Partida Rol por web

- A sus ordenes, mi teniente.- contesta José al oficial tras informarle con Larkin de todo cuanto habían visto en su reconocimiento.

Ahora ya sabemos donde están algunos de los ingleses y la estación de radio. Si liberamos al oficial y nos hacemos con la instalación en un golpe de mano podríamos cumplir con nuestro cometido sin demasiadas dificultades.

Una vez estamos todos reunidos me agacho y espero que todos se coloquen en corro mirando hacía mi para así poder dar las ordenes pertinentes y que todos las escuchen nitidamente, miro unos segundos hacía todos y después saco el mapa de mi mochila, alzando un par de miradas hacía el pueblo

-Bien escuchadme atentamente, según nos han informado tenemos a nuestros rehenes en el centro del pueblo lo que parece ser su CG, debemos proceder con maxima cautela evitando estos puestos

Digo señalando en el mapa los lugares donde se situaban los puestos de guardia en el pueblo y mirandolos a todos y cada uno a los ojos

-Avanzaremos en dos grupos para cubrir el mayor terreno posible y así en caso de que nos embocasen o alcanzasen a uno de los grupos el otro podría cubrirle y facilitarle una retirada

-McCann y Carrick sabeis cual es vuestro trabajo, cubrid el avance, después quiero que McCann se coloqué junto aquellos arbustos de allí, es una buena posición para cubrir la calle Carrick usted se colocara justo enfrente para cubrir los angulos muertos

Señalo los puntos en el mapa

-Los demás el grupo uno ira por la calle de la izquierda evitando el puesto de guardia del muelle, el grupo dos ira por la calle de la derecha según me han informado no tendreis tantas complicaciones como el primer grupo pero aun así andaros con ojo, una vez hallamos conseguido llegar al CG deberemos proceder con cautela, tendremos que buscar un punto flaco donde el enemigo no espere nuestra entrada, no hace falta decir que ambos grupos deben buscar un punto de acceso distinto, por cierto

Digo alzando mi vista hacía McCann

-Necesito que tras recibir una señal por el intercomunicador se suba a ese edificio de la derecha y nos de cobertura, el resto una vez dentro tendremos que improvisar sobre la marcha confio en vosotros ¿Alguna duda?

Angus respondió al Teniente:

- Ninguna Teniente, procederé a cumplir las órdenes en cuanto se pongan en movimiento.

Corriendo las correderas de las dos armas con silenciador, miro a nuestro oficial, y le pregunto:

¿En que grupo vamos cada uno señor?

Guardo las dos pistolas y comienzo a darme pintura en la cara, con cuidado y usando los tonos adecuados, tambien aplico un poco, muy esparcida por la superficie de las armas, tomando estas un tomo mate apagado posiblemente muy util, tras esto, saco mis 2 cuchillos de combate y los clavo en la tierra, haciendo asi que el metal del que estan hechos no reluzca. Cargadores de las armas al alcance, el sub-fusil debidamente colocado para que no moleste y este a mano... Todo queda listo, a cabeza descubierta, sin casco, pues esto es algo que los combatientes expertos hemos aprendido a no usar en las misiones de infiltracion, dado que tintinea y brilla con los reflejos, queda todo preparado para entrar en accion.

Listo señor.

Carrick asiente a las palabras del oficial.

-Eso está hecho.

Lanza una mirada a McCann. Sabe que si las cosas se ponen feas, las vidas de sus compañeros están en sus manos... o más bien en la precisión de su puntería y la rapidez de sus dedos.

- A su señal, teniente.

Márquez escucha atentamente las ordenes del oficial y se dispone para realizar su labor.

Primero saca su ASTRA 400 y la comprueba, inspeccionando el silenciador recientemente instalado en la boca del arma. Tras eso observa que tiene el cuchillo a mano y listo para desenfundarlo y ser hundido en gargantas nazis. El máuser prefiere dejarlo, demasiado peso y poca cadencia de tiro. Además, necesitan ir rápidos y en silencio.

Finalmente saca de su bolsillo un viejo gorro cuartelero del Ejército Español y se lo cala en la cabeza. Un viejo recuerdo de una guerra olvidada  de la que surgieron un puñado de valientes como él.

- A sus ordenes, mi teniente.- dice poniéndose a disposición del oficial en cuanto este estime oportuno iniciar la misión.

Espero mirando a que todos tengan todo su equipo dispuesto y después asiento firme, debía elegir bien con quién iba cada uno ahora dependía de mi el lograr o fracasar aquella misióm, volvi a mirar el mapa unos segundos y después les devolví la mirada

-Bien

Digo en tono bajo pero firme

-Larkin usted vendra conmigo, Caparaso y Pepe ustedes iran por la derecha

Después lanzo una mirada a Caparso

-No quiero tonterias como la de antes ¿entendido? necesito que corte las comunicaciónes del enemigo, eso les mantendra entretenidos intentando recuperarlas, y nos servira como distracción, ademas en caso de que nos descubriesen no podrían pedir refuerzos, en cuanto lo haga tendremos que movernos rapidos y decididos ¿Algun pregunta?

