Partida Rol por web

Chaos Theory [+18]

Prólogo I: Inicio y Tutorial

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30/08/2018, 03:03
Director

Un sonido extraño retumbaba en tu cabeza antes de que un destello en la oscuridad te hizo abrir los ojos para finalmente despertar.

Estabas de pie, con la mano en la cabeza por el dolor, y como primer instinto miraste a los alrededores para poder ubicarte. Por lo que pudiste ver, te encontrabas en una estación de trenes, pero... ¿que era exactamente un tren?

Una multitud de personas esperaba en ambos lados, cada uno en lo suyo. Sus miradas perdidas en la nada, como si ignorasen todo lo que pasase a su alrededor, incluyéndote. No reconocías a nadie, y más importante... No te reconocías a ti mismo.

Era una sensación extraña. Había un infinito vació en tu interior que te aseguraba que no sabías nada de ti mismo, pero allí estabas: parado al fondo de la multitud en una estación de trenes; si por alguna razón ibas a coger el tren, no lo harías desde allá atrás.

Te quedaste un poco atontado, sin decir nada, esperando el tren por el que por alguna razón habías ido. Te sentías uno más de la multitud, perdido en tus pensamientos vacíos mientras repetías un tipo de rutina.

Al final, cuando el tren llego y empezó a atravesar las vías...

-Click

Un chasquido de dedos te hizo abrir los ojos luego de un pesado pestañeo. Seguías en la estación, pero el tren ya no estaba, y las personas tampoco: solo se encontraba un hombre de cabello verde, sombrero y traje, parado delante de ti, chasqueando los dedos de la mano derecha constantemente frente a tu rostro.

-Oye, oye ¿estas despierto? -se debía estar dirigiendo a ti... no había nadie más a quien referirse. - Anda que no eres vago... Quedarse dormido en una banca en medio de la nada es algo, pero... ¿Dormir parado en medio de una estación de tren inutilizada? Eso si es que es otra cosa.

La manera en la que hablaba... ¿Japones? No estabas seguro: En cuanta más vueltas le dabas, menos comprendías, pero estabas seguro de entender lo que te decía, y poder responder.

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30/08/2018, 03:53
Director

Otro día en ese condenado instituto estudiantil...

Las clases cada vez se hacían más largas, y es que cada vez los abusivos encontrabas nuevas formas de molestarte y humillarte. Por suerte, tenías a alguien que te ayudaba a superar las dificultades y hacerte respetar ante los demás chicos y chicas.

Había terminado la última clase, se había abierto el portón, y con eso no tardaste en salir del patio lo más pronto posible junto a la otra multitud de estudiantes que se iban apenas podían. Cada quien tenía su vida, y no es que la tuya fuese mala, pero aquel lugar era detestable en distintos momentos...

Tras salir, tomaste rumo a tu casa como era costumbre. No debían ser más de las doce en punto, por lo que podías tomarte el camino con calma. Había mucho movimiento en las calles, como ya era habitual a esa hora, pero nada de que preocuparse; normalmente te dejaban en paz cuando por fin te retirabas.

-Oye...

Una voz detrás de ti llamó tu atención. Tuviste la sensación de que se dirigía a ti, por lo que volteaste a ver quien te llamaba... pero no había nadie. No le diste muchas vueltas, seguramente fuese alguien llamado a otra persona. Entonces, al darte la vuelta para seguir caminando, te topaste con un hombre delante de ti.

Cabello verde, sombrero y traje. No lo conocías de nada, pero él sonreía con amabilidad y confianza.

-Perdona, pequeña. Estudias en ese instituto que esta cerca de aquí, ¿verdad? -te pregunto. Solo había un instituto en las cercanías, por lo que solamente se podía referir al tuyo. - Escuche que los estudiantes de allí son muy buenos y aplicados... Son puras mentiras, ¿verdad?

Era cierto: por más que los estudiantes disimulasen ser de lo más puros ante los demás, ya tenías claro lo malos que podían ser realmente.

-¿Puedo preguntar cual es tu nombre?

 

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01/09/2018, 03:47
Caroline Marki
Sólo para el director

Otro día que había pasado en aquel infierno de lugar. Caroline no sabía muy bien por qué continuaba asistiendo a ese lugar. Lamentablemente, no quería decirles a sus tíos lo que sucedía en ese sitio, ya que no quería preocuparles más de lo necesario, cuando ya bastante esfuerzo hacían por ella para que tuviera una vida mejor. Sin embargo, tenía que admitir que algunas veces se cansaba de tener que soportar ese nivel de maldad dirigido hacia su persona. Lo bueno era que tenía a Francesca para protegerse de quienes querían hacerle mal, si bien hubiera preferido que las cosas se resolvieran de manera pacífica, en lo posible, aunque las chicas no parecieran desear esa clase de vía diplomática. Siempre querían molestarla, sin importar cómo, y siempre su "hermana" aparecía para darles su merecido, incluso si eso significaba que las cosas no hacían más que empeorar. La violencia provoca más violencia, era un ciclo sin fin pero... al menos estaba segura con ella.

No obstante, en cuanto finalizo el período de clases durante ese día, la joven no dudó en salir rápidamente de su colegio, con la intención de abandonar aquel horrible lugar y volver a su hogar, donde sus tíos la esperaban y seguramente le darían el cariño que deseaba como siempre. Era bueno que ya no estaba con su madre... No quería volver a verla jamás, en lo posible. Sólo quería que la continuaran queriendo como lo hacían sus tíos, nada más, eso y estar siempre con Francesca. Si bien era temprano, y podía tomarse el camino con calma, la rubia prefería regresar cuanto antes a su hogar, ya que no quería arriesgarse a encontrarse con una de esas chicas que eran tan malas con ella. En especial, Eliza... era la peor de todas y la más cruel, y  lo más feo era que utilizaba al resto para divertirse con su tormento.

Sin embargo, mientras pensaba en regresar a su hogar, pudo escuchar una voz que hizo que se detuviera en su deseo de continuar su camino. Al girarse no había visto a nadie, a pesar de que habia pensado que se dirigía a ella, por lo que Caroline ladeó la cabeza hacia un costado, un tanto extrañada ante el hecho de que no hubiera nada, antes de volver la mirada al frente, sólo para llevarse una sorpresa al encontrarse con un extraño parado frente a ella. En verdad... era extraño, su apariencia y su forma de comportarse. La joven sabía que no podía confiar en todo extraño que le hablara en la calle, por lo que no pudo evitar mostrarse un tanto desconfiada por un momento. Aunque... tenía que reconocer que parecía bastante amable, como si no fuera una mala persona.

