Partida Rol por web

[D&D 3.5] En Busca de Feyrya.

Capítulo 2. La Brisa Helada.

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22/02/2019, 15:43
Jacrow Geja

Aquel mensaje fue directo y claro. A Valyëvan no le gustaba él. Sin embargo, se sentía lo suficientemente respaldado por la tripulación y el resto de componentes de la operación como para no verse amedrentado por las amenazas de aquella mujer. Se zafó del agarra de la pelirroja de un tirón y la miró con desprecio. A punto estuvo de darle más motivos a la bárbara para acabar aquella disputa ahora y en aquel momento, pero iba a ser contraproducente para la expedición.

No me gustas... - Dijo escupiendo a un lateral. - No te gusto. - Gruñó. - No sé porqué estás aquí entonces... - Le desveló. - Alex dice que tu amiga es la única importante y yo sinceramente... - Miró a Aenifer. - La veo una mosquita muerta. - Volvió a gruñir. - Pero al fin y al cabo, confío en el criterio de Alex. Si dice que es necesaria le creo. Y si dice que sin ti no vendrá... - Frunció el ceño. - Tendremos que soportarnos. Creo que el viejo va a ser una carga más que una ayuda, pero es sólo mi opinión. Creo que simplemente puedo ignorarle hasta que desembarquemos. ¿Te parece bien, mujer?

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22/02/2019, 19:06
Valyëvan

El hombre no se amilanó... pero parecía no buscar pelea al fin y al cabo. Eso era suficiente para mí. Yo tampoco deseaba acortar nuestra expedición ni tampoco matar a nadie innecesariamente. Pero tenía muy claro que por las buenas o por las malas, ninguna de las personas que me importaban, Aenifer para empezar, y Eli, a quien respetaba profundamente, iba a sufrir ni un solo rasguño, tanto físico como en su honor, sin razón alguna.

Tendremos que soportarnos. Creo que el viejo va a ser una carga más que una ayuda, pero es sólo mi opinión. Creo que simplemente puedo ignorarle hasta que desembarquemos. ¿Te parece bien, mujer?

Me parece -le dije, relajándome -... por el momento.

Después de aquello, retrocedí y volví a unirme a Aen y Alex, y miré de reojo a Eli. Aquel viaje iba a ser un infierno y a mí todo aquello de las riquezas me importaba absolutamente nada. Solo estaba allí por Aen. Entonces caí. "Tu amiga es la única importante". ¿A qué se referiría? Tenía que hablar con Aenifer a solas y aclarar aquello.

-¿Bien, tenemos camarotes o algo así o dormiremos sobre la cubierta? -pregunté, esperando disponer de algún lugar en el que conversar las dos muy seriamente.

Notas de juego

Ainsss, haberme dicho que tenía que hacer una tirada. Yo es que a veces me concentro tanto en lo narrativo que no pienso en las tiradas. Sorry.

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25/02/2019, 17:03
Narrador

Tenían camarotes. Cuatro más concretamente. Aunque sólo uno de ellos era individual, el del capitán Lay Baton que a duras penas compartiría con su contratista Jacrow Geja. Otro de los camarotes estaba destinado para Alex, Aenifer y Valyëvan y los otros dos servirían al resto de la tripulación para dormir en turnos. No tardaron nada en embarcar y en menos de media hora aquella nave zarpo en en la inmensidad del océano Helado con dirección al continente vecino de Harvaka.

Lo cierto era que aquel océano era uno de los más pequeños de toda Gea en cuanto a superficie se refería, pero también era posiblemente el que tenía puntos más profundos. Aunque eso, no era fácil de comprobar. La temperatura del agua se situaba entre diez y menos dos grados centígrados, teniendo los vientos y las olas más fuertes y grandes de toda Gea ya que la temperatura del hielo contrasta con la del océano abierto. Durante invierno las aguas de las costas se congelan excepto en algunas áreas y era por eso que gran parte de la actividad pesquera y comercial que dependía del mar se paralizaba, pero todavía no había llegado ese momento y el velero de nombre Vértigo pudo zarpar sin problemas.

