Partida Rol por web

El musculoso y barbudo guerrero apenas soltó prenda no solo desde que desembarcaron, sino desde hacía varios días, cuando conoció a los que eran ahora sus compañeros de equipo. Trekk Frostbreath era un tipo de muy pocas palabras, pero no por ello asocial, ni mucho menos. Simplemente, no solía tener mucho que decir.

Al llegar, observaron un paisaje repleto de grandiosos edificios. Toda esa opulencia y exceso de medios desplegados por la poderosa nobleza en actos oficiales no era nueva para él a pesar de su procedencia bárbara. Estaba acostumbrado a las ceremonias solemnes y altisonantes, pero no por ello dejaban de resultarle ridículas e innecesarias. Resignado, decidió no pensar en ello y siguió a su grupo a la inscripción, que completó sin dilación alguna.

Sin decir una palabra, se mantiene cerca de los miembros de su equipo, mientras espera, paciente y en silencio, la llamada a las armas.

El picaro fue de los primeros en entrar a la tienda, realizo las presentaciones oportunas ante el encargado que era un anciano de larga barba que llegaba hasta los pies , sus larga experiencia vital fruto de sus arrugas y sus imponentes glifos en su capa denotaban su estatus como mago

El picaro se acerco primero al desconocido mago del cual le sonaba su cara , y se presento a el y sus compañeros

Bien hallado, noble señor, mi nombre es Jilokasin y somos "Los guerreros del amanecer".

El mago le miro imperterrito fumando su pipa , cuyo humo hacia que apeneas se le viera la cara al mago 

El picaro extendio su brazo con la mano hacia arriba y del interior del brazo del picaro se pudo ver un tatuaje de una espada dorada , con un sol en el mango, que se hizo al ser nombrado lider de "los guerreros del amanecer" y ser bautizado entonces como "Filo del alba"

El mago saco una piedra al azar de una bolsa que tenia una runa y se la extendio al picaro

a lo que añadio. La suerte  ha hecho que sea la puerta 33

Firmo y el mago le hizo un gesto para que pasaran los siguientes a firmar . El salio de la tienda y se puso depie en la puerta de la tienda esperando que todos pasaran

El enano se le acerco y le hizo una pregunta sobre las habilidades en combate del picaro , este le hecho una mirada altiva y fija con algo de odio, el enano habia interrumpido sus pensamientos sobre la puerta 33 y le contesto algo irritado

LLevamos almenos varios dias juntos  : si estamos juntos en este reto supondras pues que la agilidad de mi espada es igual de fuerte que la fuerza de tus brazos, compañero.

ya mas calmado le pregunto a este 

Es esa puerta de alli por la que pasaremos , tiene una runa igual a la de esta piedra , es la numero 33 ¿que crees que ese numero puede significar?

Eso habrá que verlo pensó el enano cuando el elfo respondió. La verdad era que si se había tatuado el brazo para conmemorar aquella incursión debía estar muy motivado. O eso, o era un chalado. Sólo el desarrollo de los acontecimientos lo diría.

- Treinta y tres - dijo, tomando la piedra con la runa marcada y girándola entre los dedos - No tiene especial significado para los míos. Muy raras veces se utiliza para simbolizar la amistad, pero lo que realmente me viene a la cabeza es que son el número de vértebras que los humanos tienen en su columna... no me preguntes por qué lo se.

Lanzándola suavemente al aire, dejó que el elfo recuperara la piedra.

Diversos equipos se arremolinaban en torno a la sala de las cien puertas; muchos ya habían terminado con su proceso de inscripción mientras muchos otros aun iban a apenas llegando.

Aunque en el fondo se decía que el grueso de los participantes que se estimaría, abrían de llegar, se encontraban ya allí. Entre ellos grandes y famosos campeones y héroes provenientes de lejanas tierras en quienes estaban puestas prácticamente todas las expectativas…, y las apuestas.

La mayoría de los equipos calentaban motores en las cabañas junto a las puertas que les habían tocado, otros por su parte aprovechaban la oportunidad para conocer a famosos héroes e incluso algunos intentaban conseguir equipo de última hora de los avaros mercaderes que buscaban hacerse con riquezas lo más pronto posible.

Al lugar habían llegado mercaderes de todo tipo, desde los que vendían simples alimentos y víveres para que la que pudiera ser una larga odisea, hasta quienes vendían extraños mágicos que estarían prohibidos en muchos reinos bajo la vigilancia de los templarios.

