Partida Rol por web

Won no prestó mucha atención a lo que decían sus compañeros mientras registraba las imagenes en busca de manipulaciones. Supuso que los tohaa no habrían sido TAN imbéciles como para dejar que les envenenaran la comida en la cara, así que o bien era un hermoso malentendido del espacio, o bien era un envenenamiento más sutil en algún punto de la cadena.

- Claro, caballero- respondió, sin apartar los ojos de la pantalla.- ¿Que sugieres que hagamos? ¿Un filete a la luz de la luna y una noche para recordar? ¿O puedo hacer mi trabajo un poco?- preguntó, con sorna.

Zahra asintio a la propuesta de Alonzo, satisfecha de que su sugerencia parecia agradar a los demas.- Por mi perfecto, si usted tambien esta de acuerdo, claro.- Respondio mirando a Vera con las manos entrelazadas a la espalda.

 Alguien tendra que avisar a Agnieska de los planes, creo que por su mas que seguro conocimiento de tecnologia podria serles de ayuda a ustedes dos.- "Y de paso la aguanta otro un rato" penso la agente para si misma, sonriente ante la posibilidad de poder trabajar tranquila al menos un rato.

El pequeño robot respondió con diligencia.

-Hay una oficina de atención de O-12 en la estación que resuelve esta clase de problemas. También sería posible hablar con seguridad directamente dado que usted es actualmente agente del Bureau Noir, Reverenda. Si bien lo normal es que se devuelvan los objetos cuando se hayan investigado o cuando se abandone la estación. Que se sepa, no hay ninguna otra miembro de la Orden de Santa María del Cuchillo, Virgen de la Misericordia. Al menos ninguna que se haya identificado como tal. La delegación nómada ha traido Interventores expertos en infoguerra, pero no Reverendas.- Terminó el robot. Las lentes de sus ojos hicieron un movimiento que hacían que pareciera sonreir.

-Oh.- Dijo segundos después.- El Padre Alonzo informa de que se han dividido por equipos. Alonzo Yañez y Won Li están comprobando las grabaciones de seguridad mientras que Vera Heant y Zahra Alizadeh han ido a investigar las cocinas. Solicita también una actualización de su estado y posición, Reveranda.

Alonzo se cuadró, dando un suave taconazo mientras inclinaba la cabeza, mostrando su acuerdo con el plan de acción. Cuando se irguió, no pudo evitar esbozar una sonrisa al escuchar la petición de la agente haqqislamita.

"Buff... La reverenda ha conseguido algo a priori increible... En fin..."

- Melissa, por favor, comunica a la reverenda Agnieska que nos hemos dividido por equipos. Indicale la composición de los mismos y las areas de la estación donde vamos a estar. Y solicita actualización de su estado y posición, por favor.- El Padre-Caballero usó su tono más profesional y conciso para enviar su mensaje a la operativo nómada. Sin embargo, siguió siendo educado con la Pseudo-IA de un modo totalmente natural.- Gracias, Melissa.

Acto seguido se volvió hacia su equipo.

- Muy bien entonces, pues pongamonos en marcha.- Con un gesto grandilocuente, se hizo a un lado y cedió el paso las damas.- Despues de ustedes.- Tras un instante de duda, añadió en voz baja.- Tengan cuidado ahi fuera.

- Señor Li, si me hace el honor, despues de usted.

Melissa sugirió a Alonzo y Li que usaran la pequeña sala de reuniones que habían usado para desayunar. Sus comlogs eran más que suficiente equipo para revisar las grabaciones.

Won Li pudo comprobar rápidamente que el drone que llevó la comida no había sido alterado por el camino. Las cámaras de seguridad seguían todo el recorrido y estaba claro que lo que salió de la cocina fue lo que llegó a la habitación de los Tohaa.

Vera y Zahra no tardaron en alcanzar la cocina de aquel módulo de la Estrella Vespertina. Desde fuera ya podía verse un importante ajetreo y eventuales llamaradas de alguno de los fogones. Pero incluso allí había personal de seguridad que les permitió pasar tras identificarse. El chef de cocina tardó un poco en atenderlas y miró algo nervioso a Vera y su estatura...y también un poco a Zahra. Era un distinguido cocinero panoceánico y no se sentía a gusto con invasores en su cocina.

