proponer Fiona esta torre fuera de su alcance, pero Fiona se había ido corriendo sin darle la oportunidad de hablar y el pensó que quizás ella sabia algo o tenía permiso para que se encontraran allí ahora. ¿No? Ella está aquí, ¿no? Podeis llamarla, por favor.