Partida Rol por web

Bárbara...

El gesto de la Cazadora Oscura se relajó. Sus pupilas recuperaron su color habitual. Incluso sus alas se plegaron tras su espalda, haciendo que, salvo por los cuatro brazos, pareciera una persona normal.

Oh, querida, cuanto lo sient...

¡Grave error militar!-gritó, desplegando de nuevo sus alas demoniacas-. Le has dado a tu peor enemiga tu nombre y tu rostro. Tu identidad secreta al traste por meros sentimentalismos.

La Cazadora Oscura echó el brazo hacia atrás para darle a su látigo más impulso. Entonces se dolió, como si de pronto le hubiera asaltado una poderosa jaqueca.

¡AAAAAAAAGH...!

Su cuerpo se desdobló: el físico y el espiritual. Solo que el espíritu exorcizado tenía el aspecto de Stompa, la Furia de Darkseid cuyo cadáver estaba en la Batcueva.

Stompa se difuminó en el aire del pasillo hasta desaparecer. Lo mismo ocurrió con el látigo, las alas y los dos brazos adicionales de la forma demoniaca.

¡Doctor Fate! ¿Qué haces, Babs? ¡Tenemos que ayudarle!

La Cazadora pasó al lado de Batgirl, pero siguió su camino hasta la puerta mágica. Empujó junto al Doctor Fate hasta que los brazos magenta se hundieron tras ella. En cuanto estuvo sellado, el portal desapareció. El mago de nuevo estaba libre para ejecutar sus sortilegios.

Gracias, Helena. Y ahora, con el poder de Nabu, Bárbara Gordon, de Gotham, New Jersey, cumplirá al fin con su... ¡DESTINO!

La gravedad desapareció. La Cazadora, Batgirl, los muebles de un extremo del pasillo y pequeñas piedritas del bosque... Todo se elevó, perdiendo toda sensación de peso. Chasqueó los dedos y se hizo la oscuridad.

Cuando se volvió a hacer la luz, solo lo hizo en un espacio de veinte pies. Más allá solo había oscuridad. En el círculo iluminado estaban Helena, Bárbara y, por supuesto, el Doctor Fate.

Maldita sea, casi morimos por culpa de mi sobreactuación.

En fin. Me disculpo si mi elocuencia fue confundida con la de un supervillano, Bárbara Gordon y Helena Wayne, de...

Sí, sí, sí, sí... De Gotham, New Jersey. Doctor, ¿qué está ocurriendo? Lo último que recuerdo es que traté de tomar una ducha en mi habitación, pero mi traje tomó vida propia y no era capaz de quitármelo. ¿Y qué era esa bestia rosa?

Primero, el dios Nabu exige ciertos niveles de solemnidad para concederme sus poderes, ¿vale? Si hablo raro es por algo. No porque sea un #@&%! villano de opereta, perdón, quiero decir... No malinterpretéis las palabras del sabio confundiéndolas con las de un necio. ¡El Doctor Fate siempre engrosará las filas del Bien!

Segundo. Cuando abandonasteis la Batcueva, comencé la autopsia del ser alienígena conocido como Stompa, de Apokolips-a pesar de que Batgirl pidió que la esperasen-. En seguida noté el sello que guardaba la fórmula de la Anti-vida. Stompa era una kamikaze. En caso de morir, aquellos que tocaran su cadáver, sus enemigos y verdugos, caerían inexorablemente en una distorsión de la mente y la realidad. Somos prisioneros. Compartimos nuestras psiques y podemos ver la naturaleza de nuestros recuerdos y creencias. Es lo que era esa bestia para mí...-la voz del Doctor Fate se entornó por un segundo, mientras rememoraba sus propios traumas-. Proyectaremos nuestras pesadillas hasta lograr que nos maten.

Tercero... Cuando empecé la autopsia, el sello ya estaba roto. Esa "Maldición" se ha contagiado como un virus por contacto físico. Y está en vosotras. Está en todos nosotros. Y la única cura es el autoconocimiento. Lo primordial es regresar a la Batcueva para completar mi investigación sobre Stompa, de Apokolips.

Bárbara recordó tocar el cadáver de Stompa para comprobar sus constantes vitales. Abrazó a Helena. Abrazó a Tim. Todos ellos estaban infectados con la Ecuación Anti-vida por su culpa.

Bárbara, ¿estás bien? Si ya confías en mí, deja que use mi magia para sanar tus heridas...-dijo el Doctor Fate, acercando la mano enguantada a la frente de Batgirl.