Los hombres se afanaban por realizar sus labores de abordo. Recogían el velamen cuando el capitán lo mandaba, montaban guardia en proa, popa y en el puente en busca de osbtáculos, pues el mar estaba lleno de pequeños icebergs flotando al ritmo de las mareas o tratando de avistar otras embarcaciones o peligros para dar aviso al capitán. Éste por su parte era quien manejaba los útiles náuticos con la facilidad del que lo ha hecho cientos de veces. Aunque la mayor parte del tiempo, la mayor parte de todos ellos estaba desocupado y sólo cuando al capitán le apetecía mandar algo pedía a sus tripulantes que realizaran labores de limpieza y mantenimiento general de equipo y maquinaria de cubierta.

Cuando llegó la noche, el mar seguía calmo. No habían aparecido aquellas famosas ventiscas de las que el capitán tenía tanto miedo, como tampoco les habían zarandeado aquellas impresionantes olas de las que les habían hablado. Toda una suerte para alguien que no estaba acostumbrado al mar, pues aunque Valyëvan y Aenifer eran vovits, nunca antes habían cruzado el océano Helado. Durante las primeras horas sintieron cierto mareo pese a que la mar estaba plana, pero al llegar la noche y junto al calor de una fogata, se les pasó.

Uno de los marineros estaba asando salchichas y el olor era realmente apetitoso, mientras que el capitán junto con otros marineros reían y bebían de una bota de vino que pasaban de mano en mano. Por suerte para la mayoría Jacrow se había encerrado en el camarote. Dijo estar cansado y se marchó sin cenar. Él tampoco disfrutaba demasiado del mar y su mareo fue considerablemente más fuerte que el de las dos mujeres. De hecho, los marineros bromearon durante la cena por haber visto a su contratante vomitar por la borda, a lo que Baton les reprendió duramente. Ante todo deseaba que se respetara a todos los componentes de la nave.

Fue en ese momento cuando uno de los marineros comenzó a tocar un instrumento de cuerda que emitía una dulce melodía. Las llamas parecían bailar a con la melodía, mientras los marineros y los tripulantes las contemplaban expectantes y comenzaban a degustar la carne a la brasa que otro de los marineros estaba preparando. Fue entonces cuando Eliferum comenzó a entonar una canción que encajaba a la perfección con la sinfonía que tocaba el otro marinero.

 

Notas de juego

Turno de cháchara. Para que os conozcáis un poco mejor y conozcáis a la tripulación.

Podéis hablar con Elifreum o el capitán. Incluso con cualquier otro marinero. Si queréis poder poner palabras en boca de los marineros sin nombre e incluso darles un nombre.

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25/02/2019, 19:07
Valyëvan

El ambiente era agradable. Yo jamás hacía distinciones entre la gente que me rodeaba, fuese cual fuera su reconocimiento. Para mí, todos éramos iguales hasta que entrábamos en batalla. En ese momento, se distinguían los guerreros de los cobardes, y el honor pasaba a ser nuestra bandera.

Quizás por eso, todos estábamos allí, alrededor de aquella hoguera, con aire nostálgico, deseando compartir recuerdos y también esperanzas.

-¿Cómo es el capitán Baton? -pregunté con naturalidad -. Parece un hombre justo. Yo suelo medir a la gente por la forma en que trata a aquellos que le rodean. Un hombre justo, habla con dureza, pero nunca sin razón. Ofrece la mano cuando se la piden y su espada cuando la necesitan. Los necios, ofenden con la mirada y nunca hacen nada por nadie.

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25/02/2019, 20:23
Oegar Sofridlas

Valyëvan aprovechó un momento en el que el capitán se marchó a orinar a la otra parte del barco, para preguntar por su persona. Oegar Sofridlas, que así se llamaba el marinero que le respondió a Valyëvan, se preocupó de que Baton estuviera lo suficientemente lejos como para que no le escuchar antes de responder.