Chef: -Bienvenidas agentes ¿Hay algún problema?

Bueno, como lo vamos a hacer?- Pregunta Zahra a la ariadna mientras iban a la cocina.- Hacemos la tipica del poli bueno y poli malo? se que es muy topico, pero encajamos bastante bien en los perfiles, jeje.- La idea de imitar alguna de esas peliculas de detectives plagadas de cliches le resultaba un tanto comica, y sentia la necesidad de bromear un poco para quitarse la mala hostia que llevaba dentro por culpa de la dichosa reverenda...

Buenos dias soy la agente Alizadeh y esta es la agente Heant.- Se presenta Zahra con una sonrisa amistosa al chef, no parecia agradarle precisamente nuestra visita, aunque con alguien tan intimidante como Vera cerca era en parte comprensible.- entiendo que usted es el jefe de esta cocina, no es asi? necesitamos hablar con los responsables de preparar los desayunos esta mañana, ha habido un... incidente relacionado con un VIP. Tambien nos gustaria examinar las instalaciones.

Al igual que con Won Li la noche anterior, se ajustó al ritmo de la haquislamita mientras andaba, evitando caminar demasiado rápido y midiendo las largas zancadas que solía dar habitualmente. Ante la pequeña broma de su acompañante la miró y se encogió de hombros.

-Cierto, tienes pinta de chica mala -dijo con una pequeña sonrisa.

Cuando llegaron, los numerosos olores asaltaron a Vera, que sentía su estómago protestar por haber dejado la mitad de su desayuno antes.

-Ya la ha oido, ¿no? Y una lista con el personal, las nuevas contrataciones y los turnos de cocina no estaría mal tampoco. Y si puede ser rapidito, mejor. Apenas he desayunado y tengo un hambre lobuna, ¿sabe? -miró al chef, sosteniendo su mirada y sonriendo siniestramente, dejando entrever ligeramente los caninos que sobresalían a posta de sus labios para remarcar su aspecto amenazador.

Alonzo tomó asiento con cuidado en la sala que tan precipitadamente habia abandonado hacia apenas unos instantes. La rápida revisión del drone que habia llevado el desayuno a la delegación Tohaa no reveló ninguna anomalia. Incluso para el calmado Padre-Caballero, el resultado habia sido frustrante...

Acostumbrado a combatir y a animar a las tropas, a velar por su bienestar fisico y espirtual, la tarea de monitorizar holograbaciones se le antojaba tediosa.

Sin embargo, era su misión, asi que pidió a Melissa que ajustase las condiciones de la sala para obtner los mejores resultados posibles... dados sus recursos.

- Vuelve a pasarlo una vez más, Melissa, por favor...

Alonzo se incorporó ligeramente, adelantandose.

- Para. Amplia sector b dieciseis... Centra.  Reproduce a una cuarta parte de la velocidad... Li, ¿ves lo que yo?

Agnieska sabía lo justo y necesario de burocracia: era absurda para alguien cómo ella y una manera de perder el tiempo en estupideces. Pero también sabía que aquellos infieles adoraban la burocracia y si no quería fallar en su misión, debía comportarse. Se maldecía por haber cometido un error tan absurdo cuándo entró en la estación, perdiendo así su equipo. Había tenido que rezar varias horas pidiendo perdón por su torpeza y por fallar a Dios. Por suerte para ella, la virgen de la Misericordia la perdonaba si cumplía con su cometido, y Agnieska estaba dispuesta a hacerlo.

La reverenda miró al Bot y se detuvo. El robot seguía siendo una partición de aquella súcubo de ALEPH, pero su servidumbre era innegable. Si demostraba que era digno, separaría sus circuitos de los del Demonio y se lo llevaría en futuras misiones. Todos parecían apreciar su presencia y eso le facilitaría las cosas.

