Partida Rol por web

El rostro de la Bestia

01.- Laudate dominum omnes gentes

Cargando editor
16/01/2009, 09:57
Gonzalo Blasco
Sólo para el director

Busco unas letrinas más apropiadas para mi labor con la mirada.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100(-25)
Motivo: memoria
Resultado: 88(-25)=63

Notas de juego

Creo que no me acuerdo de nada. La tirada no sería para encontraar las cuadras, no?

Cargando editor
16/01/2009, 10:22
Hicham

-"Hummm, yo solo los he saludado cuando subía a mi celda...no nos debemos fiar de nadie. Solo deseo que llegue el alba para marcharme de este paraje que cada segundo da más canguelo...y nunca mejor dicho aquí hay gato encerrado..."

Hicham mira a los demás desconcertado y hasta aturdido, su miedo a morir en cualquier polvoriento camino le impide huir del monasterio.

Cargando editor
16/01/2009, 10:05
Director

Gonzalo, desde que está en el monasterio no ha sido capaz de encontrar las letrinas de los monjes, las cuales intuye que deben existir. Por otra parte, le resulta extraño que una hospedería tan grande no tenga sus propias letrinas, así que decide dar una vuelta al edificio y confirmar su ausencia o, por el contrario, descubrir su presencia.

Efectivamente, en la parte que da al muro encuentra una construcción de madera bastante destartalada con no mucho mejor aspecto que las propias cuadras y que hace las veces de, al parecer, excusado para visitas. Allí, un profundo hoyo sirve de depósito de inmundicias humanas.

Notas de juego

No, evidentemente no era para eso, era para algo mejor, pero que tu personaje no lo recuerda XD

Si no te para pronto la diarrea empezaré a bajarte la FUE, la AGI, la HAB y, si la cosa va a más, empezarás a perder algún punto de RES (osea, de vida...).

Cargando editor
16/01/2009, 11:33
María Somontano

-En eso estamos totalmente de acuerdo, Hicham...

Notas de juego

A Dama lo que le sale es robarse un hábito de monje, calarse la capucha hasta la barbilla,  y salir a investigar por el Monasterio, palpando paredes, buscando puertas y trampillas, y escuchando conversaciones.

Pero, desgraciadamente, a María todo eso aún no se le ha ocurrido. Por ahora.

Cargando editor
16/01/2009, 13:29
Abraham

Abraham da un vistazo a su alrededor para ver que otras personas hay en la sala con la intención de acercarse a saludarlas y charlar con ellas. Si la idea es conocer a los demás que no son monjes puede ser un buen momento.

Tal vez el guarda pueda darles alguna impresión de lo que pasa y si es algo extraño o los monjes suelen ser así de sombríos y revoltosos.

Notas de juego

¿Quién más hay aquí?

Cargando editor
16/01/2009, 13:51
Director

Notas de juego

Sólo estáis vosotros cuatro. Estáis en el salón de la hospedería. Los dos nuevos han salido y Gonzalo tras ellos. No hay más huéspedes (al menos que vosotros sepáis) y no hay ningún monje ni nadie más donde estáis vosotros.

Cargando editor
19/01/2009, 10:24
María Somontano

-Pues por mi parte, creo que voy a salir y a dar una vuelta por la Abadía. Quisiera hacerme un poco de idea del lugar en el que me encuentro, y sólo he podido ver la Hospedería y la Biblioteca. Volveré más tarde, y les diré si he encontrado algo interesante. O, ¿quizá prefieran acompañarme...?

 

Notas de juego

María va de excursión, en el plano no veo la Biblioteca, solo la Hospedería, los establos y la caseta del Guarda, así que de momento me voy hacia lo que María crea que es la Iglesia.

Se supone que la Hospedería la conocemos "a fondo", no? Y que no hay nada raro que nos dé que pensar en ella?

Cargando editor
19/01/2009, 11:10
Hicham

-"Yo le acompaño señora, no podría perdonarme si le pasase algo..."

Dice Hicham mirando de soslayo a Tomás.

