Partida Rol por web

!Ja! !En el sitio equivocado!... Comenta el asesino por primera vez interviniendo en la conversación. !Sí, yo también estaba en si sitio equivocado... ciertamente no era el sitio correcto que me pillaran junto al cadaver del tipo que me ordenaron matar...! !JA! Sus risas en voz baja recorren el corredor mezclados con las lágrimas de la joven elfa.

Cuando escucha el ruido procedente de la celda del sacerdote comenta con voz sarcástica: Creo que el desquiciado del sacerdote ha trascendido por fin... Y creedme cuando os diga que eso no le va a gustar nada de nada a los guardias. Todo preso ha de cumplir su sentencia... Jejejejejeje. Pero a mí no me veréis mucho más por aquí, eso os lo puedo asegurar... Tengo mi plan perfecto para salir de aquí... Os dice con voz calmada y esperanzadora. Os pondré flores en vuestras tumbas...o quizás no... no, es más, creo que me iré muy lejos de aquí...

El silencio recorre el corredor durante unos momentos, ¿Salir de ahí? ¿Acaso hay alguna posibilidad? Piensan todos los presentes ante la seguridad de las palabras del asesino, inlcuso "El antiguo" parece meditar sobre ello. Luego la voz del tipo que parece ser un asesino vuelve a sonar dirigida a la Elfa:

!Oh! Pero no llores jovencita... Este es un sitio decente... Te colgarán, pero estoy seguro que ni antes ni despues haran nada indebido a tu cuerpo... Como he visto hacer en otras prisiones menos... Morales...

-Me gustaría ver como sales de tu celda y llegas a la mia,y luego como sales de esta cárcel llena de soldados.-Diego tenía una nota de sarcasmo en la voz.-Mi crimen fue matar a sangre fría a un traidor y gustosamente lo volvería a hacer...-Diego tomó aire.-Saben? la muerte de un noble no suele ser bien vista por muy traidor que sea, y como dije no me arrepiento de haber hundido una espada entre sus costillas.-Diego odiaba esperar en esos momentos previos a la tormenta,solo que en este caso no era una tormenta y tal vez lo ultimo que escuchase fuese el redoble de tambores antes de ser colgado.-Si,Soy un hombre de honor y....-Tras el sonoro golpe Diego se levantó del jergón.-¿Padre?...-Diego rió de manera siniestra gracias a su voz cascada.-Pobre infeliz...ha tenido la suerte de morir antes.-su voz sonaba amarga.

Y como una mala broma, como respuesta ante el comentario del señor Diego, se oye una voz que murmura desde el suelo: Santa Madre del Emperador, Santa Virgen de las vírgenes, Madre del trono imperial, Madre de la Iglesia Madre de la Divina Gracia Madre purísima, Madre castísima... Santo emperador nos a ti nos encomendamos, Puerta del Cielo, Estrella de la mañana, Salud de los enfermos, Refugio de los pecadores, Consuelo de los afligidos, Auxilio de los cristianos, Rey de los ángeles... Una voz que sigue y sigue, como negandose a dejar en paz a los ya desdichados presos.

!Oh por Dios! No puede ser... Comenta el asesino desde su celda al oir al padre. ¿Así que te gustaría verlo emm? Pues espera a media noche y veremos... ¿Qué me podrías ofrecer para que demorase mis planes y fuese hasta tu celda, gastando un preciado y medido tiempo buen señor? Luego saca una mano por los barrotes y señala hacia la celda del sacerdote: Por esa si que pienso pasar antes de irme... !rediez!...

Diego pudo ver en las palabras del asesino una posible salida.-Mi ayuda,antes de llegar aquí era un veterano sargento de los ejercitos de nuestro imperio y creo que una mano armada no te vendría mal.-Luego alzó una mano hacia el techo.-Oyes a ese perro,Es mio y es MUY listo....nos servirá de ayuda si me sacas de aquí,pero en cuanto me saques tenemos libertad de hacer lo que deseemos,Tu harás lo que quieras y viajaras a donde quieras que yo..haré lo propio.-Diego pensó unos segundos mas y miró a los demás reos.-Es mejor que todos salgamos de aquí,o casi todos...-La voz de Diego iba cargada de malicia.-...La justicia nunca estuvo de parte de algunos que estamos aquí...así que nosotros no tenemos por que aplicarla,sacame de aqui y te doy mi palabra de que te ayudaré a salir libre de aqui.-Diego Miró al asesino a los ojos.-¿Que hará entonces su merced?.