Lay es un hombre legal. - Dijo. - Aunque tenga pinta de bribón, que lo és... - Bromeó. - Nos trata bien y nosotros le respetamos por eso. Es un hombre honrado cuando tiene que serlo... - Alzó la cabeza y vio que Lay ya estaba abrochándose la bragueta. - Es un hombre de palabra y un gran marinero. Aunque tiene sus cosas... ¡Como todos!

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26/02/2019, 02:48
Aenifer

- Asi espero Alex yo...

Pero no pude terminar. Como era de esperarse mi amiga volvia a las suyas para enfrentar a Jacrow poniendome los pelos de punta cuando vi que ponia sus manos en sus armas.

Ay nooo!

Pero no llegue a acercarme antes de que hicieran un voto de no agresion temporal.

El resto del dia me obligue a mantenerla ocupada para que no buscara reanudar la conversacion. Ya en la noche disfrutabamos del calor la fogata junto con el olor a salchichas que se cocinaban. La grasa caia por el calor haciendolas mas apetitosas hasta que senti el hambre y el cansancio del dia. Habia sido largo, pero todo iba bien.

Me separe del grupo y habiendo dejado mis armas y resto del equipo en el camarote estaba bastante ligera y relajada. La musica era melodiosa asi que me motive a bailar despues que habia aflojado la parte de arriba de mi traje.

Al principio comence a moverme de lado hasta que continue con giros sobre mi propio pie contorneando mi figura y jugando con mi cabello. Sabia que para Alex podia ser un baile mas, sensual como otros que habia presenciado, incluso solo para el, pero esta vez era algo mas. Ni siquiera a Valy le habia comentado el porque de aquella danza y aunque sabia que tenia practicarla mucho mas al menos trate de hacer mi mejor esfuerzo.

Mientras bailaba me enfocaba en enaltecer la imagen y el fluido de la diosa, aquella que habia leido en los textos antiguos en la biblioteca. Distaba mucho de llegar a convertirme en una sacerdotiza pero bailar me hacia alejar las preocupaciones y sentirme llena de su presencia y mucho mas completa.

Cuando termine de bailar le sonrei a aquellos que habian tenido la gracia de observarme y volvi a la fogata. Tal vez bailase una nueva pieza mas adelante, ahora queria comer algo.

- Deberias bailar conmigo alguna vez, no sabes lo bien que se siente....

Algun dia le contaria a mi amiga sobre la diosa.

- Tiradas (1)
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26/02/2019, 10:36
Valyëvan

Ver a Aenifer bailando me hizo verla por vez primera como alguien que tenía mucho más en su interior de lo que aparentaba. Lo suyo no era el combate, sino el espíritu. Se notaba que sentía los dioses en su interior y que era capaz de proyectarlo.

Los hombres que estaban con nosotros, incluyendo a Alex, solo veían un baile sensual, pero yo había viajado demasiado, con ella y sola, como para simplificarlo de aquella manera.

Aquella era una danza por la cual Aen intentaba sintonizar con la diosa. Era la forma en al cual compartía su energía con ella y se sentía parte de ella, como si ambas estuvieran fundidas en el mismo cuerpo.

- Deberias bailar conmigo alguna vez, no sabes lo bien que se siente....

No, no lo sabía. Pero tampoco iba a averiguarlo. La diosa y yo estábamos peleadas. Ella no soportaba mi actitud indiferente para con ella y yo no aguantaba la suya con la humanidad.

¿Feliz encuentro? Creía que no. Desde luego, prefería que la diosa fuese por su lado y yo por el mío.

-Creo que no. Prefiero dejarte eso a ti -le dije, cerrando el tema sin comentar nada más, pero sonriendo por el disfrute de mi amiga.

