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Crónicas Giovanni: La última cena

1. El arte del buen comer

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17/09/2019, 13:47
Allan Beicker

La noche no había hecho más que empezar y sin duda los gritos sacerdote puso a Allan los pelos de punta, no estaba acostumbrado a todo aquello y sin duda, el cansancio acumulado y estar rodeado de desconocidos no ayudaban para nada en mejorar la situación.

Al fin apareció uno de los hombre de Giovanni sin demasiadas respuestas como pronto se vió por la lluvia de preguntas a la que fue sometido en pocos segundos. Allan permaneció en silencio, compartía las mismas inquietudes que sus compañeros de viaje pero todo estaba dicho ya y desgraciadamente tendrían que esperar a la noche siguiente.

Aunque un nuevo escalofrio recorrio el cuerpo de Allan cuando sintió la lengua de aquel individuo sobre su mano, que demonios era aquello? sin duda se encontraban más al norte que la calida Italia pero no había escuchado ningún relato sobre aquellas extrañas costumbres que dejaron al médico perturbado.

Robert se sobresalto al ver la situación desenfundando un arma, la situación entre tanto extraño podía verse rapidamente empañada, Allan intervino pues robert había sido la primera persona que había entablado conversación y entre tanto desconocido era lo más parecido a un "amigo".

Dejalo Robert... no merece la pena.

La situación pareció sosegarse con la intervención de los guardias al menos por el momento.

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17/09/2019, 14:09
Robert Popescu

Robert giró la cara a toda velocidad al sentir que Allan le hablaba. Dio un suspiro al ver que se llevaban al monje. Quizá si hubiera actuado con algo más de aplomo. ¿Tanto había perdido que ya no podía ni asustar a un monje? Dio un suspiro, dejando marchar sus opciones para conseguir algo más de información y volvió a la barra junto con el chico.

Mala suerte para el hombre de Dios supongo - Dijo dejándose caer sobre el taburete y terminando su bebida. - Me voy a dormir, querría estar descansado para mañana. Algo me dice que será un viaje largo y una cena todavía más larga.

Se giró hacia aquellas dos personas con las que había hablado y los sonrío. 

- Allan, Nathaniel; gracias por un rato agradable. No tardéis demasiado en iros a dormir - Tras lo que se fue escaleras arriba a su habitación

 

Notas de juego

Listo para el carruaje :). Si se diera el caso de elegir iría con Allan y Nathaniel; pero como han dicho que sea lo que tenga que ser.

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17/09/2019, 16:06
'Amr-Bashîr 'ibn Al-As

El musulmán escucha las respuestas de Lothar con atención y se da cuenta que sólo ha respondido evasivas a los cuestionamientos que les han presentado todos los invitados, limitándose con gran maestría a dar sólo palabras vacías. – ¿Por qué me parece a mí que oculta algo? – se pregunta, cualquiera habría dado una explicación habiéndose visto compelido por tantas personas preguntando lo mismo, piensa el árabe. – Algo no anda bien. – Concluye, dándose cuenta que no lo resolverá sino hasta mañana, que pase el carruaje por ellos para ir a la cena a la que han sido invitados.

Justo cuando estaba a punto de retirarse a sus aposentos, su gesto se tuerce a una expresión de ira cuando ve como los hombres de Lothar le dan una soberana paliza al monje loco que ha escupido el nombre de su señor, cuyo único delito ha sido advertirnos de un peligro que sólo él conoce y que los demás pasamos por alto. – ¿Es esto normal en estas tierras? – iracundo, se preguntaba. Pero como si no fuera capaz de controlar sus propios actos, acude violento al auxilio del monje, y empuja a uno de los guardias con tanta fuerza que lo estrella contra una mesa cercana, rompiéndola en mil pedazos.