Ajamm... Responde el asesino. Pues creo que me meteré a sacerdote... !No te jode! ¿Pues qué crees que voy a hacer al salir de aquí? !Irme lo más lejos posible, y seguir trabajando de lo mío...! Que mal no se me da. Jajajaja. Se detiene a escuchar los ladridos del perro, que a este paso, va a despertar a todo el cuartel de la guardia de la prisión. ¿Una mascota? Pregunta con una sonrisa. Yo también tengo una, y una mano fuera... juntas... verás que resultados dan... Pese a que lo intentabas mirar a los ojos la tarea es imposible pues las celdas se encuentran unas al lado de las otras y los barrotes no permiten sacar la cabeza fuera. ¿Una mano experta en el combate em..? Si... la aceptaría con gusto. Pero creo que los demás estan condenados... ni siquiera se han interesado en pedir ayuda... ¿No los ves? Callados y sentados en sus celdas...

Saca una mano entre los barrotes y los va señalando: La elfa llora, el sacerdote reza, el violador de mierda solo maldice, el caballero..bueno,es dificil precisarlo. No, no parecen querer la livertad y yo no regalo nada, tenlo claro.

Diego sonrió Complacido.-Bien,Entonces tenemos un trato señor?.-Tras oír el discurso del asesino dijo con voz neutra.-No todos van a salir,sácame y yo me encargaré de que salgas sano y salvo de esta prisión,en cuanto a los que saldrán o no....Tu solo has de abrir mi celda el resto es cosa mia....O ¿acaso vas a preocuparte por lo que haga cuando te hayas marchado?.-Preguntó Diego sabiendo de antemano que el asesino jamás se preocuparía por otros,como el intentaba hacer.

Una amplia sonrisa apareció en mi rostro al escuchar el recuento de aquel hombre que parecía ser un asesino profesional. De esto sí que se sentiría orgulloso mi maestro. Siempre decía aquello de “un hechicero gris no llama la atención hasta el momento en que la necesita. Siempre anda de sombra en sombra, pasando completamente desapercibido para el resto de las personas hasta que a él le interese ser visto”. Y por lo que escucho en la conversación este era un buen momento para llamar la atención sobre mi persona.

Me levanto y me dirijo a hacia los barrotes de la celda para que sea más fácil escucharme y hacer notar algo más mi presencia. ¿Un plan de fuga decís? Entonces tal vez estéis interesados en mi ayuda. Seguramente os preguntaréis que puede ofrecer una cría. Muy sencillo, soy hechicera, puedo poneros los vientos de la magia a nuestra disposición para salir de aquí. ¿Qué decís?

¿Que que digo? Responde el asesino. Que no quiero cerca de mí a la sucia magia... Yo me valgo de mi acero... mi perdido acero... pero mi acero de todos modos. La magia es para cobardes, y gente rara, y no me fio de ella, solo mantente lejos de mi cuando esta puerta se abra bruja. Dice en tono receloso y despectivo el necio asesino.

No os hagáis ilusiones imbéciles, no vais a ir a ningún lado, y menos fiándoos de ese asesino, que vendería y mataría después a su madre con tal de conseguir unas monedas... Escupe al suelo del corredor de las celdas mientras suela sus palabras con igual desprecio que el escupitajo: ¿De verdad vais a fiaros de el? !Entonces es que sois más necios que el sacerdote de pacotilla este, que aun se piensa que rezar vale de algo!

El despojo del fondo tiene razón... Nadie ha conseguido abrir estas celdas en los 12 años que llevo aquí dentro, y menos aun ha conseguido alguien salir de la plaza de armas... Así que callar, y dormir, esperar el nuevo día en silencio y meditando... en vez de con ensoñaciones que con el alba se romperán en mil pedazos. Dice el preso antiguo mientras se da la vuelta en su camastro e intenta conciliar el sueño.

Eso es por que no trabajamos en equipo,Reo.-Diego bajo un poco la voz.-He llegado a salir de situaciones peores,si trabajamos en equipo,nos coordinamos y luchamos codo con codo ganaremos...-Las palabras de diego iban cargadas de sentimiento.-..Y si no..Moriremos habiendo plantado guerra,yo al menos prefiero morir ensartado en una espada antes que colgando...es un final mas digno.-Diego suspiró de nuevo y lazó una patada al jergón,acaso esas personas habían perdido las ilusiones de vivir o que?....Infelices,yo al menos lucharé hasta que no me queden fuerzas.