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26/02/2019, 15:56
Lay Baton

El capitán regresó tras echar una meada por la borda. Venía con semblante sonriente y miró de reojo a las dos mujeres, como también a Oegar. Se sentó entre medias de Valyëvan y el mencionado marinero y les abrazó por encima del hombro sin dejar de sonreír.

¿Estabais hablando de mi, eh bribones? - Les preguntó. - ¡Es normal y lo entiendo! - Soltó una risotada. - ¡Tengo una personalidad arrolladora! - Y justo entonces se puso en pie y agarró un acordeón y lo empezó a tocar. 

Otro de los marineros le acompañó siguiendo el ritmo a golpe de barril y el marinero que tocaba el instrumento de cuerda no se quedó atrás entonando entre todos una en apariencia improvisada melodía. Fue entones cuando un desarrapado marinero, más beodo que todos los demás juntos se puso en pie con intención de decir algo.

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26/02/2019, 15:57
Tonbryt

Moviéndose de lado a lado, pese a que la mar estaba en calma y parecía una balsa de aceite, Tonbryt que así se llamaba aquel espigado y mal vestido marinero, apenas conservaba el equilibrio. Y no obstante, su mente estaba lo suficientemente lúcida como para recordar los versos que quería pronuncia y no obstante, su voz pastosa y su lengua perezosa provocaban el ensombrecimiento de las bellas palabras que le dedicaba a su forma de vida, el mar.

El mar es un olvido, 
una canción, un labio; 
el mar es un amante, 
fiel respuesta al deseo.

Es como un ruiseñor,
y sus aguas son plumas
impulsos que levantan 
a las frías estrellas.

Sus caricias son sueños,
entreabren la muerte, 
son lunas accesibles, 
son la vida más alta.

Sobre espaldas oscuras 
las olas van gozando.

Fuera por la razón que fuera y pese a todos los impedimentos que tenía en contra, todos ellos provocados por la ingesta masiva de alcohol, Tonbryt, Ton para los amigos, logró concluir aquellos versos  justo antes de caer plano contra la cubierta. Algunos se emocionaron ante la belleza de su poesía, y todo rieron una vez sucumbió ante su mayor enemigo, el alcohol.

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26/02/2019, 16:08
Eliferum Anjo

A medida que avanzaba la noche y las salchichas y el bien vino iba menguando, los marineros que no estaban de guardia, fueron poco a poco abandonando la cubierta para ir a descansar. A excepción de las dos mujeres y de Alex, el resto tenía mucha faena al amanecer y necesitaban un buen descanso mientras el abrazo de Maahn (la luna), todavía les meciera en aquella noche estrellada. Tan solo Alex, las dos mujeres y Elifrerum permanecían sobre cubierta y fue entonces cuando el descendiente del linaje Anjo sacó un interesante tema de conversación.

- No deseo ser entremetido pero... - Hizo una pequeña pausa. - ¿Qué buscáis en Harvaka? Viajar en invierno es peligroso. Al menos eso dicen...

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26/02/2019, 16:11
Alex Ryder

Alex reaccionó de inmediato. No parecía haberle gustado esa pregunta y fue tajante.

Vos mismo lo habéis dicho... - Saltó enseguida. Tenía muy celoso su secreto. - Si no deseáis ser entremetido, basta con no serlo... - Le dijo sin llegar a ser maleducado pero muy serio y cortante.

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26/02/2019, 18:44
Valyëvan

No sabía hasta qué punto podía confiar en Eli, pero tenía una cosa clara. Yo no estaba allí ni por el dinero ni por Alex. 

Era por Aenifer.

Y la verdad era siempre mi bandera, por lo que no me callé, sobre todo teniendo en cuenta lo que opinaba sobre Alex.