- E-eh... Sí. - Afirmó un tanto tímida al escuchar la primer pregunta del sujeto, aunque aquello debería de ser un poco obvio, teniendo en cuenta que era el único instituto cercano y ella llevaba el uniforme del lugar.  - Mm... no sé si debería decirlo. Sí... son malos y crueles. Yo sólo quiero que me dejen en paz y que sean buenos conmigo. - Le explicó al extraño que aún no se había presentado. Parecía que era una persona dispuesta a escuchar sus problemas. No, Caroline, no deberías confiar en él. No me agrada. ¿Quieres que hable yo? Preguntó su "hermana", al mismo tiempo que le aconsejaba que no conversara con el sujeto del sombrero. La rubia no pensaba que fuera tan malo, pero Francesca rara vez se equivocaba. - Soy Caroline... Francesca dice que no le agradas, que puedes ser malo. ¿Eres malo? - Se expresó un tanto nerviosa, no sabiendo si debería de darle permiso en ese momento a su "hermana" o si debería esperar la respuesta del extraño antes de llegar a esa conclusión.

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01/09/2018, 13:58
Fergus
Sólo para el director

Su cabeza retumbaba levemente, realmente no sabía que sucedía a su alrededor y todo apareció de un momento a otro como si hubiera estado en algún tipo de trance que no le dejaba recordar absolutaente nada. ¿Quien era? ¿Que hacía allí? ¿Por que estaba toda esta gente a su alrededor? Llevaba una camiseta sin mangas y una chaqueta de cuero rojo y pantalones tipo jeans de color negro además de zapatos a juego, eso le hacia pensar que no era alguien que tuviera problemas de dinero pero aún así no podía recordar absolutamente nada de si mismo.

Sus ojos rojizos debido a su albinismo se quedaron fijos en la mirada del sujeto frente a él, era extraño aunque no por la sensación de que nadie más lo estuviera mirando a él o incluso a si mismo, más que nada era raro por el hecho de que tenía una extraña aura de saber más cosas que él, muchas más cosas. Su boca se abrió levemente y con la misma sensación de extrañeza sus palabras salieron en un idioma japones que algo le indicaba que no era el suyo propio. -¿Dormido en una banca? ¿Me quede dormido? -Tanteaba con preguntas de poca monta, realmente no era eso lo que quería preguntar pero el hablar de más siempre había sido un problema en todo tipo de peliculas, libros o cosas por el estilo aunque ahora mismo no recordaba ninguno. -¿Porque pareces tener respuestas a las mismas preguntas que me estan haciendo? ¿Quien eres?

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04/09/2018, 14:15
Kantoku

-Mucho gusto, Caroline. Yo diría que soy alguien incomprendido, alguien que quiere enseñarle las posibilidades y oportunidades para mejorar a los demás, pero siempre soy rechazado. En todo caso, puedes llamarme Kantoku-San.

Con una sonrisa en su rostro, acerco y poso suavemente su mano derecha sobre tu cabeza. En ese momento, un pestañeo te llevo a un ambiente totalmente diferente. Ya no habían personas, autos moviéndose, tanto ruido, y la ciudad se sentía apagada, pues la única luz venía de los rayos de sol que atravesaban las ahora densas nubes.

-Mi deber es ejercer cierto papel en cierto juego, uno donde los ganadores pueden pedir un deseo sin regla alguna. ¿Quieres mejorar el mundo? ¿Pedir algo para ti? ¿Tal vez cambiar algo? Lo que tengas en mente puede hacerse realidad, si ganas -añadió antes de retirar su mano, momento en el que otro pestañeo te llevo al mundo real. - El destino te ha querido dentro del juego, y así lo llevaré a cabo.

Entonces, sentiste un extraño e intenso hormigueo que recorrió todo tu cuerpo, permaneciendo en tu espalda antes de desaparecer luego de unos segundos.

-El juego comenzará en unas horas: para ese momento, apareceré de nuevo para hacer de tutorial. Hasta entonces... -hizo una reverencia de despedida mientras se quitaba el sombrero de manera caballerosa. -. Disfruta de tu día, pequeña.

Tras despedirse, el hombre desapareció en un pestañeo. Mirases a donde mirases, no lo encontrabas; se había ido.

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04/09/2018, 14:36
Kantoku

-Bueno, no se si dormido sea la palabra correcta, pero es lo más cercano, sí.

Con esa amable y confiada sonrisa, el hombre desconocido se llevo las manos a los bolsillos sin quitarte la vista de encima.

-Pues resulta que no eres tan despistado, ¿no, Feris? -en ese momento, tu cabeza retumbo de nuevo y fue sacudida por aquel sonido extraño que no llegabas a reconocer. Tras breves segundos para que el dolor desapareciese, caíste en cuenta sobre cual era tu nombre. -. Lamento decir que no puedo decirte más que eso sobre ti mismo; no seria interesante si te contase toda la historia antes de empezar, ¿verdad?

Soltando una leve risa, aquel sujeto mostró una mirada afilada en sus brillantes ojos amarillos.

-Si te encuentras aquí, es porque el destino así lo quiso. Mi deber es ejercer cierto papel en cierto juego, uno donde los ganadores obtienen el deseo que quieran. Puedes recuperar tu memoria, desear una nueva vida, tal vez otra cosa... Lo que sea que tengas decidido en ese momento, podrá hacerse realidad -entonces, un extraño e intenso cosquilleo recorrió todo tu cuerpo, permaneciendo en el dorso de tu mano dominante antes de desaparecer luego de unos segundos. -. No te mentiré esta vez: no estas obligado a jugar, pero realmente ya no tienes nada más que hacer, y tal vez recuperes algo más que tu nombre durante el transcurso del juego...

Sin decirte nada más, el hombre paso junto a ti y fue hacia la salida de la estación. Aún tenías muchas dudas sobre ti, sobre él, sobre todo... No podías dejarlo ir así como así.

Siguiéndole el paso, llegaste hasta afuera, encontrándote con una gran ciudad que llegaste a reconocer como Japón. Estaba silenciosa, sin gente, sin ruido, apagada... La única luz venía de los rayos de sol que atravesaban las densas nubes.

-No estas obligado a jugar -repitió el hombre, que ahora se encontraba detrás de ti por arte de magia. -. Pero eso significa que nadie se hará responsable de lo que te hagan los seres que rondan este lugar, y tampoco se harán responsables de lo que le suceda a ella...

No sabías a quien se refería con "ella", pero... sentías que si la mencionaba, era porque era alguien importante para ti. Lo sentías en tu interior...

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04/09/2018, 15:10
Caroline Marki
Sólo para el director

Aquel extraño sujeto llamado Kantoku, comenzó a soltar un montón de palabras que a la joven mucho no le importaba en ese momento, ni tampoco llegaba comprender demasiado, no al menos respecto al contexto original de aquellas palabras. ¿A qué se refería con "enseñarles la posibilidades y oportunidades para mejorar a los demás"? Parecía uno de esos extraños un tanto locos, con alguna enfermedad mental o algo parecido, y eso la preocupaba un poco, ya que no estaba segura si aquel hombre planeaba hacerle algo malo o si simplemente quería que alguien le escuchara decir cosas sin sentido aparente.

