Partida Rol por web

Eglath miró a su alrededor y el único enemigo que encontró de pie estaba a su lado. Sonriendo se acercó a él y atacó con su hacha proyectando su rabia en el cuerpo del orco.

Eglath termina con el último de los guardias orcos.

La elfa, después de tomarse un respiro escuchando la voz del bardo, asoma ligeramente la cabeza a través de la puerta por la que quería huir el orco. Tratando de ver y oir que nuevos peligros les aguardan.

El pasillo está vacío pero te da la impresión que las puertas del fondo se acaban de cerrar.

Mientras Lanfear se adelanta Fraxtra observa la habitación en la que acaban de luchar...

Faxtra revisa la habitación sin encontrar nada más que las armas y armaduras que portaban los orcos.

Eglath ve como la elfa ladea la cabeza intentando escuchar si hay algo "malo" más adelante.

-¿Lanfear oír algo? -le susurra desde detrás con claro interés por seguir avanzando

- A mi me da que alguien ha pasado por las puertas del fondo. Podríamos perseguirlos para tratar de que no den la alarma o ir por otro lado para que no sepan donde estamos - mira a Blirk y Eglath - me da a mi que vamos a perseguirlos.

Mientras estan descansando, el semielfo, se pone a tocar como era habitual. Mientras Lanfear inspeccionaba las salas colindantes, Terble se planteaba, en voz alta, una serie de asuntos, algunos evidentes.

-Mmm me resulta extraño que los orcos trabajen con enanos, por muy duergar que sean, claro que tampoco se mucho de este tipo de enanos. Por cierto, está claro que el elemento sorpresa ya lo hemos perdido, pues uno salio para avisar. No sería mejor volver otro dia? eso si que no se lo esperan jajajaja- Dice con tono de broma, pero más en serio de lo que sus compañeros creen.

Un tanto mosqueada observa a sus compañeros. Pero decide que no va ha decir nada. Y se pone a descansar a lado del semielfo. Cuando empieza a tocar le dice:

Son seres inferiores que te puedes esperar de esas miserables ratas. Sobre lo de cantar, crees que si todavia nadie se habia enterado de nuestra presencia aqui, tu cancioncita no les podra avisar?

Terble observa a la eladrin que estaba a su lado con cara seria, lo que venia siendo bastante común en ella.

-Serán criaturas inferiores, pero precisamente por eso avisan siempre al resto, porque solos no pueden contra las "criaturas superiores"- Dice estas ultimas palabras con tono místico- Así que dudo mucho que mi canción importe mucho en estos momentos, ademas no la toco muy fuerte, no creo que sobrepase estos muros de piedra.

Tras una breve pausa añade más serio y en voz no tan alta.

-Deberias relajarte un poco, y disfrutar de la vida, tanta seriedad no puede ser buena para nadie, no se puede estar siempre en tensión. Puede que seamos un grupo de aventureros atipicos que no atiende mucho a razón, pero me diras que nuestros amigos más primarios no son divertidos?- Añade intentando dar un final más despreocupado. -Además, varios de nosotros nos acabamos de conocer, no solo contigo, sino entre nosotros. Nos unimos en el laberinto por un fin común y todavia debemos aprender a combatir juntos.

Lanfear no muy segura de lo que traman los orcos cubre, en sigilo y con mil ojos temerosa de alguna trampa el trecho hasta la puerta que le ha parecido ver cerrarse. Allí trata de escuchar a ver si se ven confirmadas sus sospechas y los refuerzos están en camino. Orcos puagh, le repugnan esas criaturas.

La elfa se mueve con bastante soltura y alcanza la puerta del fondo donde escucha una voz potente que discute con el orco...aunque por las risas de fondo hay más criaturas.

Trato de contar las voces y si alguien de mis compañeros asoma por la puerta me llevo el dedo indice a los labios, señalo con el pulgar a la puerta de mi espalda y con la otra mano voy levantando dedos hasta el numero de personas que calcule haya dentro.

¿Qué pasa? ¿qué pasa? ¿qué pasa? -pregunto insistentemente a Lanfear. Tal vez haya oído a alguien en el otro lado, alguien a quien poder pegar. Y eso estaría bien, que aún no me he enfriado...

¿Hay gente a la que poder pegar? ¿Más orcos malolientes? -Pregunto cada vez más ansioso- Si ya os dije yo que hacer esto, era el mejor camino para entrar aquí. ¿Hay alguien? ¿Entramos ya?...

Lanfear se lleva el dedo índice a los labios, señala con el pulgar a la puerta de su espalda y con la otra mano voy levantando dedos hasta llegar a cinco.

Escucha una orden seca de la voz más autoritaria y a partir de ahí silencio.

 Fraxtra sabía que seguir esperando aquí era para peor. Posiblemente mientras más tardaran, más chances de que toda la fortaleza quedara alertada.

Con su mano hizo un gesto para que abrieran la puerta, levantando su orbe, lista para el combate.