Partida Rol por web

Observo interesado la intervención de Ramírez. Esperaba que hubiera sido el supuesto "caballero" el que protegiese a la dama, no el "bárbaro pirata". Habría que reconocerle la agilidad de pensamiento para ganarse el favor de la ghoul y que confíe en él para contarle quizás otras cosas más adelante, aunque quedaba por ver que precio pagaba por interponerse en el camino de otro depredador. ¿Tendría Lazar el valor de enfrentarse a Ramírez? ¿O sólo lo tenía para asustar a humanos?

"¿¡Cómo se atreve?! ¡¡desacreditarme ante nuestros nuevos amigos por una simple escoria humana del ganado!!"

Mis dientes rechinan de rabia y una obvia mirada llameante se posa sobre Ramirez quien en breves momentos no solo había perdido puntos demostrando ser un inepto en las presentaciones, sino que además actuó como un auténtico cretino con su última acción.

Unos segundos de tensión preceden a mis palabras

- Te repito que ni el honor, ni la caballerosidad son mis banderas.

Un halo de oscuridad envuelve las palabras que suenan frías como un témpano mientras en el fondo de mis pupilas se atisba el vacío de una maldad sin precedentes.*

Ramírez, lejos de amedrentarse por el enfado de Lazar prosigue su camino y en un momento gira la cabeza, sonrie nuevamente a Lazar y le dedica un guiño de complicidad.

La mirada se Lazar parece realemnte amenazante, pero Ramirez es capaz de mantener la compostura, e incluso de hacerse el "valiente", sin mostrar un signo de amedantramiento, al tiempo que se aleja con Sherazina, la cual no se resiste por tal de alejarse de Lazar.

Una vez lejos de oido y miradas indiscretas Ramirez se coloca frente a Sherazinha, con delicadeza le coloca una mano en la barbilla y pasa el dedo pulgar suavemente sobre la mejilla derecha allí donde Lazar la golpeo --¿Estas bien? -- le pregunta gentilmente con una pequeña sonrisa en los labios.

Mi mirada se entorna sobre el guiño de complicidad de Ramirez y cuando este se da la vuelta, arrugo la nariz indignado. Aquella escena me estaba haciendo hervir la sangre. Si hubiera tenido la fuerza de un brujah, le habría arrancado la cabeza allí mismo.

No me queda otra que morderme la lengua y dejar que el silencio ahogue mi herido orgullo.

De brazos cruzados, claramente ofendido, sigo al grupo.

En vistas de que mi forma de proceder no les parecía adecuada, a partir de ahora me mantendría al margen.

"No estoy dispuesto a mover un dedo por ese marinerucho de poca monta ni por ningún otro del grupo hasta oír una disculpa."

Esa era mi madura venganza:

"Ahora os las apañaréis sin mi, malditos garrulos insolentes"

Y obviamente Ramirez había perdido ahora absolutamente toda mi simpatía.

Aparto la mano suavemente de Ramirez al tocar mi piel. Sabía de sobras como eran esos demonios y aunque uno quisiera ser amable, en cualquier momento podría ser mi peor enemigo.

Sí, mi señor, estoy bien, nada que no haya tenido que sufrir anteriormente...

Le miro firme, decidida, sin miedo.

Anatole espera a que los guardias que ha llamado Markus vengan y sin problemas se pone a cavar, teniendo una convicción seguro de que está haciendo lo correcto.

Por su parte Yago, con su honor, no discute sobre si es correcto o no, y se junta al grupo para poder acabar el trabajo.

Lo que os fijais el resto, es que viendo la cantidad de piedras, entre ellos 4 es imposible que lo consigan antes de que acabe el sol, además los guardias llevan demasiadas horas despiertos y caerán agotados de un momento a otro.

Segun vuestros calculos, deberían ayudar un par de hombres más...

--¿Y que es eso que has sufrido anteriormente, y a manos de quien? --dice tranquilo. Ramírez no se toma a mal el gesto de la Gohul, después de todo era comprensible.

Observo la infantil escena que hemos interpretado y finalmente me quito la capa o abrigo que llevo y me pongo a quitar piedras con un bufido.

Estaba claro que Lazar no iba a ensuciarse sus blancas e inútiles manos, y que Ramírez era igual de perezoso para hacer algo de provecho como rápido era con la lengua.
Tenía el mismo sentido forzar a los humanos hasta la extenuación como lo tenía forzar a los caballos. Al final no servía de nada y solo eran fuentes de nuevos problemas.
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Me remango yo también y me uno a retirar piedras siguiendo el ejemplo de Teodor.

Me atuso el bigote con satisfacción al ver que ahora les vendría genial mi ayuda y no la tienen, aunque lo cierto es que tampoco me hubiera puesto a cavar como un sucio esclavo aunque no hubiera estado enfadado.

Me entretengo mirando como los demás trabajan y de vez en cuando me encuentro mirando fijamente a Sherazinha mientras turbios pensamientos recorren mi mente.

La atención del caballero estaba en las palabras del Malkavian y sus implicaciones, suficientes para pintar una sonrisa en su cadavérico rostro, como para preocuparse demasiado del buen o mal trato del ghoul de otro de sus compañeros, por muy doncella que fuera.

No era su responsabilidad cuidar que su domitor ejerciera con dignidad y honor tal posición, por mucho que le desagradara la falta de honra en su comportamiento; a menos, claro, que dicho vampyr estuviera dispuesto a aceptar su autoridad. Cuestión, la de la jerarquía dentro de la coterie, que no iba a plantear en aquel momento. O quizás nunca, si no se presentaba la necesidad; su Clan no era uno especialmente aficionado a portar coronas que no significaran gran cosa... Por lo que con la intervención de Ramírez se dio por satisfecho, por mucho que fuera evidente que guardaba motivos adicionales.

- Joven Wilhelm, ayúdame a despejar el acceso al sótano. - La perspectiva de una biblioteca antigua y con conocimientos perdidos sin duda serían una gran motivación para su ghoul.

- Decidme, mi buen Anatole, ¿qué más os ha sido mostrado sobre nuestro porvenir? ¿Dios ha considerado necesario revelarnos algo más?

Te lanzo una mirada desconfiada, tu apoyo despues de todo lo que habias demostrado, se notaba que era situacional.

Mis captores, de los cuales Matei me liberó. Me hicieron daño y casi consiguen convertirme en una simple esclava sin futuro.

Comenzais a retirar piedras, mientas Lazar se queda esperando a que acabeis y Lucita cerca de vosotros, tampoco aporta demasiado debido a su alta cuna. En otro lado se mantienen Ramirez y Sherazina, hablando entre ellos.

Finalmente aparece una puerta, y podeis ver una pequeña estancia, la cual está bastante llena de pergaminos y unas tablas de arcilla. 

Os fijais de que la sala es lo suficiente grande como para alvergar a todos los cainitas.

Bueno, creo haber entendido que insinuabas que tus captores eran algo mas que simples humanos esclavistas, y si no seguro que con el tiempo que llevas entre nosotros sabes que no somos humanos corrientes...te estoy ofreciendo mi amistad y apollo, no los desprecies tan a la ligera. Ahora te pregunto ¿como quieres que sea tu futuro?