Partida Rol por web

Compañia del Dragon Rojo

PRÓLOGO 2

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21/06/2025, 08:00
Kerion Namahel

El olor guía al semielfo a través de los pasillos hasta dar con el comedor, la fuente del aroma parece venir de más adelante. Camina entre las mesas, las lámparas de aceite parecen encender el dorado de sus prendas haciéndo que resalte sobre el blanco de fondo. Reconoce con clariad la cocina, un honro en el centro emana el calor de una fragua, de cierto modo allí se forja lo que sustenta la vida del Dragón Rojo.

Una mediana, vital y sonriente, está concentrada en la tarea de transformar un conejo en el almuerzo de todos. Absorta en sus tareas no repara en la presencia del mercader - Se ve exquisito - dice en mediano, elevando un poco la voz desde la entrada de la cocina - Has de ser Portia, me han hablado muy bien de usted y quería saludaros. Mi nombre es Kerion. - se inclina levemente hacia ella y aguarda su reacción.

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21/06/2025, 19:28
Niyi Ikateria
Sólo para el director

Negó con la cabeza el ofrecimiento. Ni agua ni vino. Un soldado era abnegado, y solo un líder asentado podía permitirse, en su Cuartel General esas comodidades. Un soldado jamás tomaría nada ante su líder. Era el espíritu de sacrificio y de sufrimiento lo que gobernaba su mente. Era y había sido su forma de ser... y lo seguiría siendo.

- No es mi espada la mejor de mis armas, si no mi arco, pero es vuestra y a vuestro servicio. Y todas las habilidades que he podido acumular, que no son muchas, pero espero que si de vuestro agrado. Sabia que este drow le tiraría los trastos desde el principio, pero no podía dejarse "tomar" como cualquier fulana de esquina. Ella no era así, y sería mejor dar expectativas lejanas que dar un "si" o un "no". Era mejor dejar la posibilidad que cerrar o abrir cualquier puerta. - Es guapo, pero no es mi tipo. Además, en su mente aún había una pizca de contradicción de unos años luchando con drows y ahora estar al servicio o bajo el mando de uno.

Asintió sin dudar ante el comentario de "defenderse a si misma, ser fuerte y resolutiva". Estaba claro que este lugar era un tanto peligroso de todas maneras. - ¿Y pensará aún que estamos en su "mundo", que esto es la Vertiente Oscura de donde procede? Asintió ante la norma de los delitos y sus posibles consecuencias.

Aún así no dejaba de estar bajo su gobierno y mando. No dejaba de ser una unidad paramilitar. Asintió a la segunda norma como si fuera un general de los viejos tiempos. Al comentar que éramos DRAGONER ROJOS su rostro se llenó de orgullo. Era como si ya la hubieran aceptado. Asintió con fuerza esta otra frase también.

- Acepto Señor. El protocolo militar era complicado de olvidar cuando lo tenías "tan adentro". - Estoy a sus órdenes. Da igual su origen o disputas previas Almirante. Es un Dragón Rojo. Aún se podía notar el rostro de orgullo, sobre todo por su voz.

Notas de juego

tieflings

¿Qué es eso? La personaje puede ser que lo sepa, pero yo no. ¿Son los humanos semi... demonios o semi dioses demoníacos?

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23/06/2025, 14:08
Thyra Skeldrûn
Sólo para el director

Thyra recorrió los pasillos de la edificación con paso suave, casi como si tuviera miedo de meterse en una estancia prohibida o que le genere problemas incluso antes de entrar en la organización. Quería ver como era la fragua, hablar con su herrero y ver si lograba trabar amistad con él. Sabía que muchos mantenían sus técnicas en secreto, pero no eran totalmente cerrados y siempre sentían orgullo por sus trabajos. Solo era cuestión de saber hablar… y Thyra era sumamente entusiasta con esos trabajos.

Notas de juego

Okas. No tengo problema en esperar lo que haga falta. Ella buscaría la fragua y hablaría con el enano de poder ser. 

