Partida Rol por web

Rusty con la frente perlada en sudor se mueve como buen profesional que es. Amparado en el fuego de cobertura de Caffran se mueve con sigilo, como un lobo buscando su presa. No desperdicia ocasión alguna y revienta una cabeza que tiene a tiro. Nada puede pararle...
- ¡Coño!
La explosión le hace caer al suelo en parte provocado para buscar cobertura. Pero no es suficiente. Su objetivo se centra en Sr Machete y en proteger a Andriel que no tiene ni puñetera idea de donde está en ese momento. Sus movimientos son enérgicos pero meditados, se mmueve como un león al acecho entre las coberturas improvisadas. La enorme explosión de nuevo hace que se arroje "cuerpo a tierra". Espera su oportunidad. Esta última explosión ha sido realmente aturdidor y necesita unos segundos para que "vuelva a la realidad". Abre los ojos y sacude la cabeza para despejarse. Vuelve al acecho.
- No te escaparás hijo de puta.
No pierde de vista a su objetivo y puede verle justo antes de desaparecer tras el todoterreno.
Hacia allá va Rusty.

La mirada preñada de odio de Valkyria dejaba claro que me la había jugado… y que me había perdonado. Aún en su estado estaba claro que era un enemigo a tener en cuenta. Aún así no podía evitar pensar que no podía quedarse quieta mientras los demás nos dejábamos la vida allí. Ella también saldría de allí con vida si conseguíamos librarnos de aquel pequeño incovenente. Y estaba Andriel. Ahora mismo sola, aunque no desvalida frente a un numeroso grupo de mercenarios que no iban a dejarnos salir de allí tan fácilmente.

Cuando la esfera cayó cerca de la posición de Raghar, no llegué a comprender que era hasta que ya era demasiado tarde. Ver abalanzarse a Valkyria sobre mi casi me hizo apuntarle con el arma. Pero cuando la explosión hizo su aparición comprendí que aquella loca me había salvado la vida. Las esquirlas de metralla y piedra le cubrían el brazo con el que había protegido su cabeza. Aquella zorra, podía estar loca, pero ahora le debía una!!! Raghar no había tenido tanta suerte y su cuerpo destrozado y sin vida yacía repartido por la zona. Maldije por lo bajo guardando los agradecimientos para después…

Aquellos bastardos se lo estaban poniendo realmente difícil. El flash que estalló entre los coches lo pilló por sorpresa y a duras penas pudo evitar soltar un grito de dolor por el brillo súbito amplado por la mirilla. Los disparos comenzaron a sucederse y para cuando conseguí enfocar ligeramente Andriel se debatía contra aquel gorila, mientras el tipo de la metralleta pesada asediaba la posición de Caffran. El tipo del machete sabía que no debía exponrse y el cabrón estaba bien cubierto, pero el otro estaba destrozando su cobertura de apoyar el arma pesada. Sin pensarlo apunté y tras forzar la vista un poco consegu´ñi un nuevo impacto directo… Sonreí unos instantes antes de que un dolor intenso de cabeza me hiciese gruñir.

Miré de soslayo a Valkyria, pero la muy zorra estaba dispuesta a acabar con aquello por las bravas. Mi sonrisa se borró a la par que el proyectil RPG salía de su arma en dirección al murete… La deflagración me hizo latir con fuerza el dolor de cabeza. Para cuando el humo se asentó, no quedaba nada del murete y parte del subterráneo estaba enterrado. Miré perplejo a Valkyria, pero con cara de odio y rabia nos espetó uno de sus típicos comentarios antes de caer desmayada.

A pesar de la situación no podía dejar que aquella mujer muriera. Pero Andriel estaba el peligro. Apunté a donde se estaba llevando a cabo el combate cuerpo a cuerpo. La diferencia de tamaños era considerable, pero Andriel era más rápida… Miré un segundo hasta donde Caffran estaba antes de decirle…

- Que!!!! No piensas ayudar a una mujer en apuros!!!! – luego añadí… - Doc!!!! Valkyria necesita ayuda y ya!!!!

Y tras aquello comencé a buscar al señor del machete en busca de mi oportunidad de hacer algo que cambiase el peso de la balanza.

