Partida Rol por web

Finalmente, el reducido grupo de snagas que cargaban con la responsabilidad traer el componente que hacía falta para terminar de crear el remedio necesario para sanar a su pueblo.

 En la puerta sur, lugar hasta el que les había acompañado Lerb, es de donde partirían. El anciano gran trasgo, precedido por Pringo, os dice.

 - Es el momento.- Hace una pausa mirándoos a cada uno.- Ya me sorprendisteis una vez al descubrir qué causaba la debilidad e incluso nos tragistéis unos prisioneros que nos contaron cosas interesantes. Es el momento de que me sorprendais de nuevo, id y encontrad la piel ratuna y sereís recompensados. No tardeís, es importante. Necesito no menos de diez libras, pues en el tratamiento lo necesitaré. Una vez lo recolecteís traedlo rápido, no puede tardar más de tres días o se arruinaría y no habría servido para nada.

 Os observa de nuevo con detenimiento, no pasándole desapercibido la herida de Siomorang, y agrega finalmente.

 - ¡Qué estais esperando, partid ya de una vez!

- 10 libras. 3 días. Entendido. Cumpliremos la tarea que nos habeis encomendado. Podeis confiar en nosotros - Más allá de la seguridad de sus palabras y de aparentar una confianza que realmente no tenía con el maestro, Akrate era consciente de que el era solo un Snaga más... aunque no pensaba reconocerlo ante sus compañeros - Ya estamos saliendo - le contestó antes dirigirse a sus compañeros

- Ya escucharon al maestro. Debemos apurarnos. Y no defraudarlo! -

No dije nada como la mayoría de las veces que estaba delante de alguien importante, a fin de cuentas, si hablaba otro yo parecería más listo, aunque de vez en cuanto se me solía escapar una de esas preguntas absurdas, pero es que solían enrollarse mucho para explicar algunas cosas y uno tenía un límite de palabras por minuto.

Nada más darnos la orden todos salimos pitando como si lleváramos una rata rabiosa de esas de un metro de alto pegada al culo y cuando ya nadie escuchaba me repasé mi plan.

- Caminar rápido, descansar poco, coger setas y volver aún más rápido. Fácil.

Desde luego no tenía ninguna pega a simple vista, aunque seguro que aparecía algo que lo complicaba todo.

Oh, así que piel ratuna. La tengo visto alguna vez. Así que realmente vamos a recoger setas... bueno, más bien hongos.

Sus conocimientos de más allá de los muros de la ciudad le habían evitado tener que preguntar a Lerb qué era la piel ratuna.

¡Entendido, señor!

Saludó marcialmente, aunque el consejero no tuviera un cargo militar, y salió de la choza junto a los demás.

 Sin perder más tiempo, el reducido grupo parte en busca del componente necesario para dar remedio a la enfermedad que acosa a su clan, con la única compañía del viento aullante de la noche. No es que le tengáis mucho cariño, pero a decir verdad es mejor vivir en un clan que no estar expuesto a salvaje ley del valle de Gurbad. Esta 'ley' permite que cualquier criatura es susceptible de ser esclavizada por un clan, los únicos que medio se salvan son los miembros de otros clanes súbditos de Gurbad. Viendo la miserable vida que tienen los esclavos mejor formar parte de un clan como miembro que como esclavo.

 A pesar de que el suelo terroso se ha combertido en un lodazal en una gran zona cercana al pueblo, parece que el grueso de la tormenta se emplazara en las cercanías del poblado y a medida que os alejaís de la zona el suelo va recuperando su consistencia que os resulta familar, ese polvillo amarillento mezaclado con guijarros y otras piedras de mayor tamaño.

 A pesar de haber amainado la tormenta no ha sido el caso de las nubes, pues el firmamento permanece oscuro como la garganta de un lobo, pero eso no os representa especial problema al avanzar.

 Una vez alcanzaís la zona arenosa el paso que tenéis es bueno y eso os permite marchar a buen ritmo, Siomorang parece que logra hacer creer a las cabras pues no perturban la marcha. Recorreís un largo trecho hasta que Akrate, el menos acotumbrado a las caminatas empieza a aflojar el ritmo... aproximadamente cuando la oscuridad va cambiando poco a poco para dar paso a una especia de penumbra creciente.

