Partida Rol por web

Golpeas la compuerta con fuerza, disipando parte de la rabia y los nervios. Phillip te mira entre asombrado y algo asustado.

Al golpear la compuerta con tanta rabia te acabas haciendo bastante daño. Tienes las manos llenas de morados y ensangrentadas. Al ver esto comienzas a llorar de impotencia y te derrumbas por completo. Te sientas en el suelo mirándote las manos y mirando al infinito. Odias este lugar.

Observo entre asustado y sorprendido la reacción de Cassandra, y aunque no podría decir que me sentía mal por ella, tampoco me alegraba. El hecho de que ella fuese una jodida desconsiderada no significaba que me sintiese bien por su mala suerte. 

- ¿Te das cuenta que hay otras cinco compuertas por las que podrías haber intentado salir? - Comento desde mi posición, sujetando firmemente el destornillador con mi brazo bueno, pues ya no me fío de la estabilidad mental de la chica. 

Por su parte, el brazo me sigue doliendo como el infierno. Esta horriblemente hinchado. Siento gotas de sudor frío, pero no sé si son parte de mi imaginación o son reales. Espero que esto no empeore.

Miro a Philip con los ojos entrecerrados de rabia, saliendo del trance.

-¡Esto es culpa tuya! ¡Bajé aquí y casi me mato por tu puta culpa! ¡Y encima me echas! ¿¡Quién coño te crees que eres para mandarme a mí!? ¡A Cassandra Doherty!- me levanto del suelo, poco a poco. Las lágrimas aún corren por mis mejillas, de frustración y enfado. Una vez incorporada, le señalo con el dedo.- ¡Es tu culpa y de esa zorra morena! ¡YO NO MEREZCO ESTAR AQUÍ ENCERRADA CON UNA PANDA DE INÚTILES Y GILIPOLLAS!

Doy una patada en el suelo, cabreada. Pronto todo nubla mi mente y el objetivo de mi siguiente patada es Phillip. Al que me acerco con paso decidido a golpear con fuerza a una de las fuentes de mi cólera, mi compañero de habitación.

Miro a Cassie con miedo, pero me mantengo firme apuntando mi destornillador hacia ella.

- ¡No dudaré en clavártelo en el cuello sucia furcia!

Al inminente movimiento de Cassie, a lo único que atino a es mover mi brazo bueno al frente para cubrir el que esta roto, apuntando a la chica con el destornillador, a la vez que giro el cuerpo para no recibir de lleno el golpe.

Me acerco a golpear a aquel idiota. Todo era culpa suya, culpa de todos. En él veía al estirado y subido de Derek, a cómo pensaba que era mejor que yo aunque la crítica alabara mis actuaciones; veía a aquel idiota becario del director que no conseguía traer un capuccino descremado nunca, y que no lo conseguiría ni aunque fuera el único tipo de café del mundo; veía al idiota de mi agente que ya buscaba jovencitas con las que reemplazarme en cuanto me saliera la primera arruga; veía a Alexia que me había tirado al suelo y tratado de patear, solo por envidia porque yo era mejor... Y aunque veía muchas cosas, lo único que había en mi mente era rabia debido a un enfado de proporciones bíblicas.

¡Y encima que bajo a ayudar, se atreve a amenazarme con el puto destornillador que le he ayudado a coger! ¡¡Cómo se atreve!! ¡¡A mí, Cassandra Doherty!!

Mis pasos son decididos y cuando lo tengo lo suficientemente cerca, para golpearle sin que alcance mi pierna izquierda, echo hacia atrás la derecha para tomar carrerilla y le doy una patada en la mano.

Cassie, golpeas con toda tu rabia la mano con la que Phillip sostiene su destornillador. La débil patada no consigue más que apartar la mano hacia un lado. Pierdes el equilibrio y caes al suelo, frente a Phillip, lo que te encoleriza aún más. Phillip, sigues mirándola con cierto asombro, ¿reaccionas?

Atónito por la reacción de la chica, apenas consigo decir algo al momento del golpe. Por suerte este no fue muy fuerte como para sentir miedo, pero si la chica se tiraba sobre mi corría peligro. Una cosa era desviar un golpe, pero si la tenía encima, dificilmente conseguiría protegerme. Tras el primer ataque me fuerzo a recomponerme, tengo que hacerla reaccionar de alguna forma.

- ¿¡PERO QUE MIERDA TE PASA ZORRA LOCA!? ¡Apenas tienes tiempo de salir de esta habitación antes de que la matona esa venga por ti, y te dedicas a perder el tiempo con un pobre diablo con el jodido brazo roto! -

Caigo al suelo y me siento, roja de ira y con los puños cerrados. Las uñas se clavan en la palma de mi mano, tratando de calmarme. 

¡Maldito inútil, ¿encima me insulta?! ¿¡Cómo coño se atreve!? ¿¡Cómo se atreve cualquiera!?

-¿Que la matona venga a por mí?- me incorporo poco a poco y quedo de rodillas riéndome. Una risa demencial debido a mi estado actual y que no hay nada de buen humor o cómico en ella.- ¡Cabrón mentiroso! ¡Solo quieres echarme! ¡Y ella no viene a por mí! ¡Quizás el próximo al que intenté dar una puta paliza seas tú! ¡¡Te arrastrará del pelo y te pateará, y el otro lo fotografiará con su cámara!!

Renovada de rabia y con una sonrisa macabra en el rostro, agarro el brazo de Phillip y forcejeo por su destornillador.

Cassie tiene cada vez más cara de perturbada. Tiene unos pensamientos que rozan lo psicótico, recurrentes, que se vuelven contra ella. Habla y grita sobre acontecimientos que Phillip no conoce, pero ella le hace parte de ellos. Sus movimientos son espasmódicos, bruscos y violentos, es totalmente impredecible, puede hacerse daño o hacérselo a Phillip.

Phillip, haz algo para tranquilizarla o de lo contrario su mente se seguirá alejando de la realidad.

- ¡Ya basta! - Grito cuando Cassandra viene nuevamente hacia mi. Dice cosas raras, pero creo que ya le voy pillando el truco. Pensaba que los famosos estaban todos locos, pero Cassie rompe el molde hasta para ellos. Sin embargo, creo que le voy pillando el truco.

- ¿Crees que se va a ver bien esto? ¡Eres una jodida estrella! ¡Eres la mejor! ¿Acaso no te das cuenta de que tu imagen se irá a a basura si descubren que atacaste a un hombre con el jodido brazo roto? ¡Estoy tratando de ayudarte Cassandra! Los otros van a venir en cualquier momento, y yo con mi brazo no puedo hacer nada más... Tienes que aprovechar tu oportunidad Cassandra... Por favor... te lo suplico Cassandra... necesito ayuda... algún día alguien escribirá sobre esto, y serás la heroína... Por favor... Por favor...  Ve por ayuda Cassie... - Trato de encontrar sus ojos con los míos, y demostrarle con mi mirada que soy honesto, que de verdad la necesito. 

Cassie, con sus palabras Phillip consigue tranquilizarte. Tu respiración agitada se va calmando, y comienzas a recuperar el control sobre ti misma. Te das cuenta de lo que estabas a punto de hacer, y te sientes avergonzada. Phillip ha conseguido transmitirte confianza, al menos para que no le agredas y dejes de relacionarle con acontecimientos anteriores que nada tienen que ver con él. Aunque deberá seguir ganándose tu colaboración.