Partida Rol por web

Los bosques de Qualinost son maravillosos con sus enormes árboles y esa calma que te trasportaría al mismísimo exilio de los elfos.
Aquí debajo de los árboles poco se siente aquella oscuridad que baña al mundo ya que el cobijo de los árboles los aisla de todo.

No está bien el bosque, ustedes así lo sienten.
Algo trastorna al equilibrio tal vez alterando al Espíritu del Bosque.
Piensan en que pueda ser y rápidamente se dan cuenta que aquel objeto que buscan debe ser el causante de esto. Evidentemente es un objeto de caos puro el cual hace que toda la armonía del lugar se pierda. Claro, no todos lo pueden sentir, ustedes hijos del bosque así lo hacen al igual que cada una de las plantas y criaturas que lo habitan.
Es solo tiempo hasta que se visualmente notable para todos.

Nekrhatag, que había asistido muda a aquel, por qué no decirlo, magnífico espectáculo que había permitido el alzamiento de tantísimos millares de muertos vivientes, no había tomado parte en la pequeña charla de sus compañeros. Poco le importaba a ella este mundo, salvo por aquellos que veneraban a Hades. Los pocos seres queridos que había tenido ya habían muerto mientras ella permanecía inalterablemente marchita, siempre a la espera de ocupar el puesto de Perséfone.

No tenía nada que ganar. O no mucho, al menos. Pero tampoco nada que perder y su único entretenimiento, por frívolo que pudiera parecer, era continuar luchando. El bando no le solía importar tanto como las recompensas, pero esta vez había una pequeña llama en su interior que le impulsaba a continuar la lucha contra Godmaster y sus seguidores: No era que no confiara en que si se atrevían a visitar el reino de los muertos Hades acabaría con ellos sin demasiado esfuerzo, sino una especie de venganza, unas ganas indecibles de poder machacarlos ella misma con sus propias manos.

Sin romper su mutismo excepto para agradecer a Ryo la curación, se dejó llevar hacia Qualinost. El tema de las condecoraciones hacía tiempo que había empezado a parecerle ridículo y lo de calificar a Godmaster de dios, una ofensa tan blasfema que prefería ignorar por completo para no encenderse. Dejando su intermitente rastro de sangre, la liche iba volando por entre las copas de los árboles, tratando de disfrutar del paseo y entreteniéndose en destrozar alguna que otra rama para ajustar su ritmo al del resto de aventureros.

- No sé si soy la única que está con Dominic en cuanto a que nos están utilizando como se les antoja, pero... ¿no os habéis parado a pensar en que con mover una sola debería de ser completamente suficiente? Aunque bueno, mentiría si no dijera que estoy deseando hacer gritar como a una maldita zorra a Jackings para que suplique por su vida. Y que comienzo a aburrirme de combatir siempre contra adversarios demasiado débiles...

Tras su tan postergada como inesperada intervención, la muerta viviente continúa su avance.

El avance por el bosque no hace más que revelarles el daño que podía causar el ejército orco.
Árboles quemados, arrancados desde su base. Además el paso de las máquinas orcas no ha hecho más que destruirlo todo.
Cuando descubren el sendero que atravesó Unglar y lo suyos notan nuevamente la magnitud de la guerra que habían sufrido en Ginea.
Pero esto no lo era todo, algo más había, la vegetación en el bosque de Qualinost florecía rápidamente, como no había resurgido luego de dos semanas?

El clérigo camina por el bosque sorprendido de la rapidez con que aquellas tierras se reponían de la devastación. Vaya, si los dioses de este mundo son capaces de hacer cosas como esta es claro que deben ser increíblemente poderosos, aún así no entiendo como pueden permitir esta devastación, el deber del poderoso es proteger al débil, ayudar al necesitado...

Ante la valentonada del esqueleto andante el clérigo no puede sino sonreír, aún recordaba la forma en que había rehuido del combate, o mejor dicho, como se había mantenido a una prudente distancia, su sonrisa se amplio cuando recordó como se había apresurado a alejarse cuando curo a sus compañeros, consciente de que el poder del clérigo era malo para su "salud".

Con todo Akden prefería caminar despacio y sin dar demasiada importancia a las palabras de sus compañeros, aquello se estaba convirtiendo en una especie de viaje sin control que dejaba de parecerle divertido, aun que quien sabe, quizás en una de esas logras su objetivo...

Que nos estén utilizando? No lo se...te lo diré luego de hablar con Ciria. Hasta ahora...lo poco que he hecho ha sido seguramente influenciado por la alta sacerdotisa, pero estoy seguro de que ha sido para bien, al menos en mi caso.
El elfo, observa atonito el bosque aun marchito en tantos lugares...
Esto...no es posible! El Espiritu del Bosque debería haber regenerado ya toda esta destrucción! Algo debe haber ocurrido en Qualinost para que todo siga aun en este estado!

Nethiron, observa a la pequeña Ryo, abrumada al igual que él por la extraña sensación.
Tu también lo notas verdad? Algo...algo ocurre con el Espiritu del Bosque? No sabes que es? Le interroga muy preocupado.