A la par de estos, no podían faltar los oportunistas que empezaban a organizar a puestas en la sala intentando sacarle algo de dinero a los múltiples nobles que allí se reunían. Y mientras todo esto se gestaba, la gruesa voz de un hombre surgió entre la muchedumbre. Por lo alto de su volumen era claro que algún mago lo ayudaba con su discurso. Aquel hombre se había posado junto a una fuente para ganar más altura y poder ser visto con facilidad por todos.

-Sean bienvenidos reyes y reinas, nobles, mercaderes, campeones, héroes y todo aquel que se encuentra ahora sobre estas lozas. Hoy es un día histórico, hoy darán inicio los primeros torneos de la torre prohibida. Poderosos combatientes han llegado desde las tierras más inhóspitas e inimaginables del mundo con un solo propósito. Conquistar la torre; y con ello conseguir todas las riquezas y la gloria que ello conlleva. Y como se que no queremos esperar mas, incluyéndome. Doy así por iniciado el primer torneo de la torre prohibida.- Clamó aquel hombre con gran vigor siendo secundado por los aplausos y vítores de la muchedumbre que le escuchaba con jubilo y atención.

Aunque no era así para muchos de los combatientes quienes si bien concordaban con las palabras, tenían claro que no era a aplaudir a lo que habían llegado a allí.

-A partir de este momento los equipos tienen permitido acceder a la puerta que se les ha asignado. Les recuerdo que de no ingresar en las próximas 24 horas, serán automáticamente descalificados. Aunque vamos, quien quiere esperar tanto, el primero en salir tendrá claramente más oportunidades de ser el primero en llegar a la cima.- Puntualizó aquel hombre, quien probablemente seria alguno de los organizadores del evento; concluyendo así con su discurso y esperando a que los equipos iniciaran pronto con el espectáculo.

A cada instante que pasa, la algarabia es mayor, integrantes de docenas y docenas de equipos, hablan entre ellos mostrándose cada vez mas excitados. Y entretanto, yo medito sobre la posibilidad de aprovechar estos últimos instantes de tiempo para hacerme con un buen odre de cerveza.
Bien podría hacernos falta para calentar nuestros espíritus antes de entrar en combate.
Mas antes de que pueda moverme, he aqui que uno de los convocantes, trepa a una de las fuentes que adornan el lugar.
Su voz retumba por toda la zona acallando chismorreos, divagaciones y comentarios.
Y en total silencio, escuchamos sus palabras. El torneo, acaba de empezar.
Por mi parte, me peino la barba con la zurda mientras mantengo mi diestra cerca de una de mis armas prestando toda mi atención. Y naturalmente, no se me escapa el detalle fundamental del discurso del organizador.
Sonrío satisfecho mientras abandono la idea de ir a por el odre de cerveza y girándome hacia los mios, señalo con el pulgar de la zurda detrás de mi mientras digo.
Compañeros, la suerte esta echada. Es hora de dejar de hablar y de permitir que sean nuestras capacidades las que se expresen por nosotros.
Y no puedo evitar palmear una de mis hachas con gesto satisfecho al decir esto.
Solo queda una cosa que añadir. ¡Para adentro!

Con una caricia amable, Khan deslizó la palma de la mano por el morro de la mula que llevaba firmemente atada. La criatura estaba intranquila por toda aquella algarabía, y soltó un par de rebuznos inquietos. Todo el mundo se había amontonado frente a la fuente que servía de púlpito improvisado para aquel humano que cumplía las funciones de maestro de ceremonias. Por el rabillo del ojo vio cómo un cortabolsas aprovechaba para hacerse con el botín de uno de los miembros de otro grupo, pero se mantuvo callado. Que cada uno se ocupara de sus asuntos.

- Vamos allá - dijo para sí cuando todo el mundo rompió en aplausos y se dirigió a sus posiciones. La verdad es que sus compañeros de equipo eran muy distintos: mientras unos, como Brok, tenían facilidad para la palabra. Otros, como los hechiceros que viajarían con ellos, apenas habían dicho una frase - Espero que los dioses estén de nuestro lado, porque lo vamos a necesitar...

Los ojos le brillaban después del discurso. Veía como los demás equipos se organizaban y hacían los últimos preparativos para su entrada. En cambio había gente que no estaba tan nerviosa. Grupos de campeones que miraban a los demás equipos con la idea de esperar aún varias horas. Que desperdicio de tiempo, si tardan más en entrar, mejor para nosotros.

-Esa fama va a ser nuestras, conseguiremos abrirnos paso hasta la cima, estoy segura. ¿Estamos todos listos?

Escucho el discurso que da el señor subido a la fuente con mucho entusiasmo. Al arrancar los vítores y los aplausos, yo me uno a ellos, embriagado por la emoción del momento.