Está loco. Deberías alejarte de él, Caroline. Aconsejó la voz de Francesca en su cabeza. Era algo gracioso, ya que muchos habrían dicho lo mismo de ella, por lo que había cierta hipocresía en las palabras de la otra personalidad.

No obstante, mientras consideraba el consejo de su "hermana", el extraño no tardó mucho en acercarse a ella, posando su mano sobre su cabeza, aunque sin ninguna muestra de hostilidad, razón principal por la cual Francesca no tomó el lugar de Caroline para defenderla de cualquier amenaza, como siempre hacía. Aún así, de un momento a otro, había pasado de estar en la calle, a encontrarse en una lugar desconocido para ella, aunque no... estaba en el mismo lugar, pero había algo raro, como si hubiera cambiado el ambiente. Entonces, Kantoku volvió a expresarse, diciendo algunas cosas que llamaron la atención, por primera vez, de la rubia. Había hablado de un juego, y la posibilidad de pedir un deseo, el que quisiera.

- ¿Un deseo...? - Por un momento, no pudo evitar mostrar cierta desconfianza, ya que ella no creía en esa clase de cosas. La vida no era tan buena con ella como para que algo así fuera posible. Además... si pudiera pedir un deseo.... ¿qué pediría? Había tantas cosas que podría querer. Que sus compañeras la dejaran en paz y que no le hicieran daño. Que su padre volviera a la vida y la cuidara nuevamente, o que su familia jamás se hubiera visto afectada por aquel incidente con la muerte de su padre. O... que el mundo la quisiera, la adorara, para que nunca hubiera alguien que pudiera odiarla, que todos la apreciaran y escucharan sus deseos, que expresaran lo buena que era. Un mundo así sería perfecto. Si, realmente lo sería, ¿verdad, Caroline? Nuevamente pudo escuchar la voz de Francesca en su mente, quien parecía concordar con ella.

Tras esas palabras, pudo sentir un extraño hormigueo en su interior, recorriendo todo su cuerpo hasta permanecer en su espalda y luego desaparecer. Luego, el extraño volvió a expresarse, dejando en claro que la buscaría para participar de un tutorial, posiblemente del juego que había mencionado. - Ah... e-espera... Se fue. - Quiso detenerle, en el momento en el que vio cómo Kantoku se despedía de ella, antes de desaparecer por completo, sin poder encontrarle en ninguna parte en especial. Era como una especie de mago... un mago raro. De cualquier manera, aquello permaneció un instante en la cabeza de la joven, antes de considerar que sería mejor regresar a su hogar, en vez de correr el riesgo de encontrarse con aquellas que buscaban atormentarla. Sin dudarlo mucho, comenzó a caminar hacia su casa.

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07/09/2018, 22:51
Director

La siguiente hora fue normal en donde cabe. Cada tanto sentías ese hormigueo en tu espalda que te recordaba lo sucedido, pero nada como para detener tu rutina.

Fue poco más de las una de la tarde cuando aquel cosquilleo se hizo notablemente más intenso, llegando a volverse una molesta comezón. De pronto, y antes de que pudieras decidir que hacer con aquella sensación, un chasquido de dedos cambió de nuevo el ambiente.

Tu casa se encontraba más silenciosa, las luces se habían apagado, y la única iluminación que tenías venía de la que entraba por las ventanas. El cosquilleo en tu espalda se había detenido, y te sentías de nuevo en ese lugar.

-¡Hola! -saludo en voz alta el hombre de cabello verde, quien se encontraba parado detrás de ti. -. He terminado los primeros preparativos para el juego, por lo que podemos proceder a comenzar.

Con esa sonrisa amable, Kantoku te observo de pies a cabeza antes de sujetarse la barbilla.

-Supongo que desde hace rato debiste sentir un cosquilleo en tu espalda, ¿verdad? Eso significa que ellos están cerca... -no sabías a quienes se refería, pero pudiste notar como la sonrisa del hombre fue decayendo poco a poco. -. Esperaba poder reunirles a ambos antes de ponerme a dar explicaciones, pero mejor ir ahorrando tiempo antes de que ellos lleguen.

Entonces, el hombre con sombrero metió la mano en su gabardina para sacar una hoja de papel en blanco, sin una sola arruga.

-Ha partir de ahora, visitarás este mundo a cierta hora aleatoria del día. Aquí, tus deseos y tu imaginación te permitirán liberar poderes más allá de los límites humanos -entonces, Kantoku empezó a dibujar algo sobre el papel, utilizando dos de dos de su mano derecha como pincel. Al voltear la hoja para enseñártela, pudiste ver que ahora tenía cosas escritas en... un extraño lenguaje que no comprendías. -. Este es el lenguaje utilizado por los dioses antiguos. A simple vista, parecen simples símbolos y figuras sin sentido, que de paso cambian por si solas luego de unos segundos, pero, puedes leer perfectamente lo que dice si te concentras aunque sea un poco. Anda, inténtalo.

Aquel sujeto te entregó la hoja de papel con los extraños símbolos. Tal como había dicho, parecía que unos símbolos aparecían sobre otros que desaparecían luego de un rato. Haciendo caso a lo que Kantoku te había dicho, te concentraste en intentar leer y descifrar aquel escrito. De pronto, comprendiste lo que había escrito.

Caroline Marki

Nivel 0

Físico 2
Destreza 2
Inteligencia 3
Percepción 1
Voluntad 2

Habilidades

-

-Esas son tus estadísticas del juego. Actualmente no tienes nada en especial, pero más adelante te irás volviendo más poderosa -te fue explicando. -. Arriba aparece tu nombre y tu nivel actual, el cual es cero porque no has recibido esencia. Luego, aparecen tus estadísticas, y por último tus habilidades, las cuales no tienes aún.

Entonces, el timbre de tu casa sonó. Ese cosquilleo recorrió tu espalda de nuevo, y para colmó, Kantoku había desaparecido por arte de magia. Así, sin más; sin darte más explicación, que tenías que hacer, ni nada. Te había dejado sola, en "tu casa", con alguien tocando el timbre.

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07/09/2018, 23:38
Caroline Marki
Sólo para el director

Tras regresar a su hogar, la joven rubia había almorzado, para luego retirarse a su habitación con la intención de estudiar y hacer sus deberes como todos los días, mientras comía unos dulces que había adquirido. Sin embargo, resultaba un poco difícil estudiar, cuando aquel hormigueo aparecía de vez en cuando, recordándole lo que había sucedido anteriormente. Cuando eso sucedía, no dudaba en masajearse la espalda, intentando eliminar la extraña sensación. Aún no sabía muy bien lo que había sucedido, pero estaba claro que había sido bastante raro, en especial aquel extraño sujeto llamado Kantoku. También era posible que lo hubiera imaginado que todo, que fuera alguna otra personalidad que había desarrollado junto con Francesca, aunque no estaba segura... no creía que aquello era algo que pudiera crear en su mente, no cuando no le gustaba mucho la apariencia de ese hombre. Habría imaginado mejor a un enorme oso de peluche o algo parecido.