-Este hombre va a jugarse la vida igual que nosotros, por lo que tiene tanto derecho a ser entrometido como le de la gana. De todas formas, yo no hablaré por nadie más que por mí -dije, mirando enfurecida a Alex -. Yo no busco nada ni persigo nada. Solo estoy aquí para asegurarme de que Aenifer regresa de una pieza. Este viaje no es una aventura sino una guerra y yo iré donde vaya ella o no podría vivir conmigo misma.

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27/02/2019, 00:03
Aenifer

La fresca brisa de la noche, la luna en el horizonte, el acordeon, la musica, e incluso el aterrizaje forzozo de Ton habian hecho una noche muy agradable. Por un instante pense en confirmar la supervivencia del borracho pero estaba claro que no le habia dolido porque ya estaba inconciente antes de llegar al suelo. De seguro tenia callos en las mejillas de las veces que habra detenido su peso con el rostro.

Poco a poco nos fuimos quedando solos. Antes habia aprovechado para hablar un poco de navegacion con el carismatico Baton. Su amabilidad trascendia su dotes de enseñanzas al mostrarme como guiarme en el cielo. No habia entendido mucho pero tenian sentido sus palabras. Tendria que tomar mas clases de navegacion.

Al final Alex nuevamente habia sido tosco con su manera, le mire algo inconforme. Sabia que era asi, pero la amabilidad me habia abierto muchas puertas, no habia necesidad de ser hostil con aquel hombre que se habia ganado el respeto de mi amiga y por ende el mio.

- Alex, no hace falta. Dije en desaprobacion.

Despues de todo bien podiamos contarle sin decir toda la verdad.

- Vamos a realizar una investigacion en esos parajes, y esperamos volver antes de que el invierno caiga sobre nosotros. Respondi a Anjo.

 

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27/02/2019, 10:45
Eliferum Anjo

No pretendía para nada ser una molestia ni causar controversia. - Dijo el anciano. 

Eliferum se puso en pie y estiró sus brazos y espalda mirando hacia el cielo. La brisa marina y las largas horas a la intemperie le habían entumecido los músculos. Lanzó un gruñido y esbozó una sonrisa. Miró entonces a los tres valientes que todavía permanecían entorno a la hoguera.

Creo que un viejo manco como yo, ha pasado ya demasiado tiempo entre jovencitos como vosotros. - Dio un largo bostezo. - Me toca irme a descansar. Buenas noches a todos... - Y dicho eso se marchó a su camarote.

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27/02/2019, 10:48
Alex Ryder

No es que me haya dado motivos para desconfiar de él... - Se disculpó Alex. - Pero la verdad es que no le conocemos de casi nada. Puede que en la arena resultara ser un contrincante honorable Valyëvan, pero no podemos estar seguros de quien fue y de quien es. - Dio un trago a la bota de vino. - Lo que tenemos entre manos es muy importante y no podemos desvelárselo a cualquiera. Tenéis que entenderlo. 

Alex Ryder se puso en pie imitando al anciano del linaje Anjo. Acto seguido comenzó a recoger sus enseres. Se preparaba también para marcharse a su lecho. Pese a que al ser los pasajeros de aquella nave, no tenían ninguna tarea asignada abordo. También estaban bastante cansados por el viaje. Se acercó a Aenifer y le tendió una mano para ayudarle a ponerse en pie.

¿Vienes conmigo? - Le preguntó entonces.

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27/02/2019, 20:18
Aenifer

Alex me tendio la mano y automaticamente se la tome levantadome, pero solo me tomo un instante darme cuenta de cual seria me destino. No iba a dormir con el. Eso no estaba en el contrato ni en mi corazon. Lo mire a los ojos y solte mi mano de la suya y me la mire por un instante.

Porque me levante?

Estar con Alex hacia que todo lo demas se me olvidase, incluso los malos momentos y no podia permitirme caer de nuevo en sus labios.

- No Alex, no ire contigo. Dije calmadamente.

Podia dormir con Valy o incluso en la cubierta, no me importaba, pero el que estuviesemos junto en esta expedicion no indicaba que fueramos pareja de nuevo porque aunque quisiera, mi sentido comun aun podia sobre mis ganas.