La justicia de este mundo no siempre es justa. Pesa más la noble cuna que la noble virtud ante un juez, y no estoy muy seguro de cuál es el destino que me espera. Aunque estaría muy agradecido de poder salir de aquí, no es conveniente hablar más de la cuenta en las cárceles, cualquiera de los presentes me delataría para ganarse el favor de los guardias,o incluso el sacerdote lo haría por propia voluntad sin esperar recompensa. No, Otto, no. En el nombre de Sigmar no te mezcles con la gente equivocada. Pero uno no puede evitar oír las palabras adecuadas si son pronunciadas en voz alta, y para hablar entre ellos deberán hacerlo. Tal vez debamos escuchar con atención.

Las fugas -comenzó diciendo el escudero, halagado por otra parte de que se dirigieran a él como el caballero- suelen ser violentas, y no sois vosotros los que iréis armados cuando salgáis de las celdas. ¿Me equivoco?

Por muy diestro que fuera el soldado con las armas necesitaría de instrumentos de su oficio para dar buen uso a sus aptitudes, y las armas no abundaban en los suelos de los corredores de las prisiones de Altdorf. Como cualquier idiota sabría. Sólo la hechicera, si es que realmente lo era, tendría oportunidades de escapar. Pero no parecía ni poderosa ni peligrosa, de no ser así no la habrían puesto con presos ordinarios.

¿Acaso soy eso, un criminal ordinario?

En eso pensaba Otto cuando la elfa juraba que ella no mató a "unos cuerpos mutilados" que ya estaban así cuando llegué. ¡Ja!

Los de tu raza elfa pudeen ser más bárbaros que las gentes del norte.

El caballero habla con razón. Puede que confíes en tu acero, pero no lo tienes a tu disposición. Una vez abiertas las celdas yo seré la más capacitada para enfrentarme a los guardias o al menos para entretenerlos hasta que consigáis los aceros. Pero si no necesitáis de mi ayuda… ya me escapare en otro momento comento alzando los hombros con gesto despreocupado, pese a que sea un gesto inútil pues prácticamente nadie puede verlo. Y además casi mejor que no me inmiscuya en esta huida. Vista la inteligencia que tiene el supuesto “líder”, esto solo puede acabar de una forma: con todos muertos. He de ser paciente como siempre decía el maestro y esperar el momento oportuno, y parece ser que este no será el momento.

No necesito de mi acero para ello..Aunque sinceramente me facilitaría todo el proceso, he dicho trabajar en equipo codo con codo,Es indispensable que salgamos de aquí con la ayuda de la mujer,al igual que la mia o la del Caballero para presentar batalla en caso de haberla...Porque...Si de verdad fueras una hechicera tan poderosa haría bastante que vuestra merced no estuviera aqui.-Diego sabia que ninguno de allí saldría sin la ayuda de los demás,si no por que todos estaban encerrados allí?,estaba claro que el intentaría escapar con el apoyo de los que fueran...pero esa hechicera es útil....-Yo propongo una unión y que todos salgamos de aqui,luego afuera que cada uno decida que rumbo tomar,Si no, tal vez yo muera..pero habré intentado vivir y no me resigné a morir entre estos muros.

Mientras los presos continúan su charla sobre si salir o no salir y cómo hacerlo, un halcón sobrevuela la prisión. El Asesino por lo visto lo estaba esperando, pues mirando hacia los barrotes de la parte alta, silba de un modo concreto, especial y las conversaciones callan de repente pensando que quiere llamar la atención de los demás reclusos. No es así, lo único que pretende es que su halcón, turok acuda hasta él, y así lo consigue, el halcón baja en un vertiginoso picado y se posa en el borde de la pared donde se encuentran los barrotes que dan al exterior.

Desde las celdas contiguas no podéis saber que está pasando, pero hasta vosotros llegan las palabras de vuestro compañero de corredor cuando le dice al pájaro: Bien hecho pequeño, ahora suéltala, vamos, déjala caer... Un tintineo llega hasta vosotros desde la celda del asesino. Y este exclama satisfecho: Biennn....

Saca una mano fuera de los barrotes de su puerta y comienza a palpar la cerradura con los dedos, buscando la posición donde se debería encajar una llave de apretura. ¿No os fiabais de que tenía un plan ee? Pregunta a los demás. Pues aquí está, y ya está rodando, y bien para ser más exactos... Una vez localizada la cerradura, con la otra mano sacar por los barrotes una llave y comienza a introducirla en la cerradura. Cuando la va a girar todo el mundo piensa: !Si venga... ¿Y qué más? !10 contra uno a que no abre! Pero todos hubieran perdido la apuesta, pues la cerradura cede tras dos vueltas y la puerta se abre con un ligero chirrió. Toma castaña... Murmura el tipo. Nadie sale de su asombro.