Mientras le daba cobertura a Rusty para que pudiera moverse, y darle caza al grandote, se escucha en disparo pesado que caía donde se cubría Andriel, aunque todavía podían mantener a los enemigos a raya, tendrían que moverse si querían ganar aquella contienda.

Casi una fracción de segundo después, se escucha la explosión de una granada desde la dirección en donde se encontraban Raghar y Valkyria. Había que ir a por ellos si quería e intentar ayudarlos, pero el constante ataque de los enemigo me impedía moverme de cobertura.

De repente otra explosión, pero esta vez seguida de una luz segadora *¡mierda, una flash!* y casi instintivamente vuelve la cabeza hacia abajo, para tratar de disminuir el efecto, pero sin éxito. Un tiempo después vuelve la lluvia de plomo de parte del enemigo, de los cuales uno muere *¡finalmente, maldito cabrón!* y otro por un disparo de francotirador, aunque ignoraba bien de quien había sido.

Una última explosión se efectúa, esta vez un RPG que voló casi todo el murete, liquidando a uno de los últimos enemigos, exceptuando al gordo claro. Esta era la mía, podía ayudar a Rusty a darle caza al grandote y acabar con esto de una vez por todas, pero apenas dando el primer paso el grito de Oscar me da un nuevo objetivo, ahora debía atender a Valkyria, por lo que trato de llegar a la posición de ellos lo antes posible.

Las explosiones y disparos se sucedieron en una cacofonia mas digna de un enfrentamiento a gran escala que en la confrontacion de un puñado de zumbados, tal y como cualquiera podria calificarnos.
Aqui y alla se escuchaba el zumbido agorero de las balas, a lo cual yo misma contribui en mi justa medida, manteniendo por el momento mi cuerpo intacto... Pero la aparicion del tal señor machete por poco lo cambia todo al verme obligada a eludir, por los pelos, el arma de aquel cabron que me queria abrir en canal.
Mis pistolas dudan en mis manos, optando por esquivar a arriesgarme a un corte de pelo demasiado apurado, salvando la vida, momento en el que una nueva explosion que a punto esta de volar el vehiculo pone en fuga a mi enemigo, dejando el transporte a mi merced
Asomo la cabeza con precaucion, buscando nuevos enemigos, solo para comprobar que unicamente machete a podido escapar por el agujero del que habia salido... Es hora de largarse
Sin pensarmelo un segundo recargo y enfundo mis armas y me pongo a registrar a los caidos a toda prisa. Como minimo las armas y la municion me seran utiles
Es entonces cuando reparo en las intenciones de alguno de los pirados del grupo en ir tras machete
Tu mismo, pero el taxi no espera. Hemos tenido suerte en salir de toda esta mierda vivos y no pienso arriesgarme a cambiar eso por un idiota - dije sin dejar claro si el idiota era machete o quien iba tras el [b/] - Con el escandalo que se ha montado no tardara en aparecer algun cotilla, ya sean aliados de machete, zombies, tipos mutados o algun otro monstruo de pesadillla...y a mi nunca me ha gustado ser anfitriona en las fiestas. Quien se quiera largar que se suba al coche. YA[/b] - añadi colocandome en el asiento del conductor

Caffran escucha el grito de Oscar sobre el estado de Valkyria y sin ni siquiera pensarlo da media vuelta y corre en direccion a sus dos compañeros. Al llegar al lado de la mujer se da cuenta de que esta inconsciente, tiene un feo moraton en la parte de atras de la cabeza y el brazo lleno de varios trozos de metralla... pero es la cabeza el verdadero problema. Con un par de gestos llama a Oscar y hace que se ponga de manera que inmovilice el cuello de Valkyria, saca el bisturi y le hace un leve corte longitudinal en la parte posterior de la cabeza... la sangre brota de alli lentamente. Sus ojos se encuentran con los de Oscar, es el unico remedio que podia aplicarle, la mayoria del botiquin ya esta agotado y aunque las heridas no son profundas sino se libera la presion de su cabeza morira sin remedio.