Aún así, todas esas "imágenes" que le vinieron a la cabeza desde que tocó a Stompa... La sensación de que este Doctor Fate no pertenecía a este mundo, de que era algo antinatural, continuaban.

Escuché las palabras de Fate tras lograr liberar a Helena de aquel ser que me recriminó la cosa más absurda que jamás había oído en mi vida. El doctor Fate se encargó de decir mi nombre y apellido reales delante de ella. Ya los tenía. Con eso y una búsqueda en internet daría conmigo en las redes sociales. Esperaba que Darkseid fuese solo un poco más inteligente que sus secuaces, así sería más fácil vencerle usando la cabeza antes que las armas.

Pero ahora tenía el problema del doctor delante. Seguía sin fiarme de él, pero debía demostrarle que sí me fiaba... así que le dejé que sanase mis heridas, sintiendo de nuevo que aquello no era real... y si no era real era porque... porque... estaba en mi cabeza.

Mr. Frío lo dijo, el doctor Fate también. Está en nuestra psique. ¿Y sí estoy inconsciente en el suelo de la Batcueva y todo esto no es más que una pesadilla inducida por el cuerpo de aquella mujer? Tendría sentido que quienes me acompañaban no fuesen reales, no fuesen de este mundo porque este mundo era mi mente... y todo lo estaba creando mi cabeza.

- Doctor Fate. Supongamos por un momento que yo estoy dormida y que todo esto no es más que un sueño. Sé que no lo es porque sino esta conversación no tendría sentido ni que sus indicaciones hacia la Batcueva, donde empezó todo sean las correctas... supongamos que como dice el autoconocimiento sea la salida de todo esto... - Dije caminando hacia la Batcueva junto a Helena y aquel falso doctor Fate. - ¿Cómo me ayudaría el autoconocimento a despertar y salir de esta pesadilla donde la realidad es difusa y confunde demasiado todo?

Alfred era sabio, quizás él tuviese la respuesta a mi pregunta. Porque hacer la autopsia en mi mente a aquella guerrera, no serviría de nada. Alguien o algo usaba a quienes me acompañaban como marionetas... ¿Acaso tengo algo guardado en mi cabeza que alguien quiera saber y no sea consciente ni de lo que es ni de que lo sepa?

El Doctor Fate puso la palma de su mano a dos pulgadas de su herida en el hombro. Un disco mágico de color rosáceo se creó entre ambas, y empezó a girar en el aire, despacio. Las heridas de Batgirl se cerraron. Incluso el bat-traje recuperó su forma como si allí nunca hubiera el corte de un látigo.

Te puedo garantizar que ninguno de los tres está dormido. Y, desde luego, no estamos en ningún sueño. Aún hay cosas que debo averiguar sobre la fórmula de la Anti-vida, pero al parecer lee nuestro subconsciente y trae esa información a la realidad para combatirnos. Forma parte de la maquinaria de guerra de Darkseid: si una de sus Furias cae, seguirá luchando después de muerta. Parece ser que la mente de Stompa ha sido "preservada". Eso es malo. Muy malo. No sabemos qué recuerdos de pesadilla podrá recrear en nuestro mundo.

El autoconocimiento se usaría como... ¿una palanca metafórica? Sirve para reventar puertas y golpear nuestros miedos. Sin saberlo, ha sido tu arma en el pasillo. Con ella libraste a la Cazadora del influjo de Stompa-Helena lanzó una mirada confusa, sin recordar a qué se referían-. También dificultará que pueda poseernos.

Venid, hay alguien más a quién debéis ver...

Una llama se encendió en su mano para iluminar su camino. Abandonaron el claro de luz y se adentraron en la oscuridad. A izquierda y derecha empezaron a formarse imágenes. Batgirl reconoció algunas...

Otras le eran totalmente desconocidas...

El Doctor Fate hizo un alto. Se acuclilló haciendo que su palma tocara el suelo. La llama mágica abandonó su mano y recorrió el suelo rodeando un claro en un semicírculo, iluminándolo. En el centro del círculo, tendido en el suelo, estaba el cuerpo de Red Robin.

¡Timmy!

Helena salió corriendo hasta llegar hasta su hermanastro.

Está bien. Solo duerme. En este santa sanctorum está a salvo. Es mejor que sus recuerdos tomen consistencia aquí que en la mansión. Mi teoría era que la maldición le afectó más a él por tener una mente más joven. Es más susceptible a todo lo que está ocurriendo en la Mansión Wayne.

