Partida Rol por web

Avanzas por el oscuro pasillo tratando de alcanzar la puerta. La sensación mágica y malvada de la torre os hace que os de la sensación de que aquella puerta está sumamente lejos y que cuanto más andáis más lejos la sentís. Era un efecto sorprendente y que hasta ahora no os habíais encontrado. Sin duda, aquello no era nada bueno.

Avanzas por el oscuro pasillo tratando de alcanzar la puerta. La sensación mágica y malvada de la torre os hace que os de la sensación de que aquella puerta está sumamente lejos y que cuanto más andáis más lejos la sentís. Era un efecto sorprendente y que hasta ahora no os habíais encontrado. Sin duda, aquello no era nada bueno.

Avanzas por el oscuro pasillo tratando de alcanzar la puerta. La sensación mágica y malvada de la torre os hace que os de la sensación de que aquella puerta está sumamente lejos y que cuanto más andáis más lejos la sentís. Era un efecto sorprendente y que hasta ahora no os habíais encontrado. Sin duda, aquello no era nada bueno.

Avanzas por el oscuro pasillo tratando de alcanzar la puerta. La sensación mágica y malvada de la torre os hace que os de la sensación de que aquella puerta está sumamente lejos y que cuanto más andáis más lejos la sentís. Era un efecto sorprendente y que hasta ahora no os habíais encontrado. Sin duda, aquello no era nada bueno.

Vuestros compañeros decidieron marchar detrás de Arther. Vosotros tres y Mal Carlsson habíais quedado a la espera. No sabíais que hacer, pero quedaros allí parados, desde luego que no era la opción correcta.

Aramil recoge la cuerda con tranquilidad, tomándose su tiempo para enrollarla y dejando así que sus compañeros se adelanten. Quiere entrar al final, para no encontrarse en primera línea si el conjuro le afecta. Examina el extremo de la cuerda que quedó flojo para ver si está cortada o desanudada y después la guarda, saca su arco y coloca una flecha en él, y se pone por fin en camino hacia el nivel siguiente de la torre.

Arther seguía corriendo pero la puesta seguía a la misma distáncia. - Tiene que estar en mi mente, tengo que conseguir vencer a la torre. - Se dijo mientras corría listo para evitar cualquier trampa que saltase.

- ¿Qué le ocurrió a la cuerda? Le pregunto al elfo con curiosidad y desconcierto a partes iguales. No era lo mismo que la hubieran cortado a que simplemente la soltara.

Antes de que Aramil decidiese avanzar hacia el interior de la habitación contestó a la Dama Roselina que, la cuerda no había sido ni cortada, ni desanudada, que simplemente Arther había desaparecido. Porque la cuerda seguía exactamente igual.

Y entonces, el elfo, armado y preparado como iba se introdujo hacia la habitación.

Seifer comienza a correr por aquel pasillo hasta que llega un punto en el que se da cuenta que jamás alcanzará esa puerta y que lo más probable es que sea algún tipo de hechizo, pero cuando deja de intentar buscarla se da cuenta de que hay más posibilidades, cuando toma otro de esos caminos posibles termina cayendo por un precipicio.

Falcon comienza a correr por aquel pasillo hasta que llega un punto en el que se da cuenta que jamás alcanzará esa puerta y que lo más probable es que sea algún tipo de hechizo, pero cuando deja de intentar buscarla se da cuenta de que hay más posibilidades, cuando toma otro de esos caminos posibles termina cayendo por un precipicio.

Sigues corriendo por aquel pasillo, parece que llevases corriendo durante horas, pero a pesar de ello aguantas la marcha forzada. De pronto notas como bajo tus pies se abre una trampilla que evitas dando un salto en carrera. Cuando miras hacia el frente la puerta parece estar más lejos que antes.

Sigues corriendo por aquel pasillo, parece que llevases corriendo durante horas, pero a pesar de ello aguantas la marcha forzada. De pronto notas como bajo tus pies se abre una trampilla que evitas dando un salto en carrera. Cuando miras hacia el frente la puerta parece estar más lejos que antes.

Una nueva trampa se materializaba bajo sus pies mientras corrías por aquel interminable pasillo. Podías notar como el esfuerzo físico iba consumiendo lentamente tu energía vital, hasta que, de pronto te sorprendiste. Y entre tus manos pudiste notar el pomo negro de una gran puerta de piedra de doble hoja.

Muy distinta a la que habías visto en aquella primera ilusión.

Daba la impresión de que hubiera sido objetivo de algún poderoso hechizo, por lo que debíamos andar con cautela de no volver a desencadenarlo y sufrir más veces sus consecuencias. Viendo que las precauciones servían de poco, avancé tra el elfo preparada para lo único que podría enfrentarme, un enemigo tangible.