Seguidamente me acerco a la puerta que a nuestro grupo le había tocado, la puerta número 33, y reparo en la presencia de los templarios que vigilan todas y cada una de ellas. Malditos Templarios, siempre tienen que estar por todas partes.

- ¡Adelante Guerreros del Amanecer! Demostremos lo que valemos y ¡coronemos esta maldita torre!

Raven estaba apoyada en uno de los muros mientras veía llegar a la gente y finalmente escucho el discurso, dejando escapar un suspiro suave mientras escuchaba los entusiasmados comentarios de los héroes... Guerreros del amanecer era o muy gay, o muy elfico, quizás ambas cosas. Se separó de la pared y se acerco a aquellos que serían su grupo, observándolos uno a uno.

- Bueno, ¿listos para desaparecer tras esa puerta?

Comenzó escuchando el discurso ligeramente interesado, pero tras la primera frase comenzó a pensar en si aceptarían que participara en las apuestas, aunque tras recordar que apenas le quedaban unas miseras monedas decidió que no tenia importancia.

- En fin, bla bla bla, riquezas y gloria, bla bla bla, 24 horas o descalificados ¿a que estamos esperando?

Nada más acabar de escuchar a ese señor inaugurar el torneo, y escuchar lo de la ventaja, salí disparado andando a marcha hacia la puerta número 33. Me reuní con el resto del grupo.

Señores, dense prisa, ah...y otra cosa, necesitamos un grito de guerra para aumentar la moral.
Vamos a ser competitivos para llegar a lo más alto y olvidar nuestras preocupaciones por siempre, vamos a luchar por nuestra vida una vez más, y que sea esta la batalla final para vivir mucho mejor.
¡Por nuestra vida!

Di un pequeño discurso para motivar y subir la moral.

Tras escuchar la introducción del supuesto organizador del evento alzó de nuevo su bastón, arrancando sus pasos hacia el lugar que le indicaron las piedras. Encarada frente a la puerta 28, esperó a que la alcanzaran los miembros de su equipo para motivarles. Golpeó el suelo con el báculo para realizar su juramento. Soy Ivar Thorbjörn de la tribu de la escarcha, los hijos de la señora del cielo me han traído hasta las 100 puertas desde la tierra del gran Korth, quien me ha desafiado. Para regresar con mis antepasados, para portar el honor de la escarcha, seremos fríos, como la misma muerte. Helaremos la sangre de aquellos que osen enfrentarse a nosotros y los destrozaremos. A nuestro paso solo quedará roja escarcha. Su mirada implacable atravesó los ojos de cada uno de los cinco. Os confío mi destino y mi vida. No dudéis, sólo son 100 puertas... ¡Roja escarcha! concluyó con un alentador grito elevando ambos brazos, con la arcana puerta a su espalda. Tras ese extraño atisbo de emoción recuperó la seriedad para hablar con contundencia. Preparaos. En ese mismo lugar aprovechó para sentarse con las piernas cruzadas, depositando su báculo sobre ellas. Sin decir nada más esperó paciente a que su equipo realizara los últimos preparativos y confirmara estar listo para atravesar la puerta.

Jilokasin arenga y anima a sus compañeros para motivarles como un entrenador de boxeo a su pugil justo antes de enfrentarse a un combate. hecha una mirada ,  tan nobles guerreros son dignos de admiracion y su marcha un tributo a los dioses y con ello entona unas palabras para contentar algun dios de la guerra y que con ello les de sus favores

Guerreros del amanecer, es el dia de la gloria , infinitos son los rayos del sol , como infinito es la valentia que tendreis que mostrar, muchos son los peligros y las oscuros seres que se ocultan en las noches tenebrosas ,pero su fin llega cuando llega el dia y con el los guerreros de la luz 

Armaos pues señores , pues la batalla se acerca y como miembro de la orden de la "Luz de los tres soles" os bendigo, que los angeles guien vuestros pasos y el candor del corazon de las damas os protejan vuestra fe

El desafio es enorme pero mas grande sera la recompensa y la gloria

Tras recibir la arenga de su lider, Elrohir no puede más que pensar en salir de la torre de una pieza y colmado de riquezas.

No es una mala imagen para enfrentarse con valor a la prueba

Yo os esperaré en la puerta, no creo que con lo que me ronda el bolsillo puede nada más que tomarme un mal trago.

Tras echar un último vistazo a su armamento y equipo, Trekk escuchó estoicamente el discurso del organizador, o lo que fuese. Se dirigió entonces con su grupo a la puerta número 28, donde les esperaba otra charla más, esta vez de la propia líder del equipo.