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25/06/2025, 08:35
Iskaria

Iskaria asintió con una leve sonrisa, agradeciendo la franqueza de Alakoj.
Tres días —repitió con voz serena, como quien acepta un reto con respeto.

Sus ojos recorrieron por última vez la estancia, deteniéndose un instante en la copa aún tibia sobre el escritorio, como si quisiera memorizar cada detalle de aquel primer encuentro.

Gracias por tu tiempo… y por la oportunidad. No todos valoran lo que no pueden medir de inmediato.
Si este lugar puede convertirse en un hogar para la magia, haré todo lo posible por estar a la altura.

Con un gesto suave, recogió su capa y se encaminó hacia la salida.
Nos veremos pronto —añadió, antes de cruzar el umbral con paso tranquilo, dejando tras de sí una estela de curiosidad y promesas por descubrir.

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27/06/2025, 13:22
Alakoj

—¡Excelente! Pues entonces, el siguiente paso es un tiempo de deliberación con el resto de mis cercanos, aunque la última palabra la tengo yo. Tres días. Vuelve aquí en tres días y tendrás una respuesta.

-Pasó al otro lado de su escritorio y se sentó. La conversación, breve pero intensa, llegaba a su fin.

—Si no hay más dudas, creo que la conversación concluye. Eres libre de irte. Si lo deseas, puedes buscar a a Sky, o cualquiera que veas con la capa roja y negra, puede guiarte por las instalaciones y ver parte.

Queda a la espera, atento por si surge alguna otra duda o si la visitante decide retirarse, todo con una sonrisa amable.

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27/06/2025, 13:26
Director

La mediana se sobre salta al oir una voz repentina en sus dominios y no era ninguno de sus dos ayudantes que debían estar pelando papas.

Se giró y cuando vio aquella cosa negra envuelta en ricas ropas actuó por impulso y se armó con una sartén. Se le quedó mirando y entendió, mas o menos que era.

-Chico, parece que te hubieran metido al horno y se hubieran olvidado de tí. -Respondió ásperamente. ¿Saludar? me parto, nadie baja a saludar a los de cocina salvo que ya se conozcan o quieran algo. No nos conocemos así que... ¿Que se te ha perdido aquí?

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27/06/2025, 18:52
Niyi Ikateria
Sólo para el director

- Enterada. Tres días. Repitió como se le había enseñado la vez que embarcó. Lo hacían para confirmar que la orden recibida era la correcta, porque en el estruendo y jaleo de un barco era fácil confundirse. Estaba claro que la estaba despidiendo. Ya había estado ante otros mandos militares, y eso de que regresase a su escritorio era un "Fuera de Aquí", pero más discreto y educado. Un leve golpe de entre tacones, como si fuera una soldado.... o lo que fue, y con un: - Con su permiso. Como buena soldado, se marchó.

La única persona que conocía era la muchacha que le había hecho llegar allí y el propio Almirante. Así que regresar donde encontró a Sky le pareció bien. Igual incluso podría darle alguna pista de que hacer estos días. Si conseguía permiso podría dedicarse a entrenar y dormir aquí el tiempo de espera. Eso le daría tiempo a conocer la indiosincrasia de como se movían aquí las cosas, conocer gente, sobre todo algunos Dragones Rojos y el personal de servicio a estos. O incluso, la gente que le de servicios o productos externos, como los que les venden las lechugas y cosas así. Incluso si alguna misión, los que se ocupaban de ella, la aceptaban, sería una forma de hacer méritos y conseguir una plaza.

- Vamos a donde encontré a Sky. Se dijo a si misma.

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28/06/2025, 03:32
Kerion Namahel

La mediana está muy concentrada en sus asuntos, las precauciones del clérigo no son suficientes para evitar que se sobresalte, al punto de tomar una sartén a la defensiva. Tal vez por eso la mujer hace un comentario que deja sin habla a Kerion, una burla descarada que hubiese tomado a broma de no ser por el tono áspero. Siente el impulso de calcinarla ahí mismo con las llamas sagradas de su diosa, pero se contiene, sería un mal comienzo en la carrera de mercenario que tiene por delante. 