Las imprecaciones de Andriel hacen que todos se pongan las pilas. Entre Oscar y Caffran transportan como pueden hasta Valkyria al hummer, alli Rusty le ha hecho espacio en la parte de atras para que pueda estar tumbada, Caffran se coloca a su lado mientras intenta prevenir cualquier posible problema con las heridas de la mujer. - Ve con cuidado Andriel, salgamos de aqui pero evita la mayoria de los baches o no lo contara. - Andriel se gira para mirarle pero las ultimas palabras hacen que su cara de mala ostia se vuelva en una de resignacion y asienta. Le guste o no esa zorra acaba de salvarles la vida con ese ultimo misil.

Andriel le da al contacto y el motor se enciende a la primera, pone primera y arranca esquivando los escombros y buscando siempre el mejor camino lleno de baches... el coche se acerca a toda prisa a la salida del recinto cuando el traqueteo tipico de un arma epsada se escucha a vuestras espaldas. La asesina mira por el retrovisor como las balas impactan en la pared de su lado y van acercandose peligrosamente a la posicion del hummer cuando de pronto atraviesa la verja y se pierde de vista... una mirada de preocupacion asoma en sus rostros, mas el camino esta despejado y rapidamente ponen rumbo a Parody.

Los kilometros se consumen rapidamente, Caffran nota una ligera mejoria en Valkyria pero por ahora no abre los ojos. El silencio en el vehiculo acaba convirtiendose en una tension mas que palpable mientras las horas pasan... todo se relaja cuando Valkyria por fin abre los ojos y mira a su alrededor sin saber que ha ocurrido. Rusty se lo explica mientras Caffran comprueba las heridas y asiente satisfactoriamente... mas cuando la mujer habla todos vosotros os dais cuenta del marron en el que estais... y eso hace que Andriel tambien recuerde lo que oyo antes de vuestro ultimo combate.

-Genial... Parody... hogar dulce hogar. -  El tono de su voz es bajo pero claramente audible para todos vosotros, asi como el sarcasmo que invade cada una de sus palabras. - El Canibal nos va a despellejar vivos por lo ocurrido... eso o nos lanzara al foso de carroñeros. Aparte de que esos cabrones asiaticos van a querer terminar el trabajo para que no hablemos de lo ocurrido. - Sus palabras os recuerdan al cabron que os lanzo una granada cuando estabais a punto de caer por el agujero del centro comercial... asi que no solamente os habian atacado a vosotros. Que las Ratas de Jade destrocen el cargamento del Canibal se puede considerar practicamente un acto de guerra... si saben que estais vivos, intentaran evitar por todos los medios que se lo conteis al Canibal... y aun asi vuestras posibilidades de sobrevivir son bajas frente a este ultimo.

Una extraña sensacion de sobrevivir al mismo infierno apra probablemente acabar en un lugar peor asoma en los bordes de vuestro pensamiento para rapidamente ser desechada... esa es vuestra vida, es la que habeis elegido. Lo facil y lo bonito no forman parte de este mundo y si quieres sobrevivir simplemente tienes que afrontar lo que venga con lo que tengas.

Llevais ya un buen tramo recorrido, el sol ha desaparecido ya una vez por el horizonte, cuando Rusty abre una de las cajas que tiene cerca, hay una serie de mapas dentro de ella. Sin nada mas que hacer aparte de ver pasar el paisaje se dedica a estudiarlos... hay una marca en el mapa no muy lejos de donde estais. El signo es claro, gasolina. Miras a la conductora y esta asiente... vuestras reservas estan agotadas y necesitareis mas si quereis llegar a Parody.

Sin necesidades de hablar con el resto poneis rumbo a ese sitio, todos esperais que no haya problemas... tal vez incluso poder negociar por el combustible con algo de la municion que teneis detras. Vuestro hummer recorre los ultimos kilometros mientras unos edificios se hacen visibles, parece uno de esos sitios donde se repostab antes de que el Infierno bajara a la tierra. Un cartel grande con una concha reza "SHELL", el lugar esta rodeado de vehiculos a excepcion de la entrada, cubierta por unas planchas de metal no muy gruesas... parece completamente desierto de primeras, aun asi bajais la velocidad mientras os acercais al lugar y Andriel enciende las luces para ver mejor... cuando estais mas cerca veis que tanto la puerta como los alrededoes estan llenos de sangre y una figura se recorta en la parte superior del muro, claramente armada y apuntando en vuestra direccion.