No obstante, en un instante, aquel hormigueo volvió a aparecer, volviéndose cada vez más intenso, como si no pensara desaparecer y convirtiéndose en una necesidad extrema de rascarse, debido al comezón que aquello le provocaba en su espalda. Bien, tenía que reconocer que la situación se volvía cada vez más rara. ¿Acaso le había transmitido una enfermedad o algo parecido, con tan sólo tocarla? Esperaba que no fuera nada grave, de lo contrario sus tíos se enojarían con ella, y Caroline sólo quería que la quisieran. Te dije que deberíamos haberle dado una patada en sus cerezas, Lina. Comentó su "hermana" en su mente, regañándola por el hecho de no haberle permitido actuar en su momento, en contra de aquel extraño. Aún así, mientras debatía entre rascarse como si no hubiera un mañana, un chasquido de dedos la sacó de sus pensamientos, al mismo tiempo que el ambiente volvía a cambiar, como había sucedido antes.

- Ah... tú de nuevo. - Se expresó un tanto aliviada, al notar que el comezón en su espalda había desaparecido, al mismo tiempo que había aparecido el sujeto de extraña apariencia, Kantoku. Parecía que, como había prometido, había aparecido para que ella pudiera participar del juego que había mencionado antes. - ¿Cómo comenzamos? - Preguntó un tanto confundida aún, teniendo en cuenta que no sabía muy bien de qué hablaba, o si realmente le cumpliría su deseo, si ganaba. No estaba segura si podía confiar en ese extraño, más cuando ni siquiera le explicaba de qué se trataba el juego. - ¿Quiénes son "ellos"? - Volvió a preguntar, aunque notando, para su decepción, que Kantoku no parecía dispuesto a responder a sus preguntas, como si tuviera prisa por algo. ¿Tal vez por los que había dicho que estaban por llegar? Tampoco tenía idea de a quién se refería cuando había dicho que la reuniría con alguien... Sólo esperaba que esa persona fuera buena. De lo contrario, Francesca tendría que darle su merecido.

Entonces, cuando creía que ya había terminado con la explicación, la cual no comprendía muy bien, el sujeto de cabello verde volvió a hablar más y más, hablando sobre que visitaría un mundo donde sus deseos e imaginación tendrían gran influencia para la utilización de ciertos poderes... ¿Qué poderes? Ella no sentía nada especial, excepto por el comezón que había sentido antes, y que no deseaba sentir de nuevo. ¿Realmente obtendría lo que deseaba si participaba de ese tonto juego? Aquel mundo perfecto que anhelaba, en el que todas las personas, de las cuales ella deseara atención, la quisieran con toda su alma. El problema era que seguía sin comprender muy bien a qué se refería con toda esa explicación, o cuál era el objetivo del juego. Sólo hablaba y hablaba sin parar, y no la dejaba hacer las preguntas necesarias. Ah... una hoja de papel. Le estaba mostrando una hoja con una escritura extraña... lenguaje de los dioses antiguos. Bien, o estaba muy loco, o realmente estaba diciendo la verdad y aquello era el lenguaje de los dioses antiguos. De cualquier forma, decidió escucharle y concentrarse en las palabras que resultaban difíciles de comprender, notando que éstas comenzaban a adquirir sentido, como si hubiera aprendido dicho lenguaje de la nada.

- ¿Cómo consigo esencia? ¿Y las habilidades? ¿Cómo es el juego? - Preguntó en cadena al ser, aún sin saber qué era lo que debía de hacer. Sin embargo, así como había aparecido, no tardó en desaparecer, sin responder a las preguntas cuyas respuestas Caroline deseaba. Vaya cabroncete. La próxima le pateamos las cerezas por no hacer su trabajo. Volvió a expresarse Francesca, bastante cabreada por el hecho de que el extraño se hubiera marchado con rapidez, en el momento en el que alguien llamaba desde la puerta de su hogar, y el cosquilleo volvía a recorrer su cuerpo. Parecía que Kantoku tenía algo que ver con el hecho de que apareciera o desapareciera dicho cosquilleo. De cualquier manera, tras escuchar el timbre, la joven no tardó mucho en salir de su habitación y bajar por la escalera con la intención de acercarse lo suficiente a la puerta. - ¿Quién es? - Preguntó con tranquilidad, sin saber muy bien quién era la persona que había tocado el timbre. Como era lo usual, preguntaba siempre quién era, antes de decidir si abrir la puerta o no, como ya le habían enseñado sus tíos.

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09/09/2018, 22:27
Fergus
Sólo para el director

No sabía si confiar en él, sus palabras no se relacionaban perfectamente con su mirada que ocultaba obviamente la verdad. -¿Feris? -¿Era ese su nombre? No, estaba seguro que no era su nombre pero era bastante parecido, su cabeza dolia por unos instantes y luego sus recuerdos parecían volver hasta llegar a un apodo, un apodo que simplemente lo asumía como cercano, casi como su nombre, pero no real. -Fergus...Fergus es mi "nombre" -Estaba seguro que aquel sujeto sabía que no era su verdadero nombre y quizás en algún momento pudiera decirle cual era el real, pero ese apodo le quedaba. 

-Me hace sentir que juegas conmigo...Extraño. -Pronuncio mientras apretaba los puños, se había visto a si mismo y parecía ser que era un peleador capaz, aunque algo le indicaba que esa no sería la mejor opción en este caso. -No entiendo ni una maldita palabra de lo que dices. ¿Es un juego? ¿Porque parece ser que nadie más aquí esta pendiente de nosotros? -Su cuerpo se movió hacia adelante aunque luego de dar un paso simplemente se quedo quieto sintiendo que la mirada de aquel tipo era peligrosa. Incluso el cosquilleo fue un mensaje que le hizo mantenerse a alerta. 

Un pequeño cosquilleo recorrió su espalda hasta llegar a su coxis, realmente la palabra en relación a esa chica le había causado cierto temor, como si fuera importante para él. -¿Seres que rondan este lugar? ¿Juego? ¿Ella? No puedo tomar todas las cosas que dices al pie de la letra sin hechos, es como si me estuvieras hablando y tuviera que ordenar un maldito rompecabezas. -Llevo sumano derecha hasta su cabeza sintiendo una molestia al no poder recordar nada importante de su vida. -¿Tú has causado todo esto?

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11/09/2018, 22:51
Kantoku

-Bueno... Se puede decir que ayudo a que se mantenga de esta forma...

El hombre hizo un gesto con la cabeza para que lo siguieses antes de empezar a caminar por aquellas calles solitarias. No veías otra opción: no te había hablado mucho, pero era quien parecía saber más sobre lo que sucedía. Le seguiste el paso.