Forcejea contra el resto de los guardias que tienen acorralado al monje y se pone entre ellos y sus golpes, cubriendo con su propio cuerpo al hombre de fe. Esperaba que su reacción fuese acompañada por más personas, pero parece que el miedo a ser desinvitados de la cena prevalecía al deber de ayudar a los más necesitados. Grita algo inentendible para la mayoría, pues lo hace en su idioma natal. – ¡BASTA YA! – pone su diestra en su cinto, para tomar su espada, sin desenvainarla y la zurda ante los guardias, para recibir sus golpes. – Os ruego que paréis – dice en italiano a los guardias, para que todos lo entiendan – este hombre no os ha hecho nada ni ha cometido delito alguno en contra vuestra. Lo único que ha hecho ha sido hablar de más. Este no es el castigo que le corresponde. – Lo dice lo mejor que puede, iracundo, tratando de no mezclar las dos lenguas que utiliza. – Parad. – Finaliza, a modo de súplica, tras un largo suspiro. Sabe que se ha metido en problemas, pues su reacción no agradará ni a Lothar ni al señor de estas tierras. Si así tratan a un hombre de Cristo, qué podría esperar él, a quien sólo consideran un infiel. Cruza una breve mirada con Piero el pintor, en sus ojos se deja ver su ruego: “Completa la pintura, por si algo me pasara.” Fue el último pensamiento que pasó por su cabeza antes de volver su mirada hacia Lothar, ahora sí, embargado del miedo.

Notas de juego

Si nuestro musulmán favorito sobrevive a esto, me gustaría que fuese en el carruaje con Piero y Enrico.

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17/09/2019, 16:32
Director

- Disculpe, ¿sabe si el señor Lothar lleva mucho tiempo sirviendo a don Giovanni? -preguntas al cochero

-Toda la vida señorita -responde el cochero con una amable sonrisa

 

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17/09/2019, 16:43
Anna Katarzyna Zaleski

La respuesta del cochero no me hizo comulgar con su amable sonrisa dado que confirmó parte de mis sospechas así como otro tanto de las palabras del hermano Clemente. Si don Giovanni era realmente capaz de mover tantos hilos para que finalmente yo hubiera llegado aquí, ¿qué no sería capaz frente a otras gentes? Y aún más inquietante ¿qué había visto en mi? Cierto que también todo podía ser las maniobras de Lothar, el cual creyéndose invulnerable hacía y deshacía a su antojo, siempre bajo el abrigo de su amo y cruzando todas las líneas que creyera oportuno para su disfrute. Fuera lo que fuera, pronto saldríamos de dudas cuando lo acusara frente a su amo.

- Gracias por su respuesta.

Respondí educada al cochero aunque ya no ocultaba que algo me preocupaba, y no precisamente el tratamiento al monje, solo que en lugar de declararlo a los cuatro vientos opté por vestirme con ese sayo y responder a las hermanas.

- En casa, aquellos que se hacen pasar por miembros de la nobleza son ajusticiados al crepúsculo, pero desconozco si recibirá algún castigo bajo este cielo.

O mejor dicho "en estas tierras", porque aquí el conde era el encargado de dictaminar su justicia, fuera o no merecedor de dicha prerrogativa.

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17/09/2019, 17:42
Nathaniel Fontana- pj muerto

—Es interesante las respuestas que da, y las que no...— murmura, como si hablara para sí mismo.

Después, intenta sonreír, aunque se le nota poco contento, por la falta de respuestas. 

—En fin, tres horas no son mucho, después de lo que todos aquí hemos viajado... y mañana obtendremos todas las respuestas. Yo con el permiso de los presentes, me retiro a mi habitación. Descansen.