- ¿Que quereis y que haceis aqui? - La voz suena ronca, cascada y cansada pero tambien con ese deje de hastio que indica que no tiene problemas en disparar a matar.

Ver como Caffran hacía el corte en la cabeza de Valkyria me sorprendió... ¿Acaso la estaba matando? Pero su explicación sobre el porqué me dejó más tranquilo. Por unos instantes me había asustado, pero estaba claro que era médico por algo y hasta ahora nos había sacado de todos los apuros.

Como siempre la tierna Andriel nos hizo ver que las cosas solo se podían hacer de una forma, asu manera. Había que reconocer que tenía pocos modales pero ni siquiera tenía fuerzas para rebatirle.

- A veces le metería una patada en el culo!!!! - comenté con Caffran.

Con lentitud para la situación en la que nos encontrábamos llegamos hasta el vehículo. Y tras montarnos presurosamente, comenzamos a avanzar a buen ritmo, aunque no sin antes recibir unas pocas ráfagas de alguien que tenía ganas de arañarnos el coche. El estado de Valkyria no parecía mejorar mucho, pero al cabo de unas doce horaqs recuperó el sentido y solo fue para hacer gala de sus mejores frases. Muy en la línea de aquella mujer!!! Aún así me había salvado la vida.

- Valkyria.... Antes no tuve ocasión de decírtelo, pero.... gracias!!!

Y tras aquel comentario me sumí en un tenso silencio pensando en la misión que me esperaba en Parody. Las palabras de Valkyria no habían servido para mejorar la situación. Así que tras unos instantes decidí comentar,

- Pase lo que pase, y sea cual sea la situación cuando lleguemos está claro que prefiero avisar a Caníbal de la situación. Al menos así solo nos tendremos que preocupar de uno de los grupos. Pero antes de nada deberé de hacer algo urgente... Y sobre eso no hay negociación posible!!! - comenté con el ceño fruncido y pensando en lo que ahora mismo corría por mis venas...

Estábamos jodidos se mirara como se mirara. Por un lado habíamos hecho un enemigo de por vida, por corta que fuera en aquel maldito mundo, y nos la tenía jurada; por otro, y mucho mas peligroso, tendríamos a Caníbal cabreado como una mona, le contáramos lo ocurrido o no... si no lo hacíamos nuestras cabezas tendrían precio dado que pensaría que le habíamos robado y, si lo hacíamos, corríamos el riesgo de morir ipsofacto.

Menuda mierda- dije a nadie en particular tras sortear un bache según las indicaciones del galeno

Al menos parecía que por el momento Valkyria saldría adelante y, aunque no pensaba decirlo en voz alta, aquella loca nos había venido de perlas en aquel maldito agujero y ahora estaba metida en el ajo le gustara o no. Habíamos perdido uno ganábamos otro; no era mal cambio siempre y cuando no fuera yo misma la que quedaba como baja

Miré al horizonte y le di un codazo a Oscar, que parecía sumido en sus propios pensamientos tras la perorata que nos había soltado sobre que tenía algo que hacer y sobre lo que pensaba con respecto a Caníbal

Ahí podemos respostar... si no nos vuelan la cabeza antes- dije para que el resto estuviera atento

Nos deslizamos hasta la sombre del cartel de la concha, deteniéndonos allí expresamente para evitar que el sol nos deslumbrara en caso de tiroteos, y escuchamos la bienvenido de los tipos de la gasolinera. Amistosa y cariñosa como pocas

Ya, ya. Queda claro - dije hastiada de las típicas frases de hombres machotes, siempre intentando demostrar que eran los que meaban más y mas lejos mordiéndome la lengua para no decirle lo idiota que sonaba su pregunta... veníamos en un vehículo, aquello era una gasolinera, estábamos en medio de la nada... veníamos de pic-nic...- Necesitamos repostar, eso es todo. Llenamos el depósito y nos largamos. No buscamos problemas- dije alto y claro en un tono neutro, por mucho que me costara hacerlo.