-"...también creo conveniente que nuestro amigo comerciante nos acompañe y nos deleite con sus conversaciones tan llenas y ricas de contenido"

Hicham no quiere quedarse solo en el monasterio, las cosas que acontecen le resultan extrañas y prefiere la compañia de extraños que la soledad consigo.

Cargando editor
19/01/2009, 11:45
Abraham

Abraham se encuentra un poco perdido y descolocado. Al oír la idea de la dama no se le ocurre nada mejor que seguirla, en estos casos siempre es mejor permanecer juntos y no andar zascandileando por su cuenta como el dichoso Gonzalo que cada vez le está dando peor impresión ya que luego resulta que nunca está donde dijo que estaría y anda por ahí espiando y con planes ocultos.

- "Yo los acompañaré gustoso. No hay mucho más que hacer hasta el amanecer y no soy muy dado a los rezos nocturnos de los monjes."

Además no le vendrá mal estar cerca de un hombre culto como Hicham y un soldado como Tomás.

Cargando editor
19/01/2009, 18:15
Gonzalo Blasco
Sólo para el director

Después de defecar con toda mi alma, y de cagarme en lo más sagrado. Nunca mejor dicho, me voy directo a la huerta, intentando que no me vea nadie. Quiero ver qué se cultiva por aquí.

Voy haciendome el sueco, con discreción, pero sin ocultarme demasiado, no sea que levante sospechas. Cuandollegue a la huerta echaré un ojo a toda la plantación, y además examinaré los accesos al almacén. Puertas, ventanas, etc.

Cargando editor
19/01/2009, 19:41
Director

Gonzalo cruza el patio en dirección a la huerta del monasterio. En su camino hacia allí pasa junto a un edificio de piedra que anteriormente identificó como un almacén, pero que, al fijarse mejor, resulta ser un corral, donde los monjes crían gallinas y conejos. Todo bastante normal y la única diferencia con los corrales a los que está acostumbrado a ver el cazador es que éste posiblemente esté algo más limpio.

Justo tras el corral se encuentra la huerta. Allí los monjes parecen cultivar algunas frutas y hortalizas para su consumo personal. Gonzalo comprueba la presencia de algunas matas de judías, melones, cebollas, calabazas, un par de árboles de manzanas y peras y algunas otras hierbas que no consigue reconocer, pero que no parecen nada del otro mundo (quizás sean nabos, zanahorias o vete tú a saber qué...).

Cargando editor
19/01/2009, 19:52
Tomás Bosch

- Yo me quedaré aquí a cuidar de nuestras cosas, si no le parece mal, mi señora. Estoy seguro que la compañía de estos dos señores le será mucho más grata que la mía..., dice Tomás desde su lado de la mesa cuando parece que los otros tres huéspedes ya tenían decidido marcharse a explorar el monasterio.

Tras la aprobación de su señora, el guardaespaldas saca su carcaj de flechas y, en mitad del salón, comienza a afilar las puntas con una pequeña piedra de rodeno.

Notas de juego

PNJ

Cargando editor
19/01/2009, 19:58
Director

Tras dejar atrás al tosco Tomás, los tres huéspedes vuelven a salir afuera con la intención de conocer un poco mejor el monasterio. El patio está cada vez menos concurrido y tan solo puede verse por allí a algún monje despistado o a algún novicio con pinta de llevar prisa, corriendo de un lado a otro, tirando de algún animal o cargando algún bulto. No había ni rastros de Gonzalo, el extraño cazador que había salido hace poco supuestamente hacia el mismo lugar, aunque eso ya dejaba de ser noticia para el resto del grupo, después del episodio de la biblioteca.

Después de atravesar el patio, el grupo entra finalmente en la iglesia por su puerta principal, que estaba abierta. La iglesia es una construcción de piedra rojiza, al igual que el resto de los edificios, bastante imponente por sus dimensiones, aunque, al menos en su interior, bastante escueta en cuanto a ornamentos. De hecho, el interior de la iglesia no tiene más adorno que un grandísimo y magnífico rosetón colocado tras el altar y los capiteles de las columnas, en las que pueden verse algunas escenas esculpidas. La nave central es diáfana, totalmente libre de ningún tipo de mobiliario y sin bancos, lo cual, desde luego, sí es algo bastante extraño en una iglesia.