Notas de juego

Robert, Allan y ¿quién más se apunta? :)

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17/09/2019, 21:19
Duquesa María Borgia

            - Por favor Lady Anna Katar ... -     Comienza a decir la joven dama de compañía cuando la duqueza ahora descubierta misteriosamente por Lothar con las ropas de Mario frente a todos los presentes de la posada caminó hacia la mesa donde estaba con las otras damas y su guardia Pietro, ences dijo con voz baja en un italiano mas fluido que su dama de compañía:
           - No tienes porque disculparte tu mi querida y leal Pilar, ya que no haz hecho otra cosa que seguir mis indicaciones y casi has hecho y dicho lo mismo que yo hubiera hecho en tu lugar y lo has hecho para tratar de cuidarme de posibles ataques en el camino por venir con tan poca guardia a un lugar desconocido en un momento complicado para mi y mi gente con la ... pérdida de mi querido esposo, el duque Sforza! -     María mira por un momento con un ligero y breve sonrojo a las damas. los religiosos y a los artistas a quienes les sonrió un momento al final mientras que escucha las repuestas políticas de Lothar, antes de la reacción impulsiva y apasionada del fanático religioso, quien provocó la respuesta fuerte y autoritaria tan esperada por el mayordomo, como lo harían los nobles de esas tierras, de manera que la duquesa tardó un momento en reaccionar cuando vió como lo hicieron la mayor parte d elos otros invitados, entonces dijo al mercader musulmán mientras que Pietro se unía a los guardias del conde para tratr de contener lo:
          - Por favor señor Amr Bashir deje su arma, porque por la amistad que pudiera haber tenido con mi padre no me gustaría ver que le lastimaran, a pesar de estar de acuerdo con usted en que nadie de los aquí presentes queremos ni aprobaremos que nadie más lastime al hermano a pesar de su ... comportamiento!  ¿Esta de acuerdo señor Lothar?   No sería una buena señal para tantos invitados a su fiesta, aquí presentes!  -     La noble mujer pensó por un momento que ya había varios que podrían aprovechar la oportunidad para tratar de dañar al mercader, así que esperaba que el hombre cambiara pronto de decisión, para poder interceder por el hermano con el conde y sus hombres.     

Notas de juego

   Disculpen chicos pero tuve que escribir 3 veces el mensaje, espero quedara bien ... un beso!

 

 

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17/09/2019, 21:46
Albert Mctagger

Albert no pudo mas que intervenir ante tal violenta situación y se acerco al mayordomo- Controle a sus hombres por favor, es un anciano y  un trato tan brusco podria producirle heridas severas, no creo que su conciencia quiera cargar con la muerte de un hombre de dios-el medico decia aquello pero el rostro impasible de Lothar le hacia pensar que poco le podia importar al mayordomo la gracia de dios- Dejenlo marchar en paz asi todo podremos retirarnos a descansar apaciblemente para el dia de mañana, yo por mi parte me encuentro verdaderamente cansado.

 

Notas de juego

Si a Paolo no le molesta me voy en el carruaje con el

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17/09/2019, 22:56
Marco

Una vez en los carruajes Marco los observa con atención y empieza a ver como se va metiendo gente en ellos. Decide entonces cantar una canción popular para escoger por medio del azar el carruaje donde se va a meter mientras intenta adivinar quien de todos esos presentes se le unirá al carruaje.

Divertido y con la canción finalizada y su dedo apuntando a uno de los carruajes, Marco sale corriendo hacia el medio de transporte y, de tener la puerta abierta, se lanza dentro.

Notas de juego

Perdón por el post tan escueto, pero ya estaba en los carruajes, solo que no había indicado que me metía en ellos... Evidentemente, me meto en uno al azar

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17/09/2019, 23:06
Pietro
Sólo para el director

Aprovechando que los ánimos parecen caldearse y que nadie parece prestar atención más que a la escena que tiene lugar entre el religioso y los hombres de Lothar, me muevo discretamente en dirección a la mendigo que permanece allí sin haber dicho una sola palabra en todo el tiempo que he permanecido en la sala. Observo su reacción a la escena que tiene lugar y cuando aquello termina me voy acercando lentamente, pues mi pierna no me permite otra cosa.
Cuando llegó me siento junto a ella.
- Buenas noches.-Digo al llegar.-Temo que la persona que más sabe de la sala sea también la que más calla, o la más discreta, según se mire. Todos hemos sido llamados a presencia y convite del señor Giovanni y no parece que nadie sepa nada de nuestro anfitrión... Lo que no es de extrañar siendo todos forasteros ¿Usted ha oído algo por casualidad?