Necesitábamos llegar a Parody en coche. Una caminata por el páramo era tan mala o peor que lo dejado atrás

Rusty respira aliviadamente cuando el vehículo abandona la ciudad. Habían pasado aquel enorme obstáculo pero le quedaban más que superar. Observa las cajas que tiene cerca y las registra. Con alegría observa el montón de mapas y las estudia observando atentamente. Trata de abarcar todo ese mapa en la cabeza tratando de concentrarse intentando no oír las quejas de Waldier y Andriel.
Llenamos el depósito y nos largamos. No buscamos problemas dijo Andriel alto y claro en un tono neutro
- Vale Andriel te he oído, sigue mis intrucciones .
Con el dedo señala la leyenda de gasolina del mapa. Comienza a dar instrucciones hasta que ven el mugriento cartel de Shell.
- Allí lo tenéis - señala enrollando el mapa para guardársela en su chaleco - Veremos si encontramos problemas.
Comenta al observar la figura armada en la parte superior del muro.
- Tranquilo no buscamos problemas sino gasolina - responde con voz grave - Repostamos y nos largamos cagando leches, sin problemas ni historias.

El hombre os mira con desconfianza y hace un gesto, de entre los destrozos que hay a ambos lados del camino aparece un joven de unos veinte años porta una antigua escopeta. Se acerca a Andriel con el cañon apuntando al suelo, hasta llegar a la ventanilla... mira con desconfianza a la mujer pero aun asi mete parte de su cabeza dentro para poder mirar el desposito... cuando intenta girarse para mirar mejor el cuerpo de Andriel y la parte de atras recibe un fuerte coscorron por parte de la mujer... el chico cae hacia atras pero recupera pronto el equilibrio, mas avergonzado que otra cosa mientras intenta coger su arma, la voz del viejo se eleva de nuevo. - Dejaaa d'aser el gili... si t'acercas a una hembra tate listo pa que te zurren.

El chico esta realmente avergonzado mira al viejo. - Ta casi vacio... nitan... - ves comos e pone a contar lentamente con las manos. - sete garrafas pa llenarlo del to.

Por lo que os enterais son siete garrafas, si son las normales seran unos setenta litros... eso quiere decir que necesitareis al menos otro deposito para estar seguro de llegar hasta Parody. Rusty se asoma. - Queremos dieceiseis garrafas... - El hombre le mira y despues mira atras, se oyen unas voces. - Esooo es kasi toas las que teemos... costara musshoo. - Hace un gesto con la mano mientras notais como alguien mas se mueve por detras de la empalizada. Es mucho combustible... mucha pasta y prefiere no arriesgarse a que decidais tomarla por la fuerza. Caffran os da un toque para que os deis cuenta de que por el otro lado a donde ha venido el chico han aprecido un par de sombras, se mantienen a la espera...

La tension se palapa en el ambiente hasta que el hombre termina de hacer calculos mentales. - Vasss muy cargados... - Alza una mano con dos dedos. - Tres rifels de los bonos, doss sientas balas. - El calculo no es malo... no esta siendo especialmente caro teniendo en cuenta que estais en medio de la nada, pero al mirar atras veis que aunque hay mucha municion... no hay ningun rifle... os tocara dar de vuestras armas.

El lugar está ocupado por unos cafres analfabetos, paletos que han tenido la fortuna o la desgracia de quedar atrapados en aquel depósito de combustible en mitad de la nada creyéndose alguien por el mero hecho de poder negociar con el combustible como moneda de cambio

Tuerzo el gesto cuando el chico aparece. Es realmente poco más que un estorbo y no vale para nada que no sea hacer de cebo. Busco por instinto al resto, pues no es posible que solo el viejo y el crío regenten aquel lugar... cuando veo al chico mirar cosas que no son de su incumbencia, lo que le merece un buen coscorrón con los nudillos que lo hace salir de golpe y caer de culo.

Las cuentas salen rápido, o algo parecido a rápido, dejando claro que vamos a necesitar una barbaridad de combustible si queremos llegar a nuestro destino a bordo de aquella cafetera, algo a lo que ninguno de los presentes parece querer renunciar.