Tras decir esto compruebo que todas mis armas esten dispuestas, me quito el casco, entierro el cuchillo en la tierra, es decir todo metodo de cautela para no llamar la atención del enemigo

Angus se colocó con sigilo en la posición que le habian ordenado, luego apuntó con esmero y dijo:

- Teniente, en posición, espero instrucciones para disparar.

"ya veremos como lo hace el Teniente... Espero poder salir de aqui vivo, al menos que me entierren en mi tierra" pensó divertido, aunque habia algo de seriedad en sus pensamientos.

El tiempo se nos estaba echando encima, habia que actuar con rapidez, y hacerlo ya mismo. Con ganas de entrar en accion sugiero:

¿Todos listos no?¿Vamos a darle caña? A su orden, despliegue y accion, mi teniente.

El republicano español escucha las palabras del oficial atentamente. Así que le tocaba ir con Caparso a cortar las comunicaciones.

Empuñando la pistola Márquez hace un leve gesto de asentimiento dejando claro que él está listo.

Ahora veremos de qué pasta está hecho cada uno. Piensa mientras esboza una leve sonrisa.

Asiento un par de veces y me pongo de cuclillas mirando hacía el pueblo y señalo con mi mano para que avancen

-Vamos, vamos vamos

Todo ello sin gritar en un tono bajo pero audible para el grupo que estabamos allí

En cuanto dí la orden avancé colina abajo esperando a media colina agachado a que Larkin me siguiera y mirando hacía atras para comprobar que el resto acataba con precisión mis ordenes

Viendo como nuestro oficial avanzaba el primero, un repentino escalofrió me recorrió la espina, no es bueno que vaya el primero, pensé para mis adentros, ¿Y si fuera abatido el primero?, sería una perdida que no me gustaría comprobar, por lo que agudice los sentidos al máximo, la adrenalina bombeaba con fuerza, esperando el momento en que el tiempo se replegara sobre sí mismo en lo que yo llamo "El tiempo de combate", donde todo transcurre a cámara lenta y con una lucidez sorprendente.

Pistola en mano, con movimientos rápidos me desplazo tras mi oficial, manteniendo los ángulos para que no se cruce en mi línea de tiro, mis ojos recorren cada esquina, cada ventana, cada palmo del suelo, alerta y cubriendo a Miller, y efectuando un eficaz apoyo de cobertura.

Desplazándonos de sombra en sombra, y siempre con movimientos agiles pero no bruscos, avanzamos hacia nuestro objetivo.

Las órdenes del teniente eran claras: prioridad para cortar esas malditas comunicaciones. Al ver el gesto de Pepe remarcando que está listo para emprender la marcha, asiento con la cabeza y nos ponemos en marcha hacia el lugar idóneo para realizar la intervención en las comunicaciones. No es que me hiciera mucha gracia salir en solitario con uno de los dos "gatillos fáciles" del grupo, pero al menos he de reconocer que es un tipo con un buen par de pelotas.

Sólo espero que no se líe a tiros en el peor momento.

Al ver que Caparso se pone en marcha el republicano español le sigue a escasa distancia. Un poco agachado y apuntando hacia el suelo su arma, paso tras paso se acercan hacia su objetivo.

Listo para la acción. Le cubriré las espaldas mientras realiza su cometido.

Los dos francotiradores del grupo tomaron posiciones a lo largo de las calles por las que sus compañeros tenían que cruzar. McCann tenía una visual perfecta del muelle y sus guardias así como toda la calle de la izquierda mientras que Carrick cubría el resto de la zona.

Caparso se ocupó de las comunicaciones mientras Pepe montaba guardia. El español no perdía ojo de sus alrededores con el rifle listo hasta que su compañero le dio el OK: los alemanes estaban mudos.

Larkin siguió a Miller a lo largo de la calle de la izquierda que se unía con la principal del pueblo y que pasaba justo frente al cuartel general de los nazis. Una guardia de cuatro hombres apostados en las escalinatas del edificio se movía somnolienta. El oficial aliado se detuvo en una esquina sopesando la mejor forma de acercarse al lugar.

En un lento movimiento me fundo con las sombras del lugar. Mientras por señas suaves pero fluidas, le pregunto a Miller:

¿Que hacemos?¿Los dejamos pasar o los eliminamos en silencio?

( Por señas y asi...ejem.. que nose cual seria la forma de ponerlo, con que letra digo..)

Me muevo en sigilo entre las sombras pistola en mano y una vez veo a la guardia me oculto suavemente entre unas sombras para no descubrir mi posición miro a Larkin y le indico con mi mano que avancé matarlos ahora llamaría demasiado la atención y creariamos una alarma innecesaria

Para avanzar busco siempre las sombras avanzar a plena luz de farola sería un suicidio en aquel momento,solo esperaba que Larkin siguiera mi ejemplo no hiciese ningun locura