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17/09/2019, 23:32
Durga Syn

La mujer te mira al ver que le hablas

-Pocos han visto al señor Giovanni, por lo que no puedo contaros gran cosa de él, no lo conozco. Todo lo relacionado con el señor Giovanni es un misterio, pocos saben algo de él o qué le motiva para hacer las cosas que hace, pero verdaderamente es la primera vez que veo a un grupo como el vuestro acudir a su llamado

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17/09/2019, 23:28
Basilio

Domine, non sum dignus .Pienso al ver que varios de los asistentes intervienen para  parar el maltrato al monje .Por todos los santos  , si hasta el musulmán  intercede por él mientras  que un hermano en Cristo como yo  me he quedado quieto  y en silencio .Viendo que ya no soy necesario me retiro  cabizbajo a mi habitación para orar  y pedir perdón al señor por mi debilidad ,una noche de penitencia y oración es justo lo que necesito.

 

Notas de juego

el carruaje donde me toque o donde  quede hueco

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17/09/2019, 23:42
Anton Rossi

Tras despedirse de Paul satisfecho de su buena obra, espero a que Lothar abandonara el lugar. La escena del monje le pasa indiferente. De hecho le estaba empezando a molestar, agradeció su silencio.
Queda tiempo para celebrar y festejar, alegremos la posada
Sugirió Antón dirigiéndose a sus bultos de viaje. Allí revolviendo apartó un estoque y sacó un laúd. Tras cerrar con llave el baúl y pedir al posadero que lo lllevara a una habitacion, se giró hacia su improvisado auditorio.
Musica y vino, encendámos el espiritu. dijo Antón satisfecho mientras con uno de sus dedos de la mano derecha comenzaba a imprimir un ritmo pegadizo. Si ustedes quieren reservarse para mañana, los lugareños seguro que se animan provocó a los presentes, sobre todo miró a los gitanos.
Luego susurró al posadero de modo que solo le oyera él.
Quiero 1 de cada 8 monedas que saques esta noche gracias a mi. y se le quedó mirando esperando una respuesta. Sus pies comenzaron a seguir el ritmo que tocaba.

Notas de juego

Antón va a quedar despierto invitará a vino e intentara no dormir solo y tirar de la lengua de don Giovani y de Lothar..
Festejar con el es divertido, tiene una canción, una historia, un chiste y una irreverencia para todo, cualquiera es bienvenido.

Los carruajes llegan mañana a primera hora de la tarde, dijo Lothar. ¿Por que hay gente subiendo a ellos ya?

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18/09/2019, 00:13

Las gemelas miraron divertidas todo lo que se habia liado por unas pocas palabras mas subidas de tono y unos desafortunados movimientos, lamentablemente muchos ya se iban a dormir... por suerte aun había un apuesto joven para animar lo que quedase de noche. Ambas hermanas se quitaron sus capas y colgandolas en la entrada, comenzaron a bailar al son de la música que tocaba y ambas le guiñaron un ojo al muchacho, mientras sonreian divertidas.

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18/09/2019, 00:20
Nicolae Dobrich

La explosiva reacción de Lothar y el hermano Clemente hacen que me incorpore en mi asiento del golpe, preparado para sacar mi espada y entrar en acción. Es la consecuencia de haber luchado en las guerras, imagino. Pero parece que es más la intención de Lothar de quitar de en medio al molesto monje que matarlo o darle una paliza así que no termino de levantarme. Sin embargo, esas reacciones y el intercambio de palabras queda grabado en mi mente y provocan más preguntas.

Finalmente, las aguas se calman y ya se hace tarde. En una campaña los minutos de sueño son muy preciados y no se deben desperdiciar. Y el viaje hasta aquí ha sido largo y pesado así que imito a mi nueva camarada Bilyana y me retiro a descansar a mi habitación.