La reverenda perdió la mirada en algun punto del pasillo, sopesando qué podía hacer. No tenía hermanas que pudeisen asistirle, y si utilizaba su nueva posición de agente de seguridad el resto probablemente se enterase de ello. Probaría a hacerlo cómo el resto de mortales, fieles y sobretodo infieles, yendo a la oficina mencionada por el Mel-Bot. No esperaba que fuese difícil, pero claro, Agnieska no parecùia ser siempre constante de lo incómoda e intimidante que era su expresión apática junto a un tono y una mirada que mezclaban la seriedad con la ferviente fe que había en ella.

- Llevame a la oficina de atención del O-12 y no pases esas información a nadie. Los asuntos personales de una Reverenda Moira no son de interés público. Díle al padre Alonzo que debo atender a una llamada religiosa y personal que no interfiere con nuestro trabajo asignado, y que estaré de vuelta en cuanto termine o se me necesite. - La reverenda iba a termianr ahí su discurso, pero había aprendido en esas últimas horas lo bien que parecían funcionar los halagos con el padre Alonzo viniendo de Zahra, así que se quedó unos segundos en silencio pensando en su siguiente frase. - Y dígale que están haciendo un trabajo digno y confío plenamente en sus capacidades. - la reverenda se sintió satisfecha con lo que había conseguido crear y esperaba que eso fuese suficiente para quitarse al controlador padre caballero de encima un rato.

El chef se fue poniendo cada vez más pálido según hablaban. Un fallo con un VIP podría causarle muchos problemas. Y porque no le habían dicho que el problema era con un Tohaa porque se hubiera desmayado. Y aún palideció más ante el comentario de Vera.-Por...por supuesto. El personal está a su disposición.- Respondió nervioso.

Y era cierto que el personal podía atenderles ya que había poco trabajo. Habían paralizado el servicio de desayunos por la petición de Melissa. No tardaron en dar con las dos personas que habían preparado la comida de los Tohaa esa mañana,un chico y una chica que charlaban mientras preparaban la comida. 

El drone no había sido alterado por el camino, y un poco más de tiempo revisando las cámaras dejo claro que nadie había interferido con los Tohaa desde la noche anterior. La grabación era continua y no parecía haber nada raro en ella.

El problema debía venir de las cocinas, pero revisar eso llevaría algo más de tiempo. El movimiento caótico de las cocinas hacía difícil comprobar si alguien había contaminado la comida. Ademas había que revisar varias horas de grabaciones. Desde luego no era un trabajo especialmente gratificante.

Mientras trabajaban Melissa contactó con Alonzo con la respuesta de la Reverenda.- Alonzo tengo un mensaje de la Reverenda. Ha solicitado que os diga que tiene asuntos personales de una Revenra Moira que no son de interés público. Debe atender una llamada religiosa que no interferirá en vuestro trabajo y que estará de vuelta en cuanto termine o sea necesitada. Dice que estás haciendo un buen trabajo y que confía plenamente en tus capacidades.

Las molestas indicaciones del Panoco irritaban al soldado yuchino, pero no dijo nada. Se rascó la escasa barba de tres días mientras refelxionaba.- Este ángulo de cámara es una porquería- comentó.- Deja que mire a ver si puedo girar el enfoque y que Melissa nos simule en base a reflejos, hay un montón de superficies brillantes- comentó, haciendo saltar un panel de acceso técnico de su comlog para manipular un ralé de seguridad del proyector holográfico. Iba a retirar el protector de epilépticos otra vez, que se fastidiaran los jodidos niños con defectos genéticos.- A ver si ahora lo vemos mejor...- comentó, cuando fue interrumpido por la comunicación de Melissa.

- Je- rió.- Me parece bien, pero dile a la reverenda que mañana me voy yo de putas y ella trabaja, que aquí "motivos religiosos" podemos tener todos.

"Las cocinas... El punto debil de todo esto... Casi cualquiera puede haber deslizado un pellizco de cualquier cosa, desde sal hasta aceite de cacahuetes, pasando por curaré o arsenico..."

El mensaje de la Reverenda me dejó tan perpelejo que tuve que reproducirlo de nuevo.