La vegetación por partes estás podrida.
También notan algunos escarabajos que antes no eran del lugar.
No es que sea una plaga sino que encuentran algunas criaturas que no son de aquí, tal vez de algún pantano o similar, pero no oriundas de este bosque.
Y definitivamente no parece haber brotes nuevos.

Habrá resistido Romerón al avance del ejército orco?
Romerón es el Ent más grande de todos y reside cerca de Qualinost.
Que habrá sido de él?
Lo habrá alcanzado la corrupción del bosque?
Lo habrán matado los orcos?
O simplemente ha resistido a todo eso?

Un gran poder hay en este bosque, lo sientes, siempre has sabido sentir estas cosas.
Tu inherente cuerpo muerto viviente siempre ha buscado obtener más y más poder, y ahora con la búsqueda de destruir a Godmaster autonombrado como a un Dios no dejas de pensar que aquello que pueda con el vampiro tal vez pueda contra Perséfone.

Hay demasiada calma en el bosque.

Digo observando mi alrededor,pero más que hablar para que me oigan hablo para mi mismo,aunque sea en voz alta.

No se oye ni un animal,recorriendo a sus anchas por el bosque.SIn duda,es la calma que precede la tempestad

SIgo susurrando.

Cierto,querido Netherion,sin duda algo terrible ha sucedido a Qualinost.Debemos ser cautos y sigilosos,el Caos se ha a poderado de todo,espero que aun quede aún algún atisbo de esperanza,en caso de recuperar el objeto mágico...

No dejas de pensar en si los últimos elfos que defendieron la ciudad pudieron cortar los dos puentes colgantes que cruzan el barranco hacia la ciudad.
Esta era una medida que salvaría de la completa incursión orca hacia la ciudad ya que las defensas naturales de la Qualinost impedirían que crucen por el barranco.
Existe un <>. Descender por la pared del barranco parece posible, pero la caída de unos 150 metros puede ser fatal. Además tú conoces una leyenda que afirma que nadie puede cruzar a nado las aguas de abajo.

Akin ya no estaba, como ya le habían visto hacer otras veces habían dejado de verlo. Si sirve el juego de palabras.

A esas alturas ya estaba atento a todo lo que pudiese venir, fuese de donde fuese, así como a las señales qeu pudiesen quedar de lo que allí había sucedido.

Camino cabizbajo.

A pesar de que la ilumnación de la zona sea,prácticamente nula,mi armadura de mithril,brillante como la luna llena y mi espadón,sobre todo éste,iluminan mi alrededor,como si portara una antorcha.El espadón solar,lo porto con ambas manos,aunque me gusta su tacto,dejo de empuñarlo y lo guardo,de modo que mi alrededor,dejó de estar iluminado.

Sigo caminando cabizbajo,alargo mi mano diestra,la cual porta un brillante y lujoso brazalete,y me detengo.Rápidamente sale del brazalete un cetro*,el cual lo agarro con mi siniestra mano,seguidamente,del reluciente brazalete,emerge un cetro similar,el cual lo agarro con la diestra.Con ambos cetros,sigo caminando,cabizbajo.

EN cuanto,el grupo menos lo espera,digo,sin dejar de caminar:

Chicos,no dejo de preguntarme,si los últimos elfos que defendieron la ciudad,pudieron cortar los dos puentes colgantes que cruzan el barranco hacia la ciudad.

Mis palabras parecen frías como el acero.

Esta era una medida que salvaría de la completa incursión orca hacia la ciudad ya que las defensas naturales de la Qualinost impedirían que crucen por el barranco.

Cita:

Al sur a lo largo del barranco estaría uno de los dos puentes colgantes que permiten la entrada a Qualinost.
Allí es donde deberías guiar al grupo para saber si fue cortado o no.

Mirad!

Exclamo sonriente,señalando hacia el horizonte.

la ciudad de Qualinost se alza ante vosotros!

Toco la espalda de Nethrion,a la vez que una lágrima recorre mi reluciente cara.Inmediatamente guardo mis cetros,y esgrimo mi espadón iluminado por la magia.

Cómo os dije,digo mientras me dirigo hacia el sur a lo largo del barranco,para defender la ciudad,los elfos debieron cortar ambos puetes colgantes.Uno de los cuales,debería estar por aquí.¡Siganme!

Con esperanzas renovadas, sigo al Portador de los Soles hacia lo más profundo de la gran capital elfica.
Lo sabia...Ni siquiera Unglar y sus jinetes pueden siquiera intentar poner un pie en la sagrada ciudad. Esto no es Ginea...es Qualinost!
Exclamo orgulloso de nuestra gran ciudad.

Me gustaría, luego de visitar la Torre del Sol, ir a hablar con el Gran Ent, Romerón. Aunque sin dudas podríamos habernos desviado para ver como ha sobrevivido a la horda...
Que dices Fendoriel? Tu decides acá...

Si,me parece bién.NO está mal,agregar aliados a nuestra misión,sobre todo poderosos.¡En marcha!