Notas de juego

Yo iré con Bilyana. Ya que se ha hecho grupo en la mesa de la taberna pues lo más normal es que siga así.

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18/09/2019, 00:48
Anna Katarzyna Zaleski

Y si hacerse pasar por noble era castigado, que un don nadie clamara de aquellas formas contra el señor del lugar era inadmisible. Incluso si era miembro del clero lo máximo que podía provocar eran unas pocas revueltas, por lo que podía darse por contento con aquel trato tan magnánimo. Una cosa era ser capaz de ver el mal y otra cargar contra el inconscientemente como lo había hecho el hermano Clemente o incluso el musulmán porque ¿tan difícil era aguardar a que todo pasara?

Parece que si.

Reconocí mientras optaba por atender mis propios asuntos, justo como la doña María. Había salido en ayuda de su criada, pero sus palabras seguían revelando los mismos detalles. De ahí que me acercara hasta ella conforme las hermanas decidían divertirse junto al embaucador.

Seguía viéndola extraña vestida de hombre, lo cual no era bueno pues podían llevarla a la sierra o algún otro castigo capital, porque si el monje hubiera estado mejor de la cabeza no habría tardado en acusasrla de yacer con mujeres.

- ¿Verdad que viajará conmigo doña María? Me debe unas disculpas apropiadas.

Especialmente si no quería jugársela a que diera testimonio de todo lo vivido.

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18/09/2019, 05:57
Etienne de Bourgogne

Etienne atendió a las siniestras explicaciones de Lothar, y contempló impasible cómo se llevaban a rastras al monje loco. Aquello (ser "invitado" a salir de una tasca) le parecía adecuado a la situación, en la que el hombre estaba alterado y molestando a los clientes: nada que ver con la grosera aparición del arcabuz.

Al escuchar de nuevo la hermosa voz de Constanza, refiriéndose a los trovadores de su tierra natal y hablándole esta vez en su lengua, miró a la viuda, y sus ojos se encontraron.

Una vez más, sintió una punzada de envidia hacia el conde de Tournai. Aquello (los hijos, el feudo, el título...) era lo que él hubiera querido alcanzar: ¡Lo que él merecía!  En cambio, estaba allí, en los límites de la cristiandad, con un escudero al que no podría retener mucho más tiempo, sin un real, siguiendo la llamada de un patrón inquietante... y allí estaba ella, también. Sola, lejos de todo, y con esa extraña determinación en sus ojos.

Etienne asintió.

 - Y mi señora puede contar con estas armas - respondió, también en francés - Y con que no quedará gota de sangre sin derramar para protegeros si fuera necesario.

 

Y, por un instante fugaz, mientras ofrecía lo único que podía ofrecer, Etienne volvió a estar en los jardines alegres de la corte de Borgoña, donde el filo de su espada era temido y a sus palabras se les daba algún valor.

 

 - Chico - dijo a Luigi, ya en italiano - Mejor será retirarnos: mañana será un día difícil, y debemos estar frescos.

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18/09/2019, 16:44
Constanza de Tournai (pj muerto)

Constanza sonrió al oír la respuesta de Etienne, sintiéndose súbitamente conmovida por escuchar una voz que no fuera la suya en su francés borgoñón tan lejos de casa. Aunque seguía inquieta por las extrañas acciones de sir Lothar, la presencia del caballero cerca y sus palabras la hacían sentir más segura que antes; aunque se acababan de conocer y el aspecto desmadejado de Etienne le recordase levemente a los días de menor gloria de su hogar, Constanza quería confiar en él y en sus capacidades. Sin duda Etienne tenía una historia que contar, al igual que ella, pero aquel no le parecía el momento ni el lugar para compartir la suya, sobretodo cuándo el sueño después de la comida empezaba a arreciar y los guardias del mayordomo de los Giovanni se llevaban a rastras al monje afuera de la posada.