- Gracias, Melissa. Transmite mis agradecimientos a la reverenda junto a la petición de que ruegue por nuestras almas... Ah, y enhorabuena, Melissa... Tal nivel de sarcasmo por parte de Agnieska hubiese frito cualquier otro sistema menos eficiente.

No habia ni rastro de humor en aquella última aseveración. La actitud de la ciudadana nómada era todavía más irritante que la del subdito del Estado Imperio, que ya era decir mucho.

Con un suspiro resignado, Alonzo se levantó, paseó un rato por la sala para desentumecerse y volvió a su puesto, permaneciendo en pie en esta ocasión. Con gesto grandilocuente, alzó ambas manos, desplegando ante si el sistema de reproducción mediante Realidad Aumentada.

- Allá vamos, de nuevo en la brecha...
 

Los chicos parecían absortos en su conversación e inconscientes de lo que se les avecinaba. Vera se acercó a ellos, lista para saltar en caso de que a alguno se le ocurriese hacer alguna tontería. Prefería dejar que Alizadeh tomara las riendas a la hora de entablar contacto e interrogar a los sospechosos. por lo que la miró e indicó a la joven musulmana a los muchachos. La idea de Vera era menos ortodoxa y podría causar problemas ambas.

-¿Ambos a la vez? ¿O nos dividimos a la parejita entre nosotras?
 

Zahra se quedo pensativa a la pregunta de Vera.- De momento empecemos con los dos a la vez, y si no nos convence ya presionaremos a cada uno por separado. Aunque no estaria de mas que parecieras amenzadora, para que se pongan nerviosos. A muchos se les suelta la lengua cuando su culo corre peligro.- Añade con semblante serio y una sonrisa maliciosa.

Salam, muchachos.- Saluda la agente para llamar la atencion de los dos cocineros mientras les mostraba la placa.- Soy la agente Alizadeh, y mi compañera aqui presente es la agente Heant. Nos gustaria haceros unas preguntas.

El trabajo resultó ser mucho más simple de lo que cabría esperar. En las cocinas habían separado los alimentos en los que eran adecuados para los Tohaa y en los que no. Won Li consiguió, trabajando con la interfaz de su comlog, que los elementos peligrosos para los alienígenas aparecieran en un vivo color rojo en las imágenes. Con la ayuda de Alonzo, no tardaron en dar con el problema.

El ajetreo de la cocina era impresionante, los pinches iban de aquí para allá frenéticos. En un momento dado, un plato acabó rompiéndose y parte de su contenido cayó en los ingredientes Tohaa, aunque una cantidad tan pequeña que era lógico que nadie se hubiera dado cuenta. Y es que aquellos extraterrestres eran extremadamente alérgicos al eneldo utilizado en otros platos.

El Padre-Caballero soltó un reniego obsceno en un latín pulcro y cuidado. No daba credito a lo que veía y tuvo que pedir que lo pasaran varias veces, en distintos espectros, angulos y velocidades para confirmar que, efectivamente, se trataba de un vergonzoso descuido.

- Inconcebible...- Musitó entre dientes.

Alonzo se dejó caer sobre su asiento, mesandose la barbilla, pensativo. Una parte de él estaba satisfecho de que no fuese un acto deliberado pero, por otro lado, se sentía decepcionado al no poder entrar en acción.

- Melissa, por favor, abre un archivo e incluye las grabaciones en la franja de tiempo designada. Añade holo-simulación y comentario de situación. Según las conclusiones del equipo de investigación, se trata de un accidente fortuito, no de una acción deliverada con intención de hacer daño o provocar un incidente. El agente causante del incidente es el Anethum Graveolens, comúnmente conocido como eneldo. Añade toda la información sobre dicha planta para el servicio medico y que lo calsifiquen como aleregeno para la delegación Tohaa...

Llegado a ese punto, el sacerdote guardó silencio, mientras se sumía en un silencio introspecitivo, valorando que hacer a continuación.

- Melissa, por favor, manten en stand-by el informe.

Alonzo se puso en pie y echó a andar por la habitación.

- ¿Quiere añadir algo, señor Li? Me gustaria oir su opinión sobre este asunto y sobre que información debemos transmitir... y a quien.