Esperaba que aquello fuera más costoso, pero a parte de andar no tuve que que hacer mucho más porque no nos encontramos con ninguna rata así que ni con la armadura me cansé lo suficiente como aflojar la marcha, aunque quizás mi estómago comenzaba a protestar un poco porque estaba vacío.

Mis compañeros, sobretodo el listo, comenzó a caminar de forma más lenta, lo que me hizo creer que era mejor que buscáramos un lugar para descansar al menos un rato. Tendríamos que hacer guardias y yo aún podría aguantar despierto.

- Grolm tenemos que parar ya para que descanse el listo o sino no nos podrá decir qué setas tenemos que coger.. - Dije sin darme cuenta de que igual aquella palabras podían molestarle de alguna manera, pero lo de pensar seguía sin ser lo mío. - Además tú no sé, pero yo empiezo a tener hambre.

Humm.. comienza pensativo sin dejar de andar hemos recorrido un buen trecho y el camino que debemos tomar es fácil de encontrar, así que no creo que pase nada si descansamos un rato. finalmente se para y mira alrededor buscando un sitio decente, cerca del camino, donde detenerse a descansar. Al no encontrar ninguno se encoge de hombros, resignado.

No es un sitio muy bueno para parar, pero si creeis que no podeis aguantar un trecho más.. tendrá que servir. Así además, al no estar cómodos, no nos costará tanto ponernos en marcha de nuevo dentro de una hora o dos...

 El grupo ha avanzado durante un periodo incierto... pues al no poder ver los astros se hace difícil de valorar, tal vez un par de horas, tal vez seis. Haciendo algunas cuentas, la ceremonia se celebró un par de horas antes de medianoche y se prolongó durante cosa de una hora o así, luego partisteís y parece que pronto saldrá el sol. Puede que haya pasado unas seis o siete horas de marcha.

 Parece que la noche ha vigorizado vuestros espíritus y vuestros cuerpos...

Al enfermero no le gustaba caminar, por lo menos no por tanto tiempo y sin detenerse. Si bien no quería reconocerlo ante sus compañeros, lo cierto es que, poco a poco, disminuyó el ritmo de sus pasos.

El resto se dio cuenta y comenzó a plantearse la posibilidad de detenerse, lo que Akrate, para sus adentros agradeció con ganas - Si, paremos un rato. Ya se está haciendo de día. Podemos comer algo y continuar un rato más antes de detenernos para descansar - propone - Con la luz será más fácil encontrar un sitio que nos permita defendernos de... de lo que pueda aparecer -

Grolm:

Haced lo que queráis. Pero si nos paramos durante un par de horas a descansar, ya se nos hará de día. O acampamos en este lugar incómodo para dormir mal o seguimos un poco más para encontrar un buen sitio. Detenernos cada dos por tres nos va a retrasar mucho. En este caso, la opción intermedia es la peor de todas.

Pandilla de gandules...

Akrate miró al "desconocido" con curiosidad - Quizás tienes razón - le comentó - Pero nadie dice de parar aquí, solo que podemos comer algo y luego buscar un sitio mejor para acampar - se explicó sin querer reconocer que lo que realmente quería era no mover las piernas durante un rato

- A mi tampoco me gusta demasiado moverme de día... pero quizás, para encontrar un buen sitio sea lo mejor - insistió - Y lo cierto es que tengo hambre ahora -

El nuevo no es que me cayera bien, ni yo a él, como ya lo habíamos " hablado " mientras comíamos, pero parecía no importarle que pudiéramos no llegar en condiciones.. Mi única respuesta fue soltar un gruñido al menos hasta que escuché las palabras de Akrate, que era quien sabía hablar y que todo sonase medio bien o incomprensible, que para el caso era lo mismo.

- Si no descansamos tendremos que cargar con compañeros a hombros y creo que tienes bastante con las cuerdas de las cabras.. Tenemos que parar un rato..

Sin duda mi apariencia distaba mucho de ser la de alguien cansado y podía comer y caminar a la vez, pero no a todos estábamos hechos para las mismas cosas y teníamos que ajustarnos al ritmo de todos.

Menudos haraganes están hechos...

Sin duda buscáis mi beneplácito para descansar, porque yo estoy aquí tan ricamente con las cabras y vosotros seguís contándome vuestra vida. Ya os dije que hicierais lo que os viniera en gana, pero es agradable saber que me reconocéis como autoridad. ¿Porqué sino insistis tanto en obtener mi aprobación?