Volvi a sentarme y me quede mirando el mar ligeramente iluminado por las estrellas. Tome un pedazo de tela que habia por alli, tal vez era una vela ya raida, no importaba, me cubriria del frio un buen rato mientras estuviese en la cubierta, y si nos quedabamos sola Valy y yo podriamos hablar un poco sin oidos indiscretos.

Quedaba tripulacion en la cubierta claro, pero no estarian pendientes de nosotros y por otro lado no irme con Alex me hizo sentir bien. Ser una de las pocas cosas que Alex no volveria a conseguir me hacia sentir muy bien.

- Valy, cuando regresemos con lo que encontremos que quieres hacer? Suponiendo que todo salga bien, a donde te gustaria ir. Le pregunte mirando las estrellas.

Tenia que sacar a Alex de mi cabeza.

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27/02/2019, 20:45
Valyëvan

Alex se sintió desairado y yo me alegré en mi interior, aunque procuré no exteriorizarlo. Aenifer parecía estar sometida a bastante tensión, pero por ella misma, por nadie más. Alex no solo era su pasado, sino también una peidra con la que continuamente se encontraría hasta que no tuviese claro sus propios sentimientos.

No podía arreglar eso por ella.

Solo podía ser paciente y esperarla. Esperar a que tuviera fuerzas para hablarme de lo que sentía.

- Valy, cuando regresemos con lo que encontremos que quieres hacer? Suponiendo que todo salga bien, a donde te gustaria ir.

Sonreí. No lo había pensado. No me importaba demasiado.

-¿Quién te dice que quiero ir a algún otro lugar? -le respondí -. Yo no quiero aventuras, Aen. Quiero batallas. Mi sitio está con mi pueblo, aunque el suyo no esté conmigo. Volveré y lucharé por aquellas gentes en las que crea. Ya no tendré que alquilarme a cualquiera que me ofrezca una bolsa de dinero y un plato de comida. Podré decidir mis propias batallas. Pero si no conseguimos nada... intentaré hacer lo mismo, solo que siendo más pobre.

Entonces la miré. La miré como una hermana mayor miraría a su pequeña protegida, con miedo.

-Solo estoy aquí por ti, Aen, así que no me defraudes. Busca lo que necesites, pero jamás traiciones mi confianza. Eso acabaría conmigo. ¿Lo sabes, verdad?

Después de ponerme tan seria, procuré volver al sendero de lo ligero.

-Y tú, ¿qué harás? ¿Te comprarás un país solo para ti?

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27/02/2019, 21:25
Aenifer

- Traicionarte???? A ti??? Estas loca???? Si le quitaste la mano a Anjo no puedo imaginar lo que me harias, ja ja ja.... Como iba a traicionarte despues de todo lo que hemos pasado.

Y me acerque para darle un golpe en el brazo de camaderia.

Mientras miraba a las estrellas respondi a lo que habia preguntado despues.

- Solo tengo un deseo mas Valy, quiero regresar a la tierra de mi Madre y encontrarla, y tal vez saber un poco mas de mi pasado y... conocerla supongo, no se si aun viva, pero deberia no? Los elfos viven mucho mas que nosotros, al menos es lo que dicen, crees que aun me recuerde? Que quiera verme y saber de mi?

Aquello me deprimia un poco porque no sabia cuales eran los sentimientos reales de mi Madre aunque solo habia una forma de averiguarlo.

- Y despues supongo que depende de lo que pase alli, si podria comprarme un pais como dices y nombrarte Edecan de mi ejercitos, ja ja ja ja y despues engordaria de comer y dormir ja ja ja, y te compraria la mejor hacha que el dinero puedo comprar, eso tambien.

Tenia un par de cosas mas por hacer antes de comprarme un pais pero ya se veria en el momento. Al mirar las estrellas senti como me vencia el cansancio. No me importaba quedarme dormida alli.