Y eso nos lleva a la Cazadora...

Helena, tú has sucumbido a Stompa. Al contrario de lo demostrado por Bárbara, tu mente no es lo suficientemente fuerte. Mi opinión profesional es que Tim y Helena deben quedarse aquí, en el santuario. No solo estaréis a salvo... también evitamos que le deis más munición a la Ecuación Anti-Vida. Batgirl y yo volveremos para tratar de deshacer todo este entuerto.

El punto débil de mi plan es que si me pasara algo... Vosotros dos-dijo por Tim y Helena-quedaríais aquí encerrados para siempre. Este Santa Sanctorum fue creado por la magia de Nabu. Si yo muero, ningún otro mago de este mundo podrá sacaros de aquí.

Si el Doctor Fate se tomaba las molestias de explicarlo, en lugar de desaparecer de allí con Batgirl, era porque no se sentía con el derecho de tomar esa decisión por ellos. La mirada de Helena también reflejaba dudas. Si alguien tenía suficiente valor de tomar esa decisión era Bárbara.

Sabía que no teníamos tiempo, pero... ¿realmente podía confiar aún en el Doctor Fate aún sabiendo que "no era él"? Debía hacerlo, quizás fuese la única manera de salir de todo aquello, pero debía proteger a Tim...

- Hay algo más. Algo que siento, que percibo. Es la sensación de que no soís de aquí, de hecho creo que no eres el verdadero Doctor Fate. Lo sé, suena a locura, como todo esto... e iremos todos juntos. No dejo atrás a los míos y si me equivoco contigo, Doctor, me disculparé cuando deba hacerlo. Pero la sensanción es que no encajáis en este lugar... Ella sé que es mi amiga Helenna, pero tampoco encaja aquí... es... - Suspiré. No sabía como explicarlo en condiciones. ¡Solo tenía 18 años!

- Despierte o cure a Timmy y marchémonos todos. Tendremos que vigilarnos unos a otros. Al menos ya sabemos como liberar a Helenna del control mental y de esa horrible transformación. Faltaría encontrar la manera de liberar a Timmy, quien será el más vulnerable.- Pero él si pertenece a todo esto, quizás sea más fuerte de lo que parece. Aún así debo cuidar de él. - Quizás si le explicamos a Cazadora y Red Robin lo que está pasando para que puedan defenderse y pedir ayuda cuando les ocurra...

Miré a mi amiga. - Es un peligro llevarle, pero si se quedase aquí atrapado para siempre, no me lo perdonaría jamás.

Khalid, ¿a qué se refiere Bárbara con lo de que no eres el verdadero Doctor Fate?

El Doctor Fate bajó la cabeza y guardó unos segundos de silencio.

Las puertas de Nabu ocultan verdades inescrutables. No soy el primer Doctor Fate, y la manera de acceder a mi poder no fue en las mejores circunstancias. En cualquier caso, no tiene relación con el problema que nos atañe.

El mago se acercó a Helena y a Timmy. Se inclinó y usó su magia para despertarle.

Abre los ojos, querido amigo. Este joven mundo te necesita.

Nggg... ¿Doctor Fate? ¿Chicas? Creo que he tenido una pesadilla...

No eres el único, Tim Drake. Y estar despierto no basta para estar a salvo. Sígueme. Afrontaremos nuestros miedos juntos.

Timmy se puso en pie con la ayuda de su hermanastra y de Khalid. Los tres avanzaron hasta situarse al lado de Bárbara.

Formemos un círculo. Cogeos de las manos. Y preparaos... para lo peor.

La magia les hizo desaparecer del santuario. Reaparecieron en un lugar familiar: el pasillo de la planta baja de la Mansión Wayne. El Doctor Fate puso su dedo índice sobre el casco para indicarles que no hicieran ruido. Avanzó hacia el salón que permitía bajar a la batcueva. Allí pudieron ver al mayordomo sosteniendo la tetera. De los pocillos sobre la mesa salía un humeante olor a té.

¿Alfred?-preguntó sorprendido de verle en un estado tan estoico.

Un placer volver a verles-saludó con una reverencia-. Si algo me han enseñado todos estos años conviviendo con Bruce es que hay que mantener la fe en que los héroes siempre regresarán.