Mas sombras. Ahora sí asiento para mis adentros. Aquello ya empieza a tomar forma. Estamos en mitad de un fuego cruzado y una palabra de mas solo servirá para que allí muera mucha gente,  tanto nuestra como suya... el viejo emite su precio y no puedo mas que chasquear la lengua. No tenemos esos malditos rifles, pero si muchas balas. Aun podemos llegar a un acuerdo

Cuatrocientas balas y un rifle- le dije saliendo del vehículo. No me gustaba tratar con nadie desde las sombras si no tenía intención de matarlo y el viejo, por el momento, me había caído más o menos en gracia - Piénsalo bien, viejo. Es una ganga para vosotros y todos quedamos satisfechos ¿Cuánta gente va a pasar por aquí negociando abiertamente en vez de liarse a tiros? Menos combustible no nos sirve de nada porque nos quedaremos tirados y, en ese caso, vosotros vais a gastar mas combustible en ir a buscar lo que dejemos en el vehículo y regresar... y te aseguro que si dejamos atrás el vehículo por falta de combustible va a arder con todo lo que no nos podamos llevar

Hice una pausa para que lo asimilara

TSK. Una pena desperdiciar buena munición por simple ambición en vez de sacarle partido...

Miré entonces a los que nos rodeaban

Claro, que podríais intentar quitarnos por la fuerza lo que tenemos... pero creo que pocos de vosotros van a quedar entonces para disfrutar del botón, si acaso queda alguno. No he salido de un puto infierno, peleado con mutantes con piel dura como el acero, podridos comedores de carne y una panda de chiflados que se creen un ejército para morir en mitad de la nada.- zanjé mi discurso apoyándome en el capó, junto al chico, dedicándole un guiño picarón mientras alzaba una pierna con descaro para colocarla sobre una de las ruedas y dejar a la vista buena parte de mi muslo

Cualquier treta era buena para lograr lo que necesitábamos... y aun guardaba un as en la manga

Andriel lanza su contraoferta mientras los demas esperan a ver cual es el resultado. Si toca matar lo haran pero todos estan bastante agotados y no apetece pasar por otro tiroteo. Ven como el viejo cambia su peso de un pie a otro y de pronto mueve la mano suavemente en direccion a las sombras que habias percibido. Dos mujeres no precisamente jovenes se levantan de entre los arbustos con las armas apuntando al suelo, una de ellas incluso se la cuelga al hombro... parece ser que el lider del grupo ha hablado.

No esperais mucho hasta que la puerta se abre, no demasiado, pero si lo suficiente para permitir que aparezcan otro dos jovenes que no deben tener mas de doce primaveras... entre ambos arrastran una carretilla con dos de garrafas llenas de gasofa. Se paran delante de la puerta, esperando a que saqueis la municion y el rifle... parece que nada mas ocurrira hasta que os movais cuando un hombre joven, musculoso y armado aparece tras las chicas cargando otra carretilla con siete garrafas mas. La voz del viejo se alza de nuevo. - 'Ostros damos gasofa... pero vostros rehenaaais auto. Encenyad balass y rifel. -

Como bien habia dicho nueve garrafas. Algo mas de la mitad de lo que necesitais... pero ahora os toca bajar del vehiculo, rellenar el deposito y darles al menos la mitad del pago.

Parece ser que el trato ha surtido efecto y no ha hecho falta añadir nada mas; aquellos tipos deben estar tanto o mas necesitados que nosotros mismos a juzgar con la facilidad con que se ha desarrollado el asunto, mas las precauciones nunca son pocas y buena prueba de ello son los movimientos furtivos, y mal disimulados tal vez a propósito, de quienes han tomado posiciones a nuestro alrededor.

Tuerzo el gesto. Las amenazas veladas nunca me han gustado pero dado el tema parece lo mas sensato... o al menos lo que yo misma haría.

El viejo cumple su palabra y las garrafas empiezan a desfilar, momento en el que me dirijo a la parte de atrás mientras hablo con los del interior

Ya que no vais a abrir la boca al menos mover el culo y ayudarme, joder... pero usad la cabeza y no hagáis nada raro o nos coserán a tiros. les digo a sabiendas de sus hormonas mas que revolucionadas - Y dentro de lo posible que no vean nada mas de lo que llevamos dentro o puede que quieran algo más... sacad solo lo justo y abrid las puertas lo necesario para que podamos sacar lo del trato... no me acabo de fiar... y los de dentro mantened los ojos abiertos y las armas listas, pero no os mostréis hostiles si no es necesario. Si nos podemos ir sin mas tiros todos los agradeceremos- añadí tomando las riendas de la situación dada la apatía del resto

Todo fue mucho más fácil de lo que en apariencia había estado previsto y aunque la tensión se relajó de forma ostensible, la amenaza de aquellos tipos de la gasolinera seguía existiendo.