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27/02/2019, 23:23
Narrador

Finalmente se quedaron dormidas en cubierta. Pero espero no fue el final de ese largo día. El frío y la brisa nocturna les desiertó. Ambas estaban heladas y tiritaban. Pasaron tres largos días con sus respectivas noches hasta que comenzaron a recuperarse del resfriado que cogieron. Desde luego aprendieron a base de la experiencia, que no era buena idea dormir a la intemperie en medio del océano Helado y en invierno.

Pese a todas las advertencias que recibieron antes de zarpar y el miedo de Jacrow y del propio capitán Baton acerca de la difícil navegación durante la temporada invernal en el océano Helado, salvo alguna ventisca menor, tormentas heladas y gélidas brisas, la travesía discurrió sin ningún incidente reseñable. Una semana tardaron en llegar al lugar donde habían previsto el desembarco, pero desde el tercer día ya veían la costa a algunas millas de distancia, aunque navegaron en paralelo a esta casi todo el tiempo.

El buen ambiente siguió reinando en el Vértigo. Jacrow incluso pareció relajarse a ratos y compartió con el resto varias de aquellas cenas bajo el manto estrellado nocturno. Alex acabó por aceptar que Eliferum era un amigo y que no tenía intereses ocultos. Por suerte la carne que torrar y el buen vino fue una constante durante todas aquellas veladas e incluso algunos noches cenaron pescado que Aenifer y Valyëvan habían pescado durante el día ayudadas por alguno de los marineros. Estaba siendo un viaje muy agradable, algo que sin duda no esperaban en el momento de zarpar, cuando Valyëvan casi se enfrenta a muerte con Jacrow.

Desde el Vértigo, pudieron contemplar la geomorfología de la costa. Grandes zonas de afilados acantilados grises y escarpados se sucedían entre zonas de playa, ya fuera de pequeñas rocas pulidas por la acción del mar o de fina arena. Dejaron atrás algunos cabos y bahías donde parecía bastante propicio el poder desembarcar, pero su destino evidentemente no era eso, sino que estaba algo más al oeste. La vegetación que podían observar desde la nave era escasa y de no demasiada altura. En aquella fría zona del mundo era difícil que prosperara la vida, pero de eso ellos sabían bastante, eran vovits y vivían todavía más al norte de aquella tierra. Sabían muy bien que era el frío y como relacionarse con él.

Finalmente, al mediodía del séptimo día e travesía localizaron una bahía en la que se observaba la desembocadura de un río. El capitán anunció que se aproximaban a la costa y el velero viro a babor acercándose definitivamente a la costa. Cuando estuvieron lo suficientemente cerca de la misma, tiraron el ancla y prepararon una embarcación a remo para acercar a los cuatro pasajeros a su destino. Ya habían cargado todo el material que iban a necesitar para su exploración cuando Eliferum se acercó a los cuatro exploradores.

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27/02/2019, 23:27
Eliferum Anjo

- Ha sido un placer viajar a vuestro lado. - Dijo entonces aquel hombre. - Os deseo la mejor de las fortunas.

Había llegado el momento de la despedida. El capitán Baton, Oegar, Eliferum y el resto de marinos darían la vuelta y regresarían a Arthanis. Posiblemente esa sería la última vez que les verían a todos ellos, pero sin duda guardarían un buen recuerdo de aquella semana que habían pasado juntos. Eliferum parecía que quería decir algo más, pero que no encontraba las palabras y entonces se armó de valor y habló.

- Me gustaría... - Hizo una pausa. - Si estáis los cuatro de acuerdo claro... - Les miró a todos uno a uno. - Y si el capitán disculpa mi presencia abordo... - Miró a Baton y este asintió con la cabeza. Parecía que aquel hombre ya sabía algo sobre lo que Eliferum tenía que decirles. - Me gustaría seguir el viaje con vosotros, si me lo permitís...