En cuanto más mirabas a tu alrededor, más nostálgico y perdido te sentías. De alguna manera, reconocías aquellas calles y lugares que recorrían, pero a la vez quedabas con muchas dudas: ¿Como conocías aquellos lugares? ¿Que hacías allí? ¿Por que te sentías tan familiarizado con el camino?

Al final, fue casi media hora de caminata antes de llegar a la entrada de una casa. Se encontraba tan silenciosa y apagada como el resto de la ciudad, pero no sentías nada; tal vez no conocieses esa casa...

-Bien, ahora necesito que te quedes parado en la puerta y esperes a sentir un cosquilleo en tu mano antes de tocar el timbre. Ni un segundo antes, ¿ok? -te explico el hombre de verde mientras se acercaba a la puerta. -. Como ya dije, no tienes nada que hacer, aparte de que los seres que rondan las cercanías podrían darte caza si te alejas de aquí, por lo que no dudo en que seras un buen chico y esperarás hasta el momento adecuado para tocar.

Entonces, el hombre con sombrero desapareció en un pestañeo antes de que pudieras preguntar nada. Habías quedado totalmente solo, en medio de una ciudad extrañamente conocida, frente a una puerta con un timbre que no deberías tocar hasta que llegase el momento... Si lo que decía aquel sujeto era verdad, lo mejor era esperar allí.

Media hora de espera aproximadamente. No había pasado nadie, no habías escuchado a nadie, y no habías recordado nada. Parecía ser una perdida de tiempo, empezabas a considerar que todo se tratase de un tipo de broma pesada muy bien hecha, pero... cuando estabas pensando en retirarte, un fuerte cosquilleo recorrió el dorso de tu mano. Hasta ahora, la única persona con la que habías hablado era el hombre de sombrero, el cual te había dado una sencilla orden que deberías cumplir ahora...

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13/09/2018, 02:10
Fergus
Sólo para el director

Fue en ese instante en que supo que sus preguntas realmente no tenían sentido alguno, ninguna sería respondida de manera directa debido a que ese tipo buscaba mantener la información al minimo, le molestaba el hecho de que todo pareciera ser una especie de juego y él participaba sin el gusto de querer hacerlo, casi como si sus recuerdos estuvieran puestos sobre la mesa y el tuviera una mano de naipes que no conocía, simplemente debía seguir adelante e intentar descubrir lo más que pudiera por sus propios medios. 

Su mirada intento mantenerse calmada mientras le seguía cada vez más de cerca, a la par, insinuando que él no tenía el control de la situación y que simplemente seguía sus instrucciones ya que no tenía opción alguna, pero que en cualquier momento podía cambiar aquello. 

-Si que te gusta dar instrucciones y no entregar demasiado a cambio, eres algo molesto. -Pronuncio de manera sincera mientras observaba al chico desde su inmensa altura con un rostro de pocos amigos, aunque su voz muchas veces parecía ser algo jugueton como si todo aquello no fuese algo serio. -Entonces creo que no tengo muchas opciones, practicamente si me voy de aquí sería la peor opción que estaría tomando ¿no? -Pronuncio con clara ironía mientras se mantenía en el lugar indicado, aburrido mirando hacia la nada intentando recordar cosas que no lograba visualizar en su hogar.

El instante había llegado y sintió el cosquilleo en la mano, con rapidez llevo su mano hasta el timbre pero no toco en el instante, espero un par de minutos pensando si aquello era realmente viable, luego de pensarlo supo que no habían más opciones, simplemente lo que hubiera adelante sería algo que debía enfrentar si o sí. Toco el timbre...

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13/09/2018, 20:51
Kantoku

-¿Quien es?

Luego de un breve momento de que sonase el timbre, la puerta cayo echa polvo, dejando así a una indefensa niña de hermoso cabello rubio y ojos celestes frente a un hombre albino con camiseta sin mangas y una chaqueta de cuero rojo, con pantalones tipo jeans de color negro además de zapatos a juego.

-¡Felicidades! -grito e voz alta el hombre de cabellos verdes, que tras un pestañeo de la pequeña niña, apareció tras el chico. -. Os habéis reunido al fin: son una pareja creada por el destino para participar en el juego. Caroline, Fergus; Fergus, Caroline -los presentó rápidamente el uno al otro. -. Realmente me hubiera gustado tener más tiempo: conversar un poco, explicarles las reglas, darles un par de objetos y consejos... Pero el vació nunca descansa, ¿saben?

Entonces, antes de poder preguntar nada al hombre que algún día podría darles un infarto con esas apariciones repentinas, una terrible sensación recorrió la espalda de Caroline; un hormigueo intenso que la llevaba a curvarse notablemente.

-No tengo tiempo de darles el paquete completo, pero consideren esto una pequeña ayuda para enfrentar lo que se viene -comentó el hombre de cabello verde antes de crear en su mano derecha un tipo de esfera de energía verdosa. A los pocos segundos, la energía se dividió por la mitad: una parte voló hasta Caroline y paso junto a ella para después entrar por su espalda, mientras que la otra parte se quedaba delante de Fergus.

Tras unos breves segundos, el cosquilleo en la espalda de la niña se detuvo totalmente, y la energía frente al chico desapareció para dejar flotando en su lugar un par de nudilleras de metal brillante.

-Muy bien: Poco tiempo, muchas cosas que explicar. Demuestren que el destino no se ha equivocado, y acaben a esa cosa -añadió para después pasar a señalar hacia la calle.

La ciudad estaba desolada, apagada, con densas nubes que apenas se dejaban atravesar por uno que otro rayo de sol... La calle estaba sucia, con manchas de aceite y una terrible sensación de no hacer sido utilizada en años... Pero algo más llamó vuestra atención: Una sombra en el suelo. Podía confundirse con una mancha, pero esta se movía levemente, hasta que de pronto, algo empezó a surgir de ella.

Como si la propia sombra del suelo cobrase vida, una figura de altura media se alzo del suelo, mostrando luego unos brillantes ojos amarillos que se clavaron en ambos, pues mientras la veían salir, el hombre de sombrero había desaparecido de vuelta.

-D̸e̸b̸o̸ ̸c̸o̸s̸e̸c̸h̸a̸r̸ ̸l̸a̸ ̸e̸s̸e̸n̸c̸i̸a̸

- Tiradas (2)

Motivo: Iniciativa - Fergus

Dificultad: 0

Habilidad: 4

Tirada: 8 8 9

Total: 8 +4 = 12 Éxito

Motivo: Iniciativa - Caroline

Dificultad: 0

Habilidad: 3

Tirada: 3 4 9

Total: 4 +3 = 7 Éxito

Notas de juego

Para usar las nudilleras, Fergus, haces la tirada de Ataque y lanzas de una vez la tirada de daño, que seria 1d6 sin bono alguno.

No lanzo iniciativa de la criatura porque dejará que actúen primero, así que se le da el último turno.

