Partida Rol por web

Un gran horno ruge fuertemente a un lado de la habitación, ali­mentado por un orco con el fuelle. Un enano de piel negra como el carbón y una barba rígida de color óxido, trabaja en un yunque cercano golpeando una hoja brillante a la que está dando forma. Estanterías llenas de armas recién acabadas se distribuyen por toda la pared.

Otros dos orcos, uno de ellos con una herida reciente, están vigilando la puerta con sus armas preparadas.

La elfa apresura el conjuro con el que le suele gustar empezar las peleas. Esta vez no parece enfocar bien las descargas eléctricas sobre sus enemigos. Aunque espera que al salir de la zona sufran sus efectos.

Los rayos de Lanfear impactan en uno de los orcos. A continuación el duérgar herrero avanza lanzando maldiciones en común: Si me hacéis quedar mal, usaré vuestro cráneo de yunque - a la vez hace un ademán con su martillo y las llamas de la forja salen en oleadas contra Eglath, Blirk y Clio siendo el gnomo el único afectado que se prende.

Clio espera para ver el movimiento de los orcos y de repente se materializan tres duérgar con ballesta que abren fuego sobre Eglath y se vuelven a hacer invisible. Los orcos a pesar de los rayos de Lanfear se lanzan a por el goliath y el gnomo para impedir el avance de los demás. Uno impacta de refilón en el brazo izquierdo del bárbaro pero el otro hunde su hacha en el pecho del protector mientras un crack de huesos rotos resuena y la sangre mana abundantemente.

Viendo el daño sufrido por su compañero clio intenta dar palabras de animos a su compañero.

- Eres como la montaña puede que el viento te castigue, pero tu eres inamovible. Eres parte de una raza dura como esas montañas. Y unas simples heridas no son mas que rasguños para ti.

Despues de decir eso coloca su calida mano en la espalda confortando a su compañero.

Terble se echa poco a poco mientras coje aliento y cuando esta bien colocado, efectua un grito estridente.

-A POR ELLOS!!!

El grito parece llevar un huracan consigo que les da movilidad a sus compañeros pero desestabiliza a los enemigos, incluso llegando a empujarles.

La curación de Clio deja restablecido casi por completo a Eglath mientras el grito de Terble afecta a uno de los orcos que sale lanzado hacia atrás quedando en la posición que ocupaba momentos antes uno de los duergars exploradores.

Eglath aprovechó la inercia para llegar hasta el otro extremo de la sala, dejándole hueco a sus compañeros para entrar.

Mientras se movía levantaba el hacha enfadándose cada vez más. Justo al llegar al lado del enano, golpeó el suelo con su arma.

-¡¡Tierra tragar!! -gritó con la boca abierta y con una expresión clara de rabia.

Las cascotes del suelo golpean al orco y llena el suelo de grietas.

Rápidamente, avanzo gracias Terble hacia el herrero, para intentar propinarle un duro golpe al enano... Aunque se queda prácticamente en el intento.

El golpe de BLirk falla por milímetros al desviarlo Urwol con su martillo.

 Fraxtra lanza un patrón de luces ilusorias para llamar la atención de los enemigos, en la parte más recondita de la habitación, con la idea de desorganizar la defensa enemiga.

ASALTO 1

La elfa apresura el conjuro con el que le suele gustar empezar las peleas. Esta vez no parece enfocar bien las descargas eléctricas sobre sus enemigos. Aunque espera que al salir de la zona sufran sus efectos.

Los rayos de Lanfear impactan en uno de los orcos. A continuación el duérgar herrero avanza lanzando maldiciones en común: Si me hacéis quedar mal, usaré vuestro cráneo de yunque - a la vez hace un ademán con su martillo y las llamas de la forja salen en oleadas contra Eglath, Blirk y Clio siendo el gnomo el único afectado que se prende.

Clio espera para ver el movimiento de los orcos y de repente se materializan tres duérgar con ballesta que abren fuego sobre Eglath y se vuelven a hacer invisible. Los orcos a pesar de los rayos de Lanfear se lanzan a por el goliath y el gnomo para impedir el avance de los demás. Uno impacta de refilón en el brazo izquierdo del bárbaro pero el otro hunde su hacha en el pecho del protector mientras un crack de huesos rotos resuena y la sangre mana abundantemente.

Viendo el daño sufrido por su compañero Clio intenta dar palabras de animos a su compañero.

- Eres como la montaña puede que el viento te castigue, pero tu eres inamovible. Eres parte de una raza dura como esas montañas. Y unas simples heridas no son mas que rasguños para ti, despues de decir eso coloca su cálida mano en la espalda confortando a su compañero.

Terble se echa poco a poco mientras coje aliento y cuando esta bien colocado, efectua un grito estridente.

-A POR ELLOS!!! , el grito parece llevar un huracan consigo que les da movilidad a sus compañeros pero desestabiliza a los enemigos, incluso llegando a empujarles.

La curación de Clio deja restablecido casi por completo a Eglath mientras el grito de Terble afecta a uno de los orcos que sale lanzado hacia atrás quedando en la posición que ocupaba momentos antes uno de los duergars exploradores.

Eglath aprovecha la inercia para llegar hasta el otro extremo de la sala, dejándole hueco a sus compañeros para entrar. Mientras se mueve levanta el hacha enfadándose cada vez más. Justo al llegar al lado del enano, golpea el suelo con su arma.

-¡¡Tierra tragar!! -grita con la boca abierta y con una expresión clara de rabia. Las cascotes del suelo golpean al orco y llena el suelo de grietas.

Rápidamente, Blirk avanza gracias a Terble hacia el herrero, para intentar propinarle un duro golpe al enano... aunque se queda prácticamente en el intento. Las llamas no se le apagan al gnomo que sigue sufriendo daño.

Fraxtra lanza un patrón de luces ilusorias para llamar la atención de los enemigos, en la parte más recóndita de la habitación, con la idea de desorganizar la defensa enemiga.

Una pantera negra pasa entre el bardo y el mago y se coloca junto a la puerta para dar un par de mordiscos a los orcos que acosan a Clio. Antes de que se den cuenta, y con sangre en sus fauces, la pantera ya se encuentra tras Terbe y Fraxtra.