¿Te encuentras bien, Alfred? ¿No has...? ¿No has notado nada raro? Hay algo sobrenatural y maligno en esta mansión que afecta a todos los que estamos en ella-dijo Khalid, avanzando despacio y manteniendo la guardia.

Soy consciente, señor. Pero creo que mis años de entrenamiento en el MI5 me han proporcionado una mente difícil de retorcer. Si me lo permiten, quisiera llamar la atención sobre una problemática.

Alfred dejó la tetera sobre la mesa y se acercó a la estantería. Al presionar el botón para deslizarla, el mueble se movió dejando ver una pared desnuda donde debería estar el elevador para bajar a la batcueva.

El ascensor está temporalmente fuera de servicio.

Era esperable, después de ver cómo se transformaba la cocina. La memoria eidética de Batgirl le permitió ver que el salón también tenía pequeños cambios, casi imperceptibles, con respecto a lo habitual... El piano estaba desplazado un palmo en comparación a dónde debía estar, los lomos de la enciclopedia británica estaban en la estantería que no era, las molduras decorativas de la mesa tenían distinta forma y su madera era más oscura. Todo parecía apuntar que la mente fuerte de Alfred había sido una especie de parapeto que evitaba cambios más grandes que volvieran a la habitación contra ellos. Eso llevó a Batgirl a establecer una teoría: si aparentaban normalidad, los cambios podrían revertirse solos.

- Vale, estooo... sonará raro pero. ¿Qué tal si tomamos algo de ese té? Nos vendrá a todos bien y nos ayudará a pensar o a no pensar. - Les dije a todos tratando de no perder la sonrisa que me solía acompañar siempre. Batman se enfadaba porque me lo tomaba todo como un juego, pero si no veías el lado divertido de las cosas, acabarías como él, todo el día amargado y regañando a todos.

- Además, este momento de paz nos vendrá bien para explicarle a Timmy que está pasando, pues creo que anda un poco perdido. - Y me senté y asentí a Alfred para que me sirviera, como si aquello fuese lo habitual. Entonces miré a Timmy, le conté lo de el cuerpo de la "amiguita" de Darkseid, del virus que nos contagió por contacto, de como este jugaba con nuestras mentes y de como él podía ser el más débil de todos por ser el más joven y no tener la mente tan entrenada.

De paso le expliqué a Helena lo ocurrido cuando salió de su cuarto convertida en aquella cosa que parecía, no más bien que quería matarme y como la liberé de aquello. Les conté mi encuentro con Mr. Frío... mis visiones pasadas con Dick e incluso otras que jamás había visto donde yo era mucho más mayor... todo para que aquel momento fuese, dentro de lo anormal que era todo, algo de relajación y de resolución de dudas.

Oh, Bárbara... Lo siento, cariño. Me siento fatal por haberte atacado. Papá no habría caído en algo así, pero yo perdí la cabeza como una novata. La sombra de Batman siempre fue muy alargada. Para todos.

La Cazadora dejó un momento su taza de té sobre la mesa, y puso su mano sobre la de Batgirl solidariamente. Tim se había sentado frente a ellas. El muchacho dio un sorbo, cabizbajo. Las palabras de Bárbara le daban qué pensar.

Cuando llegué a mi habitación, miré por casualidad a través de la ventana. Pero allí no estaba el jardín de la mansión, tan solo un inmenso e interminable páramo. Y me vi a mí misma correr alejándome de la casa. Llegué a un bunker, en cuyo interior había un laboratorio. Manbat, el murciélago mutante, estaba peleando con mamá, que vestía su traje de Catwoman. Traté de ayudar, pero el monstruo alzó el vuelo llevando a mi madre cogida por los hombros con sus garras. De pronto el techo del laboratorio estaba tan alto que no vislumbraba el fin. La única manera que tuve de ir a por mamá fue inyectarme el suero de Manbat. Muté, pero con mis nuevas alas pude ir tras él. Y al luchar soltó a mi madre, que murió en la caída.

Los únicos que no se habían sentado eran Alfred y el Doctor Fate. El leal mayordomo se mantenía de pie, tras uno de los respaldos. El mago seguía conjurando delante de la pared, tratando sin éxito que el ascensor volviera a aparecer.

En ese momento sentí rabia... Una ira que se apoderó de mí hasta hacerme perder la razón. Pero también noté un vínculo especial. Era como si alguien más hubiera tenido mi vivencia y me comprendiera. Creo que Stompa también perdió a su madre.

Timmy, ¿qué te ocurrió a ti?