 

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13/09/2018, 22:44
Caroline Marki

En el momento en el que la puerta se hizo polvo, la rubia tosió un poco, mientras intentaba mirar hacia el frente, sin que se le metiese algo de eso en los ojos. Al concentrar su mirada lo suficiente, pudo observar a otro extraño, un sujeto de gran tamaño y de apariencia un tanto... peligrosa, como si no fuera alguien en el que se debiera confiar demasiado. - Mm, ¿hola? - Preguntó en forma de saludo, en un tono frío, a aquel hombre, al mismo tiempo que le miraba con cierta desconfianza, aunque sin saber muy bien lo que este podría querer de ella. En el peor de los casos, tendría que llamar a Francesca, ella se haría cargo de todo, como siempre lo hacía. Sin embargo, el raro de cabello verde no tardó mucho en aparecer tras el otro hombre, sorprendiendo a Caroline nuevamente, a pesar de que ya sabía que tenía la costumbre de aparecer de la nada.

El sujeto del sombrero no se demoró en soltar toda una explicación respecto a que los dos eran la pareja perfecta... ¿pareja? Aquello no le gustó nada a la rubia, quien miró con más desconfianza a Fergus, como si se tratara de una especie de pederasta que quería hacerle cosas que ella no deseaba. Pff, yo digo que me dejes decirle un par de palabras a ese idiota. Nadie es la pareja de Lina sin que yo dé mi permiso. Comentó Francesca en su mente, dejando en claro que estaba igual de en contra con la idea que Caroline, en especial cuando las dos sabían que no les gustaban los hombres, no luego de su "pequeña" experiencia tiempo atrás. De todas formas, era posible que el hombre de cabello verde no se refería a "pareja" en ese sentido. ¿Tal vez del juego? Eso tampoco le agradaba a la rubia, no confiaría en alguien que no conocía de nada y mucho menos un chico. Por otro lado, no sabía a qué se había referido cuando había hablado del "vacío", si bien tampoco le permitió hacer muchas preguntas al respecto, ya que, cuando pretendía sacarse algunas dudas de su mente, pudo sentir nuevamente aquel horrible hormigueo. - Uuugh... N-no otra vez... - Expresó un tanto mosqueada con aquella detestable sensación.

Entonces, el extraño de cabello verde volvió a hablarles, hablando sobre que les daría algo para enfrentarse a otra cosa que vendría... ¿Enfrentarse? ¿En serio? Aquello no sonaba muy bonito, y la rubia no tenía intención de pelear con alguien o algo, la verdad. Esa clase de cosas eran más para Francesca, pero aún así, si podía evitarlo, sería lo mejor para ella. No había confirmado que quisiera pelear con alguien... ¿o sí? No estaba segura. De cualquier modo, no tardó en una esfera de energía, la cual se dividió en dos, una parte yendo a parar en su espalda, mientras que la otra se ubicó frente al supuesto pederasta. Tras ello, la rubia sintió una cierta sensación de alivio, en cuanto el hormigueo desapareció por completo, haciendo que Caroline suspirara aliviada, ya que aquello había comenzado a resultar insoportable para su gusto.

- ¿Cosa? No... yo no quiero pelear contra nadie. - Se expresó en aquel tono neutral, frío, como si poco pudiera causar cierta emoción en ella, antes de negar con la cabeza, al ver como el hombre del sombrero señalaba hacia la calle. Allí, el escenario era bastante tetrico, oscuro, como si todo hubiera sido abandonado tiempo atrás, y la luz del sol apenas se filtrara entre las nubes. No era un ambiente que a la rubia le agradara demasiado, y realmente quería dejar aquel lugar y buscar algo más alegre. Ante la tensión del momento, cerró los ojos, pidiéndole ayuda a su "hermana", a su protectora. No te preocupes, Lina, todo estará bien. Déjamelo a mí. Le respondió aquella voz en su mente, antes de que la rubia volviera a abrir los ojos, mostrando ahora una mirada afilada, junto con una sonrisa salvaje, justo en el instante en el que una criatura sombría se hacía presente en el exterior. - Oh, mierda. No parece que esa cosa quiera jugar con nuestro juguetes, Lina. - Aseguró la rubia, ahora en un tono bromista, diferente a la forma de hablar usual de Caroline.

- Bueno... No pienso pelear contra esa cosa con sólo mis manos... Tú. El pervertido. Encárgate de esa cosa. Ya regreso. - Indicó la joven, como si no le importara mucho la opinión del extraño de chaqueta roja. Le daba igual lo que pudiera querer en ese momento, ella harías las cosas a su manera. Primero, debería de buscar algo con qué defenderse de esa criatura. Con un cuchillo de cocina suponía que podría hacer algo, aunque, en lo preferible, era mejor que el grandulón se hiciera cargo. Francesca nunca había visto algo como esa cosa, por lo que no creía que fuera buena idea pelear contra algo así, incluso si tenía el espíritu, la actitud para esa clase de cosas. Sin dudarlo demasiado, se preparó para correr hacia la cocina de su hogar, con la intención de buscar algún arma con el cual poder defenderse de esa criatura que... deseaba su ¿esencia? No tenía idea de qué era eso.

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14/09/2018, 02:18
Fergus

La sorpresa llegó hasta sus ojos cuando notó a una niña frente a él pero ¿por qué una niña? había tomado como entendido que la joven que era la razón, o más bien casi la amenaza que le habían mencionado, tendría que haber sido una chica mayor de edad, una amiga, una novia o quizás incluso una esposa ¿Tal vez era su hija? No tenía ningún tipo de parecido ni tampoco pareciese que la mirada de la chica le diera a entender que fuese a tener algún tipo de cariño, más bien parecía asustada. Se giro para ver al sujeto de cabellos verdes con un enojo claro, la nariz fruncida y los ojos enardecidos, el juego ya le estaba cansando. -¿Vació? -Mierda, realmente me cabrea que me deje con las preguntas en la punta de la lengua. Movió el rostro para notar a la chica rubia, Caroline, encorvada levemente debido a algún tipo de dolor, su rostro mostraba cierta preocupación pero no podía perder al tipo de traje de vista, si se escapaba de allí con la rapidez que tenía quizás nunca le volverían a encontrar. 

-¿Que le has estado haciendo a esta niña? -Sus puños se cerraron con fuerza mientras sentía ira interna que no podía controlar, sus ojos se llenaron de enojo mientras apretaba los dientes mirando desde la distancia, sea lo que fuese sentía que la chica no habia estado pasando un buen momento en este lugar. -¿Ayuda? Hablas como si fueras el bueno en este lugar, solo tengo claro que cada acción que nos rodea tiene un denominador en común y ese eres tú, Caroline sufre y es porque tu has realizado una acción, algo.. -Justo algo verde, un tipo de energía aparece en su mano derecha, aquello casi le deja sin hablar ya que no entendía nada de ese tipo de cosas. -Algo verde aparece frente a nosotros sin que sepamos que mierda es..

