Partida Rol por web

Dirk continua avanzando hacia el interior del templo, dispuesto a inspeccionar cada detalle del campamento abandonado.
Va con la moto apagada, caminando a su lado. Con la mano derecha, descuelga una de las numerosas cadenas que le cuelgan del cuello, y la desenrosca de su ancho cuello, jugando inquieto con ésta, dejando escapar algunas tensiones.

Dirk examina el lugar con cuidado sin embargo es evidente que lo suyo no es este tipo de trabajo, su búsqueda no le lleva a ningún lado, quizá lo único extraño es que los objetos no lucen telarañas ni rastros de haber sido abandonados hace demasiado tiempo, por el contrario, bien pudieron haber sido usados un par de días antes, de hecho quizá los restos del campamento original se confundían con los dejados por alguien que visito el lugar hace no mucho...

Parece que hubo alguien aqui recientemente...comenta adentrándose aun más.
Con suerte, encontramos alguien viviendo acá y nos pueda decir si encontró algo...

Dirk toma la delantera, caminando al lado de la moto, sumergiéndose en lo profundo de la oscura gruta.

La expedición continua penetrando en las profundidades de la misteriosa caverna sin preocuparse por el pequeño campamento, después de todo aquella sangre y desorden podía ser simplemente el resultado de una fracasada expedición, quizá una caída, un mal paso, muchas cosas y ninguna relacionada a eventos extraños sino más bien el descuido evidente de un grupo de nerds. Poco a poco la luz natural desaparece y se hacen necesarias las lamparas, la oscuridad no es rival para el bien equipado grupo que avanza por un áspero camino en pendiente, las sombras provocadas por sus luces son su única compañía, aun que se podrida jurar por sus rostros que más de uno desearía evitar su presencia.

Súbitamente el piso desaparece abruptamente y frente al grupo se extiende un profundo foso que a lo ancho abarca de pared a pared y a lo largo se pierde en medio de la oscuridad. De voluntad fuerte, la pequeña expedición decide explorar y uno a uno se atan a firmes cuerdas para descender toda vez que parece ser la única forma de continuar. Lentamente el grupo desciende en aquella profunda garganta, la bajada se prolonga por casi dos horas hasta que deciden descansar en una pequeña saliente que es lo suficientemente ancha como para permitirles descansar en ella. De pronto al encontrarse juntos se percatan de que Drago, Scott y Natalia ya no se encuentran con el grupo, asustados piensan en volver sobre sus pasos para ver si se quedaron rezagados, sin embargo Halcon, Dirk y Will deciden continuar con el descenso por lo que las únicas que regresan son las dos mujeres.

En seguida el grupo se pone nuevamente en marcha, las dos mujeres ascendiendo y los tres hombres en bajada, luego de apenas unos minutos de haberse separado las cuerdas de las dos mujeres caen silbando al cortar el aire y pasan frente a los tres hombres, sin sujetar a las dos bellas investigadoras....

Sin dejarse amedrentar, Dirk y Halcon continua el descenso sin apenas preocuparse por las desaparecidas, Will algo asustado no tiene más remedio que seguir a los dos individuos que le obligan a continuar con el descenso. Aquella cansada rutina se prolonga por dos horas mas, luego de las cuales se detienen a descansar nuevamente, los tres hombres comparten alimentos en silencio y sin saber a que atenerse y cansados luego del prolongado esfuerzo, deciden "acampar" en la pequeña saliente. Las horas pasan lentamente y luego de lo que parece una eternidad Halcon y Dirk despiertan solamente para darse cuenta que Will ya no esta y que se sienten quizá más cansados que cuando se echaron a dormir.

Los dos curtidos hombres se mantienen a la expectativa, aquellas extrañas desapariciones y el cansancio acumulado no les dejan pensar con claridad, en su imaginación se ven el uno al otro cortando los cables de sus compañeros, en su mente comienza a anidar la idea de que el otro es el causante de la desaparición de cada uno de sus compañeros, casi pueden oler el hedor a muerte y corrupción que despide el otrora aliado, ahora odiado enemigo. Sin embargo sus ágiles y despiertas mentes comienzan a idear un plan para librarse de tan terrible peligro, habrá que buscar un modo, habrá que salir vivo de allí, no pueden permitirse ser unas victimas mas, no, habrá que eliminar al enemigo...

Dos gritos sordos que nunca son liberados de las agónicas gargantas es lo único que queda cuando uno a otro cortan la yugular del compañero en una danza aérea digna de cualquier gran espectáculo...