Diego sonríe complacido ante el descubrimiento de la apertura de la celda del asesino y saca una mano por los barrotes.-¿Y bien?Me sacaras de aqui?.-Diego dejó la pregunta en el aire mientras cruzaba los dedos de la otra mano. Por Dios Sigmar....abreme esta puta puerta...

¡Cáspita!

¿De dónde ha salido esa llave?

El tipo se acerca a las celdas de sus compañeros de prisión. Con una sonrisa astuta comenta en voz baja: Bueno... las puertas de las celdas se renuevan cada poco tiempo... y un sobrino de un amigo de mi hermano trabaja en la forja donde se fabrican, no es dificultad sacar una copa de las llaves... El asesino de profesión se mueve con rapidez y observa a los presentes en sus celdas evaluando posibilidades. A quien llevar, a quien dejar, quien será más útil... Recursos, son imprescindibles en mi profesión.

Con paso decidido se planta ante la celda de Diego dispuesto a abrirla cuando de repente la puerta del corredor se abre y entran tres soldados hablando despreocupadamente. La luz de sus antorchas ilumina la escena, que pilla al asesino desprevenido y sin saber qué hacer.

Los soldados se detienen un momento por la sorpresa... ¿Pero qué demonios...? Exclama el jefe del grupo ataviado con un uniforme de grado y con dos pistolas al cinto. Un segundo después una de sus pistolas se encuentra en su mano. El asesino presiente lo que va a pasar, pero no tiene vía de escape alguna, pues la entrada al corredor es el único lugar por el que se accede a las celdas. El tiempo parece detenerse cuando el percutor de la pistola martillea la pólvora de la misma y el pesado proyectil vuela y revienta el rostro del asesino, lanzando su ligero cuerpo hacia atrás. !!BANNNGGGG!! Truena el arma en el espacio corredor, y todos veis el fogonazo del arma y el cuerpo del asesino cayendo sin medio cráneo en el suelo. Tras el disparo los corredores de la zona de mazmorras comienzan a llenarse de voces.

El cuerpo queda frente a la celda de Diego, tendido y sin vida, con la llave en sus manos mientras una escuadra de 10 hombres entra apresuradamente en el corredor con sus espadas desenvainadas y sus pistolas en ristre. !Teniente! !Quiero saber cómo ha pasado esto! !Lo quiero saber para antes del alba! Todos los guardias comienzan a comprobar las puertas de las celdas para ver que están bien cerradas y se sitúan en frente de las mismas obligando a sus ocupantes a situarse en la pared del fondo de las mismas.

El oficial, un capitán de la guardia de la prisión pasa por delante de las celdas mientras con un dedo señala algunos de los ocupantes mientras murmura: Este, este, está, este, esta... esto... Añade señalando al violador. Entre los escogidos se encuentran Diego, Otto, Umbra, Yuviel, el violador y el contrabandista que aun no había dicho nada en todos los días que llevaban en las celdas. Los quiero atados y en el patio de ejecución en menos de 10 minutos. !Y limpiar esta mierda joder! Grita dando un puntapié al cuerpo sin vida del asesino. Esto no le va a gustar nada al jefe... Con media vuelta y capa revoloteando, se dirige a la salida a toda velocidad mientras sus hombres preparan los grilletes de los reos.

¡No me apuntes con eso! Te he dicho que yo he tenido nada que ver. ¡Por Sigmar, si estoy en una celda! ¡No puedo ponerme más lejos esto es minúsculo.

Los perros de la justicia eran tan sordos como estúpidos, y no entendían lo absurdo de lo que estaban pensando. Otto confiaba en que el que estuviera al mando tuviera algo más de cerebro e instrucción.

¡Señor capitán! ¡Señor capitán! Apelo a su integridad y buen juicio. ¿De verdad cree que he tenido algo que ver en la fuga de ese preso? Nunca he visto a ese hombre antes de que saliera de su celda. Mi crimen no merece la muerte, no cometí asesinato pues la muerte de un caballero que justaba no puede ser utilizada para juzgar a su adversario, es una de las reglas de la caballería, y menos aún merece una ejecución sumaria.