- Que extraño, a tí parece que te hubiesen sacado de la planta antes de madurar - dice en mediano, sin quedar claro si se refiere a su tamaño o a su inmadurez, o a ambos, pero intentando conectar desde el lenguaje brusco de la mujer. Luego ríe amistosamente - Me caes bien Petra.  Ahora me conoces, soy Kerion, sacerdote de Waukeen, comerciante de Faerun, y flamante miembro de los Dragones Rojos - asiente con cierto orgullo en sus palabras.

- Pero me has pillado, no sólo vengo a saludale, dos cosas más me traen ante tí. La primera, me gustaría comer algo y me dijeron que cocinás de maravillas - señala el conejo que un instante atrás estaba entre las manos de Portia - La segunda, Sky dice que sabes todo lo que aquí ocurre, y yo soy generoso con quienes me ayudan, así que si bajas la sartén puede que hagamos buenos negocios a partir de ahora - 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Habla en mediano. Tiro persuasión para acompañar lo narrado con la intención de mejorar la disposición de la cocinera.

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17/07/2025, 18:28
Director

EL grupo caminó por las instalaciones, un pasillo de piedra que refrescaba la temperatura. El pasillo de la primera planta aún conservaba el eco solemne de su antigua vida como monasterio. Las piedras que lo formaban eran oscuras y frías y se notaba donde antaño hubo un tapiz o un estandarte ahora arracando y en su lugar, ausencia. La luz que se colaba por ellos era cálida pero escasa dado el poco numero de ventanas que había. 

Llegaron a unas escaleras de piedra que daban a a elegir entre subir y bajar. Descendieron por estas, que estaban sujetas por el flanco izquierdo de la pared y giran en espiral aparte de dejar un hueco en el centro donde normalmente había una columna. Llegaron a la planta inferior donde les recibió el olor a comida mezclada con vino y algo de humedad

El sótano se abría al final de la escalera como una boca oscura y fria. Si bien había un pasillo a izquierda y derecha. 
Lo que en su día fue una cripta o despensa monástica ahora era el gran comedor del cuartel.

 

Pasado un tiempo indeterminado, y tras apurar una copa de vino y unas porciones de queso ordinario, una chica se acercó a ella, una semielfa de cabello negro y ojos azules, la misma que vieron nada más llegar a la base. 

-Me llamo Sky, me ha dicho que te lleve con el jefe. ¿Lista?

 

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29/07/2025, 23:11
Cassandra Klang

 

Llevaba puesta mi ropa habitual: una blusa tipo chaleco sin mangas y de escote abierto, de tela negra, con bordes dorados que combinaban con las bandas que cubrían mis dos codos. El pantalón era algo ajustado, pero no tanto como para limitar mis movimientos... los cuales, siendo honesta, tampoco eran demasiados, ya que no soy precisamente una atleta muy diestra. Bueno, eso sería una mentira a medias: en fuerza no destacaba, pero si se trataba de evitar el peligro, podía correr como la mejor.

Mis manos, adornadas con pocos anillos, sostenían mi hermoso laúd de madera negra y morada, con detalles gris plateado que recordaban a los hilos tejidos por una araña. Decía que era mío, aunque en realidad lo había robado hace años a un Drow bastante estúpido que tuvo la osadía de intentar robarme a mí. ¡¿Pueden creerlo?!

Tomé un sorbo de vino y luego toqué unas cuantas notas. —Ah... —murmuré, mirando a la chica antes de dedicarle una sonrisa— Claro, ¡siempre lo estoy! - Me levanté con elegancia —Guíame a mi destino —dije, sin dejar de sonreír.


 

Notas de juego

Cambie mi foto, para que se vea mejor, espero no haya drama.