No tardaron en aparecer con una carretilla con los bidones acordados, a cambio de la nueva oferta que nuestra señorita había conseguido meterle doblada. Considerando nuestra situación era un buen cambio.

Para cuando Andriel vino a pedir ayuda para llenar el depósito le comenté:

- Te podrías haber dedicado a comerciante!!! Se te da bien…

Y tras aquello me apeé del vehículo dejando mi rifle en el interior pero con la recortada a mano para ayudarla a levantar las pesadas garrafas. Al cogerlas y tras las horas de viaje que llevábamos me di cuenta de lo cansado que realmente estaba. Me dolía cada centímetro de mi cuerpo, pero intenté ser de la mayor ayuda posible, a pesar del dolor lacerante de la pierna y las costillas rotas.

Un extraño calor había comenzado a recorrer mi cuerpo. Iba y venía, pero cada vez parecía aumentar de intensidad. Maldita Hermandad!!!

- Anda Rusty!!! Ayúdame y no nos demoremos más de lo recomendable!!!

- Claro, por supuesto jefa .
Rusty acepta a regañadientes. No le hacía gracia desprenderse del material que tanto les había costado, pero necesitaban la gasolina. De buena gana le daría un balazo por el culo a esos malditos cabrones. Sabía que su cabeza estaba dentro del visor de un rifle de francotirador, al menor movimiento sospechoso su cabeza estallaría como una sandía madura.
- Claro Eagle, cuanto antes acabemos antes nos iremos de este apestoso lugar y quiero poner polvoreda lo antes posible.
Cuatrocientas balas y un rifle. No estaba mal. Esos paletos aceptarían y aunque cuatrocientos era mucho mucha más cara era la gasolina pero tenía un mal presentimiento y se apresuré raudo a ayudar a Oscar, quería evitar estar el menos tiempo posible allí, se sentía desnudo y vulnerable y le jodía sentirse así.

Rusty y Oscar salen y empiezan a descargar la municion, la mitad de lo acordado y el rifle de francotirador de Raghar, es un dolor desprenderse de semejante arma pero poco mas podeis hacer ahora mismo y Oscar ya tiene su propio rifle. Las cajas estan en el suelo a mitad de la distancia de la puerta, las garrafas llegan hasta vosotros y el intercambio se hace... la tension se puede palpar en el aire pero nada ocurre bajo la mirada de Andirel y el viejo aparece que todos os comportais aunque sabeis de lo fragil de la situacion... el deposito empieza a llenarse atentamente bajo la mirada de Andriel, Oscar y Rusty se van turnando mientras Caffran sigue cuidando de Valkyria. El proceso es lento, no quereis malgastar ni una gota del precioso liquido y para cuando estais terminando con las garrafas, os estan esperando para rellenarlas... las devolveis y se meten para dentro para volver con el resto.

Volveis al todoterreno y descargais el resto de la municion, la colocais en el mismo sitio de antes y esperais... la espera se alarga casi quince minutos mas cuando la puerta se abre y aparecen de nuevo con las garrafas que necesitais. Todos estais mas relajados... Rusty y Caffran cogen las garrafas de dos en dos y es cuando terminan de cargar las mismas y aun quedan tres en el suelo cuando un rugido poderoso y grave se oye en la explanada seguido de al menos un par de coros mas... el rugido es algo que os hiela la sangre, es algo primitivo, agresivo... el rugido de un depredaro hambriento. Los dos grupos os mirais... unos a otros hasta que de pronto, algo se mueve a una velocidad que no sois capaces casi de seguir se lanza contra una de las sombras que os vigilaba entre la hierba. Pronto un par de pedazos de carne sanguinolenta salen disparados al cielo para caer sobre la entrada del lugar junto con los aullidos de una mujer a la que se estan comiendo viva. Los paletos se mueven para disparar sobre la bestia de la que solo se ve una espalda llena de espinas en la columna vertebral... la bestia hace caso omiso de la mayoria de las balas porque no llegana  impactarle y las que lo hacen parecen hacerle cosquillas.