Sus palabras obviamente no iban a ser escuchadas, no importaba que dijese el tipo simplemente las ignoraría por completo y eso le causaba aún más molestía, aun así el ambiente a su alrededor le traía una tibia sensación de nostalgia, observo hacia donde le habían indicado mientras comprendía que algo aparecería frente a ellos. -¿Espera..Cosa? -Su rostro de incredulidad fue un preludio para las palabras de Caroline quien claramente había dicho que no pelearía con la cosa, como si ella encontrara completamente normal todo aquello. Realmente ni siquiera quiso mirar a Caroline, pensaba que estaría asustada y a pesar de que le hubieran entregado una especie de arma lo más seguro es que no se sintiera en total confianza con él. -Bien niña, quedate tras de mi. Intentare enfrentarme a esa cosa mientras tu.. -Justo en ese momento la chica le llamo pervertido además de parecer caminar hacia atrás sin intenciones de querer quedarse allí o más bien no le importaba en lo absoluto. -¿Que?... -Quedo algo helado como si aquello no fuera lo que esperaba en lo absoluto, aun así intento seguir con su disposición a ayudarle. -Bien..ehm..Eso.. -Se giro para mirar nuevamente a la cosa mientras sonreía algo nervioso con las nudilleras en ambas manos. -Bueno niña, si no puedo con esta cosa lo mejor es que salgas de aquí. Al menos te daré el tiempo suficiente para que no pueda alcanzarte. -Eso, dando la vida por alguien que te llama un pervertido y tú ni siquiera recuerdas que es esa niña de ti...Vaya mierda. Rapidamente su cuerpo se movió cuando la criatura se encontraba a cerca de 3 metros de distancia, dando un pequeño salto hacia un costado a su derecha mientras su puño derecho lanzo un gancho al higado -si es que llega a tener higado esa cosa- se trataba de un clasico 1-2 de golpe al cuerpo y luego un izquierdazo al mentón.

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque

Dificultad: 0

Habilidad: 10

Tirada: 8 9 10

Total: 9 +10 = 19 Éxito

Objetivo: Daño

Tirada: 1d6

Tirada: 3

Total: 3 = 3

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16/09/2018, 17:13
Director

Cuando Fergus se lanzo contra la criatura con la intención de atacarle, aquella extraña sombra empezó a doblarse de una manera antinatural, como si no tuviese huesos ni nada por dentro que le evitase doblases con suma facilidad. Igualmente, los ataques del luchador alcanzaron a golpear el "higado" y el mentón de la criatura, la cual se vio afectada de cierta forma pues empezó a retroceder rápidamente mientras se doblaba un poco antes de recuperar su forma original.

Mientras Caroline seguía en la cocina en busca de algo para usar en el combate, la criatura no dio tiempo de distraerse a Fergus, pues se abalanzo contra el luchador con una gran velocidad y destreza, esperando propinar con sus garras un corte en X en el pecho del chico.

- Tiradas (3)

Motivo: Sombra - Esquiva

Dificultad: 19

Habilidad: 10

Tirada: 6 8 8

Total: 8 +10 = 18 Fracaso

Motivo: Sombra - Ataque

Dificultad: 0

Habilidad: 11

Tirada: 2 4 10

Total: 4 +11 = 15 Éxito

Objetivo: Daño

Tirada: 1d6

Modificador: 1

Tirada: 6

El dado ha explotado: 4

Total: 10 +1 = 11

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16/09/2018, 17:29
Kantoku

Una vez registrada la cocina para conseguir un cuchillo con buen filo, te diste la vuelta para volver a la entrada, pero allí estaba: el hombre del sombrero.

-No pensarás usar eso contra ESO, ¿verdad? -preguntó señalando hacia afuera, donde debería estar la extraña criatura. -. Creo que es buen momento para entregarte esto, y esto.

Entonces, Kantoku sacó de su camisa un papel con las mismas escrituras extrañas de antes, poniéndolo delante de tu vista para que lo leyeras de nuevo. Esta vez, al ver el papel, quedaste en cierto trance mientras las letras eran descifradas por tu cabeza.

Caroline Marki

Nivel 1

Físico 3
Destreza 3
Inteligencia 5
Percepción 2
Voluntad 2

Habilidades

Marionetista
Takumi: Ataque rápido
Takumi: Bloqueo
Técnica - Takumi: Trampa de hilos

Tras quedarte embobada viendo el papel durante varios segundos, pestañeaste y pudiste reaccionar. Kantoku ya no estaba, el papel tampoco, pero... En tus manos, había una sencilla marioneta de madera que utilizaba un trapo negro que simulaba una túnica; se encontraba conectada con hilos a una cruz de madera que llevabas en la otra mano. De alguna manera, te habías familiarizado con esa marioneta y sabías de lo que era capaz.

Notas de juego

Marionetista
Tienes la capacidad especial de manejar con destreza los hilos que manejan las secciones de una marioneta. Los hilos pueden extenderse y contraerse hasta 30m.

Puntos de vida: 3(En caso de que la marioneta se quede sin PVs, los hilos se rompen, pero se vuelven a regenerar y conectar al gastar 1 de mana luego de un turno)
 

Takumi: Ataque rápido
La marioneta se lanza a por un enemigo(que no este más allá del límite de alcance de los hilos) y desencadena una serie de ataques rápidos sobre el objetivo, combinando puños y patadas.
1o3d10+Inteligencia
1d6+(1 punto por cada 2 niveles en Inteligencia) de daño

Takumi: Bloqueo
La marioneta se protege con los brazos de un ataque. Por su poco tamaño, es muy probable que retroceda si es un impacto fuerte para ella, pero reduce considerablemente los daños.
1o3d10+Bloquear+(Inteligencia/2)

Técnica - Takumi: Trampa de hilos
La marioneta se mueve a gran velocidad alrededor del objetivo para que luego el marionetista contraiga los hilos y atrape al enemigo. Como consecuencia, la marioneta queda pegada al objetivo y no puede moverse hasta que se suelten los hilos.

1o3d10+Inteligencia contra dificultad 8; no se puede bloquear ni esquivar
De no superar la dificultad, la marioneta se atrapa en sus propios hilos durante un turno

En tu siguiente posts marca a Fergus; yo no lo marco para que no vea la información y tal, pero si vas a salir y atacar, obviamente lo tienes que marcar xD

PD: Actualiza tu ficha con los nuevos atributos

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16/09/2018, 18:53
Caroline Marki

La rubia no había tardado demasiado en llegar a la cocina y encontrar un buen cuchillo afilado que podría usar contra aquella criatura. Sin embargo, cuando pensaba regresar a la entrada de su hogar, con la intención de encargarse de lo que sea que amenazaba la vida de su "hermana", pudo notar que Kantoku había aparecido nuevamente frente a ella, probablemente para molestarla con otros de sus discursos unilaterales. - ¿Qué quieres? - Preguntó mosqueada, justo en el momento en el que el sujeto de cabello verde le hacía aquella pregunta, como si no fuera bastante obvio de por sí. - Si quieres... puedo usar el cuchillo contigo y ver qué tan efectivo es. - Le respondió neutral, antes de dedicarle una sonrisa salvaje que dejaba en claro que no tendría mucho problema con intentarlo.