Pues bien, sabed que para vuestra intranquilidad no voy a ratificar la decisión ni a daros permiso implícito. Un líder no se ocupa de los temas menores. Si necesitáis tan desesperadamente que os digan lo que tenéis que hacer, preguntadle a esta cabra. O simplemente madurad.

Nadie busca tu aprobación ni eres ningún lider, novato.. De hecho no te necesitamos y estás aquí porque Lerb así lo quiere.. así que menos humos o acabarás teniendo otra conversación con Thokk, me temo. hace una pausa que aprovecha para calmar su ánimo un poco. No le gusta hablar, pero el nuevo le saca de sus casillas.

Pararemos una hora para comer y descansar y luego seguiremos camino hasta que ya no podamos más o encontremos un sitio fácilmente defendible para parar unas horas. La misión es urgente y tenemos poco tiempo, así que ya descansaremos cuando estemos de vuelta en el poblado una vez ha acabado se acerca al nuevo para cogerle las cuerdas de las cabras y atar éstas a un árbol cerca del cual haya hierba para que coman antes de sentarse él mismo..

Pues si no me necesitáis, dejadme tranquilo de una vez, ¡demonios!

Al verse liberado de las cabras, se sienta en el suelo. El hombro no ha parado de dolerle en el trayecto, aunque nunca lo reconocería ante los demás. Parece que la herida no se cerrará si siguen con ese ritmo. Por eso Siomorang está tan ansioso por tener un descanso largo en el que dar tiempo a que su hombro cicatrice.

Negué con la cabeza mientras volvía a gruñir, ya que si hacía lo que me estaba apeteciendo en ese momento le hubiera vuelto a dar un hachazo para que se callara y dejara de parecer tan sumamente idiota a pesar de usar palabras " bonitas ". Por suerte, parecía que Grolm tampoco estaba muy conforme con su forma de hablar y fue él quien reaccionó primero, sino yo tendría que decirle a Lerb que una rata se comió al nuevo, aunque fuera yo mismo el que lo enterrara.

Sin decir ni una palabra me senté en el suelo y saqué algo de las raciones que llevaba encima y comencé a comer en silencio, aunque con el hacha bien cerca.

- Cuando paremos a dormir y nos toque hacer guardias el nuevo las hará conmigo.. - dije al resto de mis compañeros con una sonrisa quizás hasta algo malévola en el rostro. - Hasta que no haga algo útil a parte de dar por culo todo el rato no me fío de él.

Estaba hablando como si él no estuviera presente.

 Tras atar a las cabras en un nudoso árbol al que le empezaron a devorar las hojas, Grolm y el resto de la pequeña compañía hacen un alto para descansar los pies y llenar la tripa.

 Poco a poco notais como el alba se acerca, trayendo con ella la luz del astro solar, pasando por todos los colores del azul marino de hace unos instantes al verdoso hasta el azul claro que se va instaurano ahora.

 Parece que Grolm os ha conducido en la dirección adecuada a pesar de la oscuridad reinante durante la travesía, la cordillera sureña se ve imponente ante la luz del sol, a su base se aprecia el verdor de sus valles boscosos. Resulta un fuerte contraste con el desierto que dejáis a vuestras espaldas...

 Pronto dais cuenta del desayuno y parece que lso pies han descansado un poco, el camino aguarda y no hay amenazas a la vista. Se presenta una larga y pesada jornada de travesía.

El enfermero observò interesado el cambio de palabras entre "el nuevo" y sus compañeros, detectando los tonos ríspidos que daban cuenta del mal humor que este causaba.

Con todo, decidiò no participar de la conversación "No serìa la primera vez que volvemos sin un compañero" se planteó "aunque esta vez creo que no me va a molestar tanto como las otras veces"

- Grolm tiene razón - aseguró sin dirigierse a nadie en particular, antes de recostarse a los pies de un arbol y cerrar los ojos por un momento. El desayuno fue escaso, pero suficiente y tras un rato de descanso y comida se sintió preparado para continuar.

- Es una buena idea, quizás debamos hacer solo dos guardias. Cuando encontremos el lugar indicado que se ocupen Thok y Siomorang de la primera y luego Grolm y yo haremos un segundo turno para que ellos descansen. Cuatro ojos ven más que dos - aseguró