Partida Rol por web

Con el grupo sensiblemente más relajado tras la identificación del recién llegado y la confirmación del ghoul como aliado, me dispongo a continuar el camino.

No me pasa desapercibida la mirada de Ramírez a la esclava, sin duda muchas casualidades nunca lo son.

Ramírez parece que finalmente claudica, y deja paso al Ghoul, pero ni mucho menos satisfecho con todo aquello.

Me encojo de hombros con resignación

"Lo que me temía. Está bien, está bien... esperaré. Qué remedio."

Pienso en mi interior volviéndome a girar hacia Hadel.

Cargándome de paciencia me dispongo a seguirle de nuevo.

Camino por el callejón, hasta que llevo a la casa que es nuestro destino. Tras eso abro la puerta y entro, doy unos pasos y enciendo una pequeña antorcha, para incomodar a los vampiros lo menos posible, pero es necesario ya que las escaleras que descienden están completamente a oscuras y no se ve nada.

 Arrugo la nariz en respuesta a la peuqeña antorcha, me parece desagradable y de mala educacion por parte de nuestro guia, pero hago de tripas corazón, nuestro objetivo no puede estar ya muy lejano.

 Sin embargo remoloneo en la puerta, no seré yo quien se andentre el primero a lo que pese a nuestro reciente encuentro con el sire de uno de nosotros, bien podria ser una trampa bien urdida.

Conforme llega Aurel se marcha raudo como el viento gélido de la noche y aún tiene tiempo a encontrar un espía que nos seguía y llevárselo. Sin tiempo para presentaciones más formales aún sigo a nuestro ghoul más pendiente de nuestro entorno. Está claro que he bajado la guardia al sentirme protegido por el número de nuestro grupo. Fue un error que no podemos permitir se vuelva a repetir.

Llegamos hasta la casa que era el objetivo del ghoul, quien enciende una antorcha. Lo observo hacer sin que mi rostro se altere un ápice. Al fin y al cabo estoy acostumbrado a moverme entorno a las luces de la noche para iluminar mis quehaceres y estudios. Mi Bestia se ha acostumbrado tanto que ya apenas si levanta las orejas ante una amenaza tan pequeña.

Espero un poco a un lado de la puerta a que mis ojos se terminen de acostumbrar del todo a la nueva luz. Reviso la estancia con la mirada antes de ir más allá. Una vez satisfecho sigo a Handel sin problema en ser el primero en hacerlo si ningún otro de mis compañeros así lo hace.

Ramírez sigue con la mosca detras de la oreja, al ver la escalera oscura emite un pequeño gruñido mientra clava una penetrante mirada en la oscuridad.

Si la les costo detectar a un perseguidor en campo abierto con algo de luz...

Reacio a entrar escudriña cada esquina de la calle intentando asegurarse de que no haya nadie mas que no deba estar allí, terminando finalmente por mirar a la esclava y gruñendo denuevo.

--Deja que vaya delante Hedal, sigueme de cerca con la antorcha y guiame.-- dice mientras empieza el descenso

A Matei no le pasaba desapercibido el repentino interés que Ramirez estaba demostrando por su acompañante. Cada vez que el vástago observaba a la mujer, el Ventrue le lanzaba a su vez una mirada intensa a Ramirez, intentando averiguar que pasaba por su cabeza. No estaba seguro de poder confiar en alguien que parecía temer su propia sombra. 

Matei toma educadamente a la esclava de la cintura para acercarla más a él con aire protector y así ayudarla a bajar por las escaleras:

-Os encontrais bien? - le pregunta en un susurro, preocupado por su silencio, supondría que le habría impresionado la aparición de Lantos.

El susurro no escapa al oido de Ramírez
--Demasiado bien se encuentra para ser una simple esclava que presencias todas estas cosas ¿no creeis?-- responde Ramírez en lugar de la joven, sin volverse.
--Cualquier ser humano corriente habria gritado cuan lo menos, salido corriendo, o tal vez reaccionado en modo alguno, pero aqui la joven parece que no esta demasiado sorprendida por todo lo acontecido ¿no os parece raro?-- como Ramírez sigue avanzando sin mirar a nadie mas que a la oscuridad no queda claro si la pregunta es para Matei y para el grupo en general.
--Me parece demasiado coincidente que ella estuviera en nuestro camino, y que el noble que resulto ser un espia también estuviera alli, asi mismo me resulta raro la suma facilidad que tuvo la esclava para escapar de sus amos, que eran ¿los peores esclavistas de la historia?-- esa pregunta era claramente retorica.

--Sinceramente, demasiada casualidad, yo mas bien diria que todo es un montaje, ella no deberia estar aquí, es solo mi opinión claro esta, si de mi dependiera no estaría aquí, pero no depende de mi, ni sera sobre mi sobre quien recaiga la culpa si finalmente es parte del complot de o de los espeias.-- concluye como medio consejo medio advertencia para Matei por si nose habia percatado por si mismo de todas estas concidencias.
Finalmente se encoge de hombros y siguendo adelante.

No puedo si no dar la razón a en parte a Ramírez, sin embargo y por lo que a mí respecta todo continua siendo al menos sospechoso, nadie nos asegura qué bando es el bueno, pero no queda mucha opción.

Bajo las escaleras tras mis compañeros.

Ves manchas pálidas en su alma, además de un tono naranja.

- El miedo atenaza su alma en estos momentos, caballero, aunque sí que estoy de acuerdo con vos en que parecen muchas coincidencias, sobre todo pudiendo tratarse de una ghoul… - comenta Markus en tono conversacional, dejando el final en el aire.

Miro a Matei y luego al hombre que dice que soy un Ghoul.

Ya os dije que mi familia era poderosa y que yo solo quería volver con ellos. Sigo a Matei, porque me está brindando protección, no porque sea mi fin.

Seguíis bajando escaleras hasta que llegais a una gran sala, la cual parece una caverna excavada, con montones de túneles a por todas parte.

Por favor señores, no os pareis ahora, acabad vuestra conversación cuando hayamos llegado, cualquier error en estos túneles y quedaremos atrapados para siempre.

Me apresuro a seguir al ghoul como nos indica y guardo silencio para no desconcentrarlo mientras trato de memorizar el camino que seguimos para no quedar allí atrapado en caso de trampa.