No obstante, antes de que siquiera pudiera intentar apuñalar al hombre con su arma, este no se demoró en hacer aparecer un nuevo papel frente a Francesca, haciendo que ésta quedara en una especie de trance, mientras las palabras, escritas en el papel, eran asimiladas por su mente, como había sucedido anteriormente. No había duda de que aquellos papeles tenían una especie de poder extraño, e incluso era posible que ni siquiera fueran papeles, sino más bien algo que adquiría dicha forma para que la joven pudiera comprenderlo. De cualquier manera, el efecto de trance no duró demasiado, y la chica, tras un breve tiempo, despertó del mismo para concentrarse en lo que ahora se encontraba con ella, además del conocimiento recientemente adquirido.

En sus manos, tenía una extraña marioneta de madera, vestida con un trapo negro que aparentaba ser una túnica. Era como si, aquella cosa, siempre hubiera sido parte de ella, una parte importante de la joven, una pieza imprescindible de la misma, además de la guardiana de ambas. Ni hablar de lo que ésta era capaz de hacer, o lo que Caroline y Francesca también podían hacer, ahora que poseían aquel poder en sus manos. Estaba claro que Kantoku esperaba que usara aquella habilidad contra la criatura. Por otro lado, parecía que sus "atributos", tipicos de un videojuego, habían mejorado en cierta forma, algo ideal para la joven, si es que aquello tenía mucha importancia en ese instante de necesidad. - ¿Level Up? O algo así... Genial. ¿Vamos a divertirnos, Lina? - Preguntó la joven Francesca, en el momento en el que volvía a sonreír divertida ante lo que aquello significaba. Era hora de enseñarle a aquella criatura que nadie se metía con su "hermana".

Sin dudarlo demasiado, con la marioneta entre sus brazos, corrió de regreso a la entrada de su hogar, con la intención de hacer frente a la criatura oscura. No sabía si el "pervertido" había sobrevivido o no, pero al menos suponía que podría vengarle, si este había muerto, como una especie de favor. Al menos, el extraño había demostrado que se preocupaba un poco por ella, incluso si podía ser un pervertido, por lo que suponía que no podía ser tan malo. Al llegar a la entrada, dejó la marioneta en el piso, preparándose para ordenarle que atacara al extraño ser que les amenazaba. - Muy bien... Hora de divertirnos, Lina. ¡Takumi! ¡A la cabeza! ¡Destruye a esa mierda, ataque rápido! - Comandó con cierta sed de sangre en su voz, en el momento en el que la marioneta se movía, corriendo en la dirección en la que se encontraba la criatura, con el sólo deseo de atacar la cabeza de la misma. No deberías insultar tanto, Fran... Es malo. La regañó su "hermana", un tanto molesta con el hecho de que Francesca utilizara esa clase de palabras.

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque Rápido

Dificultad: 0

Habilidad: 4

Tirada: 6 7 7

Total: 7 +4 = 11 Éxito

Objetivo: Daño ataque rápido

Tirada: 1d6

Modificador: 2

Tirada: 3

Total: 3 +2 = 5

Notas de juego

NOTA DEL MASTER: El verdadero bono de la tirada "Ataque rápido" es 5.

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18/09/2018, 02:37
Fergus

Le hago daño, perfecto. Una sonrisa apareció en su rostro mientras la maldita cosa retrocedía, al parecer podía hacerle algo de daño si le atacaba con aquellas nudilleras, aunque no sabía bien si es que aquello era una buena o mala noticia, quizás la resistencia de esa cosa era infinita y solo estaba gastando energias cuando debería buscar un escape y proteger a la chica, ¡NO! la mejor defensa siempre es una buena ofensiva y más aún si tienes a alguien que depende de ti. 

Al notar que la criatura intentaba atacarle éste no decidió escapar. -¿Esquivar? Lo lamento, pero los verdaderos hombres no huimos de nuestros problemas. -Pronuncio con una enorme sonrisa, casi convencido de que aquello podría soportarlo o al menos lo intentaría, si no pudiera detenerle entonces no podría lograr que Caroline escapara. Por un momento el golpe lo había bloqueado de buena manera con una parte de las nudilleras, incluso pensaba que la criatura no podría ante sus habilidades de boxeo aunque no fue hasta que algo paso a un costado de él, parecía ser una especie de muñeca que le llamo la atención y sin darse cuenta había perdido la atención en quien era su objetivo, un certero corte le dio en el pecho causando un dolor intenso en su cuerpo, sintiendo el dolor, el calor y luego el frío de perder una cantidad tremenda de sangre cayendo hacia atrás con ambos brazos extendidos sintiendo los ojos nublados mientras perdía sangre. -Mier...Mierda...Esca-pa.. -Pronuncio mientras intentaba levantarse luego de que sus ojos lograsen recobrar el brillo. 

- Tiradas (1)

Motivo: Bloqueo

Dificultad: 15

Habilidad: 9

Tirada: 3 5 6

Total: 5 +9 = 14 Fracaso

Notas de juego

Ocupo un nivel de estrés para acumular el daño.

Cargando editor
20/09/2018, 17:01
Director

Aquella marioneta corrió hacia la sombra y dio un salto para quedar a altura de su rostro y así empezar a desencadenar una serie de rápidos golpes y patadas, los cuales fueron bloqueados fácilmente por la criatura.

Tras bloquear todos los ataques de la marioneta, la sombra actuó rápidamente y se propuso a atacar a quien tenía más cerca: la propia marioneta. Cerrando su puño derecho, se dispuso a propinarle un golpe que la obligase a retroceder.

Fergus se estaba manchando de sangre, pero no pensaba caer tan fácilmente. Resistiendo el dolor de las heridas, logró recuperar la compostura, estando listo para seguir combatiendo incluso cuando sentía que pudo haber perdido la consciencia con ese ataque.

- Tiradas (3)

Motivo: Sombra - Bloquear Caroline

Dificultad: 11

Habilidad: 10

Tirada: 1 4 8

Total: 4 +10 = 14 Éxito

Motivo: Sombra - Atacar Marioneta

Dificultad: 0

Habilidad: 11

Tirada: 2 3 9

Total: 3 +11 = 14 Éxito

Objetivo: Daño

Tirada: 1d6

Modificador: 1

Tirada: 3

Total: 3 +1 = 4

Notas de juego

Al hacer uso de los puntos de estrés, cambien una O de la ficha por una X, por favor.