Si queréis, podemos compartir carruaje mañana por la mañana para ir a la Mansión Giovanni —propuso con el ánimo algo recuperado ante la respuesta de Etienne, mirando alternativamente al caballero y a Luigi, para saludarlo cortésmente una vez se hubo acercado—. Yo me iré a descansar también, aunque antes quisiera preguntar algo al cochero. Disculpadme, si sois tan amables.

Después, Constanza se acercó al cochero rubicundo con paso suave y le saludó moviendo la cabeza educadamente, conforme dictaba el protocolo ante los siervos. Aunque se acarició el crucifijo de plata que llevaba colgado del pecho al ver que el cochero también llevaba uno, dejó caer las manos juntas sobre el regazo enlutado y, después de presentarse como Constanza, condesa viuda, le dijo:

Creo que fuisteis vos uno de los conductores de mi carro durante parte del trayecto. Os lo agradezco mucho —luego carraspeó y miró preocupada hacia la puerta por la que acababan de salir los guardias con el monje— ¿Sabéis si el señor Giovanni obra así con todos sus siervos? Estoy preocupada por el anciano...

Dijo mirando hacia el musulmán que directamente intentaba impedir que llevasen al monje, mostrando consternación cuándo se hubo llevado la mano al pomo de la espada. No era la primera vez que se hacía en la taberna esa noche, pero viendo la crueldad fría de las palabras de sir Lothar decidió preguntarle directamente:

¿Adónde os lo vais a llevar, sir Lothar? Solo es un pobre monje viejo. Os ruego que no seáis muy severo con él, solo hablaba tonterías acerca de vuestro amo. ¿Hacerle caso no sería darle la razón? —Constanza razonó con su voz meliflua, intercediendo de inmediato por el anciano cuándo los guardias lo sacaron a rastras de la habitación. Luego miró hacia el musulmán, conteniendo un suspiro para decir despues—. Disculpad su impetuosidad. Debe de ser ajeno a las formas de vuestra corte y de vuestras tierras, pero estoy segura de vuestro invitado musulmán que no obra con mala intención.

La condesa había sido criado desde niña para representar la excelencia de la nobleza, ya fuera dentro o fuera de la corte, y precisamente por eso los alardes de imperiosidad y los arrebatos de violencia le parecían de muy mal gusto. Ella quería pensar que gran parte de los problemas de la gente se podían arreglar con elocuencia y buenas maneras y quería llevar a cabo esas prácticas hasta el final. Aunque se le hacía raro defender a un musulmán, cuya guerra y oposición a Dios estaban gran daño causando a la Cristiandad, Constanza opinaba que nunca era plato de buen gusto ver como le cortaban las manos a alguien.

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18/09/2019, 17:53
Duquesa María Borgia

         - ¿Deber le disculpas lady Anna Katarzyna?   Tal vez sea buena idea que platiquemos de eso un rato mas, pero por supuesto que me agradaría compartir con usted mi propio carruaje con el que llegué aquí junto a mis criados, el cual podríamos compartir junto con sus amigas, un par de aristas y un comerciante socio de mi padre ... ¿Si les parece bien señoritas Di Soldi? -   Responde la duquesa Borgia a las damas en la mesa mientras que de reojo mira a los artistas y le hace una seña a Pilar para que les exponga la idea mientras que Pietro se mantiene cerca de Amr Bashir

        - Señores Piero y Enrico mi señora les pide que nos acompañen en nuestra carroza durante el camino a las tierras del señor Giovanni -    Susurra la joven criada andaluza, aún con las ropas de la duquesa 

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18/09/2019, 19:43
Anna Katarzyna Zaleski

Si nuestro anfitrión nos proveía de tantas cosas, quizás pudiera considerar un insulto que rechazásemos su último transporte solo por ir en uno más espaciso, por lo que era pronto para aventurar aquel detalle.

- O incluso en privado antes de acostarnos.

Sugiero con seriedad, no fuera a cohibir su lengua en presencia de demasiada gente.

- Aunque no necesitará cambiarse o se nos hará demasiado tarde.

Añado de igual modo, pues lo último que deseaba era que nos dieran las mil sin haber hablado.