Cuando el grito del viejo os alerta de lo que son... leyendas, solo leyendas os dice vuestro cerebro, es imposible en todo el tiempo que habeis estado ahi fuera nunca los habeis visto... son solo leyendas.... - Sanguinarios!!!

Las tres garrafas siguen en su sitio junto con la parte de municion que habeis dejado ahi... recoger lo vuestro, recogerlo todo, ayudarlos o dejarlos morir es vuestra decision. Caffran esta demasiado fijo en Valkyria para poder decir o hacer nada y vosotros tres os mirais teniendo que tomar una decision.

- ¡Cago la puta! - exclama Rusty - ¡A dentro!
Rusty se cuelga el arma a la espalda y se apresura a coger otro bidón de gasolina y llevarlo a la parte de atrás del vehículo esperando que no fuera demasiado tarde. No daba tiempo a cargar todos los bidones, pero esos hijos de puta no se quedarían con la munición y los bidones. Raudo se esfuerza mirando por un lado suyo, saltaría al vehículo si fuera necesario pero tenía que recuperar su preciada carga. Se apresuraba desesperadamente devolviendo el preciado líquido al vehículo.
- ¡Cubridme cabrones!
Las venas de su cuello se hinchaban alarmantemente pero redobló su esfuerzo para cargar la caja con la preciada carga. Mira por encima de su hombre y observa el ocaso, se apresura aun más.
- ¡No abandonemos los bidones, joder!

La transacción no se había desarrollado como se esperaba, pues un grupo de sanguinarios había irrumpido mientras Rusty y Oscar subían los bidones de gasolina, era demasiado buena esa pausa de balas y sangre que habían tenido. *Tu me odias mucho Dios ¿verdad?* pensé para mis adentros mientras trataba de mejorar el estado de Valkyria, después de todo ella seguía teniendo la peor condición, pero mas temprano que tarde me di cuenta de que no llegaríamos, no a la velocidad con la que cargaban las garrafas.

Mientras Rusty y Oscar se las arreglaban para tomar la mayor cantidad de garrafas posibles, busco dejar lo mejor parcheada posible a Valkyria, en caso de que debiese bajar a dar una mano.

La tensa calma se podía casi palpar en el ambiente. Aún así todo parecía estar saliendo según lo acordado. Nosotros estábamos demasiado cansados como para empezar una nueva refriega y ellos parecían demasiado asustados e inexpertos como para lanzarse a una batalla. Lo cual era de agradecer. Junto con Rusty llevamos la munición al lugar acordado hasta que nos trajeron las garrafas. Pesabana como unos emonios o tal vez era el dolor que recorría todo mi cuerpo…

Con tranquilidad y sin querer tener un accidente que pudiese servir de disparador de una disputa. Tras acabar de llenar el depósito, recogimos el resto de munición y volvimos al lugar acordado. Era una pena deshacerse de todo aquel botín de balas, pero el cambio era necesario si queríamos salir de allí. La espera se hizo larga y ya todos nos mirábamos con disimulo, mientras nuestras manos iban poco a poco hacia nuestras armas temiendo lo peor. Pero cuando la puerta se abrió y apareció el resto, suspiramos aliviados, aunque la presión no cedió.

Mientras comenzábamos a hacer viajes con las garrafas de repuesto, un rugido resonó en la quietud de aquel páramo solo roto hasta ahora por el arrastrar de nuestros pies. Era un gruñido primigenio, aterrador. Algo que solo en los cuentos se contaba pero que no se podía decir con seguridad si existía o no. Pero aquella leyenda se había vuelto real. Y era muy peligrosa!!! El viejo de la gasolinera gritó a voz en grito el nombre de la sombra que devoraba a uno de nuestros vogolantes, dándole la forma en nuestras mentes. Un sanguinario!!! Rusty aceleró el paso mientras mi mente daba con la misma idea.

- Tenemos que salir de aquí cagando leches!!! Ves por las dos garrafas que quedan!!! Y todos listos para salir cagando leches!!! – grité mientras corría hacia el todoterreno para coger mi fusil y prepararme para disparar a cualquiera de aquellas cosas que se atreviese a aparecer.