Partida Rol por web

- Gracias su excelencia- dijó Gabriel acompañando sus palabras por una leve reverencia.- Nos dará una misiva para poder vijar en él- preguntó el guerrero.- Y ¿cómo se llama el barco y su capitán? no querría equivocarme, más en esta ciudad- comentó, suponiendo que ya no tenían mucha manga ancha si volvían a meter la pata.

Adham mueve la cabeza de arriba a bajo en señal de conformidad y agradecimiento. Dice "Gracias príncipe por su gesto, se lo recompensaremos cuando nos lo requiera".

El barco es el Sirena Azul. Decidle al capitán Marco Vizzola que os envío yo, y que os de los camarotes de proa

Dicho esto, el alguacil le susurra algo y, tras despedirse de vosotros, se marcha.

Cuando les da los datos que necesitan, el príncipe se retira. Gabriel hace una reverencia y tras esto se gira, mira a Adham y haciendo un gesto con la cabeza para que se marcharan también.

Tras esto mira al guardián por si les decía algo y sin más se marcha el también por donde ha venido.

Adham espera a que se vaya el príncipe y cuando ve moverse su compañero lo sigue para acudir al puerto y buscar el barco. Cuando salen al cementerio le dice en voz baja a Gabriel "Gabriel, no confio en el príncipe aunque ya sabes que no tenemos otra opción, eso que debemos de estar alerta".

El guerrero asiente a las palabras de su compañero. Él tampoco confiaba en el príncipe ni en nada de lo que estaba sucediendo en aquella ciudad. Para más inri, uno de ellos, se quedaría en tierra y lo más seguro que fuera Rendor, por su desafortuna acción en aquel tugurio... la cosa empezaba mal ¿empeoraría?... seguramente, pensó Gabriel, camienando hacia los muelles.

Al llegar a los mismos buscó el barco, la sierna azul, en el que debían embarcar. Debían darse prisa pues la mañana se les estaba echadno encima a pasos agigantados.

Llegais al barco sin problemas, y habláis con Vizzola. Él os hace pasar a bordo sin problemas.

Subimos al barco y hablamos con el capitán Vizzola quien al nombrarle al Príncipe nos deja pasar sin problemas. Pese a todo, Gabriel le habla.- Gracias por alojarnos en tus bodegas- comenzó el guerrero-. No queremos causar probles, de hecho nos hemos alimentado antes de partir. Aun así, ¿cuánto dura el trayecto?- preguntó para calcular sus reservas alimenticias.

- Nos ha dicho que viajáis con animales. Si puediera ser, te pediría que nos mantuvieras alejados de ellos... no es por nuestro hambre ni nuestra maldad.. que no la hay, si por que no casamos con los animales y puede que nos tengan miedo. No quiero..-Gabriel se giró hacia Adham y continuó-, queremos, que se vuelvan locos o estén todo el día estresados.

Tras estas palabras Gabriel se cayó y esperó a que el capitán les contestara.

En el barco encontrais a un viejo conocido, Marduk, con el que participásteis en la incursión en el palacio de Vittorio y fuisteis emboscados.

Lo que os sorprende también es encontrar a Allbrecht sentado en la proa

Adham cuando los ve de nuevo exclama "¿Qué haceis aquí?" "¿No estabais de camino a Venecia o desaparecido?". Después de escuchar las respuestas comenta "Allbrecht, Marduk hemos embarcado Gabriel y yo en este barco pero desconfiamos del príncipe, ¿creeis que podemos descansar con seguridad u os han ofrecido la misma hospitalidad que nosotros y no tenemos otra alternativa que dirigirnos rumbo a Venecia en este barco?"

No os preocupéis del Príncipe, fui a verle personalmente antes de partir y me aseguré de que os diera este transporte para llegar a Venecia. A quien me sorprende de ver es a Marduk. ¿Cómo has llegado hasta Barcelona?

Gabriel mira a Allbrecht y a Marduk y si se ha sorprendido de su presencia no lo manifiesta, coo de costumbre. La faz de hielo que tiene el caballero parecía una máscara digna de un carnaval veneciano.

Escuchando atentamente lo que los demás dicen, espera a que terminen para bajar a las bodegas. No quería que el sol les sorprendiera en cubierta.

Vine hacia aqui,buscando transporte a Venecia como vosotros,buscando venganza por lo pasado años atras .

Escuche que estabais por aqui y que mejor forma de encontrar vendetta que acompañado,solo no podria aguantar demasiado

Gabriel escucha a marduk asiente y leugo se fija en Allbrecht. Sin decir palabra le escruta y luego desciende a la bodega.

El viaje iba a comenzar en breve y no tenía muchas ganas de que el sol le pillara desprevenido así que bajó a buscar un buen sitio en el que pasar el resto del viaje.