Partida Rol por web

- Pues si no os importa,me gustaría acompañaros esta vez

—Seguro que lo quiere por algo... ¡Seguro que hace algo que no vemos! —digo al resto del grupo poniéndome de pie. ¿Para qué querría un elfo de piel negra una cosa así, si no hace nada?

—Yo diría que le saquemos porque lo quiere antes de que dárselo... Y luego, vemos si se lo damos o no —digo al grupo, mientras busco al camarero—. ¿Dónde está mi barril de cerveza?

-Para venderlo, para que lo querrá si no.- Responde Nitis con tranquilidad mientras mira al gnomo.

-Yo prefiero esperar a ver si aparece don mago y me cuenta que ha encontrado la pista definitiva. Y cuando hagáis terminado, espero que partamos de aquí bien pronto.-

—No me fío de ese drow, y aquí no me ponen mi barril de cerveza. ¡Me voy con vosotros! ¡Como nos quiera engañar, le daré una paliza! —respondo al tiempo que me pongo de pie en el suelo.

—¡Venga, vamos a ver a ese elfo!

El drow os recibe entre saludos melosos y halagos grandilocuentes por vuestras hazañas hasta que lo cortáis.

- Bien ¿habéis encontrado el cetro que os dije? Pagaría bien por él

—Espera, espera, espera... A mí no me hagas la pelota, que no me la das —digo al elfo, para añadir—. ¿Para qué quieres el cetro? ¿Eh? ¿Qué hace el cetro? ¿Eh? ¡Como nos engañes! —diciendo esto, agito el puño, mientras pongo cara de mala leche.

Kairon se acerca un poco mas al drow y empieza hablar con voz melosa mientras mueve las manos con intención de distraer su mente. - Tranquilo, estas entre amigo, y como lo somos, nos dirás porque quieres tanto el cetro, sabes que puedes confiar en nosotros

El drow levanta las manos levemente a modo de defensa contra el gesto amenazador de Blirk.

- Ya se lo dije a ellos, contesta mirando a Terble y Lanfear, tengo un cliente que lo malvendió por necesidad y ahora que la suerte le ha vuelto desea recuperarle. Había escuchado rumores de que estaba en posesión de un duergar en Fuerte del Cuerno y como vosotros lo habéis....limpiado, imaginé que lo tendríais.

Mira al drow y arquea una ceja, como si estudiara la situación.

Terble se adelanta para hablar con el Drow.

-Debes disculpar a mis compañeros, han insistido en venir y cerciorarse de la historia del cetro, perece ser que no tengo credibilidad ni respeto entre mis compañeros.- Dice llevandose el antebrazo a los ojos como si fuera a ponerse a llorar para quitarle hierro al asunto.-Espero que no te hayas sentido amedrantado. Da la casualidad que en nuestra "limpieza" de enanos, encontramos dicho cetro. Cuanto lo echa de menos vuestro comprador anonimo?

- Bueno, no estoy acostumbrado a que me amenacen por ofrecer dinero e información, dice un poco sarcástico. Estaría dispuesto a pagar hasta trescientas piezas de oro, sin regateos ni más preguntas.

- Digamos que "me creo" - pronuncia las palabras como si estuviera diciendo que el sol va a salir por el oeste - que tus intereses en el cetro son los expuestos y ninguno más.

- No haremos más preguntas sobre ello - levanta la mano para frenar al gnomo al que ya le ve de puntillas para protestar. - A cambio pedimos información sobre el mago desaparecido, piensa que es tambien en tu provecho, más aventuras nuestras, más objetos con los que comerciar y más negocio para ti. Es como una inversión en tus propios intereses. Es bueno para el negocio.

-Es más, si logramos encontrar al mago, él también podrá comprarte más cosas.- Añade el semielfo.- Nuestra única condición es que nos des la información y luego hacemos la transacción, si te parece bien.

Veis que se os queda mirando, hace como que se lo piensa pero realmente está dispuesto a deciros algo....y la promesa de nuevos negocios parece que le convence.

- Dónde está no lo sé pero la semana pasada me pidió que le llevara a una cueva a una hora del Salón un cargamento de componentes mágicos. Puedo haceros un pequeño mapa para llegar si vosotros agradecéis el gesto con parte del oro que os acabo de dar.

Kairon mira al resto del grupo, y sobre todo al bardo, que al parecer es quien lleva al voz de ellos, y asiente.

CLio solo observa la situación no le gustaba demasiado el elfo. Y menos iba hablar con el.

- Creo que hemos llegado un acuerdo ¿verdad? - dice mirando a Terbe. La elfa parece convencida.

Gendar saca cuarenta monedas de oro de la bolsa mientras muestra una sonrisa acariciosa. A continuación saca de uno de los bolsillos de su pantalón un pergamino echo de cuero balndo y desgastado donde se muestra el camino a una cámara a pocoa distancia del Salón de las Siete Columnas saliendo por el camino de las Sombras.

- Aquí es, ya lo tenía preparado pues sabía que la sabiduría prevalecería, os lo tiende