"Ha llegado la hora. Todo lo que se ha dicho hasta ahora pierde su sentido. Lo que importa es lo que pasará una vez crucemos el portal."

Trekk se sentó también y, cruzando brazos y piernas, comenzó a entonar en voz baja un rezo, precedente a la batalla, propio de su hogar.

Me acerco con paso tranquilo hacia la puerta 28 para reunirme con mis compañeros, así intento disimular el miedo que tengo ante la inminente prueba.

No puede ser peor que la Angustia. Entonces, ¿Por qué mi cuerpo no puede dejar de temblar?

Las palabras de Ivar no apaciguan mi alma inquieta, pero sí lo hace el casi inaudible rezo de Trekk, me hace sentir tan pequeño que me da la sensación de que no importa si desaparezco o no de la existencia, algo que contra todo pronóstico me calma. No quiero molestarle, pero quiero que sepa que estaré pendiente de él en la batalla.

- Vyrin está listo. - Respondo Adriana y a Raven con esa simple frase.

Muchos de los equipos se movían ya con rumbo a las puertas, e incluso ya un par de equipos se habían adentrado en las suyas, mientras para asombro de todos parecían ser consumidos por aquella puerta de cristal que se comportaba con liquido firme y brilloso en el que se adentraban.
Otros equipos se mantenían aun en sus casas de campaña o con los mercaderes preparándose de ultima hora para lo que les pudiera esperar en la torre.
Era claro para todos que dentro la aventura no sería fácil, el trabajo en equipo era al importante y quizá sin eso no se podría llegar muy lejos. Ahora, frente a las puertas los equipos se preparaban para empezar por fin lo que podría ser su ultimo momento en el mundo real.

Paciente esperó a que el resto del grupo confirmara su deseo de adentrarse en su primera prueba, acompañada del bárbaro que tanta nostalgia le brindaba con su canto. Motivo por el que se incorporó valerosa, llena de moral, preparada para enfrentarse al mismo frío de Hakkon si fuera necesario. Se giró de nuevo para hablar con todos, esta vez con más calma. No he sido instruida para el liderazgo, os ofreceré toda mi sabiduría y todo mi poder en cada enfrentamiento, golpeó percutante el suelo con su báculo, pero no dudéis en demostrar vuestro potencial, compartidlo y juntos llegaremos a lo más alto. Alzó su mano extendiendo su dedo índice. Dedo que acudió seguidamente a una pequeña bolsa que colgaba de la tela que hacia las veces de macuto. Posteriormente se acercó a cada uno de sus compañeros y marcó con un líquido rojo una línea vertical en su rostro, cruzando su ojo derecho. Una vez hecho esto, se aplicó la misma marca en su propia cara. Os considero así mis hermanos, reclamemos nuestro destino. Se adelantó la primera para cruzar la puerta, con decisión, con la imagen del polvo carmesí en sus pensamientos, la magia, no extraña, pero sí desconocida, la inundó para arrancarle de este mundo, o al menos de aquella torre. En contra de lo que hubiera deseado, sintió calidez, nada hostil. Pero la imagen del polvo se repetía mientras se iba deshaciendo aquella arcana sensación para mostrarle el interior de la sala.

Durante la ceremonia que realiza Ivar antes de la entrada, Elrohir sólo asiente mientras en su interior se pone en paz con sigo mismo y comienza a intentar aclarar su mente para mantenerla despierta y rápida para el combate.

Compañeros preparar vuestras armas desenfundadas, cuando crucemos puede que estos instantes que ganemos salven nuestra vida.

En cuanto llegaron a la puerta que les habían asignado, Khan dirigió una mirada escrutadora a los templarios. No se movían, como si no fueran más que estatuas a las que habían dado una increíble apariencia humana. Estaban ahí para proteger a la gente de caer en aquel portal por equivocación. ¿No? ¿O para evitar que alguien, sin que ellos lo supieran, se infiltrara en su interior? El enano desconfiaba de todo y de todos hasta que no comprobase que eran de confianza, y dudaba que todo lo que les habían contado fuera cierto.

De todas formas, de algo había que morir.

Con gesto firme, se introdujo en el portal sin esperar a que su líder lo ordenara. Ya tendría tiempo de ganarse su respeto durante la competición. Inmediatamente lo inundó una sensación extraña, como si hubiera caído en un lago de agua volcánica que calentaba su cuerpo y también su espíritu. Había cerrado los ojos, así que no sabía qué había a su alrededor, pero sus dedos buscaron a tientas su hacha dispuesto a cercenar carne y hueso al primer enemigo que estuviera a su alcance.