En el interior de la iglesia hay unos cuantos monjes y novicios, quienes se afanan en limpiarlo todo y en ir colocando, junto a una de las paredes, cirios y algo que parecen ser libros.

Cargando editor
19/01/2009, 21:22
Gonzalo Blasco
Sólo para el director

Nada venenoso, ni psicotrópico, ni similar, ¿no?

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: conocimiento de plantas
Dificultad: 19-
Resultado: 78 (Fracaso)

Notas de juego

Uhm, casi no reconozco el peral, me temo.

Cargando editor
19/01/2009, 21:34
Director

Notas de juego

En efecto, de hecho, cuanto más lo miras más te parece un membrillero... :)

Cargando editor
19/01/2009, 21:31
Abraham

Abraham miró su alrededor con fascinación, con ojos nuevos como de niño. Ni se había fijado en el color rojizo de las paredes y encontraba realmente extraño encontrar una iglesia cristiana tan poco ostentosa, podría haber sido un hospicio o cualquier otro edificio de uso popular más que la casa de Dios.

Se acercó a María y susurró, lo suficiente alto para que pudiera oírle Hicham pero sin levantar la voz para evitar que llegara a oídos de los monjes:

- "O éstos monjes son excesivamente rigurosos con la limpieza o me parece que me arruinaría si fuera el proveedor de este monasterio. Parece casi como si la iglesia estuviera aún a medio acabar o si la usaran para otros menesteres. No entiendo porque requiere tanta limpieza ni como tiene tan pocos adornos. ¿Dónde están las vidrieras y los relieves con escenas de la Biblía?"

Abraham miró la cara de sus compañero sin ocultar su gesto de preocupación y de sorpresa poco halagüeña.

Cargando editor
19/01/2009, 23:19
María Somontano

-Parece... parece como si...

Habla en susurros, más para sí misma que para los dos hombres que la acompañan. Mira a su alrededor, con aire extrañado. Finalmente se acerca a los novicios que están trasteando lo que parecen libros junto a uno de los muros. En voz adecuadamente baja, pregunta a uno de ellos.

-Buenas tardes, hermano. Decidme... ¿habéis sacado los bancos de la Iglesia? ¿Porqué razón la estáis vaciando...? Con interés, mientras habla, mira los libros que están más cerca. -¿Y esos libros...? ¿estáis preparando algún acontecimiento, alguna ceremonia...?

Cargando editor
20/01/2009, 00:12
Monje

El joven monje al que María se dirige se sobresalta por un instante al escucharla, pues parecía realmente entregado a su trabajo y totalmente concentrado en él. Una vez el muchacho parece entender qué es lo que está pasando y lo que le están preguntando, responde sin demasiados tapujos.

- Eh, ¿vaciar?, no, la verdad es que la iglesia siempre ha estado así, aquí no hay bancos. Ahora nos estamos preparando para los rezos de esta noche y por eso lo de los cirios y los libros...

Cargando editor
20/01/2009, 10:56
Hicham

La curiosidad pica al converso y sus ojos se iluminan como pequeños cirios.

-"Diculpe noble monje, ¿y esos rezos merecen tanto trajín y tanta limpieza?, disculpe mi torpeza y mi poca sabiduría religiosa, ¿es el de hoy un rezo especial, con ritos especiales y gran pompa y boato?, ¿o más bien será un rito íntimo y sobrío?, y si no es inoportuno por mi parte, ¿A quien dedican la liturgía de este día?
.

Hicham hace una pausa para tomar aire y respirar, ya se estaba poniendo rojo por la falta de oxigeno.

-"¿Podremos participar en esos rezos?, no de forma activa sino como meros observadores y devotos de la santa madre iglesia..."

Cargando editor
20/01/2009, 11:23
Abraham

Abraham se queda callado. Se trata de una oportunidad única el poder ver el oficio de los monjes en el monasterio, aunque no promete ser el mejor del entretenimiento si que es una buena forma de dejar que pase el tiempo venciendo al sueño que no tardará en amenazarle tras el cansancio del viaje.

Abraham quería demostrar su interés, pero prefirió permanecer callado y atento a la respuesta del monje mientras se acercaba a Hicham.