En ausencia del Duque de Transilvania, el Caballero Durius quedó al cargo de la Corte, del castillo, de la capital, y, en cierta medida, de toda Transilvania.
Lo que tenía que haber sido una doble boda de alianzas y festejos que sirvieran para cimentar buenas y sólidas relaciones se acabó convirtiendo en un desastre de proporciones catastróficas. Se produjeron muchas muertes, mucha confusión, y al final la Casa Basarab al completo acabó exiliándose a Polonia.
A su regreso al país, el Duque Gyula Kadar no estaba contento, no confiaba en ninguno de sus fieles seguidores, por lo que los exilió a todos al devastado feudo de Slobozia con la excusa de repoblarlo y hacerlo próspero.
Partida costumbrista en la que el objetivo principal es sobrevivir a lo largo del tiempo mientras se desarrolla un feudo medieval, Slobozia.
Es necesario llegar, bien directamente, bien a través de un descendiente en buen estado, hasta una fecha concreta secreta.
Los avances temporales son esenciales. No se juega todo en detalle, sino que muchos aspectos se narran mediante elaboradas redacciones.
Los Personajes son profundamente desiguales, siendo algunos muy poderosos y otros simples lacayos o siervos. Hay que tener en cuenta y aceptar que la desigualdad es algo completamente normal en la partida.